PIRECTOg IsteMÀSTI REDACTORrJEF ' ! i illA DOMINGO SOLE ADMINISTRADOR ANTIAGO DÜRÀI ENERO DE 1908 NUM. SUMARiO: D. Adolfo Garcia.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Españo- la»,—El Espiritismo, ante las teorías Dualista y Monista, por D. Manuel Pareja Me- dina.—Lista de suscripción.—La Plegaria, por D." Amalia Domingo Soler.—El Re- formador, por Vidal Barbero.—A Teresa, por D." Amalia Domingo Soler.—Estado sociológico y científico del Espiritismo, por Miguel Mayol.—A la memoria de Senillosa, por D." Amalia Domingo Soler.—Sobre el temerá Dios, porD. Faustino Ysona.—Gen- tro de Estudios Psicológicos «Luz de Chile».—Suscripción á favor de los damnificado- por las últimas inundaciones.—Notas bibliográficas.—Movimiento espiritista.—Necros logias.—Curiosidades. Corresponsales Administrativos miéjico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO. Puerto-Rico.—Faustino Ysona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE.—Francisca Suárez, Méndez Vigo, MAYAGUEZ. Cuba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO.—Delfín Roig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 54, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN.—Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- doj. Raggi, Apartado 17, CAIBARIEN.—D.^ Rosalia Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES, República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN.—Manuel Y. López L., Carrera 6.% n.° 248 bis, BOGOTÁ. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedella, Dtor. de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés», PEHUAJO. —Zoilo Casas, LOBERIA.—Atilano Hervas, Tucumán, 1736, BUENOS AIRES,—Pedro Iraola, NECOCHEA.—Francisco Otero, calle 26, n.° 174, MERCEDES —Manuel To- rres, SANTA FE. , República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Islas Filipinas.—Casimiro Peña, San Rafael, 110, (Manila), SAN MIGUEL. Rrasil.—Emilio Serrador, Caixa do Correo, n.° 54, SAN MANUEL DO PARAÍSO.—Agrip- pino Gómez Veado, Rua Municipal, n." 3, CIDADE DO MURIAHÉ (Estado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Bahía).—Edla de Moarés Cardoso, San Francisco Havrer, 132, RÍO DE JANEIRO, República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Bahía de Samana), SÁNCHEZ. República de Blicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Kcnador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CORRESPONDENCIA Sres. ISnscriptores que han satisfecho la suscripción de 1907 Presidente «Aurora de la E. S.—Río de Janeiro J. P. C.—Pontevedra Fraternidad» —Orán T. G.—Manzanillo (Cuba) A. Q.—Igualada M. R. —Huelva E. B.—Orizaba (México) M. M.-Bel-Abbes (Argelia) A. H.—Buenos Aires- R. M.-Conceioao do Arroio M. B.—Sevilla V. N.—Alcora (Brazil) J. M. D.—Yabucoa (P. R ) A. S.—Rio de Janeiro D. R.—Pontevedra A. G,—Isla Cristina Sres. Huscriptores que han satisfecho la suscripción de 1908 F. M. F.—Algeciras R. C.—Puerto de México T. A.—C. Victoria Tampa L. G.-Id. B. C.—Manresa M. R.—Gibraltar J. L.-Id. P. S.—Id. J. H.—Id. M. L.—Isla Cristina J. B.-Id. A. A.—Id. S. C. C.—Verdelpíao F. P. v.—Villa do Conde Presidente «Luz de la Ver- G. R.—Buenos Aires (Portugal) dad».—Gibraltar (Alcanza al 23 de Diciembre de 1907) , La Administración. AÑO IX ENERO DE 1908 NÚM. 1 Nuestros Corresponsales D. Adolío García Fué iniciado en el conocimiento de nuestra doctrina por D. Andrés Fájardo, uno de los primeros espiritistas de Cuba. Es otro de los que más fervorosamente ejercen en aquella isla el apostolado de la propaganda espiritista. Colaborador del inolvidable Marcelino Tascón que tan buena semilla esparció en Manzanillo, con el importante Centro «Lazo Fraternal», al desencarnar aquél se encargó de continuar su obra D. Adolfo García, empezando por fundar un nuevo Centro ti- tulado «La Luz», del que es Presidente. No cesa un momento en su labor propagandista. Si no posee dotes oratorias ni condiciones de literato, tiene en cambio un corazón que se conmueve á la vista de cualquier infortunio, lo que le da motivo para cumplir los deberes á que, según los.preceptos del Cristo, viene obligado todo hombre con respecto á su prójimo. Podrá no escribir en libros ni periódicos, pero sabe aprovechar de lo que otros han escrito, distribuyendo hojas de propaganda, revistas, folletos y libros á donde quiera que hace falta llevar la buena nueva, encontrando en él las personas de es- casos recursos que quieren estudiar, al adepto generoso en disposición de entre- garles siempre una obra doctrinal para nutrir su inteligencia y su corazón del all- mento espiritual y de los consuelos que proporciona el conocimiento del Espiritismo. Cuenta 74 años de edad, y en el trabajo que ha emprendido desarrolla una actividad y brío juveniles, á los cuales debe mucho la divulgación de la doctrina espiritista en Manzanillo y su comarca. Al honrar hoy las páginas de esta Revista con el retrato del Sr. García, nos complacemos en saludar cariñosamente al entusiasta propagandista de nuestros redentores ideales. 2 LUZ Y UNIÓN SECCIÓN OFICIAL de la "Liga Espiritista Española" El día 6 del actual tuvo lugar, en los amplios salones de nuestro local social, una importantísima velada literario-musical y de propaganda. Esta fiesta, primera de las que se propone realizar nuestra «Liga», fué un verdadero éxito, puesto que el salón de sesiones y el de descanso rebosaron de gente que se apretujaba para mejor oir á los oradores que en la misma tomaron parte y de la que guardarán grato recuerdo todos los presentes. FIESTA INFANTIL Para el día 2 del próximo Febrero se está organizando una fiesta in- fantil que promete ser, por los preparativos que se están llevando á cabo, una fiesta de felicidad para los niños que á ella concurran. Para este acto se está organizando un coro infantil que, entre otras piezas, cantará el Himno Espiritista. En la parte literaria figurarán unos treinta niños y niñas que ya hace días se aprestan á llenar su cometido. Todos los niños y niñas que aquel día acudan al local social acom- pañados de sus respectivas familias, serán obsequiados, durante el inter- medio de la fiesta, con una merienda y al final con un sorteo de regalos. A-este acto quedan invitados todos los espiritistas. SECCIÓN EXCURSIONISTA Esta sección, de acuerdo con la de propaganda, ha resuelto verificar, el dia 19 del próximo Marzo, la inauguración de las excursiones que durante el próximo verano piensa realizar á las poblaciones donde radi- can los Centros afiliados á la «Liga». Será muy probable que esta primera excursión se realice á Sabadell, á cuyo fin se ha escrito ya al Consejero del Centro «Aurora»; según sea la contestación que se reciba, inmediatamente se procederá á organizar la excursión y algún acto de propaganda en aquella localidad. FIESTA EN HONOR DE MIGUEL VIVES Para los días 7 y 8 del próximo Junio se están organizando varios actos en honor de Miguel Vives, el Apóstol del Hiew. Para ello se han puesto de acuerdo las Comisiones de Propaganda y Excursionista con ÓRGANO ÒFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 3 nuestro Director, á fin de dar á dichos actos todo el esplendor que se merece el ser á quien van dedicadas. Es ya seguro que, como en el afio anterior, podrá darse una comida á unos trescientos pobres y que los actos de propaganda que se realicen tendrán más importancia que los que se realizaron en la fiesta anterior. CURSOS DE ESPIRITISMO PRÁCTICO Nuestro Director continúa dando esos cursos que cada día son reci- bidos con más entusiasmo por parte de los que á ellos concurren. Hasta ahora lleva explicados los en que trató de la ciencia del co- mer, la del vestir, la del respirar y la en que trató de la higiene del cuerpo. A estas tres últimas, por su mucha extensión, tuvo que dedicar- les dos conferencias. La falta de espacio nos impide insertar los extractos que de las mis- mas ha escrito el Secretario de la «Liga»; procuraremos hacerlo en el número próximo. EXPERIMENTOS Se agita la idea, entre los miembros más consecuentes en el asistir á los cursos de Espiritismo práctico, de formar un Grupo que se dedique un día á la semana'á realizar experimentos sobre ciertos puntos trata- dos por nuestro estimado Director en sus conferencias. Mucho celebraremos que esta idea cuaje y que el éxito corone tales experimentaciones. INGRESO DE SOCIOS En el próximo número daremos la lista de los nuevamente ingre- sados, que ascienden á más de treinta. Tenemos noticia de que son bastantes los Grupos y Centros que sólo esperan la renovación de sus juntas en este mes para solicitar su ingreso en la «Liga». ■ SENSIBLE BAJA Según ofició extendido por el que fué Secretario del Centro «Amor», de Gerona, este Centro se ha disuelto hasta nueva fecha, por acuerdo de los pocos socios con que hoy contaba. Esperamos que este acuerdo será revocado en breve y que la bri- liante historia de tan valioso Centro volverá á llenarse con nuevas pá- ginas de amor y altruismo. 4 LUZ Y UNIÓN CAJA DE PROPAGANDA—suscripción permanente Suma anterior. . . . 237'76 pesetas Ramón de lá Cueva, de Gracia 25 » Manuel Ricart, Lezignan (Francia) 12'76 » Recogido en el Centro «La Buena Nueva».. . 7'76 » Domingo Arana, de Hatillo (P. Rico). 3'90 » . . . P. B., de Gracia 0'50 » El Espiritismo, B. B.,deid 0'20 » » ante las teorías DualisBta. BM.,ondistea. id 0'20 y A. V., de id 0'50 » V A. V., de id 1 » Dios es la Inteligencia Universal, Dios es la única cia, la Inteligencia originarCia,. liAbre.,, omdneisci Inteligen- iednte, ilumina 0'25 » que todos los actos de su voluntad j dirige todos los actos de su vo- luntad y determina su volSunatadl,-lbaajoriel imperio absoluto del 1 » bien. Las determinaciones deAsudvolulfnotad,Mpromrueenveon,su dfaecultaSdan Juan de las Abadesas. 2 » de obrar, convirtiendo su Mpoteancria en acto. Cada acto supone una solución de continuidad, unatdientermCinaascióenrode,ladpeotenCciauenca 10'50 » única y universal, la cual queda convertida en un individuo, en una fuerza individualizadaC » quae ardmqueierne uSnaovtibora,cidóneplroFpiaeérrol 1'50 independiente, la cual le es dada y mantenida por la acción del Todo. Total 304'80 pesetas (Continúa abierta la suscripción). ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 5 Cada unidad es, pues, la expresión formal de la acción efeeíiüa àe un acto de la voluntad divina. Tal es ó puede ser el proceso de la individualización de los seres ó de la diversificación del Todo, que da origen á las distin- tas unidades simples. No hemos de repetir aquí el procedimiento mecánico, cuasi mecánico y liberal, mediante el cual, el ser simple evoluciona físicamente adquiriendo primero la variedad de propiedades y después sus cualidades relativas á cada uno de los estados que alcanza, porque esto ya lo hemos expuesto con la claridad que nos ha sido dada, anteriormente, con la teoría del colectivismo y de la solidaridad cooperativa de la acción de los seres. Aquí, nos proponemos ensayar la exposición procesal de lo que llamamos facultad intelectual del espíritu, que sería más propiamente dicho, su capacidad para recibir, percibir, apro- piarse y desenvolver, según el estado de su actividad física pre- dispuesta y educada por la evolución, las impresiones de la vibración intelectual. Ya hemos visto que el espíritu es, consubstancialmente, una fuerza derivada de la fuerza universal, que es el agente físico de la divinidad, por el cual obra y rige, como principio, todas las existencias; que este ser, vibra? con una vibración igual en natu- raleza y distinta en potencia á la vibración del Todo, del cual es parte y en el cual se desenvuelve; y así se expresa que el es- píritu es una fuerza igual en substancia á la fuerza universal, pero distinta, por no decir nula, en lo que es esencial en la divi- nidad. Dios, diversificando su potencia ha creado los seres, pero porque ha de vivir en su naturaleza perfecta y absoluta, no quiere ni puede diversificar su Esencia, porque entonces, su creación no sería distinta de El mismo; donde estuviera una parte de su Esencia, allí estaría Todo El presente. Así, porque la inteligencia es su facultad esencial, no ha de- bido transmitirla por ningún acto. Nosotros nacemos del acto, existimos en la potencia y vivi- mos en la actuación. Somos una vibración de la fuerza, es decir, un acto inma- nente en el cual permaneceríamos sin las excitaciones externas. Los seres se conmueven por distintas sensaciones relativas á su estado y éste determina el orden y naturaleza de las sensa- clones que el sujeto puede percibir: para él no existen otras. Aquéllas se caracterizan por la modalidad de sus vibraciones. 6 LUZ Y UNIÓN Así, por ejemplo, el ser, aun incapaz para la inteligencia', no puede modular sus vibraciones al diapasón de las vibraciones de la inteligencia y queda fuera de la esfera donde es posible su percepción. Lo mismo sucede en la moral que del Bien se des- prende y en el orden de las sensaciones de la estética que trans- pira de la Belleza suprema. Sobre todos los seres irradian por igual las emanaciones de las puras Esencias divinas, pero cada uno percibe con mayor ó menor intensidad sólo las que están en la relación de su posibi- lidad potencial, así como la luz es nula al través de los cuerpos opacos, trasluciente en otros, en otros transparente y para otros pura y diáfana. Creemos que con esto acentuamos la idea de que el princi- pió intelectual no reside en el espíritu como cualidad inherente del mismo. Todas las cualidades esenciales, residen sólo en Dios. El es- píritu cuanto es más superior, más netamente las refleja; peroá esto se reduce su propiedad; á una sola potencialidad reflexiva. Si el espíritu poseyera en sí la esencia de las cosas, sería un Dios ó llegaría á ser un Dios tan grande en la eternidad como Dios mismo. Pero el espíritu no es más que una potencia desprendida de un acto físico que, por evolución, va cualificándose ó capaci- tándose para percibir las operaciones de la inteligencia que re- vela la Verdad; de la Estética, que revela la Belleza y de la moral que revela el Bien, atributos infinitos y absolutos del Es- píritu de todos los espíritus, del Ser de todos los seres. No dudamos de que esta tesis que expropia al espíritu de su inteligencia (en principio, no en función) ha "de impresionar desagradablemente hasta el punta de que se considere por una gran mayoría como extravagante, heterodoxa y fuera del co- mún sentir. Es muy natural que así suceda; la conciencia hu- mana está formada de concepciones, de las que cuesta un gran esfuerzo separarse. Nosotros sentimos agitarse el pensamiento dentro de nuestro ser y creemos que su causa está en nosotros mismos, cuando en realidad, en nosotros, no está sino el origen. Somos una potencia viviente, pero la Esencia de este fenó- meno, no está ni puede estar en nosotros, aunque Ella nos sos- tenga y vivifique. Cuando se trata de la existencia absoluta, es necesario con- cretar y distinguir los conceptos para colocarlos en su verdade- ro .rango. I j i ! .ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 7 Es Esencia, todo aquello que es por sí mismo, de un modo absoluto, invariable, indivisible y eterno. No hay nada anterior ni superior en orden capaz de modificarla. Es causa y soporte de todas las cosas y de todos los hechos, determinándolos de un modo eficiente. Nada puede existir sin su presencia. Es potencia, todo agente constituido fundamentalmente so- bre la Esencia y que obra accidental ú ocasionalmente, según la relación de sus sensaciones. Es, por tanto, variable y perfec- tibie. Aquélla, se ve, que mora en el mundo de lo absoluto y ésta en la esfera de lo relativo. Dios, es por esencia, inteligente: en caso contrario, no sola- mente dejaría de ser Dios sino que dejaría de ser, porque su voluntad irradia y se formula de la pura esencia de su entefidi- miento y aquélla es la que promueve y determina su facultad de obrar ó la fuerza que constituye, forma y rige el universo. Y si la inteligencia como esencial que es, ha de ser invaria- ble en su existencia y absoluta desde su principio, ¿podremos afirmar que es cualidad propia del espíritu? Creemos que no: ni desde el punto de vista dualista ni mi- rado desde la concepción monista. Para afirmar con fundamento, tendríamos que observar, desde su principio, en el espíritu, una inteligencia, una facultad íntegra, sin defectos de error y sin necesidad de complementar- se por la cultura, porque si el objeto de la inteligencia es el co- nocimiento de la verdad de las cosas, la inteligencia esencial las ^ tendría conocidas de antemano. Sus funciones serían estériles ante su propia cultura, que es lo que sucede á Dios, sin duda. La inteligencia de Dios obra en sus propias ideas y de sus ideas surgen potentes todas las creaciones. Su obra es la crea- ción, su fin es el Bien, y no su propia cultura. El no progresa ni há menester del progreso, porque es pura esencia. En el sistema de la creación y cualificación directa de las di- ferentes especies de seres, vemos sólo una potencia espiritual sencilla, ignorante y progresiva, y en la mónada ó unidad subs- tancial monista, un ser, una potencia, una fuerza ciega que se cualifica por transformación y se engrandece y dignifica por evolución. En ambos sistemas, vemos una imperfección que progresivamente se mejora por mutación de sus cualidades na- turales, debida á su cultura, es decir, á su integración por la anexión de aquellas cualidades que faltan para su complemento. 8 luz y unión Esto nos enseña, claramente, que el espíritu es una poten- cía que no cuenta en su íntima constitución con ninguna esen- cia propia, sino que está constituido y sostenido por la esencia universal. Además, como de la nada nada se hace, si la inteligencia del espíritu no está tomada por individualización de la esencia intelectual divina, hay que convenir en que procede de otra in- teligencia universal. Esta ha de ser también esencial, porque de otro modo ve- mos que el principio inteligente no puede existir; y si es esen- cial y universal, es otro Dios y entonces hay dos Dioses. Así, hay que convenir en que la inteligencia, es, en el espí- ritu, una sensación refleja, y el amor es una emoción, un sen- timiento también reflejo, suscitado por la Belleza Universal, que es el Bien mismo, porque lo bello y lo bueno, todo es uno. Vemos, pues, que á nada es dado la cualidad propia y per- durable, directamente, como supone el dualismo, sino que la potencia, progresando, llega á alcanzar cualidades que la elevan al mundo donde reinada Voluntad divina, que es toda amor, y allí, capacitado ya, para ello, vive en el Bien, en el Amor; pero sin participar jamás en el orden de la soberana Inteligencia. Dios no progresa en ninguna de sus personas; es que se complace en el amor de sus criaturas, ofreciéndoles una dicha ascensional inacabable, entre una variedad asombrosa de sensa- ciones de felicidad eterna. ^ Manuel Pareja Medina. SUSCRIPCIÓN para realizar un banquete y otros actos, en Iarrasa, et mes de Mayo próximo, en honor de Altan (Continúa abierta la suscripción). Kardec y Miguel Vives. Ptas. Recibido de Los Albores de la Verdad de su última suscripción. 138'95 Recogido en diferentes veces en el Círculo «La Buena Nueva» . 2'80 Cándido Muñoz, de Verdelpino 1 Un anciano, de Puerto México . . . 10 Adolfo Moreno, de S. Juan de las Abadesas. . ... . . . 2 Jaime Masas, de Palamós 0'50 Total 155'25 ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 9 La Plegaria «Surge, voz de mi alma, álzate con la aurora y cón la noche; sube como la llama; espárcete, después, como el ruido y flota de las nubes en las alas; mézclate al aire, al huracán, al trueno, al choque de las olas encrespadas. En vano el hombre cerrará obcecado los ojos de su alma; ¡siempre y doquiera vibrarán los ecos con el himno eternal de la plegaria! » Dice muy bien el poeta; siempre resonarán los ecos repi- tiendo las mismas palabras: ¡Señor! ¡ten misericordia de mí!... Yo nunca he sabido pedir con los labios; en cambio he pe- dido muchas veces con mis lágrimas. Decía San Agustín que las lágrimas son la sangre del aliña; ¡qué hermoso pensa- miento!... y sobre todo, ¡cuánta verdad encierra! porque cuando se sufre profundamente; cuando se dice con amargura lo que dijo Camprodón: «Cualquier camino que tome me conducirá al desierto)!, entonces no hay frases que expresen nuestro senti- miento, pero hay lágrimas que piden misericordia; las heridas del alma se abren y de ellas brotan las gotas de una sangre sin color; ¡qué triste es perder esa savia de la vida!... pero al mis- mo tiempo el espíritu se tranquiliza cuando ha llorado de pena; así como el llanto de la desesperación quema nuestros ojos y aumenta nuestra fiebre, el llanto del íntimo sentimiento, la confesión muda de nuestra impotencia, nos tranquiliza; nos vemos á través de nuestras lágrimas tal cual somos, pequeños, muy pequeños, sin un pensamiento fijo que nos dé la orienta- ción necesaria para salir del atolladero en que nos encontramos. Triste, muy triste es verse uno tal cual es; pero no porque sea muy triste deja de ser muy necesario el exacto conocimiento de nuestro sér pensante, porque siempre nos queremos ver mejo- res de lo que somos. Dice un cantar popular: No vengas con ambages, ni con dijimos; no digas me perdieron, di, nos perdimos. 10 LUZ Y UNIÓN Y es urla gran verdad, siempre queremos ser impecables, y desgraciadamente la culpa es nuestro patrimonio; y en los momentos críticos de la vida, cuando parece" que una turba de acreedores invisibles nos presentan sus cuentas diciéndonos: Paga á la vista; no hay ocho días de plazo como en las letras terrenales, tienes que pagar inmediatamente; entonces no mi- ramos hacia adelante, miramos hacia atrás, y nos vemos tan pequeñitos y tan enterraos de cuerpo y de alma, que entonces nuestro amor propio desaparece y decimos con nuestro llanto: ¡Señor! ¡Señor! ¡ten misericordia de mí! Dice bien el poeta: «¡Siempre y doquiera vibrarán los ecos, con el himno eternal de la plegaria». Nosotros no entendemos el lenguaje de las lágrimas; pero éstas deben tener una voz, una vibración que debe resonar en el espacio. ¿Qué ser habrá tan dichoso que no haya pedido alguna vez á Dios clemencia y perdón para sus faltas? Ninguno, en la tierra ninguno; todos tenemos horas de angustia y hasta de desesperación, si no se conoce algo de las enseñanzas espiri- tistas; con el estudio del Espiritismo, el hombre más desgra- ciado, en medio de-sus dolores, no tiene el valor de lanzar un reto á su destino, maldiciendo su infausta suerte, porque sabe que su maldición caerá como plomo derretido sobre su con- ciencia, ya que nadie es el causante de su iníortunio, y que él únicamente es la causa de todos sus males; y ante el convenci- miento de su pequeñez microscópica, no maldice ni se deses- pera; eleva, en cambio, su plegaria á Dios, pidiéndole luz para iluminar el caos de su torpe inteligencia. ¡Cuánto bien nos hace el estudio del Espiritismo! ¡cuántos suicidios evita! ¡cuántas almas enfermas se curan en el Sana- torio del Espiritismo!... ¡En ese Sanatorio he hallado el agua milagrosa que ha cal- mado la sed de mi espíritu, sediento de luz, de amor, de pro- greso y de verdad!... Nunca me cansaré de aconsejar á los desgraciados que estu- dien el Espiritismo; es verdaderamente la panacea universal; paiM toHos los dolores tiene un consuelo, para todas las angus- tias un lenitivo, para todas las desilusiones un rayo de espe- ranza; por él sabemos que no hay desheredados; que el men- digo que vive sentado á la. puerta de una iglesia no está solo, que alguien le acompaña en su penosa peregrinación, y por la noche, al regresar á su tugurio, donde parece que todo falta, al entregarse al sueño el pordiosero, goza de un placer inmenso órgano oficial de la liga e. española 11 al sentirse acariciado por su guía que le dice: ¡Hijo mío! yo no te dejo nunca; yo inspiro al transeúnte que deja en tu mano el óbolo de su caridad; yo te doy esa tranquilidad inexplicable que siente tu alma en medio de las mayores privaciones. Sigue pa- gando tus cuantiosas deudas para reposar después en mis aman- tes brazos; y el mendigo se despierta tranquilo y sonriente, repitiendo, sin él saber el valor de lo que dice, lo que dijo Es- pronceda refiriéndose al mendigo: Mío es el mundo, como el aire libre, otros trabajan porque coma yo; todos se ablandan si doliente pido: ¡una limosna por amor de Dios! Todos, todos tenemos quien nos ayude á llevar nuestra cruz. Si así no fuera, la tierra estaría desierta; porque todos sus habitantes están condenados, los unos á cadena perpetua y los otros á trabajos forzados. No hay ninguno que pueda decir: ¡soy feliz! El potentado, el que posee inmensos tesoros, el que podría disfrutar de todos los goces que proporciona la abundancia y la ópulencia, á veces es aquejado de una enfermedad incurable que no puede alimen- tarse más que con pequeñas dosis de leche; otros sufren insom- nios perpetuos, otros locura incurable, y así, sucesivamente, no hay nadie, absolutamente nadie que pueda decir: No sé qué cosa es el dolor; por esto tenía mucha razón el poeta al asegu- rar que siempre vibrarán los ecos de la eternal pleglaria. Sí, sí; todos pedimos misericordia; la tierra es la inclusa del infinito; aquí estamos los niños sin calor maternal; justo es que pidamos á nuestro Padre el calor de su amor universal. Amalia Domingo Soler. —El reino de los cielos lo llevaremos todos dentro del alma; si obramos el bien, gozamos placer inefable y satisfacción equivalente á, nuestras acciones; si se obra mal, el remordimiento de conciencia es un purgatorio. —Quien sólo siente amor, no conoce el temor ni las dudas; confia en la jus- tieia de sus actos y la fe le hace vivir dichoso y feliz. —«No juzguéis para que no seáis guzgados; porque con el juicio con que juzgáis seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán á medir»; ó sea, cada ser recibirá según fueren sus acciones. 12 LUZ Y UNIÓN El Reformador Hace veinte siglos que allá en la fértil Glalilea apareció un joven de dulce y afable semblante, de sonrisa cariñosa, de palabra elocuente y de increíble humildad. Este joven traia una misión muy grande que cumplir, venia á reformar la sociedad. ¿Pero en qué época vino? cuando la desmoralización cundía por mo- mentos; cuando el vicio hubo triunfado de la virtud, de la honradez la maldad, el fuerte del débil, la mentira de la verdad, de la piedad el egoísmo; cuando los emperadores, sacerdotes, cortesanos y demás miem- bros de la aristocracia de aquellos tiempos, los que cónstituian el poder divino y humano sobre la tierra, se hallaban presos en las redes de sus propios vicios, convirtiendo su sagrado ministerio como medio de reali- zar sus torpes y groseros instintos, y en una palabra, cuando aquello no era sino un inmundo lupanar, en donde se prostituían los más puros sen- timientos del corazón ante el fatídico poder del egoísmo y de la maldad. Esta era la sociedad que venia á reformar aquella alma generosa, hasta el extremo de convertir el vicio en virtud, la anarquía en discipli- na, la indiferencia en amor y el egoísmo en generosidad, Una modesta túnica y un tesoro inmenso de amor hacia la humani- dad, eran sus únicas armas de combate, dejándose bien pronto oir su potente y sonora voz que, cual arpa divina, despertaba en los corazones las dulces melodías del amor, Al escucharle los míseros, los afligidos, los esclavos, los oprimidos y todos los que constituían la humanidad doliente, corrieron tras él, ebrios de entusiasmo, deseosos de oír aquellas sublimes predicaciones tras de las que se, ocultaba la aurora luminosa del deseado día en que había de co- menzar la era del derecho, de la equidad y la justicia. No sucedió lo propio á los opresores que aun cuando adormecidos al arrullo de sus placeres, percatáronse bien pronto de aquella gigantesca revolución que al calor de una doctrina que tenia por base el amor y la caridad iba adquiriendo tan grandes prosélitos que creyeron llegado el momento de ponerse á la defensiva para conservar su omnímodo poder, siquiera para ello tuvieran que exterminar al predicador. En aquella sangrienta cruzada cayó el reformador desinteresado y elocuente á los primeros golpes de los hipócritas; y un infamante suplí- cío en donde apuró hasta las heces el cáliz de la amargura, fué el fin de una existencia consagrada á redimir á la humanidad. órgano oficial de la liga e. española 13 A la muerte del Maestro pasó su doctrina de libertad y de amor á manos de los nuevos sacerdotes, y éstos en vez de seguir sus huellas se perdieron por los laberínticos senderos de la impiedad y se constituyeron en únicos soberanos de la tierra, sucediendo los papas á los emperado- res; á los supreinos sacerdotes, los cardenales; á las vírgenes de Vesta, las monjas; á ios oráculos, las revelaciones de los santos; al suplicio de la cruz, la hoguera; á los dioses del paganismo, los santos; las vírgenes - y bienaventurados, á los fariseos; y á los escribas, los frailes y sacerdo- tes; á los templos que anatematizó Jesús, las catedrales, y al pomposo culto de los antiguos, el ritual grosero y monstruoso de „sus sucesores; habían cambiado de nombre, pero eran los mismos. Luego el sacrificio de Jesús había resultado estéril; pero no, no pro- nunciemos semejante blasfemia, la sangre derramada en la cumbre del Gólgota fué sangre redentora. El Espiritismo es el Mesias de los modernos tiempos que ha de traer- nos envueltos entre diamantinos celages los exquisitos goces del alma. Vidal Barbero. Cuenca. A Teresa I ¿En dónde te hallas, Teresa? ¿estás lejos de este mundo, ó algo de aquí te interesa con anior grande y profundo? ¿Aun te acuerdas de tus hijos? ¿aun te desvives por ellos? ¿aun con cuidados prolijos peinas sus rubios cabellos? ¿Aun de la gentil Mercedes sigues con afán sus huellas? comunícate si puedes, y cuéntame tus querellas. II Oí una voz lejana, muy lejana, y escuché, y escuché; la voz decía: «¡Ah! qué hermoso; qué hermoso es el mañana del que creyendo en Dios, en El confía. »¿Quieres saber mi historia? historia triste, interminable serie de dolores; todo en ella de luto se reviste, que apenas al nacer, mueren sus flores. 14 LUZ. Y UNIÓN »Un recuerdo me guardas que agradezco tu llanto confundistes con mi llanto; mas cesa de elogiarme; no merezco tu admiración; ¡porque he pecado tanto!... »Yo me creí en la tierra, desgraciada, y al parecer, en realidad lo era; pero ¡ay! al terminarse mi jornada vi que fué mi dolor vana quimera. »Todo al llegar aquí se ve tan claro!... (aquí no nos estorba la miopía), aquí la falsedad no encuentra amparo, no puede aquí triunfar la hipocresía. »Aquí no puede nadie usar careta, aquí de sobra están los antifaces, nadie gana ni pierde á la ruleta, aquí no se comercia con disfraces. »Aquí no hay más que la verdad desnuda, adusta, grave, gravedad inclemente; aquí no hay los misterios de la duda; aquí nuestro amor propio no nos miente. »Aquí nos vemos todos al desnudo, pequeños, imperfectos, despreciables, y el hombre más locuaz se queda mudo al hallarse entre tantos miserables. »Tú quieres que concrete, que te diga algo de mi pasado; ¡es tan sombrío! que sólo recordarlo me fatiga, y me miro, me miro con hastío. »iQué historias tan fatales! ¡tan violentas!... en ellas todo es triste, abominable, yo he querido empezar á pagar cuentas; ¡mas quién puede pagar lo innumerable!... «Bástete, pues,'saber que fui coqueta, caprichosa, voluble, indiferente, yo misma me llamaba la veleta; gocé en hacer sufrir impunemente. »Me amaron con delirio, con locura, me brindaron amores á porfía, pero mi corazón de piedra dura desdeñosa, de todos me reía. »Un momento llegó, que'pesarosa una voz escuché que me dió espanto; voz que me dijo: —Despreciable cosa es la mujer, que no ha vertido llanto. »Tú no has llorado; es menester que llores, prepárate á llorar, porque ya es hora; te has mofado de todos los amores: quien de todo se burla, luego llora. »Has hecho mucho mal; y es necesario que ceses en tus locos devaneos; prepárate á subir hasta el calvario y á no ver realizados tus deseos. «Tendrás hijos ingratos, imperfectos. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 15 en tu hogar no serás la soberana; y á todos tus. anhelos y proyectos encontrarás oposición tirana. «Prepárate á sufrir, que pagar debes innumerables deudas contraídas por tu frivolidad y hechos aleves, y por la reincidencia en tus caídas. «Prepárate á sufrir, no has sido buena, has gozado en el mal por tí causado; tú misma te has forjado tu cadena; el dolor es la herencia del pecado. «Prepárate á luchar, sufre y medita, reflexiona que el tiempo que has perdido tu alma recuperarlo necesita; tiene que levantarse el que ha caído». ni «Sumisa y obediente, de mi guía sus mandatos cumplí; ¡cuánto he sufrido! ¡Cuántas horas dq llanto y de agonía!... ¡cuánto me arrepentí de haber caído!... «Y cuánto me arrepiento, ¡Dios clemente de haber perdido tantas existencias!... Pero yo lucharé resueltamente y no me asustarán las penitencias. «No he cometido crímenes horribles, mas no son solamente criminales los que hieren y matan insensibles, y que la sangre vierten á raudales. «Hay seres que sonriendo dulcemente envenenan de muchos-la existencia, individuos que son cual la serpiente que se arrastran y matan sin clemencia. «Hay madres que no quieren á sus hijos, hay esposas que olvidan á su esposo, y que en-otro mortal sus ojos fijos, de su hogar arrebatan el reposo. «Y no hay culpa sin-pena ni castigo, para todo delito hay su sentencia, por eso, buena Amalia, yo te digo que no me elogies más, que mi existencia «fué como debía ser; muy dolorosa, porque viví en completo desencanto; que yo había sido despreciable cosa, y tenía que verter mares de llanto. «Un recuerdo me guardas, que agradezco, compadece mi loco desvarío; mas cesa de elogiarme, no merezco más que tu compasión por mi extravío. «¡Todo al llegar aquí se ve tan claro!... (aquí no nos estorba la miopía), aquí está la verdad, ¡brillante faro! y la verdad es el sol de eterno día! Amalia Domingo Soler. y 16 LUZ Y UNIÓN Estado sociológico y científico del Espiritismo Stuart Mill decía, y nunca se repetirá bastante, que «todo progreso nace de los espíritus descontentos», porque ellos hacen remover la tierra y prepararla para un nuevo plantío. Contra esos descontentos se conjuran de un lado los incontentables que no quieren moverse de un solo sitio porque les parece que si se mueven van á caerse, convirtiendo su aparente felicidad perso- nal en el ilusorio estado que el «statu quo» les proporciona, producto de una educación basada en optimismos de rutinaris- mo. No fijándose en que el estacionamiento es un egoísmo sin entrañas, pues prefieren no ver el peligro á tener que hacer algo para evitarlo y se incomodan cuando un espíritu empren- dedor turba su pacífica idiosincrasia, aunque les haga ver pal- pablemente las ventajas que con un movimiento de avance se produciría un gran bien á la causa en que comulgan sus ideales. El Espiritismo en su última Asamblea extraordinaria de Delegados de la «U. E. K. E.», ha dado este beneficioso paso de avance, al concentrar en una Liga mutua á todos los espiri- tistas españoles que deseen una mayor concordia en la práctica fraterna á que aspiramos, para así poder defender mejor nues- tros intereses materiales y espirituales, á la par que despertemos las apatías de todos los espiritistas del globo, como también dar el exceso que nuestro ideal proporciona en todo el mundo. Dentro la doctrina que tan admirablemente nos expuso Alian Kardec y de las bases y acuerdos tomados por todos los Gongre- sos Universales Espiritistas, caben el que esta Liga haga suyas también las ideas nuevas que fueran aprobadas en los núcleos de mayor potencia mental espiritista; dando así lugar á Una ge- nerosa aspiración de más vasta reformación espiritista, de fe- cunda redención en el ambiente social. Primer principio de coincidencia firmemente establecida por repetidas manifestació- nes de la opinión espiritista y que servirá como de primer pel- daño en la escala de la realidad práctica espiritista por la lógica de la vida de la materia. Constituida la anhelada Liga en beneficio de todos podrá examinar concienzudamente los derechos y deberes del hombre durante su existencia terrena aplicados á nuestra doctrina y con el concurso de la Democracia librar á los espiritistas de malos gobiernos, pues está en el deber de la clase directora el abrir los brazos al desvalido, particularmente á la clase obrera, ejerciendo órgano oficial de la liga e. española 17 sobre ellos una acción tutelar, otorgándoles el auxilio que fuera menester, no á título de limosna ó de gracia, sino por lo que fuera justo. Y como ciudadanos dar, á todos los que están á nuestro alcance, la posible felicidad relativa en mejorar las con- diciones morales y materiales de todas las clases sociales para poder llegar á un estado, social más perfecto, basado en las con- diciones dichas por un hombre célebre: virtud y trabajo. Aunque en la sociedad actual se nota una reacción en este sentido, sin la doctrina espiritista es fácil caer en exageraciones; lo qUe aceptando la redención nuestra, el. obrero se hace más abnegado y asociándose, coopera á un conocimiento más exacto de sus deberes. Y si reinan en él ideas más elevadas de Espiri- tismo, puede llegar á ocupar la cúspide moral del edificio mun- dial, que requiere, para ser bien comprendido, un estado de cul- tura superior á lo tangible de las sociedades vulgares, donde pueda encontrar el goce de sus legítimos ensueños, huyendo de la propaganda pseudo-social ó anarquista que le subyuga. Basta una situación económica sin grandes agobios; á la ri- queza material preferimos una riqueza rhental con capacidad psicológica, sin la cual (según Mulford) el capital material puede perderse y por el contrario, con el mental pueden obtenerse ambos. Los progresos científicos y sobre todo la ciencia espirita, han ayudado grandemente á levantar los tupidos velos que cubre la ignorancia, descubriéndose con ello muchas incógnitas. El que va á la cabeza de la pléyade de espíritus científicos espiritistas, ha sido premiado: «Nos comunican de Stokolmo que ha sido concedido el premio Nobel al químico Crookes que descubrió en sus recientes estudios el metal Thalium, atendida la utilidad y aplicaciones científicas de dicho metal»; ¿por qué no se añade que también descubrió el medio de materializar los espíritus que es mucho más meritorio? ¿será por miedo, ignorancia ó superstición? ¡Felicitemos á Crookes por la ciencia que ha des- cubierto al mundo! ¡Felicitémonos junto con nuestros Directores de la «Liga Espiritista Española», por el generoso movimiento intelectual y moral que se va á desarrollar! Mi alma se siente pequeña al comparar la grandeza del asunto, pero al considerar los entusiasmos de que estoy anima- do para el avance espiritista, se siente muy grande. Miguel Mayol. 18 LUZ Y UNIÓN A la memoria de Senillosa ¿Yo olvidarte? No lo creas; á instruirnos, y nos llevaran cuando vuelan mis ideas por otras sendas mejores. trás de la luz y el progreso, ¿Por qué tan pronto te fuistes? envío á tu recuerdo un beso ¿por qué de la tierra huistes? diciendo: ¡bendito seas!... ¿quizá te faltaba ambiente Yo no sé exteriorizar, y los sueños de tu mente yo no puedo demostrar desvanecidos los vistes? lo que yo siento por tí; Sin duda vivías muy mal, sé... que tú vives en mí, esta atmósfera letal y que no te sé olvidar. no pudiste resistir; Sé que un año ha transcurrido, y llegaste á sucumbir y que ese. tiempo he vivido víctima de un frió glacial. recordando tus lecciones, ¿Dime, me puedes decir tus generosas acciones, si has comenzado á vivir, y el biefi de tí recibido. si tus sueños realizando Tu propaganda bendita vas avanzando, avanzando?... la humanidad necesita; ¿qué ves en tu porvenir?... hay mucha sombra en la tierra; ¡Mas ay! no sé lo que siento, suena el clarín de la guerra no sé lo que experimento, y la crueldad resucita. oigo una voz amorosa, Se preparan batallones, pero triste, dolorosa... las aguerridas legiones voz, que murmura un lamento. dispuestas á la pelea ¿Qué me dice? no lo sé; no tienen más que una idea: ¿con mi pregunta falté? saciar torpes ambiciones. —«No temas que yo te riña; Y todo ¿para qué al fin? pero no preguntes, niña, para matar y el botín que no te contestaré». que sacie á la soldadesca, Habló Senillosa así, y la juventud perezca muy claramente le oí, en uno y otro confín. no volveré á preguntar: En la fuerza está el poder, ¡tan alto quise llegar!... se desconoce el deber ¡que de la altura... caí!... que tiene la humanidad, ¡Senillosa! estoy muy lejos de buscar en la verdad de tí; pero tus consejos la grandeza de su ser. iré afanosa estudiando; Faltan moralizadores, y me irán iluminando concienzudos escritores, de tu ciencia los reflejos. que como tu, se brindaran. Amalia Domingo Soler. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 19 Sobre el temor á Dios «No temáis à los que rnataii el cuerpo y no • pueden matar el alma; temed antea al que puede echar el alma y el cuerpo en el infier- no». (Mateo, c. X, v. 28) He aquí un tema que quién sabe los juicios que tendrán formados de él las Religiones positivas, pero ese pasaje, como muchos, confirma una de las bases fundamentales del Espiri- tismo, aclara uno de los puntos más culminantes de esta conso- ladora doctrina. Esto es la reencarnación de las almas; y para comprobación de este aserto, ponga atención el lector á las ob- servaciones siguientes: No temáis á los que sólo matan el cuerpo; quiere decir que la vida humana á más de ser efímera reviste poca importancia en comparación de la vida espiritual, que poco importa que el cuerpo sucumba en la lucha de las ideas, mientras el espíritu se mantenga incólume en su puesto de honor y salga victorioso. Temed más bien al que puede echar el alma y el cuerpo al infierno; quiere decir, que si uno se muestra débil y pusilánime en la lucha y deja de cumplir con su deber por temor á los hom- bres y á la persecución de la justicia humana, podrá salvar su cuerpo pero habrá sucumbido su espíritu, y al presentarse ante el tribunal supremo recaerá sobre él el peso de la justicia Divi- na; y ante los impulsos soberanos de ésta ese espíi'itu se verá precisado á volver á la vida de la carne para reparar la falta de su debilidad. Tendrá que volver á la lucha unido á su nueva envoltura material, y ese es el verdadero infierno á que alude el Evangelio. Y sino, ¿cómo se explicaría echar al infierno el alma y el cuerpo si éste queda sepultado y en descomposición después de la muerte? ¿Cómo se explicaría eso? El que puede echar el alma y el cuerpo al infierno-es, pues, la lalta del cumplimiento del deber, las infracciones á la ley Divina. ¿Porqué las Religiones positivas se han formado un con- cepto tan mezquino de la justicia Divina? ¿Por qué enseñan el temor á Dios, si Dios no es ningún tirano para ajusticiar las almas? Cumpla cada uno con sus deberes de la vida, trate cada uno de afrontar los peligros que puedan presentársele y de sal- var con destreza y mesura los escollos del camino de la vida y 20 LUZ Y UNIÓN esté seguro que al dejar su cuerpo en la tierra, sea en la forma que luese, su alma se presentará triunfante ante el tribunal de la ley Divina, y juzgado por sus obras irá al lugar de los elegi- dos del Señor, y si vuelve á encarnar no será para volver á la luchaj puesto que ya llegó á su vencimiento, sino para cumplir una misión redentora y ésta lo elevará más en la escala del pro- greso de las almas. Así, pues, como Dios es infinitamente justo y bueno, es una aberración temer á su soberana justiciaj y es lo más lógico y natural que cada uno tema á sus infracciones á la ley de Dios, cumpla cada uno las máximas que la misma ley tiene consig- nadas y así se evitará tener que volver á la lucha, que como queda dicho, es el infierno á que alude el Evangelio, sino que su espíritu al desprenderse de la envoltura material será ascendido á las regiones de la luz, de la fraternidad y de la paz. Temer á Dios es, pues, ofender la justicia Divina, puesto que la justicia Divina es el cumplimiento de la ley de Dios, y ni Dios ni su justicia no pueden hacer mal á nadie ni exigen á na- die más del cumplimiento de la ley, que es el cumplimiento del deber. Dios no es ningún monstruo y su justicia no está tampoco ajustada á ningún código severo y sanguinario como los códigos humanos. La ley Divina dice que no se mate, que no se hurte ni se desee lo ajeno, que no se mienta, que no se cometa adulterio, etc., y sin embargo, ¡cuántos representantes de las leyes huma- nas cometen todas esas infracciones á la ley Divina! ¡cuántos representantes de las leyes humanas claudican en el cumpli- miento del deber que les exige la ley Divina por temor á perder su poderío! Esos son los que,temen á los que matan el cuerpo, y por eso su alma, unida á otro cuerpo, tendrá que volver á la misma tarea hasta dejar su deber cumplido y á más sufrir las consecuencias de sus faltas. Y ¿qué diremos de los ministros de las religiones que dicen ser los representantes de Dios en la tierra? ¡Ah! esos que son los más llamados á cumplir y enseñar el cumplimiento de la ley de Dios y no obstante interceptan el cumplimiento de ella, esos son mucho más responsables. Esos son los que dice el Evangelio, ciegos y guías de ciegos. Esos son también los que dice el Evangelio que tienen ce- rradas las puertas del Reino de los cielos, que ni ellos entraron ni dejan entrar á los deníás. órgano oficial de la liga e. española 21 Esos son los que temen á los hombres y les importa poco su cumplimiento para con Dios. Esos son, sí, los que no quieren perder su modus vivendi; los que quieren estar bien en la vida humana faltando á los de- beres de la ley Divina, sin pensar que su alma y su cuerpo ó sea su espíritu unido á otra envoltura material, tienen que volver á la vida humana para reparar su ociosidad por medio de la lucha, que es el crisol purificador de las almas. Ese es el verdadero infierno á que alude el Evangelio. Faustino Ysona. Centro de Estudios Psicológicos LUZ DE CHILE.—Valparaíso Sesión de 30 de ñgosto de 1907 •Pregunta.—¿Lh reencarnación es un hecho verdadero? Respuesta.—E\ cuerpo es el producto de la vida presente. El alma debe ser considerada en tres partes distintas: La primera parte, que es creada al mismo tiempo y que se desarrolla conjun- tamente con la célula, punto primitivo del ser. La segunda es la que proviene del ambiente del planeta y la tercera es el resultado de las vidas anteriores. Esta última parte no se desprende jamás del espíritu. A la muerte, lo que proviene de la tierra vuelve á la tierra. A la-hora de la separación de la materia, cuando el momento final llega, en que el lazo fluídico es roto, el instinto animal, que es parte del alma, queda toda- vía al lado del cadáver. La segunda parte vaga en el aire. La tercera parte sigue al espíritu radioso que se levanta buscando su patria verdadera. La materia, producto de vuestro planeta, vuelve al planeta. La segunda parte, tierra, materia más deletérea, concluye por disolverse siguiendo la parte superior; lo que vuelve á encarnarse es, por consiguiente, el alma- pura producto de todas las vidas. Cuando los deseos terrenales vuelven á agitar de nuevo el alma, ésta se en- cama en un cuerpo elegido de antemano y al cual habrá contribuido. Así, que todas las veces que nace un hijo, no es creado en tal espíritu por el Creador, es el producto de una creación anterior muchas veces repetida. Sería un absurdo creer que á cada ser que nace. Dios creara un alma. Los espíritus actuales no son otra cosa que el residuo de otro planeta anterior. «Felices los mansos de espíritu, dijo el Cristo, la tierra les pertenecerá». Lo que quiere decir, en conclusión, que los espíritus todavía imperfectos que- darán aquí. Las almas bajan por serie, representada por la escala de Jacob, subir y bajar hasta la perfección completa; pero quedarán adheridos aquí á este planeta, para formar una raza nueva, los mansos de espíritu. El Grande Alberto. 22 LUZ Y UNIÓN Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones HOLGUIN-CUBA.—Para Málaga t Cataluña Suscripción á favor de las victimas qué sufrieron la inundación en dichos puntos de la Peninsula, el 24 de Septiembre anterior, llevada á efecto en esta ciudad de Holguin por el que suscribe,, acompañado de los hermanos en creencias Sres. D. José Heredia Álmaguer y B. Francisco Pallares Saco, cuyo importe recogido es como sigue. P. S. y familia, 5 ptas.—P. Pallarès, 5.—J. Heredia, 5.—P. Pernández, 5.— A. de la Peña, 5.—J. Valenzuela, 5-—Eimblas Garcia y C.®, 40.—M. Lastra, 20. —La. Casa Verde, 10.—Sarabiay Diego, 22.—A. Campins, 5.—Infante y C.'', 10. —R. ¡Sirven, 6.—J. S. Betancourt, 5.—I. Ibarzábal, 5.—J. Romeu, 5.—M. Pe- ralta, 5.—General Luis de Peria, 5.—M. Rimblas, 2.—P. Monné, 5.—E. Medra- no, 5.—E. Espinosa, 5'75.—Pavila y Ovidio, 6.—M. Sánchez, 10.—General P. Vázquez, 11.-^A. Riancho, 2.—M. Lastra, 5.—R. Socarrà, 2'50.—R. González del Rosal, 10.—A. Queral, 3.—J. Cruz, 0'50.—L. Santiesteva, 1.—D. ürquiza, 1.—L. Echevarría, 1.—J. García, 2,—E. Cordero García, l'SO. —Una herma- na, 1.—R.Garcia, 1.—J. Alemán, 2.—M. Rueda, 2'50.—J. Garcia Baza, 1.— P. Pacheco, 1.—J. A. Garda, 4.—J. González de la Rosa, 10.—Un Asiático, 0'25.—J. Dolores Mar, 3.—R. Guillermo P., 2.—E. de la Puente, 2'50.—Elio- doro Duques, 5.—L. Víu, 5.—V. Vila T., 2.—N. Duques, 5.—T. Caicés, 5.—M. Sánchez, 1.—D. Pérez, 1.—E. Zaldivar, 2'50.—A. Iglesias, 1.—A. Cervera. 2.— B. Pérez, 5.—A. Puentes, 1.—B. Rodriguez, 1.—A. Barceló, 1.—A. Crús, 1'35 —J. Nieto, 3.—R. Pernández, 1.—A. Leyva, 1.—J. Gorga, 1.—L. Raster, 2'50. —J. Manduley, 5.—P. Chacón, 5.—R. Echevarría, 0'50.—L. Echevarría, 2. —J. Recio, 2'50.—G. Pozo, 2'50.—P. Sandón, 5.—M. Pereda, 2'50.—Angela Hidalgo, 1.—G. Iñiguez, 1.—P. Miranda, 5.—A. Coca, 2.—M. Chank, 2.—C. Zaldivar, 0'55.—Santiago déla Cruz, 1.—M. Pupo Peña, 1.—R. Serio, 1.— Pbro. J. Pernández, 11.—C. Coca, 2.—M.^'del Rosario Palenzuela, 5.—Mariana Palenzuela, 2'50.—R. de la Peña, 3. —P. Hermosa, 5.—A. Pabon, 2.—J. Alva-' nés, 10.—M. Buch, 2.—J. Molina, 1.—J. Milá, 2.—Kantay, 1.—B. Gómez, 2'50. —C. Villanueva, 5.—Ldo. P. Talavera, 5.—S. Pariñas, 5.—A. Betancourt, 1.— Julita Betancourt, 2'50.—E. Petite, 10'75.—P. Rodriguez, 5.—J. Torrens, 1.— P. Cabrera, 1. —R. Truebas é hijos, 5.—Un señor, 5.—I. Benito, 2'60.—A. Váz- quez, 1.—M. Pérez, 1'25.—P. Camafruta, 5.—M. Almazán, 0'25.—R. Pupo, 1. —J. A. Torralva, 1.—M. Rippe, 2'50.^M. Cabrera, 2'50.—P. Cohallo, 2.—R. del Toro, 2.—Nufiez, 2.—A. Parra, 5.—M. Enilleu Santos, 1.—Sánchez y Saurs, 5.—Gírala, 1.—S. Echevarría, 1.—Un obrero, 1.—V. Camafruta, b.— Rosendo Gómez, 50.—M. Paleó, 2.—J. Castañeda, 1.—R. Menchero, 5.—A. Cordero é hijos, 1.—J. Alverteriz, 2'50.—Calixto Cordero, 3.—Agueda Silva, 2'50.—M. Garcés, 2.—J. G., obrero, 1.—E. Artola, 5.—G. Crús, 2.—G. Mota, 1. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOI.A 23 —N. Julves, 1.—Íí\ Hernandez, 1.—M. Zaldivar, 1.—A. Pupo, 1.—T. Osorio, 1. —A. Serrano, 2.—J. Peña y Crús, 1.—F. Y., 2.—S. Vega, 1.—M. Rosal, 5.—J. Suarez, 5.—J. Sánchez, 5.—V. Mayo, 2'50.—F. González R., 5.—J. Pérez, 0'50. —E. Enrique, 1'25.—M. Maturana, 2'50.—A. Aznares, 2'50.—J. Labarte, 1'50 —S. Parra, 2.—E. Magariño, 1'50.—B. Santiesteva, 11.—ün vecino, 1.—O. Obrer, 5.—P. Lacrús, 4.—J. Montero, 1.—Elena B. de Epanler, 1'15.—A. Serio, 3.—P. Muñoz, 1.—J. Martinez, 1.—J. Laugran, 2'50.—M. Rocaful, 6.—A. Terán, 2'50.—Total, 655'85 ptas. De 174 donantes que anteceden, cuya copia es fiel á su matriz que obra en mi poder. Holguin 7 Diciembre 1907. El Corresponsal de L. y D., Faustino Serio. DEL CENTRO ESPIRITISTA «AMALIA DOMINGO».—MELONES Para Málaga y Cataluña Suscripción á favor de las victimas de las inundaciones, en la Peninsula, llevadas á efecto por el Sr. Presidente de dicho Centro, J). Lorenzo Crús y otros socios del mismo, en el radio de su demarcación, cuyos donantes copio'á continuación. El Centro «A. D.», Melones, 25 ptas.—Lorenzo Crús, 5.—Sixto Peña, 2'50.— Indalecio Leyva, 1.—Francisca Crús, 1.—E. Garcia, 6'50.—R. García, 6'25.— A. Muñoz, 1'50.—J. García, 2'ñO.—J. Gómez, 2.—Bibiana, 1.—A. Ochoa, 3.— J. Crús, I'IO.—É. Crús, 5.—J. Crús, 2'50.—Francisca P., 0'90.—P. Peña, 1.— M. Ruiz, 0'50.—E. Ricardo, 1.—J. Góngora, 2.—M.* del Rosario Gómez, 0'50. —F. Leyva, 1.—P. Leyva, 0'50.—M. Leyva, 1.—P. González, 1.—M. González, 0'50.—M. Ruíz, 1.—A. Rodríguez, 1.—F. Pérez, 1.—A. Torres, Ó'50.—F. Piñei- ra, 2.—C. Simón, 0'50.—J. Borja, 2.—Julita Borja, 1.—I. Crús, 2.—Tomás Méndez, 5.—J. Crús, 1'50.—J. Sarmiento, 2'50.—A. Crús, 0'50.—A. Proenza, 0'55.—P. Sánchez, 1.—E. Peña, 2'30.—M. Sarmiento, 2'75.—L. Peña, 1.—E. Peña, 1.—N. Zaldivar, 1.—L. Crús, 2.—N. Peña, 2.>—C. Peña, 1.—M. Zaldivar, 0'50.—R. Martínez, 0'50.—T. Martínez, 0'50.—R. Bruceta, 1.—R. Sarmiento, 0'50.—A. Medina, l.^E..Leyva, 0'50.—E. Ricardo, 0'50.^J. Leyva, 1.—S. Leyva, 1.—J'. Leyva, 1.—F. Almeyra, 1.—R. Ricardo, 0'50.—J. Fuentes, 2'75. —J. Pérez, 1'36.—A. Reynaldo, 1.—R. Reynaldo, 1.—E. Reynaldo, 1.—A. Reynaldo, 1.—J.. Reynaldo, 1'75.—Total, 130'20ptas.- Holguín 7 Diciembre 1907.—P. E. del Sr. Lorenzo Crús.—El Corresponsal de L. Y ü., Faustino Serio. Holguín, relacionados 174 donantes." .... 655'85 ptas. Centro de Melones, relacionados 69 donantes. . 130'20 » Suman 786*05 » Gastos certificado 1'05 » Liquido 785 ptas. 24 LUZ Y UNIÓN Sama del número anterior. . . 726 45 pesetas Poífiria Rodríguez, de Puerto México 1'25 » Micaela Dorante, de id 2'50 » Severiana de Machorro, de id 2'50 » Carmela Gamble, de id 1'26 » Alfonso Domínguez, de id 6 » Mardonio del Angel, de id 2'50 » Marcelina Cruz, de id . 1'25 » _ Francisca Monte, de id 1'25 » Sofía Rentería, de id. 1'25 » Dorotea Mansilla, de id. l'25 » Demetria Osorio, de id. . . . . . . . . . 1'25 » Luisa Martínez, de id . 2'50 » Gabina Gutierrez, de id ■ . 1'25 » Isabel Lara, de id 1'25 » Andrea González, de id 2'50 » Andrés Alvarez, de id 2'50 » Juana Pérez, de id 1'25 » Julián Domínguez, de id. 2'50 » Pasiano Rivez, de id 6 » Petronila Carrasco, de id 2'.50 » Gumersinda Oilgua, de id 1'25 » Cbona Arellano, de id 1'25 » Biviana Alvarez, de id 2 50 » Petronila Rueda, de id; 1'25 » Domingo Cruz, de id 2'50 » Agustín Alor, de id. . . 2'50 » José Torres, de id.. . 2'50 » Manuel P. Fife, de id. . . . . . . . . 2'50 '> Felipa Ruedas, de id 2'50 » López y Fonseca, de id 1'25 » Enrique Vanmeeter, de id. . . . . . 2'50 » Estanislada Torruco, de id . 1'25 » Lorenza Guerrero, de id. ' . . . 1'25 » Antonio Solá, de id 1'25 » R. C.,deid 14'50 » Jesús Bernal, de id . . . 2'50 » ' Manuel Ricart, de Lezignan . 10 » Agustín Casany, de Barcelona. • » . . . . 0'50 Francisco Seguí, de Pontevedra. . .... Joaquín Poza, de id ". José Otero, de id ^ Laureano Poza, de id. ' ........ José Lomba, de id . . . Domingo Rodríguez, de id Suma y sigue. 829'70 pesetas ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 25 Suma anterior 829'70 pesetas Eulogio Infiesta, de Habana. ... . . . . 2'60 » Jesús M. Dávila, de.Yabucoa 10 » Suman 842'20 pesetas Recibido por mediación de D. Faustino Serio, se- gún las anteriores relaciones 785 » J Esteva Marata 6'05 » Total 1632'25 pesetas REPARTIDO Remitido á Málaga en 3 partidas. . . . i . 400 » á Manresa en 3 partidas 400 » áliérida en 2 partidas 300 » á Molins de Rey. 70 » á Prat de Llobregat 70 » á San Vicente deis Horts 70 » á Cornellà 70 » á San Baudilio de Llobregat 70 » á V. Martínez Piquer 25 » á Julia Delgado.- . 25 » á Dolores G 25 » á J. Martínez 20 » á Fernanda García. ....... 25 » para algunos labriegos de Hospitalet. . 50 Por 3 cajas madera (envío ropa á Málaga). . . 3'75 Por gastos de giros y franqueos 7'50 Total 1632V25 Suma lo recaudado. . . . 1632'25 ptas. Suma lo repartido 1632'25 » .... (Queda cerrada esta suscripción). Notas bibliográficas INCHIESTA INTERNACIONALE SUI FENOMENI MEDIANICI, pOr F. Jacchiní Luta- ghi. Un elegante volumen con 208 páginas. Precio: 3 liras. En este libro su autor reseña las contestaciones dadas á dos preguntas que dirigió á la mayoría de los hombres que se han significado en el estudio de los fenómenos medianímicos. Las preguntas fueron las siguientes: 26 LUZ Y UNIÓN 1.^ ¿Los fenómenos medianímicos son debidos á simples alucinaciones ó son fenómenos objetivos, biológicos, dependientes del organismo del medium y de los experimentadores, ó determinados en todo ó en parte por la intervención de fuerzas desconocidas, extrañas al organismo del medium y de los experimen- tadores? 2.^ ¿Admitida la realidad de los fenómenos, la hipótesis espiritista puede ser aceptada y discutida como hipótesis de trabajo ó debe relegársela fuera de los límites del circuito de las hipótesis científicas? Entre las personalidades que contestaron á estas preguntas, figuran las si- guientes: Alberto de Rochas, Federico Mistral, Federico Mayer, Olivier Lodge, Fe- lipe Bottazzi, Ernesto Bozzano, Lino Ferriani, Arturo Graf, L. Luciani, Visani Scozzi, Alfredo Nicéforo, Gin. Melazzo, Salvador Farina, G. F. Gebla, Adolfo Zerbogris, Gerónimo Novicow, Camilo Flammarion, Amilcar Lauria, Escipion Sighele, C. A. Marescotti, A. Marzoratti, G. Venzano, G. L. Lapouge, B. Bon- nayme, J. Esteva Marata, Jollivet-Castelloll, M. Sage, Roberto Braceo, Otorino Novi, Angel Andres, León Denis, Alejandro Sacchi, Julio Scotti, F. Zingaropoli, Carlos Galateri, Aureliano Taifofer, E. d'Amisis, Sofía Bisi Albini, Carmelo Samona, Th. Flournoy, Jules Bois, S. S. Lascaris, Dante Lattes, Jaime Smith, Annie Bessant, F. Porro, E. Bonardé, H. Freimark, Sánete de Sanctis, etc., etc. En otro número nos ocuparemos más extensamente de esta obra, que creemos llamada á producir gran sensación. Biblioteca de Ciencias Filosóficas y Experimentales .—Acaba de apa- recer el primero y segundo volúmenes de esta notabilísima «Biblioteca» que por las obras que lleva publicadas acapara ya los elogios de toda la prensa. Dada la amistad que nos une con sus editores y á fin de que nuestros _elogios no parecieran interesados, nos permitimos copiar del diario La Libertad, de Vitoria, el juicio crítico que del primer volumen inserta. «La acreditada casa editorial de los señores Carbonell y Esteva, de Barceló- na, acaba de poner á la venta el primer tomo del notabilísimo libro Fases del sentimiento religioso, del insigne psicólogo William James, profesor de Filosofía de la Universidad de Harward. »E1 famoso publicista yanqui, gloria de la ciencia americana, hace en esta primera parte de la obra un estudio completísimo y documentado de la esencia y modalidades del sentimiento religioso y expone su posición especial al considerar el proceso genético de lo que algunos psicólogos han llamado el imperativo cordial. »A1 estudiar los individuos normales, equilibrados, penetra en la selva obscu- ra y laberíntica del alma enferma, del dualismo de la personalidad y la disgrega- ción del «yo». Estas morbosidades del espíritu se curan mediante la reversión y unificación del «ego» integralmente considerado. Los resultados positivos para la vida, de las conversiones felices, los examina en los capítulos consagrados á exponer las condiciones y el valor de la santidad; y antes de deducir sus conclu- siones filosóficas, se ocupa extensamente de los deliquios de los místicos. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 27 »Según James, los experimentos religiosos tan sólo atestiguan de modo inequí- voco que el ser humano puede comunicarse con algo más grande y perfecto que el sujeto mismo, y que en dicha unión se asciende á una esfera en la cual reina la paz y se halla el contento interior y el supremo goce para el espíritu anhelante. La Filosofía contemporánea con su aspiración á la unidad y el misticismo con su tendencia monodeísta, «rebosan el límite» é identifican aquel «algo» con un Dios único, alma universal. Y al proponerse sintetizar su criterio formula su profesión de fe, afirmando la existencia de un yo subconsciente que denomina «sublimal», intermedio entre la naturaleza y la razón más elevada ó sea Dios, cuya eficiencia produce efectos reales en el universo. »La publicación de este primer tomo de la obra de James, al cual seguirán en breve los dos restantes, supone un laudable esfuerzo editorial llevado á cabo con acierto por los señores Carbonell y Esteva, en su «Biblioteca de Ciencias Filo- sóficas y Experimentales», que recientemente comenzó á ver la luz pública con las de Popper y Sergi, El derecho á vivir y el deber de morir y La Psiquis en los fenómenos de la vida. ❖ ❖ As CURAS ESPIRITAS Ó SUA LEGITIMIDADE PERANTE A LEI.—En este librO pU- blica la «Federación Espirita Brasileña» los documentos referentes al proceso instruido contra ella y el medium curandero Domingo de Barros Lima Filgueiras. De estos documentos resulta una victoria completa para el Espiritismo, ya que el juez absolvió con todos los pronunciamientos favorables á los acusados. Felicitamos de todo corazón á la Federación hermana y á nuestro buen amigo el Sr. de Barros Lima. Movimiento espiritista Nuestros buenos amigos los esposos Arturo Hanaiz y María Juliana,, vecinos de Rèillo, acaban de ver aumentada su familia con una niña á quien han inscrito en el Registro civil con el nombre de Leontina. Felicitamos á nuestros queridos amigos por tan fausto acontecimiento y de- seamos á la recién nacida una vida de progreso y de felicidad. Nuestros hermanos de Colombia, debido á la tiranía que en aquella nación ejerce el clero católico, son víctimas de sañudas persecuciones por parte del clero y del Gobierno de aquella infeliz nación. No contento el clero con haber excomulgado públicamente á todos los espiri- tistas y á cuantos con ellos se relacionen, ha logrado del Gobierno absolutista que desgobierna aquella nación, el que promulgara un decreto en el que se pro- hibe la entrada en Colombia de todo libro, folleto ó periódico que ataque en alguna forma las creencias católicas. 28 LUZ Y UNIÓN Exacerbado el fanatismo católico, se ha procurado aislar, de momento, á nuestros queridos hermanos, y después de logrado este propósito han pasado á vías de hecho, colocando una bomba explosiva en la casa que habita nuestra querida hermana D.^ Petronila Hoyos. Fué una gran suerte el que algunos de nuestros correligionarios se apercibie- ran de que había algo encendido en la escalera, y pudieron llegar á tiempo de apagar la mecha, evitando con su arrojo las desgracias que sin duda habrían ocu- rrido. Esta bomba, colocada á los cuatro días de haberse publicado la excomunión, demuestra su procedencia fanática y da la medida de lo que son capaces los que se apellidan, en Colombia, discípulos de Cristo, de aquel Cristo que tanto pre- dicó el amor, la tolerancia y el perdón. Desengáñese de una vez el clero católico; no es sembrando odios como una religión se engrandece. Según nos participa la Comisión de Propaganda de la Sociedad Espiritista «Luz del Progreso», de Tarrasa, para el día 26 de los corrientes tiene organizada una fiesta literaria y musical dedicada á honrar la memoria de D. Miguel Vives. Por nuestro conducto invita la citada Comisión á todas las entidades afilia- das á la «Liga Espiritista Española», de cuya invitación nos hacemos gustosa- mente intérpretes. Deseamos á dicha Sociedad el mejor éxito en su empresa. Necrologías En Verdelpino de Huete, ha desencarnado nuestro queridísimo amigo y her- mano D. Cándido Muñoz García, antiguo suscriptor de esta Revista. El sepelio se verificó civilmente y el acto fué una verdadera manifestación de las muchas simpatías con que contaba nuestro querido hermano, á quien de- seamos en su nueva vida un feliz bienestar y mucho progreso. * * Nuestro buen amigo D. Venancio Terrazas nos envía la siguiente carta que hacemos nuestra en todas sus partes. Morón (Sevilla), 7 de Enero de 1908. Sr. Director de Luz y Unión. Barcelona. Queridísimo amigo y hermano en creencias': El principal objeto de la presente es triste. Un hermano nuestro ha dejado su envoltura carnal y el día 20 del pasa- do Diciembre se le dió sepultura, prescindiendo en absoluto de la intervención de las religiones positivas. Don Salvador Guillén Gallego, fué un hombre activo, pero sobre todo, metó- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 29 dico en todos los asuntos de la vida. Estudió el magisterio después de casado, ganando plaza á los 25 años. Es muy corriente decir en casos semejantes: Fué un modelo de padres, etc. Para comprender lo que él fué, basta con indicar que crió once hijos, educándolos á todos con esmero y supliendo su escasez de recursos con su amor y sus desve- los. Es de notar que jamás molestó á nadie con peticiones. He leído algunas poesías que compuso y siento no enviarle, para que sus lee- tores saborearan el amoroso afán que ya sentía por unirse á la que antes fué su compañera en la tierra y la intensa fe que revelan. Era un espiritista convencido y ya muy práctico por los muchos años que llevaba estudiándolo. En su trato, sólo una cosa no hallé de mi gusto: su retraimiento. Por lo demás, sólo motivos de alabanza tengo y en cuanto á su voluntario retiro, le disculpo puesto que me consta que era debido á su afán de aprovechar la estancia terrena en el estudio de nuestra ciencia y de comunicarse con los queridos seres que había perdido, á los cuales deja un archivo de comunicaciones privadas, las que, además de unas memorias en que recomienda el amor al prójimo y el perdón para los enemigos, deja á sus hijos supervivientes. Contaba al desencarnar 78 años. ¡Felices los que en una existencia como la suya la aprovechan en bien de la humanidad! Que tan provechosa estancia le sirva de progreso y que con la luz adquirida alumbre el espinoso sendero de la vida material á los seres amados que aquí dejó. Le ama su mejor amigo y hermano, Venancio Terrazas. Otra vez la Parca ha venido á probar la fe de las familias de nuestro querido Director y la de su señora: una niña muerta al nacer, hija de nuestros buenos y queridos amigos D. Juan Grau y D.^ Trinidad Esteva, hermanos respectivamente de la Sra. de Esteva y de éste,,ha venido á tronchar todas las ilusiones que el fausto y esperado acontecimiento del embarazo había hecho concebir. Acompañamos á nuestros buenos amigos en el sentimiento que esta pérdida les ha ocasionado y esperamos que la fe en el Espiritismo les hará soportar mejor la ausencia del ser tan idolatrado ya antes de nacer. El entierro, como es la costumbre en la familia Qrau-Esteva, fué civil. Curiosidades De los Anales de Ciencias Psíquicas, reproducimos los siguientes casos de sueños, confirmados por hechos acaecidos poco tiempo después; estos sueños los ha tenido el conocido periodista francés, Enrique Buisson. I La noche del 8 de Julio de 1887 vi á mi abuela muerta, con un semblante tan tranquilo que llamó ftii atención. Encima la cabecera de su cama vi un sol res- 30 LUZ Y UNIÓN plandeciente y en medio de este sol la fecha 8 de Junio de 1888, el día y el mes encima del año. Terminada esta pesadilla no me desperté, pero al levantarme, obsesionado por este sueño se lo conté á mi madre. Esta calmó mis aprensiones del mejor modo que pudo, pero una vez libre de mí se apresuró á tomar nota de mi sueño. Después nos ha enseñado muchas veces esta nota. Un año después y en el mismo día por mí soñado mi abuela moría en menos de un cuarto de hora, llamándonos á todos la atención la tranquilidad de su sem- blante, tranquilidad que yo había observado en mi sueño.—Enrique Buisson. Los abajo firmados, certificamos el haber tenido conocimiento de la muerte de nuestra abuela un año antes de haber acaecido ésta por un sueño de nuestro hermano Enrique y que nuestra madre había apuntado en una nota. Y para que conste, firmamos el presente escrito. Mme. Enrimeta Buisson.—Mme. René Pépin.—Buisson.—R. Buisson.—F. Buisson.—M. Guiloux (1). II En la noche del 21 al 22 de Marzo de 1903 soñé que mi madre estaba en la cama, no muerta, pero sí muy enferma, causándome infinita sorpresa el observar que el médico que había al lado de ella era el Dr. Renau. Este médico había sido el médico de mi familia durante más de 25 años, y hacía más de uno que había muerto, y por lo tanto, no podía comprender cómo estaba allí. Impresionado al levantarme le conté el sueño á mi mujer que, como era natural, no le dió ninguna importancia, puesto que la víspera habíamos recibido una carta de mi hermana, en la que nos decía que nuestra madre estaba muy bien. La misma mañana á las 9 recibíamos un telegrama diciendo: «Madre, muy mal». Acto seguido tomé el tren llegando á la 1 á Saumeur, cuando ya hacía media hora que había muerto. III En la noche del 9 al 10 de Abril último, soñé que mi portera llamaba á mi puerta y me decía: Señor, de orden del prefecto de policía os suplico que apa- guéis la luz, pues ya son más de las nueve. Miré á la calle, y efectivamente vi á Mr. Lepine en la calle, pero vestido de tal modo que no pude aguantar la risa. Mr. Lepine llevaba una chaqueta de cuero, sombrero flojo y calzado un pie con una bota y el otro con una pantufla. Naturalmente que yo no le había visto jamás vestido de ese modo. En el mismo instante vi en mi sueño que un edificio vecino había sido presa de un incendio formidable, en vista de ello me lancé á la calle para ayudar al salvamento durante el cual he llevado á cabo actos de extraordi- nario valor. Como había hecho siempre, al despertarme expliqué mi sueño á mi esposa. Todo el día se pasó sin ningún incidente. Por la noche estábamos comiendo cuando de pronto oímos pasar las bombas y un fuerte rumor subía desde la calle hasta nosotros. Nos precipitamos á una ventana y observamos que á nuestro lado izquierdo había estallado un formidable incendio, eran los lavaderos de la calle de Jarcquemont que àrdían por completo. (Véase los periódicos de dicha fecha). Algunos momentos después bajé y me dirigí hacia el lugar del siniestro. Después de haber atravesado la muchedumbre y llegado al lugar incendiado, la primera persona que se me apareció fué Mr. Lepine, vestido exactamente tal como lo había soñado. Después he sabido que habiéndose herido en el pie el pre- fecto de policía, se había visto obligado á usar aquel día una pantufla. Enrique Buisson, periodista, rue Daulancourt, 18, bis, París. Certificamos que los sueños referentes á la muerte de nuestra madre y al incendio de los lavaderos de la calle de Jarcquemont nos fueron contados por nuestro hermano bastantes horas antes de acaecer dichos sucesos. Mme. Enriqueta Buisson.—P. Buisson. (1) Esta última firma es la de una mujer ai servicio de la casa desde hace 55 años. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 31 Caso extraño de visión por medio de la audición musical .—En el Pro- ceedings of the S. P. N., V. X, pág. 183, encontramos el siguiente caso que reproducimos con sumo gusto. Miss Q. explica en él el efecto de las diferentes sensaciones que producen en ella los sonidos de varios instrumentos de música del siguiente modo: «Las notas de un oboe me hacen aparecer delanté una pirámide, ó más bien dicho, un obelisco de vértice agudo, vértice que se va aguzando más á medida que la nota es más aguda y que se vuelve más obtuso cada vez á medida que la nota es más grave. Cuando el instrumento suena fuerte veo el obelisco de forma bien definida; si el sonido es débil, en forma vaga y vaporosa. La gama entera del violoncello, la nota alta del contrabajo, la de la trompa, la baja del clarinete y del violin, hacen aparecer á mis ojos una blanca cinta ondulante. El toque de la corneta presenta á mi mirada una sucesión de blancos círculos graduados y regulares que se van sobreponiendo unos á otros; cuanto más grande es la inten- sidad del sonido, más grande es el círculo. Estos, como la cinta, pasan delante mío en línea horizontal en vez del obelisco que parece venirse al encuentro con el vértice». ❖ ❖ Nuestro colega de Valparaíso, La Revista de Estudios Psicológicos, pu- blicó, hace poco tiempo, varios artículos sobre fenómenos á cual más notables, de entre ellos entresacamos el siguiente: «Visión sin o¡os .—Light of Truth da cuenta del siguiente fenómeno: Ethel Gilliam, de 12 años, murió en Palouse, Washington; pero la joven volvió á la vida antes de que terminara el servicio fúnebre. Desde este momento quedó completamente ciega. Poco á poco se desarrolló eñ ella una disposición á la clarividencia que le permite ver más distintamente que antes con sus ojos materiales; ve, también más distintamente de noche que de día; describe las cosas que se encuentran delante ó detrás de ella; lee tan fácilmente en libros cerrados como abiertos; juzga de la belleza de un cuadro deslizando sus dedos sobre la superficie; ame- nudo describe escenas que se producen á varias leguas de distancia, indicando el lugar y la hora de una manera exacta; describe escenas espirituales que ve por la noche, cuando su alma viaja por las esferas celestes. Médicos y sacerdotes contemplan admirados este problema para cuya solu- ción sus teorías sobre la vida y la muerte son insuficientes. En las experiencias que se hicieron con ella, se le hizo tocar objetos que des- cribió exactamente. Indica la hora á un medio minuto, así como el número'de monedas que se tiene en la mano. En una ocasión, la vieron dos señores, uno de los cuales llevaba un cartón con imágenes; le bastaba tocar el borde de las imágenes para saber lo que represen- taban. Como esta experiencia se hizo en la obscuridad, había necesidad de en- cender luz para constatar la verdad. Escribe y lee en la más profunda obscuridad; come y bebe muy poco; en una palabra, ésta joven constituye un problema físico. * * ^ Luce e Ombra cuenta una extraña y terrible visión que se ha Verificado en Londres. Una señora X... visita con su marido una casa desocupada para alqui- larla. El marido baja para ver la caballeriza. La señora, sola en el salón vacío, ve de pronto entrar una joven por la puerta abierta, aproximarse á la chimenea y apoyarse en ella. Un instante después, por la misma puerta, penetra un hombre que se acerca á la joven y, sin hablar palabra, la hiere de una puñalada. La joven 32 LUZ Y UNIÓN cae. La señora X... pide socorro. Su marido vuelve rápidamente, pero la visión ha desaparecido. Algunos días después, la señora X,.. que había renunciado á alquilar la casa, encuentra en una casa amiga una Joven enteramente parecida á la de la aparí- ción. Las dos se unen en estrecha amistad. Pronto la nueva amiga de la señora X... presenta á ésta un joven que es su novio. La señora X... reconoce en él al segundo personaje de su visión, al asesino. Los novios son ahora esposos y ocupan la misma casa en que la señora X... tuvo su trágica visión. Esta no ha hecho revelación alguna á los esposos, pero cabe preguntarse: ¿qtié irá á suceder? ¿Va á realizarse el final de la visión? ❖ La promesa de un condenado .—Clovis Hugues,. brillante escritor y distin- guido parlamentario de Francia, afirma el siguiente hecho, que extractamos del librito anti-espírita. Almas del otro mundo, de Amadeo de Freitas. En 1871, estando yo preso en Marsella, con un amigo, Gustavo Crémieux, condenado á muerte, me dijo: «No te preocupe por el pronto (refiriéndose á la inmortalidad del alma), cuan- do me hayan fusilado yo te probaré la verdad de que el alma no muere, dándote señales fidedignas de mí en tu celda». Tuve para sus palabras una sonrisa incrédula. Mas una cierta mañana, desperté sobresaltado por el ruido producido por unas tenues pisadas producidas en la mesa de mi celda. 'Salté fuera del lecho, escudriñé, revolvílo todo, examiné la mesa, nada!... No obstante, las pisadas sucedíanse acompasadas, sin saber á qué atribuir esde extraordinario hecho. Pocas horas habían transcurrido de este fenómeno, cuando mi guardián, me informó de que mi amigo Gastón había sido fusilado aquella misma mañana. tjí Aparición de un muerto .—Copiamos de la revista brasileña Tribuna Espi- rita, que ve la luz en Río de Janeiro, lo siguiente: La viuda Bichara contónos el siguiente hecho ocurrido algún tiempo después de muerto su marido, Rafael Bichara, que aquí fué comerciante largos años. Habiendo quedado viuda, pobre y con varios hijos pequeños, teniendo que lu- char con grandes dificultades para cubrir las necesidades de mis pobres criatu- ritas, venía preocupándome seriamente desde la muerte de mi esposo y siendo realmente penosa la situación en que me encontraba, sentíame muchas veces in- vadido mi espíritu por el más profundo desaliento. Una noche, después de un día de los más atribulados me acosté. Estaba yo... no sé si dormida ó dispierta, cuando vi se aproximaba hacia mí, mi difunto espo- so diciéndome; ¿Precisas dinero, no es verdad? en el bolsillo de los pantaló- nes nuevos encontrarás 20 duros (veinte mil reis) que allí dejé. Al día siguiente, al despertar, me acordé perfectamente del suceso, mas díle la importancia que generalmente se da á los sueños y no volví á preocuparme más del asunto. Dos ó tres días después, reuní la ropa para lavar, incluyendo en ella los tales pantalones (que son de hilo crudo y que así fueron designados por haber sido vestidos solo una vez) y lo entregué todo á la lavandera. Foco tiempo había transcurrido, cuando se presentó dicha lavandera entre- gándome un billete de 20 duros que encontró en el bolsillo de los pantalones nuevos!!! Sin comentarios. Liga Espiritista Española JUNTA DIRECTIVA: Presidente, D. Jacinto Esteva Marata.—Vicepresi- dente, Dr. D. José Cembrano.—Secretario, D. Agustín Brunet.—Tesorero, don Santiago Durán.—Revisor de cuentas, D. Samuel Peremarch.—Contador, don Alberto Andreu. REVISTA: Director, D. Jacinto Esteva Marata.—Redactor-jefe, D.® Amalia Domingo Soler.—Administrador, D. Santiago Durán. ASOCIACIOííES EFECTIVAS Luz y Unión (Revista), Perlandina, 20.—BARCELONA. La Voz de la Verdad (Periódico), Ferlandina, 20.—BARCELONA. «La Buena Nueva», Círculo Espiritista, Plaza del Sol, 5.—BARCELONA (Gracia). «Unión Fraternal Espirita», Sociedad de Estudios Psicológicos, Muralla Santo Domingo, 9.—MANRESA. «La Fraternidad Humana», Centro, San Isidro, 77.—TARRASA. «Circulo Cristiano Espiritista», Democracia, 12, 1.°—LÉRIDA. «La Aurora», Centro Espiritista, calle San Cucufate, 21.—SABADELL. «Unión Fraternal Espirita», Centro, San Francisco, 26.—CAPELLADES. «El Altruismo», Centro de Estudios Psicológicos, calle de Barcelona, 42.—BA- DA LONA. «El Angel del Bien», Madera, 18 y 20, pral., derecha.—MADRID. «El Renacimiento», Centro espiritista. Viudas, 7.—ALGECIRAS. «Justicia y Redención», Grupo espiritista.—ILERAS (Cordoba). «Constancia», Centro, Cobertizo Malavert, 13.—MÁLAGA. «El Faro de Paz», Centro, Arzobispo Mayoral, 12, 2.°—VALENCIA. «La Paz», Centro espiritista.—MAHÓN. «Constancia», Centro, calle de San Roque, 18.—NOVELDA (Alicante). «Felicidad», Centro.—CANILLAS DE ALBAIDA (Málaga). «Luz y Unión», Centro, Levies, 14.—SEVILLA. «Amor Universal», Farro, 4.—SAN GERVASIO. «Amor y Vida», Tamarit, 161, 2."—BARCELONA. «La Verdad».—BURJASOT (Valencia). ADHEBESÍTES «Esperance», Grupo de propaganda espiritista kardeciana. Rae Donizetti, 4.— PARÍS (Auteil). «Lazo Unión», Centro Espiritista, calle San José, 20.—LARES (Puerto Rico). STA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la protección de sus guias espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRIPCIÓN España 1 Por nn año. pesetas . Extraejero • ... 12 » Número snelto. . 0'50 » CPAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rue- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certiñcado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes do Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos paises cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los paises en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. — Barcelona Obra de regalo para el presente año: Elementos de Una Nueva Ciencias pnífr Mariano Ruth Sinué. Un tomo en 4.° de 308 páginas, es- meradameiito impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118.—Barcelona AÑO IX NÜM. 2 SülIARIO; D.^ Rosalia Cabrera de Pérez.—El Crucificado, por ü. Frnncisco Restrepo Gómez.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Española». —El Espiritismo, ante las teorías Dualista y Monista, por D. Manuel Pareja Medina.—A+go de lo que se debe entender por Esencia, Substancia, Fuerza y Materia, por D. B. Rodriguez.— Odios de ayer, por D." Amalia Domingo Soler.—La voz de ultratumba, por D. Fran- cisco Ríos.—A todos .., por D. Jacinto Fornaguera.—Dos senectudes, por Aguilar.— Dos almas, por D.®-Maria Trulls de Rubio.—Reflexiones, por Angeles.—Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones.—¡Alerta, espiftïistas! - Mo- vimiento espiritista.—Necrologías.—Notas bibliográficas.' Corresponsales Administrativos üléjico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4." de Nicolás Bravo, 19, ORIZABA (Veracruz). Puerto-Kico.—Faustino Tsona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE.—Francisca Suárez, Méndez Vigo, MAYAGUEZ. Cnba..—Adolfo Garcia, Real, lo, MANZANILLO —Delfín Rpig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio liifiesta, calle Cuba, ^4, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN —Luis G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS,—Arman- doj. Raggi, Apartado 17, CAIBARIEN —D.® Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN —Manuel Y. López L., Carrera 6.% n." 248 bis, BOGOTÁ. República dei Salvador (c. A.)—^Luciano Cenedella, Dtor. de «La Nucva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés». PEHUAJO. —Zoilo Casas, LOBERIA.—Atilano Hervas, Tucumán, 1736, BUENOS AIRES.—Pedro Iraola, NECOCHEA.—Francisco Otero, calle 26, n.° 174, MERCEDES —Manuel To- rres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Islas Pilipinas.—Casimiio Peña, San Rafael, I 10, (Manila), SAN MIGUEL. Krasil.—Emilio Serrador, Caixa do Correo, n.° 34, SAN MANUEL DO PARAÍSO —Agrip- pino Gómez Veado, Rua Municipal, n." 3, CIDADE DO MURIAHÉ (Estado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Bahía).—Edla de Moarés Cardoso, San Francisco Havrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Babia de Samana), SANCHEZ. República de Kicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República dei Cenador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CARBONELL y Nuestras fuerzas Mentales llodo de emplearias con provecho en el comercio, la industria, las artes, los oficios, y en general en todos los actos y situaciones de la vida por Prentice Mulford Cuatro magníficos tomos encuaderuados á la americana. . . 40 pt-'S^tás ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 37 De Barcelona.—Grregorio Juan.—Eduardo Estrada.—Florencio Am- pudia.—Juanita Piñol.—Clemente Francés.—Isidra Tejero.—Juan Terra- das.-^José Alventosa.—Rufino Creus.—Silverio Andrés.—Ramón Lato- rre.—Antonio Cabos.—Pedro Artés.—Mariana Sabaté.—Agustín Pujol. —Escolástica López.—Conchita López.—Josefina López.—Juana Puy- cheo.—Pilar Larrosa.—María Moll.—J. Esteva.—Josefa Falló.—Claudio Martín.—Mercedes Serras,—Luisa Poils.—María Güero.—Ramón de la Cueva.—Victoria de la Cueva.—G-enoveva de la Cueva.—Emilia de la Cueva.—Mercedes de la Cueva.—Vicente Pastor.—Ramón Pérez.—José Vidal.—Juan Bosch.—Jaime Borràs.—José Ferranz.—Francisco Moya. —Pablo Vidal.—María Vidal.—Josefa Vidal.—^Clementina Vidal.—Car- men Vidal.—Mercedes Samper.—Elvira Samper.—Enrique Ramón.— Juan Ramón.—Esperanza Ramón.—Elena Barrera.—Josefa González. —Prudencia González. — Francisco Brians. — Emilio Ayele.—Josefa Simó.—Virginia Cervera.—Carmen Viudo.—Francisca Fina.—Ricardo Pérez.—^Francisco Vera.—Teresa Guitart.—Antonia Moncerda.—José Farreras.—Trinidad Pérez Dorado.—Luisa Juncal.—Francisco Cercós. —Salvadora Castell. De San Gervasio.—Jacinto Fornaguera.—Juan Besora.—N. Marcial Simó.—Antonio Guells.—Jaime Año. De Badalona.—Enriqueta Sánchez Gou.—José Canals Planas.—Anas- tasio Sánchez Gasol.—Rosa Peses Pecho-abierto.^—Emilio Vila Simó.— Cosme Prenafeta Mostany.—Concepción Prenafeta Fá.—Manuel Preña- feta Mostany.—Flora Prenafeta Solé.—Francisco Rosado Bigorra.—An- tonia Oliva Josa.—Sebastián Batlle Prat.—Bartolomé Solé Casa-ramors. —Jaime Elié Miralles. De .SaóaííeM.—Augusto Vives.—Teresa Olivé.—.Rosa Ballós.—Vicen- te Domeuech.—Tomás Palá.—Francisco Aquilino.—Dolores Vila.—Ca- milo Sampere.—Vicente Pérez.—Antonio Pubill.—Antonio Palá.—Asun- ción Borrell.—Pedro Munsech.—José Picó.—Antonio Plá.—José Riera. —Armengol Farràs. De Málaga.—^miMo Callejón Caral.—Ricardo García de la Torre.— José Maldonado Fernández.—Ramón Caballero Portales.—Ramón Pérez Pascual.—Gabriel del Pino Carrera.—Antonio Bruno Yobar.—Antonia Martín Millán.—Josefa Gómez González.—Antonia Granados Muñoz.— María Morales Ruíz.—Catalina Roldán de López.—Francisca León Aguilar.—Rosalia Crespo Pérez.—Cipriana Tierno Gómez. OBSEQUIO. Un amante de la «Liga Espiritista Española», entusiasta de las Con- 38 LUZ Y UNIÓN ferencias que sobre Espiritismo práctico viene fiando nuestro director, ha donado 1.500 ejemplares de un folleto titulado Por qué soy incrédulo, para que se expendan al precio de 10 céntimos en Barcelona y 16 en provincias y extranjero, con la precisa condición de que el producto de esta venta sea aplicado á la impresión de las Conferencias dadas por nuestro director. De conformidad, pues, con lá voluntad del generoso donante, se han puesto á la venta dichos folletos, esperando que nuestros amigos se apre- surarán á adquirirlos facilitando así la pronta impresión de dichas Conferencias. El folleto de referencia es de tamaño en'4.° y 16 páginas de nutrido texto, en el que su autor, el doctor Ricardo de la Parra, expone los mo- tivos por qué ha dejado de pertenecer á la religión católica asi como á toda otra, á pesar de sus creencias en Dios y en la existencia del alma. CENTRO «AURORA», DE SABADELL Esta importante entidad, según nos participa en atento oñeio, ha ele- gido la nueva Junta Directiva que ha de regir sus destinos en el año actual, componiéndola los señores siguientes: D. Augusto Vives, Presidente.—D. José Picó, Vicepresidente.—Don Tomás Palá, Secretario.—D. Vicente Domenech, Vicesecretario.—Don- Armengol Farràs, Tesorero.—D. Antonio Palá, Bibliotecario.—D. Pedro Munsech, Vocal. Felicitamos á los recién elegidos y les deseamos mucho acierto en su cometido. CAJA DE PROPAGANDA—SUSCRIPCIÓN PERMANENTE Suma anterior. 304'80 pesetas Francisco Sabé Bosch, de Plá del Panadés. 1'60 » Francisco Tixell, de Barcelona. . . . . 2 Antonio Sal-lari, de id 0'50 » Total 308'80 " pesetas (Continúa abierta la suscripción). Cristo dijo: No os acongojéis por la comida, ni por el vestido, ni por el día de mañana; basta al día su afán. Procurad el reino de Dios y su justicia y todo lo demás os será dado por añadidura. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 39 El Espiritismo, ante las teorías Dualista y Monista VI Como el Transformismo monista tiene algunos detractores, tócanos ahora allanar su camino especialmente por lo que se refiere al Cristianismo y en general por la alarma que produce al arbitrismo que es naturalmente dualista; opinión que en- cuentra muchos partícipes, aun dentro del mismo Espiritismo. Hay un fenómeno de orden universal que consiste en la vía de relaciones entre el sujeto ,y el objeto que aquel examina. Así, cada sujeto es un punto convergente de sensaciones reía- tivas al modo de percibir la intensidad de la vibración de la materia. Por eso, el oído, nos convierte la vibración en sensación particular, poniéndonos en presencia del sonido, y la vista por otro modo de percepción, nos lleva al fenómeno de la luz y de las formas que ésta revela según el grado de capacidad percep- tiva del órgano sensual. Si ampliáramos el poder intensivo del órgano la imagen de los objetos se transformaría para nosotros; ya no observaría- mos su plástica general, sino su extructura íntima; ya no ve- riamos su fenómeno, sino su antefenómeno, su espectro. El mundo de cada sujeto está formado por una serie de sen- saciones particularmente conocidas. No hace muchos días que nuestro íntimo y joven amigo el Doctor Martín Alguacil, de justo renombre, que tiene estable- cida en esta población una Clínica oftalmológica gratuita, dió vista á un ciego de nacimiento. Cuando para el paciente se hizo la luz, parecía receloso del mundo en que entraba. Le presentamos una copa de vidrio preguntándole qué era aquello, y movió negativamente la cabeza; cuando, la tocó, la reconoció enseguida; no conocía el mundo de las imágenes sino por la sensación táctil. El mundo de la luz era completamente negativo para él; lo hubiera negado siempre, sin el milagro realizado por la ciencia. Besó las manos de nuestro amigo. 40 LUZ Y UNION ¡Así sucede siempre al progreso de la humanidad, que está decretado por el Destino, cuando llama á las puertas del recinto donde dormitan los seres en brazos de una concepción formada á priori! Al despertar, recelan del mundo nuevo á que se les invita y luego besan las manos del Progreso, que es la personificación, el enviado de Dios. No nos extrañaría, pues, que la tesis que exponemos pro- dujera un movimiento instintivo de desconfianza, ni nos mo- testaría ver en algunos labios una sonrisa equívoca; lo esencial, lo importante es que busquemos la verdad. Y como es el transformismo el que nos conduce á las ideas espiritualistas que, en esta serie de artículos, bosquejamos, es de nuestro deber colocarnos de su parte y facilitar su acceso con nuestro débil esfuerzo hasta naturalizarlo en nuestras pla- yas filosóficas donde lo han depositado, en España, la escuela de Sanz del Río y de Azcárate y Salmerón q'ue lo importaron de la patria de Hegel y de Krause, la de Ahrens, la de Spencer y la de Carlos Marx. Porque lo creemos de excelencia, no desconfiamos de verlo pronto aceptado por esta escuela naciente, para nosotros tan amada, que se llama Espiritista y qué no cuenta con otros de- tractores que sus profanos. Hace algunos años, que mientras ciertas nulidades episco- pales españolas quisieron combatirlo, por esa especie de repug- nancia á la cual aludimos antes, el más eminente Primado que ha tenido el Catolicismo español en la época contemporánea, el Padre Ceferino González, poderoso cerebro de la Iglesia en el siglo XIX, juzgando el Transformismo con sin igual competen- cia, en su obra «La Biblia y la Ciencia», dice que, «ora se trate del origen y naturaleza de la vida, ora de las manifestaciones de ésta y del proceso que la determina; ya que la discusión re- caiga sobre el problema antropológico, ya sea que se refiera al problema etnográfico y al problema filológico; lo mismo cuando la investigación tiene por objeto la moral, que cuando tiene por objeto la religión, la sociedad, la familia, y hasta cuando se agita el problema general cósmico, siempre y por todas partes asoma el darvinismo como factor esencial é indispensable para la solución del problema». Ya, también, San Agustín y Santo Tomás mirando á Aris- tételes, habían presentido el Transformismo, abriendo anchos cauces por donde pudiera admitirlo su iglesia, estableciendo el ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑ'OLA 41 primero, que no sería imposible ni contrario á la religión, acep- tar la producción de las plantas y animales por el procedimien- to llamado in semina ó secumdum rationis seminales, como decía Santo Tomás. Así no habría heregía en admitir, que los vegetales hayan sido producidos por la tierra, mediante la mHud y leyes conce- didas por Dios, según San Agustín, frases que santifican la teo- ~ ría germinalistá espontánea. A poco esíuerzo, vemos, aquí aceptado y aun proclamado en su totalidad el sistema expuesto por nosotros; la Esencia-in- telectual divina ordenando por actos de su voluntad la genera- ción y distribución de las unidades de la fuerza ó facultad de obrar del Todo que así queda constituido en potencias indivi-, duales (secundum rationis) y estas unidades potenciales ó ele- mentales vitales (semillas) formando asociaciones de coopera- ción recíproca y progresando en cada organismo, (móneras, células, C." de Hseckel) estableciendo organismos superiores según su virtud (fuerza) con arreglo á una ley concebida y lie- vada á efecto por la primera causa, por Dios. ¿Se dolerá el Dualismo ya que no lo hace el Cristianismo, de" esta teoría? Sería sistemático no reconocer que la dualidad de prirjcipios, como aquellos cuatro que reconocían los antiguos, es debida á un imperfecto reconocimiento de la naturaleza íntima de la materia elemental. No es posible negar ya, que la materia es simple en subs- tanda; más aun, no es substancia inerte, es activa en sí, es decir, hay que cambiar la palabra substancia por la de potencia; pero es una potencia ciega; en sí no lleva sino el germen de su actividad funcional, no cuenta con ninguna esencia intelectual; este principio no está en ella, es ella la que está fundada y re- gida por este Principio, que á la vez.que la genera y sabe man- "tenerla, la pone en funciones de entender, dotándola leUta y evolutivamente de cualidades para ello; esto es, capacitándola para percibir y discernir las impresiones del Intelecto universal y para la interpretación y apropiación de las ideas, ya formula- das por la sensación que produce el mundo subjetivo, como las que sugiere el mundo suprasensible, que hoy es llamado ya mundo trascendental, aun siendo también puramente físico, trasciende fuera de la apreciación de los sentidos. El mundo de lo abstracto ha muerto á manos del mundo de lo concreto; el mundo moral trasciende del mundo físico. 42 luz y unión del mundo real; las cualidades específicas y originarias que íor- jaron la falsa noción de los diversos elementos, han quedado reducidas á simples manifestaciones de los diversos estados de una sola materia elemental; materia que no constituye por sí la esencia de las cosas porque no tiene en sí el principio inteli- gente, sino que sigue una ley dictada por la Inteligencia, ley que la rige fatalmente en presencia, pero no en acto. El acto está regido por un determinismo, primero incons- ciente, luego semi-inconsciente y luego liberal con la plena ca- pacidad racional, es decir, cuando el espíritu completamente libertado de las sugestiones de la materia de estado primitivo, atiende sólo á las inspiraciones de la verdad racional por haber elevado sus funciones al grado necesario, para recibir las sen- saciones directas del Principio intelectual del Universo que es el mismo Dios. Los que se quejan de las consecuencias morales y sociales de este determinisme, se parecen mucho á los que temen á los ' viajes por los accidentes. No tienen en cuenta que todo lo que es fatal en la naturale- za, se modifica en la sociedad al esfuerzo de la razón humana, que es la normal que constituye el derecho. La iey humana modela al hombre según las necesidades del orden social y Dios educa y desenvuelve el espíritu según las necesidades del orden genera^ de la vida. Ambas leyes, caen de plano sobre él, cuando delinque, hasta hacerle entrar en la normal de la vida social ó moral que lo conduce á un fin óptimo. -jí- ^ Lector, quienquiera que fueres, perdona mi insuficiencia. Si al levantar la cabeza de estas sencillas páginas,dé la Revista, brilla en tu mente una idea débil de lo que eres en el Universo y por lo tanto de lo que debes á tí mismo, á los demás seres y á tu Dios, yo estaré satisfecho. •íf vf ^ A tí, Gimeno Eito, que has sabido tejer coronas de brillan- tes y zafiros para colocarlas sobre las sienes inmarcesibles del Espiritismo, te dedico estos párrafos. Acéptalos como pobre ofrenda de un apacible y puro amor de hermano, nacido al calor de la cooperación de las ideas. Manuel Pareja Medina. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 43 Algo de lo que se debe entender por Esencia, Substancia, Fuerza y Materia Eq la vida espiritual debemos suponer que los espíritus, partiendo de sí mismos, se reconocen como seres animados por un principio esencial, eterno é inmutable, bien comprobado en cada una de las etapas de sus existencias orgánicas y sucesivamente en todas las en que les es posible relacionar sus actos. Nosotros, los encarnados, también nos reconocemos siempre idénticos á nosotros mismos sabiendo con toda evidencia, que somos individual y colectivamente los mismos, desde la infancia á la decrepitud. Ellos, como organismos ñuídicos actuando en nuestra atmós- fera vital, son prolongaciones temporales de la existencia carnal y pueden relacionar nuestras ideas con etapas anteriores de existencias y siguen reconociéndonos idénticos á ellos mismos. Espiritüs superiores que sienten más y conocen mejor la vida en esferas más amplias que nuestro sistema solar, reconocen- y afirman, que el principio animador, la esencia des- arrollable al infinito, es simple, inmutable y eterna; por consiguiente, siendo virtualmente activa, tiene que ser necesariamente perceptible indefinidamente., porque proviene y tiende al infinito. Esto para todos debe ser lógico y asequible á la razón, porque corresponde á la natura- leza esencial como seres conscientes que participan parcialmente de la esencia infinita, como partfes integrantes del infinito universal totalizán- dose. No sucede así en cuanto á seres escientes con facultades de querer, de sentir y de pensar, en cada instante de la existencia, porque falta lo infinito que recorrer y no podemos reconocer más que alguna parte de la totalización realizada, ni podemos sentir más que la limitada esfera en que nuestra inteligencia puede penetrar. Podemos, sin embargo, en nues- tro anhelo de perfeccionarnos y progresar, querer y desear ejercitarnos en más amplios horizontes de la vida, ese estimulo emanado de nuestro principio de actividad esencial, le reconocemos como atributo y facultad volitiva, pero el deseo de amplificarse, desarrollarse, conocerse y sentirse, lo realizamos en cumplimiento de la ley suprema, única que corresponde á la esencia divina, ley que subordina á todas las formas de solidaridad, de asociación y de identificación que aceptamos como leyes particulares, la ley de amor, como voluntad absoluta manifestándose en el universo infinito con todos los atributos y caracteres de sublimidad infinita que le queramos asignar, y si el Sér absoluto es' la suprema inteligencia en acción, nosotros somos también conscientes y por serlo podemos objetivar 44 LUZ Y UNIÓN nuestra conciencia y hacerla appreciable con la luz inextinguible de nuestro sentir en acción. Si el Sér absoluto es omnisciente, nosotros somos escientes y participa- mos parcialmente de la inteligencia infinita y como elementos alícuotas, contribuimos á la vida intelectual y activa del universo y no debemos atribuirnos los atributos ni las facultades que no podemos reconocer á la esencia absoluta. Las diferenciaciones cuantitativas de estados y de formas, nos darán resultados variables, siempre y cuando corresponda á la naturaleza esencial y á la substancia animadora de que debemos ocuparnos para desvanecer muchas dudas y evitar el dualismo que resulta al considerar la esencia absoluta única y total, como substancia animadora de todo lo que existe y para que los espíritus superiores se presenten serionamente en el tiempo y en el espacio. Jamás llegaremos á sentir ni á conocer la substancia primaria, causa animadora, pero por inducciones lógicas, llegaremos por la divisibilidad mental de la materia, á la infinita tenuidad, á lo incomprensible, á lo imponderable por nuestra inteligencia, pero puesto que sentimos y nos reconocemos animados por una fuerza que no es propiedad de la materia que llamamos psíquica, le reconocemos en esa fuerza animadora la evolución de la causa absoluta manifestándose en lo infinito; exactamente del mismo modo en nuestra esfera limitada, nuestra voluntad como fuerza se manifiesta y se objetiva, y de este modo, el mismo principio de unidad substancial que nosotros mismos reconocemos, encontramos la causa única, manifestándose en lo infinito. A esa substancia que llena el uni- verso, pudiéramos en nuestra ignorancia sin ofensa para nuestra descrip-- ción, considerarla como el alma, ó sea espiritualización del sér único espiritualizándose y animando todos los elementos animados del universo. Por conveniencia quizá ó para poderse explicar mejor y hacerse comprender, ha llamado la Ciencia Eter á la substancia animadora de lo infinito y lo eterno, es decir: algo substancial, fuera del límite de lo exercible y ponderable que se denomina materia, para no caer en dua- lismos; pero la Filosofía espiritista debe afirmarse en la fuerza, manifes- tación'de la voluntad infinita del infinito universo, por la sencilla razón de que nuestra voluntad, infinitamente limitada manifestándose, pro- mueve en nuestra substancia, nuestra esencia animadora y se oponen y subordinan las fuerzas de la materia, reforzándose esta afirmación con los resultados que se obtienen con las fuerzas colectivas de lás asociacio- nes inteligentes y afinidades naturales que producen el progreso y el desarrollo de los individuos y colectividades en el mundo aún tan imper- ■fectas en la tierra poblada de seres racionales materializados pero en vias de pruebas y de expiaciones. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 45 Afortunadamente ha llegado ya el tiempo de la emancipación de las conciencias y la Ciencia iluminará pronto las tinieblas mantenidas por la ignorancia de unos y la mala fe de otros, y los sentidos corporales con mayor potencialidad, debida á los perfeccionamientos individuales y colectivos, podrá ponernos en contacto directo y tangible con los espi- ritus desencarnados, seres orgánicos también, aunque de mayor tenuidad que los gases y fuerzas de la materia terrena, puesto que sus irradiació- nes no encuentran obstáculos, desenvolviéndose esféricamente, ilumi- nando su sér con sus propios fulgores que solamente se obscurecen para ellos mismos, en presencia de fulguraciones superiores para ellos impe- netrables, lo contrario de lo que sucede con la luz como fuerza producida por el movimiento molecular de la materia. Bien comprendo que lo dicho no es todo lo aclaratorio ni satisfará el deseo de los que hayan leído el título que encabeza estas lineas queriendo ó pensando encontrar una solución concreta y categórica, pero tengan paciencia y esperen, que poco á poco, si se me permite un lugar en esta Revista, iré desarrollando éste y-otros varios puntos importantes para la causa del Espiritismo racional y científico, tan necesitado hoy de la de- mostración de fenómenos psíquicos, entré ellos el de la comunicación de los espíritus desencarnados, á pesar de la tendencia de ciertas entidades en querer demostrar que la cornunicación debe relegarse al último orden de las pruebas espiritistas, que es tanto como relegar al Espiritismo en sí, puesto que éste debe su principio y su existencia á la comunicación de los espíritus. En artículos sucesivos pienso demostrar los beneficios que las comunicaciones ó" inter-comunicaciones de los espíritus producen el doble resultado de facilitar la transmisión del pensamiento en su me- canismo orgánico y la interpretación de las ideas por su transmisión instintiva por acción reciproca de las mentalidades, polarizándose entre si y las fuerzas emitidas por las voluntades respectivas de los asociados y unidos para un fin determinado, fin que llegaremos para encontrar las difíciles aclaraciones que son motivo de controversias sobre el mecanis- mo de la comunicación como fenómeno espiritista que la Ciencia debe resolver. B. Eodríguee. Madrid, 1907. —La tierra es morada de espíritus atrasados. Gran fortuna será para tí si encuentras en ella un solo hombre bueno. —No exijas de los demás virtudes que tal vez tú no tienes; recuerda que el amor propio es nuestro mayor enemigo. 46 luz y unión Odios de ayer I . Hace pocos días recibí una carta de la cual copio á continua- ción los párrafos más interesantes: Sra. D.® Amalia Domingo. Barcelona. Muj'^ Sra. mía y de mi más distinguida consideración: Lector asiduo del periódico Los Albores de la Verdad, me tomo la libertad de rogarle pregunte al guía de sus trabajos espiritistas algo de un suceso extraño acaecido en casa de unos amigos todos de las ideas que V. sustenta y que aunque no serviría la contestación para fortalecerles en las creen- cías espiritas, por tenerlas muy arraigadas, en cambio podrían darles una buena lección de moral y de estudio. Dicho lo anterior entremos en el asunto. Los protagonistas del suceso, son un matrimonio que tiene una hija de 12 años de edad, la cual desde que tiene uso de razón ha tenido y tie- ne una animadversión muy grande hacia su madre sin saber el por qué, dándose el caso de desaparecer de su casa días enteros hasta que se la encuentra, bien en casa de unos parientes, bien en la de algún amigo y al preguntarle el por qué de no querer estar en su casa contesta muy tranquila que porque no quiere á su madre. El caso principal es que un día de esta semana pasada se le encontró debajo de su almohada de la cama el cuchillo de la cocina que había guardado, y al preguntarle por qué lo había hecho, contestó que para pegar á Rosa (esta Rosa es su madre); de manera que calcule la pesadumbre que habrá en esta familia que ocupa una posición bastante desahogada y no tiene más familia que esta hija, á lo que no saben ni cómo tratar, ni qué camino tomar con ella. Asi, le repito mi ruego de que si tiene V. á bien el consultar, y al mis- mo tiempo veríamos si el guia de sus trabajos indicaba el mejor camino para atraer á este espíritu que debe tener seguramente malos recuerdos de otras vidas relacionadas con la que hoy es su madre. Caso de preguntar esperamos lo publique en la Revista Luz y Unión, para que sirva de lección á los lectores. Dándole anticipadas gracias, se repite de V. áfmo. s. s. q. s, m. b., Rafael Pardo. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 47 II Es indudable que el contenido de la carta anterior merece ser atendido, por lo cual he preguntado al guía de mis trabajos y éste me ha contestado lo siguiente: III «Haces bien en complacer á los que te piden luz y consuelo; el tiempo que te resta de estar por ahora en la tierra, no esotra tu misión que aprender y enseñar, no aprender en las acade- mias científicas, que por esta yez han estado cerradas para tí, ni enseñar á los sabios: tú estudias en ese gran libro de la hu- manidad, en la historia íntima de los penados de ese mundo y enseñas á los desheredados, á los desvalidos, á los que sacian su sed con sus lágrimas y viven muriendo, porque viven du- dando. uEsos desgraciados que tienen por hija un enemigo terrible de su madre, deben procurar tener para esa niña una toleran- cia sin límites, una paciencia á toda prueba, y durante la noche, cuando la niña duerma, si pueden disponer de ün buen medium, que emplee su voluntad en atraer al buen camino á ese espíritu vengativo que se oculta en la envoltura de una niña, y hacerle comprender que odiando se estaciona el espíritu y aumenta los años de su condena; si después de varias sesiones ven que la niña no cambia de conducta, entonces será prudente alejarla de su madre, poniéndola á toda pensión en un colegio que no sea religioso, ó en casa de algunos parientes que la consideren y la prodiguen las más tiernas atenciones, porque esa pobre niña no es de mala condición, es un espíritu herido y martirizado en otra época que aun no ha podido desprenderse de su odio (en cierto sentido justificado). Con la violencia no conseguirán nin- gún buen resultado, y hay que evitar á todo trance que esa niña se encolerice, y al mismo tiernpo tomar toda clase de precaució- nes para que no realice sus inicuos planes. ))En una de sus existencias anteriores, esa niña era una 48 LUZ Y UNIÓN hermosa joven, que vivía feliz porque amaba y era tiernamente correspondida por el hombre que le iba á dar su nombre des- pués de haberle dado por completo su corazón. Elisa era com- pletamente dichosa, preparó sus galas de desposada y la víspera de su enlace se fué á confesar con el padre Froilán, alta digni- dad eclesiástica que abría y cerraba las puertas del' cielo según su capricho y su deseo. Ver á Elisa y enloquecer por ella todo fué uno; sintiendo horribles celos cuando ella le confesó sus sueños de amor y que sólo esperaba la bendición nupcial para ser la más feliz de las mujeres. El entonces le pidió las primi- cias de su belleza, asegurándole que si no accedía á sus deseos no vería más la luz del día. Ella le apostrofó duramente negán- dose en absoluto á su miserable pretensión, y el padre Froilán le dijo: serás mía ó de nadie; y aquella misma noche los fami- liares del Santo Oficio se apoderaron de Elisa acusándola de hereje. Elisa era huérfana y estaba en casa de su tutor, que enmudeció de espanto ante la horrible acusación del Santo tri- bunal. Elisa desapareció y su prometido hizo cuanto puede ha- cer un hombre enamorado para probar la inocencia de su ama- da; pero todo fué en vano. Elisa murió en su calabozo después de haber sufrido los más horribles tormentos, y murió maldi- ciendo al padre Froilán que tanto la había martirizado y que había satisfecho sus impuros deseos, cuando la infeliz moribun- da no tuvo fuerzas para resistir, cuando ya su cuerpo era una masa inerte. ))Ya en el espacio, le hicieron comprender que se vivía siempre, y ella (fijo: mejor, así tendré más tiempo para odiar á ese miserable, y. dominada por el vértigo de-la venganza ha encarnado varias veces, deseosa de vengarse de su verdugo. Aparte de ese odio implacable, es un espíritu bueno, y deján- dose convencer por los consejos de su. guía, ha querido ver si teniendo por madre á su verdugo de ayer, se apagaba la llama de su odio; ha hecho la prueba y; no ha salido victoriosa, su odio no se ha entibiado, por eso es necesario no avivarlo con recriminaciones ni castigos. Compadeced á esa pobre niña, es un loco incurable, es un enfermo de riiucha gravedad y hay / órgano oficial de la liga e. española 49 que tratar de curarle con amor, con paciencia, con una inmen- sa compasión. ))Ella era buena; amaba y era amada, soñaba con todos los placeres de la vida y cayó en los abismos de la desesperación; su tálamo nupcial se convirtió en el potro del tormento, sus galas de desposada en la hopa del condenado. Compadecadla porque ha llorado mucho, su dolor ha sido más fuerte que su deseo de reconciliación; ya volverá otra vez más fortalecido ese espíritu para perdonar y amar á su verdugo de ayer.—Adiós». IV Verdaderamente merece estudiarse la comunicación que he obtenido: el árbol del odio da frutos de muerte. ¡Ay de los ver- dugos y de sus víctimas! ¡cuántos siglos pasan en la sombra los unos y los otros! El estudio del Espiritismo es muy provechoso para evitar violencias y atropellos que traen consecuencias tan horribles. ¿Hay nada más triste que ver á un hijo odiando á su madre? Cuando la familia es el oasis de este mundo, cuando una madre es el puerto de salvación de los seres que ha llevado en su seno; en la tierra una madre es la imagen de Dios, y cuando el odio de ayer rompe los lazos más fuertes de la naturaleza, no hay desgracia más horrible que ese rompimiento violentísimo. Nunca me cansaré de repetir que el estudio razonado del Espiritismo es el que nos llevará á ser buenos, á ser tolerantes, á no condenar las debilidades de muchos seres, que si pecan, merecen compasión: porque son almas enfermas que han lio- rado mucho. Amalia Domingo Soler. —Si'el hombre fuese perfecto, no estaría en la tierra, que es ■sun mundo de reparación. —¿Por qué juzgas á tú hermano? La justicia sólo pertenece á Dios. —No trates con aspereza al que tiene la necesidad de servirte; mira que tu servidor es tu hermano, es tu igual ante Dios. 50 LUZ Y UNIÓN La voz de ultratumba ¿Qué pretendes, voz sonora? que no atesore caudales, que al sentir tu vibración que los bienes terrenales agita mi corazón son un engañoso faro; una sed devoradora. que forme un juicio más claro ¿Tu influencia bienhechora y atienda á la multitud; me despierta el sentimiento, que marche con rectitud, por si puedo comprender que eso es lo que allá se aprecia: que á mí te pueda traer allá el oro se desprecia, algo ignoto que yo siento? sólo vale.la virtud. Me despiertas un deseo Vengo á decir á los sabios que se asemeja al delirio; que moderen su criterio; sufro un horrible martirio; que estudien c\ gran misterio te presiento y no te veo. y no provoquen agravios; Por más medios que yo empleo, que, de los humanos labios yo no te puedo entender; no brota toda la ciencia; sólo consigo encender que saben por expejiencia el fuego de mi pasión que es su saber perfectible; por saber qué es la misión que hay sólo un Sabio infalible: que á mí te pudo traer. ¡la suprema inteligencia! -^Pues sólo vengo á decir Yo vengo á decir al Rey que vais los hombres inciertos; ■que hay un solo Soberano; vengo á decir-que no hay muertos, que penetre el hondo arcano y á enseñaros á vivir. y no vulnere la ley; Vengo á decir que el sufrir y que esta pequeña grey se impone á todo viviente; con sus augustas personas que el martirio del presente abandonen sus poltronas es el goce del pasado;- y vanidoso esplendor, que el sér ha recolectado y no den tanto valor según tiró la simiente. á sus doradas coronas. Vengo á decir al que llora Que procedan con más tino víctima del sufrimiento, en su muy corto reinado, que sin ropa ni alimento que les -está reservado sólo miseria atesora: en cada vida un destino. que si su suerte deplora Que no hay derecho divino y maldice su indigencia ni los empleos son constantes, 'lleve su Cruz con paciencia, que es cuestión de unos instantes que él mismo se la labró, por probar su proceder; cuyo madero sacó y otro día podrán ser del árbol de su conciencia. andrajosos mendigantes. Vengo á decir al avaro ¡Ah, ignorante humanidad! ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 51 careces de fundamento, ya tiene luz mi razón, ignoras el salvamento tú me das explicación - que guarda la eternidad; de cuánto mi anhelo ignora. tu loca perversidad Ya que ha llegado la hora te priva de ver la luz; de salirme de este abismo, te envuelve un denso capuz hazme el bien por el bien mismo, que perturba tu progreso; date por Dios á entender; no recuerdas el proceso tu nombre quiero saber. de AQUEL que murió en la Cruz. —Pues soy... ¡ El Espiritismo! •—Basta, voz consoladora, Francisco Ríos. Velez-Málaga. A todos... Sobre la doctrina expiatoria La sublimidad de nuestra filosofía nos hace conocer reve- lándonos un Dios todo bondad y amor, empero nosotros, los formados entre las teorías deístas del Dios del castigo, no nos podemos substraer aun de la idea expiatoria y opinamos que las víctimas de hoy son los verdugos de ayer, lo cual si obede- ciera á una ley inevitable y por lo mismo justa, no dejaría de revelarnos un Dios castigador aunque sólo lo fuera temporal- mente... y Dios no premia ni castiga, para ello tendría que ser dictador y por lo tanto individual. Necesario es que al despertarnos abramos los ojos á la reali- dad y que sea ésta la que impulse nuestros actos todos reem- plazando con ella las fantasías que reales habíamos supuesto mientras soñábamos dobmidos. Meditemos, tomando por base que nos impulse á las deduc- clones, á la lògica y veamos si ésta abona la doctrina expiatoria temporal. Indudablemente no soy el primero ni seré el último que llame la atención de los espiritistas todos sobre este, punto, empero siempre la realidad y el progreso nos han deshecho nuestras más apreciadas ilusiones ináponiéndonos verdades mu- ©ho más bellas, lo cual no debe hacernos rebelar. Yo, cual todos los espiritistas, he oído más de dos veces á- espíritus que valiéndose de un medium nOs han relatado su 52 luz y unión existencia demostrándonos que aquélla fué el derivante de otra y... lo confieso: nunca he creído lo que otros se empeñaban en creer por el mero hecho de decirlo un espíritu. No ignoro que necesariamente debe el espíritu desarrollar el sentimiento y la intelectualidad para llegar á poseer la Con- ciencia Sabia, y que para ello se ve precisado á pasar por dis- tintos y opuestos círculos, pudiendo ser el de una existencia la antítesis del ocupado en otra, empero esto no me demuestra— ni es lo suficiente que me lo diga un medium—la ley expiató- ria, sólo me enseña la necesidad de buscar la sabiduría donde se halle. Aquí no se cieñe á pagar, aquí se cieñe á aprender'. Decimos nosotros que lo innecesario ó lo inútil no existe y que todo es provechoso y en su consecuencia bueno por condu- cir á un fin bueno; todo lo existente por el mero hecho de exis- tir está abonado por una ley, y ésta no puede ser anti-natural de ninguna manera, y siendo así, si imprescindiblemente teñe- mos que ser los llamados malos á fin de que se despierten en nosotros deseos que sólo con lo malo (yo no conceptúo nada malo) pueden despertarse, si ello es inevitable, obedece á una ley de Dios. Dios, por lo tanto, nos mandaría ser malos para llegar á bue- nos y si por haberle obedecido siéndolo nos impusiera un casti- go temporal por limitado que fuera. Dios sería injusto. Opino que el espíritu en la tierra siendo hombre no hace nunca el mal por el mal mismo, siempre lo comete obedeciendo cuando menos á un bien considerado para él, al desencarnar el espíritu saca deducciones de su pasado y se halla satisfecho de la lección, viene de nuevo á aprender otra en otro círculo sien- do opuesto.al anterior, empero cieñe á aprender, lo cual está en consonancia con el Dios del Espiritismo, y lo estaría con el Dios de la teología si persistiéramos en ser sostenedores de la doctrina expiatoria. Así opino y así desearía—á falta de algo que me enseñara más claramente la justicia y el amor de Dios en la ley de las expiaciones—que opinaran mis correligionarios. Debemos despertar alejando de nosotros todo aquello conce- bido y reconocido ahora solamente producto del sueño. ¿Lo haremos? Jacinto Fornagüera. Cuando juzgas á tu hermano, ¿nada acusa tu conciencia? ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 53 Dos senectudes En una hermosa mañana de primavera, hallábase á bordo de su bar- quichuelo un joven marinero, abrumado por tétricos pensamientos que al porvenir afectaban, aleccionado por el turbulento presente; y se decia: La juventud es.fugaz y hay que aprovecharla en beneficio de la vejez. La vida entera dura lo que el fulgor de un relámpago cuando se desliza entre satisfacciones y holguras; mas entrando en funciones las estreche- ees, enfermedades ó inutilidad del cuerpo, es asaz dilatada y triste. Contando con robustez física y energía de espíritu, pueden evitarse cier- tas funestas contingencias. Ni el abatimiento puede llevarme á feliz término. Ni la holganza proyeerá á mis necesidades. Ni la irregular y delectible conducta me traerá la paz. Asi, pues, ¿qué quiero, qué necesi- to, qué busco? Es verdad que Dios me ha dotado de inteligencia y ésta me guia por los senderos de la Razón y del Bien que tanto anhelo. ¿Me amo yo? Es cierto. ¿Qué debo hacer para que mi vida sea digna de loa por mí mismo; que me satisfaga plenamente; que demuestre al mundo el cariño que siento por mi humanidad?—Es seguro que al querer mi bien, me siento feliz con los goces phros de los demás. Irguióse pronto y su resolución heroica despejó sus abatimientos, se- mejando sombras que huyen al contacto de la luz. Abrió los brazos- á la esperanza y concluyó: Lucharé con denuedo antes que el invierno de la vida entumezca mis miembros. El trabajo honrado y asiduo me privará de muchas penalidades; recogeré, si la suerte me es propicia, un pequeño capital que me ponga al abrigo de la dura necesidad cuando las fuerzas corporales-me abandonen; entonces será hora de retirarme á descansar viviendo cristianamente hastá el dia de mi desaparición de la tierra. El espiritista á bordo de su cuerpo material y navegando entre los escollos de una sociedad pusilámine, con peligro constante de ser arras- trado por las olas, aunque recibiendo infinidad de salpicaduras, tiene sus momentos de atención, formulando en sus interioridades aspiraciones, hermanas á las del marino, pero más extensas, que traspasan la frontera de esta vida y se sumergen en las profundidades de lo inconmensurable. Trabaja para otra vejez, siempre joven, siempre bella, llena de luz y alegria: la eternidad. Ei tesoro que vislumbra en lontananza es la paz en su perfección, resultado del cumplido deber, repleta de amores é iluminada por los es- plendentes soles Ciencia y Moral. Se mecerá entre efluvios de purísimo 54 LUZ Y UNIÓN consuelo en el paraíso de la felicidad inmortal, siempre en progreso, donde seguirá trabajando sin reposo ni cansancio. Para conseguir ese estado, se emancipa de ciertas ideas, pensamien- tos, pasiones y sentimientos; y se amamanta de otras más pulcras, veri- dicas y perfectas, en progresión también, acercándose á la Verdad Ab- soluta, cada vez más. Huye del bullicio mundano que trastorna. Elude conversaciones y evita actos impropios. Respeta lo ajeno. Y no odia .ni menosprecia; pero perdona y compadece al que .yerra. Ama siempre, desterrando de su corazón el odio, celos, envidia, etc., que son enfermedades que lastiman primeramente al que las sustenta. Amémonos, pues, orando, trabajando, instruyéndonos, moralizándo- nos, dignificándonos; para que la fortuna perdurable hallemos y podamos disfrutarla en el Espacio el día que la senectud del cuerpo nos deje en completa libertad. Aguilae. Dos almas Dos almas elevadas que en.uno de los mundos superiores vivían desde tiempo inmemorial unidas con el más dulce de los lazos, sintieron un día turbada su dicha por una tristeza pro- funda que no recordaban haber experimentado jamás. La causa.de aquella anormalidad era' que, por conducto de un mensajero del Eterno que acababa de pasar por la tierra, se habían enterado del estado de atraso en que se halla nuestra pobre humanidad. Aquellos seres, adornados de tantas virtudes, no podían concebir la vida en un lugar en donde se les había dicho impe- raban las más bajas pasiones y que el amor verdadero, sin el cual ellos no comprendían la felicidad, era completamente des- conocido, puesto que se consentía el sacrilegio de llamar amor á la sensualidad por no conocer los terrenales goce superior al que les produce la grosera ley de la reproducción de los cuerpos. En tal estado de ánimo las dos almas concibieron una idea generosa que, .como por encanto, devolvióles la tranquilidad que por algunos momentos habían visto interrumpida; ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 55 La tal idea consistía en emprender el vuelo hacia el mundo desdichado y enseñar con el ejemplo á sus habitantes á amar para que amando pudieran ser dichosos. Pero, para lograr, ó mejor dicho, para intentar tan santo objeto, era preciso tomar un cuerpo terrestre, y como tal, más ó menos sujeto á las pasiones, que sin ellos había sentido en Los comienzos de su vida sensciente, no lo recordaban ya, aunque debían guardar de ellas alguna vaga reminiscencia en lo más íntimo de su sér, por cuanto al hablar de las"mismas se extremecían dolorosamente. Mas, ¿qué importaba todo esto si con su sacrificio lograban llevar la luz, aunque fuera sólo á una de las muchas almas hermanas que permanecían prisioneras en las sombras de una naturaleza inferior? Desde aquel instante el tema de todas sus conversaciones era el mismo: ir á la tierra á cumplir una misión regeneradora. Y tantó les entusiasmaba aquella hermosa obra en perspec- tiva, que de no poderla llevar á cabo,' es probable que su vida tranquila y feliz hubiera llegado á causarles hastío. La única dificultad con que tropezaron fué el no acertar de momento en ponerse de acuerdo sobre el modo en que debía efectuarse la partida; pues, si bien en un principio las dos almas, siguiendo sus espontáneas inclinaciones, .habían pensado marchar juntas hacia la Tierra, luego reconocieron que para realizar lo que había llegado á ser el objeto de sus mayores anhelos, era más conveniente partir la una antes que la otra, y mientras el alma femenina quería ser la primera en sacrifi- carse en aras del amor universal, el alma masculina se sentía invadida por igual deseo. Por fin, el alma femenina pudo- lograr que la que había sido hasta entonces su inseparable compañera consintiera en dejarla partir sola, haciendo ésta á aquélla formal promesa de ir en su busca al cabo de algunos años,' y encontrarle aunque escondiera su ideal belleza en la níás humilde de las formas. El lenguaje humano carece de vocablos para expresar lo que se dijeron al partir, con objeto d'e comunicarse mutuamen- 56 LUZ Y UNIÓN te las fuerzas indispensables para soportar la dura prueba que voluntariamente se habían impuesto. ¡Jamás se vió despedida más tierna, y jamás la ausencia causó tan vivo pesar como el que experimentó cada uno de aquellos dos seres al verse separado de] que era su dulce com- plemento! Desde tan solemne momento la constante aspiración, de cada uno de ellos fué volver á encontrarse para cumplir su santa misión y gozar otra vez de la vida dichosa de otro tiempo. vi- vf Un día en uno de los hospitales de la populosa ciudad de T., circuló con pasmosa rapidez una noticia que por lo inverosímil puso en conmoción á todas las personas albergadas en el be- néfico establecimiento que se hallaban en condiciones de ocu- parse de asuntos agénos. Y en verdad que la cosa no era para menos, pues, persona que afirmaba estar bien enterada, aseguraba que el Dr. Pablo, joven y distinguido médico que ejercía allí su profesión, tenía relaciones amorosas con Sofía, una pobre expósita enfermiza y casi ciega que hacía algunos años se había acogido á la piedad de aquellas hermanas que entonces la servían, por no tener medios de vivir por sí misma. En. un principio la cosa se tomó á broma. ¿Era, por ventura racional el creer que el señorito Pablo, tan guapo, tan elegante, tan sabio y tan rico, sobre todo tan rico, pretendiera casarse con una mujer de las condiciones de Sofía? Aquello no pasaría de ser un capricho pasajero del señor Doctor. Pero cuando se adquirió la convicción de que eran formales las relaciones del distinguido médico con la pobre enferma, la cosa cambió de aspecto. El Dr. Pablo, tenido hasta entonces por sabio, fué califica- ,d(»de loco al querer compartir su suerte con aquella criatura en quien los seres vulgares'no podían ver ningún atractivo, por órgano oficial de la liga e. española 57 no ser capaces de apreciar las bellezas del alma que en.tan alto grado poseía, y á Sofía la calumniaron despiadadamente y la hicieron víctima de todos los desprecios por consentir en unirse con un hombre que no merecía!!! Por fin, después de terribles luchas con la ignorancia, la envidia y demás bajas pasionès, se unieron en matrimonió Pablo y Solía, causando gran extrañeza que ej amor que se profesaban los dos esposos aumentara con el tiempo en vez de disminuir como en la mayoría sucede. Alguien había logrado escuchar, sin que ellos lo advirtieran, alguno de sus íntimos coloquios y se había quedado admirado al oir que él le decía á ella que su mayor felicidad consistía en haberla conocido y en poder endulzar con su apoyo las amar- guras de su vida, respondiéndole ella que durante muchos años había estado esperándole y que aquella dulce esperanza la había sostenido en medio de las grandes penas que había pasado desde que la que le había dado el sér tuvo la crueldad de abandonarla en medio del arroyo, añadiendo que al conocerle á él se sentía próxima á desfallecer á causa de los muchos desengaños sufri- dos en medio de sus grandes dolores y que él era el ángel que le habíg salvado de caer en el abismo de la desesperación ó ser presa del terrible excepticismo. En aquellos momentos Pablo y Solía eran tan fpfices como si vivieran en el mismo cielo, y aunque su felicidad llegó á ser evidente para todo el mundo, nadie acertaba á comprender la causa de aquella dulce armonía en un matrimonio que tanto había dado que hablar por considerarlo el mayor de los dispa- rates. ¡Si hubieran sabido la promesa que dos almas se habían hecho un día en otro mundo, lo hubieran comprendido todo fácilmente! María Trulls de Rubio. Corrígete de los defectos que en tí advierta tu enemigo; día vendrá en que le estés agradecido por el bien que te hizo. 58. LUZ Y UNIÓN Reflexiones Y en pos de la mariposa sin peasar que el polvillo de sus alas en vuestros dedos quedará y hollando con vuestras plantas la alfombra de cesped, sin recordaros que la echáis á perder y arrancáis de su tallo la flor y aspirando su perfume olvidando que presto, muy presto, se vería marchitar y su aroma desaparecer. ¡Qué hermosa es la delicadeza, qué pura, de cuán pocos es comprendida!—Dándoos, daréis; adquiriendo, tendréis; poseyendo, guardaréis.—-¡Saber! ¡saber! no sólo el saber hace sabio.—La sabiduría es como el manjar, se gusta, se digiere, nutre ó no, ello depende de muchas circunstancias.—Y aunque aparezca que las fuentes no manan, los ríos no corren, los arroyuelos no rielan; mas, no es asi, no, es que las córrientes han desviádose y es preciso encauzar nuevamente las aguas.—Es ímprobo el trabajo, ¿verdad? mas tras la última etapa encontraréis victoria como premio á la virtud. Guardad, guardad, mas no bajo siete llaves, donde la mirada inves- tigadora no penetre, ni tampoco exponedla al tráfico público; ambos extremos pecaminosos son.—Y abstraídos pensáis más, mas comprendéis menos, porque es un estado de otro plano que no es el vuestro y necesi- táis estar en el adecuado á vosotros para posesionaros de las ideas.— Si oís la dulce voz aun desconociendo la figura, ¿verdad que la adivináis? La belleza se rodea de tanta majestad que puede adivinarse sin ha- hería visto de antemano.—Los escollos del camino no deben saltarse, acaso en pos de vosotros otros vendrán quizás más inexpertos, procurad que no tropiecen. ¿Cuál es, pues, vuestro deber? Y porque hallaste el camino á obscuras y encendiste el faro no le apagues cuando hubieres pasado, que otros vendrán que vuestro nombre aclamarán por hallarlo iluminado. Y si nuestros pies fueren heridos por los guijarros y el de nuestro hermano no, pensad, pensad que antes de emprender la marcha es preciso tener conocimiento y diferenciar las espinas de las rosas para no dejarse herir por ellas. —La voluntad, he aquí el todo. ¡Saber! ¡saber! Y cuando sepáis, ¿sabréis lo que sabéis?—No conjuntos, una sola unidad, única y sola cual la verdad; posesionaros de ella, vivid en ella, por ella y para ella y llegaréis á satisfacer el purísimo deseo de vuestra Angeles. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 59 Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones Cerrada esta suscripción en el número anterior, hemos recibido posterior- mente del Presidente de la Sociedad espiritista de Banes (Cuba), las siguientes cantidades cuyos donantes son: José Zaldivar Hidalgo, '5 ptas.—Isabel Bejerano Batista, 1.—Juan J. Bermu- dez, 1.—María Basulto, 1.—Juan Antonio Bermúdez, 1.—Simón Almaguer Beje- rano, 5.—Flor Bera, 1.—Carmen González, 1.—Jacinta Sánchez García, 1.— Antonio Tamayo, 1.—Caridad Hernández, 1 .—Eulogia Alonso, 1.—Estela Feria, 1'25.—María Tamayo, 1.—Antonio Feria, 1.—Gabriel García, 0'50.—Jesús Do- mínguez; 1'50.—Valentina Flores, 1,—Francisco Flores, 1'75-—Diego Torno, 1. —Enedina Feria, 0'50.—Diego Feria, 0'50.—Francisco Feria, 0'50.—Gumersin- do Tamayo, 0'75.—Lugarda Tamayo, 0'25.—Juan Almaguer, 1*50.—José Suarez, rSO.—Ursula Merino, 0'50. Total, 35 ptas. Por conducto de D. David Sanguinetti, de Mérida (México), las siguientes: E. M. 58 ptas.—Genaro Vela, 14'50.—David Sanguinetti, 11'75.—Isidoro Valdés, 11'60.—José Viña, 5'85.—Un creyente, 5'85.—Á. P. M., 1'45. Total, 109 ptas. De p. Francisco Moreno, de Baños de Mayajiqua, 25 ptas. cuyo total de ptas. 169, se han distribuido en la siguiente forma: A Málaga, 50 ptas.; á Lérida, 50, y á Manresa, 69, de cuyo reparto quedan encargados los presidentes de los Centros de dichas poblaciones. ¡Alerta, espiritistas! Con este título copiamos de nuestro estimado colega Hojas Morales, de Elche, en nuestro número de Octubre, un escrito en el que se llamaba la aten- ción de los espiritistas americanos hacia ciertos individuos que primero en Ali- cante y después en Elche, bajo el nombre santo del Espiritismo, sólo perturba- clones han producido en ambas localidades. Dicho escrito, que insertamos después de haber visto en Barcelona una esposa y una hija sumidas en la desesperación por el abandono en que las dejó un esposo antes modelo, para seguir y apoyar con su fortuna ú unos falsos re- dentores, sin ni siquiera tener una frase de despedida para las desgraciadas, sin pensar que quizá con su conducta rompía el venturoso porvenir que la hija entre- veía con la unión del sér á quien adoraba, cquel escrito, que debían contestar 60 LUZ Y UNIÓN los que ocultando sus decisiones se despedían de nosotros para volver á Elche, según nos dijeron, y sin embargo al día siguiente embarcaron para Cuba, aquel escrito, repetimos, nos ha valido el que dos personas con quien nunca hemos tenido relaciones dé ninguna clase, que no conocemos y que por lo tanto no po- díamos dirigirnos ú ellas en nuestro corto comentario, publican en El Cre- púscülo, que ahora ve la luz en Santiago de Cuba, dos escritos repletos de odio y de palabras impropias de toda persona que se estima, dirigidas contra esta Revista y contra nuestro director, mientras que los individuos que señala Hojas Morales, estos individuos que tuvieron que marcharse de Alicante, anonadados por el escrito que nuestra estimada redactora-jefe, D." Amalia Domingo Soler, insertó en La Revelación, de Alicante, escrito que pueden leer en el número 2 del año 1903, aquellos,señores se callan como muertos y dejan incontestadas las formidables acusaciones que contra ellos lanza Hojas Morales. Por nuestra parte sólo diremos á estos señores que firman las cartas apare- cidas en El Crepúsculo: ¿Creeji que las acusaciones lanzadas por Hojas Mora- les no les alcanzan á ellos? Mejor; nosotros seremos los primeros en felicitarnos por ello. ¿Creen que la gratitud les obliga á defender lo indefendible? Esto es cuestión de pareceres. Por nuestra parte lo decimos sin ambajes: sería una gran satisfacción que desde hoy en adelante, echando un velo á lo pasado, sólo elo- gios nos merecerían El Crepúsculo, sus redactores y cuántos con él abandona- ron España, devolviendo á los hogares abandonados la paz y la felicidad. Réstanos decir, antes de dar por terminado este asunto, que es inútil pre- tenda El Crepúsculo y los que lo inspiran el herir nuestra susceptibilidad y la de nuestro estimado director con palabras é imputaciones de ninguna clase; la historia de todos los que en esta nuestra cara Luz v Unión redactamos, está á una altura donde no alcanzan los rencores de El Crepúsculo y su principal ins- pirador. Y basta. Movimiento espiritista Veladas en honor de Miguel Vives .—El día 26 del pasado Enero la So- ciedad espiritista «Luz del Progreso», de Tarrasa, celebró una velada literaria en honor del Apóstol del Bien. Un asunto urgente impidió á nuestro director asistir á esta fiesta, como era su deseo, correspondiendo á la atenta invitación que por parte de dicho Centro se le había dirigido. Según nos han dicho algunos hermanos de Barcelona que á él asistieron, el acto revistió gran importancia, por lo cual felicitamos al Centro organizador. También el mismo día el Grupo «Amalia Domingo», de Isla Cristina, celebró, con una velada y una comida á los pobres, el segundo aniversario de la desencar- nación de nuestro querido amigo y maestro D. Miguel Vives, de cuyo resultado nos enteró su Presidente D. Angel Qrinda, con el siguiente telegrama: BIBLIOTECA UNIVERSAL OBBA8 PrBL·lCADAS ANIMISMO Y ESPIRITISMO por ALEJAKBBO AKSAKOF LA VIDA DE ULTRATUMBA (LA SURVIE) por lime. BlIFIAA XOFGGFBATH Cada obra forma dos volEminosos tomos en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada uno 7*50 ptas.—En rústica, 6 ptas. Eli ARTE DE CQflOriETIZflR por CH. LAFONTAIKF Obra clásica de magnetismo. Un volumen de 448 págs. en 4." mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, 7*60 ptas. —En rústica, 6 ptas. KA PUBLICACION AL PAÍS DE LAS SOMBRAS por B. «'K8PÉRANCK Se publica por cuadernos semanales de á 32 páginas al precio de 20 eén« timos en España y 25 céntimos en el Extranjero.—Pago adelantado. CORRESPONDENCIA iSrc^i. ISiiscriptores qae han satisfecho la suscripción de 1907 J. M. A.—Zacatecas J. E.-Uba (Brasil)' R. M. ~ Lérida S. A.-Ponce (P. R.) A. P.—Jiguajay (Cuba) V, N.-Id. P. M.—Tremp E. T.—Tarros A. E. G.—Ponce (P. R.) J. V.-Id. Si-es. Snscriptores que han satisfecho la suscripción de 1908 A. G,—Gibraltar M. J. dos S.—Lisboa (P.) E. Y.—Habana (Cuba) D. A.—Hatillo (P. R ) A. G.-^ Tàrrega J. V.—Novarcles E. B. Orizaba (México) L. A.—Valdepeñas A. C.—Manre.sa A. del R.—Id. id. A. G.—Cerbiá (Lérida) A. M. B.—Lorca D. C.—Jijona M. M. - Bel-Abbes S. P. —San Gervasio V, M.-ld. J C —Lérida A. M.—S. Juan de las A. A. S.—Gracia V. B.—Gracia J. D.—Madrid J. M.—Alcoy J. Y.-Ceuta M. O.—Gibraltar E. A.-Id. N. F. .Cuenca B. B. Santander J D —Id. J P. Id. S. P.—Barcelona Presidente «La Paz».—Id. A.G. - Manzanillo D. S.—Mérida de Yucatán L. M.-Id. D. G. S—Habana (Cuba) A. G. - Habana R M.-Conceieao do Arroio J. C.-Id. id. A. Q.—Cuenca (Brazil) A. E.—Id. id. M. C.—id. M. R. - Andújar R. M.-ld. id. C. G".—Capdepera J. F.—S. Baudilio de Ll. (Alcanza al 8 de Enero de 1ÜÜ8) La Administración. STA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la protección de sus guías espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRIPCIÓN { España. . 7 Por nn año. A pesetas i Extranjero 12 » Número suelto 0'50 » (PAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les pue- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certiñcado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos países cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los países en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandlna, 20, principal. — Barcelona Obra de regalo para el^resente año: Elementos de Una Nueva Cienciaj por Mariano Ruth Sinué. Un tomo en 4.° de 808 páginas, es- moradamente impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118.—Barcelona DIRECTOR REDACTOR^OEF MARZO DE 1998 SUMARIO: D. Pedro Iraola.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Españo- la». —Predicando, por D. Bruno Miguel Mayol.—La sombra de ayer, es la sombra de hoy, por D." Amalia Domingo Soler.—Estudios, por D. Benito Rodríguez.—¡Los ni- ños!..., por D.® Amalia Domingo Soler.—Juicios sobre el demonio ó diablo, por don Faustino Tsona.—Al Pueblo, por Un Espíritu.—¡Amor!, por D.® Emilia de la Cueva. —¿Qué debían?, por Margarita.—La educación, por D. Emilio Botella Pérez.—Comu- nicaciones.—Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones.— Notas bibliográficas.—Movimiento espiritista. Corresponsales Administrativos Méjico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4." de Nicolás Bravo, 19, ORIZABA (Veracruz). Pnerto-Rico. —Faustino Tsona, CATEY.—F. Vázquez Colón, médico MANATI. cirujano, —Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE.—Francisca Suárez, Méndez Vigo, MAYAGÜEz'. C/iiba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO —Delfín Roig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 34, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN —Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- do J. Raggi, Apartado 17, CAIB.ARIEN —D.^ Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN.—Manuel Y. López L., Carrera 6.», n.° 248 bis, BOGOTÁ. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedelia, Dtor. de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés», PEHUAJO, —Zoilo Casas, LOBERIA —A'iiano Hervas, Tucumán, 1736, BUENOS AIRES,—Pedro Iraola, NECOCHEA.—Francisco Otero, calle 26, n.° 174, MERCEDES—Manuel To- rres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Iütla!« Filipinas.—Casimiro Peña, San Rafael, 110, (Manila), SAN MIGUEL. itranil.—Emilio Serrador, Caixa do Correo, n.° 54, SAN MANUEL DO PARAÍSO.—Agrip- pino Gómez Veado, Rua Municipal, n." 3, CIDADE DO MURIAHÉ (E.stado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Babia).—Edla de Moarés Cardoso, San Francisco Havrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Babia de Samana), SÁNCHEZ. República de Aicaragna.— Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Cenador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CARBONELL y ESTEYA--Editores--'^"'^':l^°lA^R"c7L'o^^^^ Nuestras fuerzas Mentales Modo de emplearlas con provecho en el comercio, la industria, las artes, lo.s oflcios, y en general en todos los actos y situaciones de la vida por Prentice Mulford Cuatro magníficos tomos encuadernados á la americana. . . . 40 pesetas AÑO IX MARZO DE 1908 NÚM. 3 JVuestros Corresponsales Pedro Irada Es nuestro corresponsal en Necochea, Buenos Aires, uno de estos hombres que se hacen amar y querer por la entereza de su carácter, por su caballerosidad y su amor al trabajo. Batallador incansable, emplea todas sus energías en propagar y defender to- dos los ideales que tiendan á ennoblecer á la humanidad conduciéndoia á una mayor cultura y más intensa fraternidad. Ni los reveses de fortuna ni las decepciones han podido doblegar su carácter de acero; firme en sus creencias espiritistas, no sólo las rinde culto en el altar de su corazón sino que cumpliendo como bueno, las exterioriza en todas sus relació- nes. y las vive en toda su intensidad. ' Al honrar estas páginas con su retrato cumplimos un deber gustosísimos, el deber de dar á conocer á nuestros hermanos á cuantos contribuyen con su celo y energía á la más rápida difusión del ideal espiritista. Hombres cómo Iraola honran á la idea á que pertenecen y son ejemplos vivos á quienes todos debemos imitar. Reciba nuestro querido amigo el testimonio de nuestro afecto, ai que estamos seguros se asociarán cuantos aman de verdad á los que luchan por la victoria de nuestro ideal. 66 LUZ Y UNIÓN SECCIÓN OFICIAL de la "Liga Espiritista Española" La Junta Directiva de la «Liga Espiritista Española» acordó en su última sesión enviar su adhesión al XX Congreso Nacional que ha de ce- lebrarse en Méjico. Igual acuerdo ha tomado la Directiva de esta Revista. ¡Ojalá que los organizadores de este simpático Congreso alcancen el éxito que se proponen y sean los acuerdos del Congreso base firme y sólida con la cual podamos unirnos todos! DESAiyiOLLO DE MEDIUMS Convencida la Junta de la «Liga» de la necesidad de tener á su dis- posición mediums de todas clases, ha decidido dedicar dos noches á la semana al estudio y desarrollo de los sujetos que presentando síntomas de mediumnidad sea factible el desarrollársela. Por de momento, se está procediendo al desarrollo medianimico de cuatro señoritas en cuyas casas han sucedido fenómenos que demuestran la existencia de alguna mediumnidad, esperándose fundadamente-que dentro de breve tiempo se obtendrán, por medio de ellas, algunos fenó- menos dignos de estudio. OUESOS DE ESPIRITISMO PRÁCTICO Debido á las múltiples ocupaciones que asedian á nuestro director, se ha visto precisado á suspender temporalmente las conferencias que venia dando semanalmente en el local de la «Liga», siendo casi seguro que las volverá á reanudar á últimos de Abril ó primeros de Mayo, si su salud y ocupaciones se lo permiten. FIESTA INFANTIL Importante fué la que celebró el Circulo «La Buena Nueva», en la que tomaron-parte unos treinta niños de ambos sexos, quienes recitaron herniosas poesías y discursos,'que hicieron las delicias del público. El coro infantil de la «Liga Espiritista Española», cantó con mucha afinación los himnos Gloria al Espiritismo, Coronemos á Kardec y la Marsellesa Espiritista, obteniendo una cariñosa ovación al terminar su cometido. En el intermedio de la fiesta fueron obsequiados los pequeños oradores ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 67 con sanwiches, pastas y vinos, y, al finalizar la fiesta, con un espléndido softeo de juguetes del que participaron todos los niños que concurrieron á esta simpática fiesta, de la que guardaremos grato recuerdo, cuantos á ella tuvimos el placer de asistir. FIESTAS EN HONOR DE KARDEC Y VIVES A medida que se acerca la fecha en que se celebrarán estas fiestas, el entusiasmo para asistir á ellas va cundiendo entre nuestros correli- gionarios, lo que nos hace presagiar qué este año se reunirán en Tarrasa mucho mayor número de los que se reunieron el año pasado. Aunque creemos que el programa de las mismas variará poco del anterior, sin embargo en nuestros números de Abril y Mayo, lo anuncia- remos á nuestros lectores paya su conocimiento. SUSCRIPCIÓN para realizar un banquete y otros aetos, en Tarrasa, el mes de Mayo próximo, en honor de Alian Kardec y Miguel Vives. Ptas. Suma anterior 155'25 Recogido en el Círculo «La Buena Nueva» 0'80 Francisco Torregrosa, de Jerez . 0'50 Miguel Vera, de Cuenca 0'50 Recogido en el Círculo «La Buena Nueva». . . • ■ • • ■ 0'60 Total 157'65 (Continúa abierta la suscripción). Predicando Todos los hombres han de poder desenvolver todas sus ía- cultades, aptitudes é inclinaciones mientras estén seguros de la verdad que sustentan y por ende conforme con la justicia y la honradez. Pues en la complicación de la sociedad moderna, compuesta de elementos tan heterogéneos, donde reinan en la misma corrientes de ideas distintas que debilitan grandemente la unidad de espíritu mundial en las cuestiones más trascen- dentales, cuyo progreso debe marchar hacia un fin más feliz, sucede á menudo que una de esas mentes ofuscadas y soberbias creyendo poseer toda ciencia (sin que por ello les neguemos su 68 LUZ Y UNIÓN buena íe) tratan de interrumpir el proceso de la ciencia intan- gible que no conocen por no haberla estudiado ni practicado profundamente como se merece todo estudio científico, al po- nerse en tela de juicio y no con la negación sistemática de que algunos hacen uso. Alian-Kardec nos dice en su libro «De los Médiums», pági-. na 18, párrafo 16 del capítulo II, que «Los fenómenos espiri- tistas, lo mismo que los fenómenos magnéticos, han debido pasar por prodigios antes que se conociese la causa; pero que los excépticos, los espíritus fuertes, esto es, aquellos que tienen el privilegio exclusivo de la razón y del buen sentido, no creen que una cosa sea posible desde el momento que no la compren- den: he aquí por qué todos los hechos reputados prodigiosos, son objeto de bufonadas». Esta es "la putrefacta llaga que no deja sanar debida y expontáneamente la vida pública y social. Para nosotros el pueblo no significa una clase, sino todas las clases sociales. - Todavía quedan reminiscencias del feudalismo medioeval; ■■ el régimen de separación de clases subsiste, á pesar nuestro hay vallas infranqueables, prerogativas y exclusivismos. Estos obstá- culos de la vida común parecía que habían de desaparecer para siempre, y las almas generosas como son las de los espiritistas, se deleitan en la esperanza■ de que con su ayuda los tiempos modernos, con su multiplicación de riqueza, verían una época de expansión y elevación moral del pueblo, de fraternidad y auxilio mutuo entre los ciudadanos, y de que hasta en ePorden práctico del amor, imperaría el principio político y "social deque la eminencia, la superioridad y la dirección sobre los "demás hombres sería ejercida por los ciudadanos más probos y mejo- res, fuese cualquiera la condición ó clase social á que pertene- cieran. Si el Espiritismo no tuviera tantas trabas y hubiese sido, es- cuchado por los hombres de ciencia ya estaría todo reformado. ,Y si no fuera por la repugnancia mal entendida á que el vulgo ignorante está predispuesto en contra de nuestros bellos ideales á causa de esos hombres obcecados que creyéndoseles infalibles propalan entre las masas su excepticismo respecto á nuestras creencias, haciendo á la causa todo el daño que pueden,"se hu- biese allanado el terreno. Empero nosotros les tenemos lástima y les perdonamos de todo corazón porque sabemos que todo mal redunda siempre en perjuicio del causante; además de tener la seguridad de que ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 69 el Espiritismo es Providencia bajo cuya mira se tienen'que des- arrollar con el tiempo todos los sucesos humanos; porque se reconocerá que en el Espiritismo sano están los pensamientos de Dios, distantes de los pensamientos humanos, tanto más ellos se alejen de El por sus concupiscentes pasiones; pero la humil- dad cristiana, que es la del Espiritismo, no nos veda discurrir acerca del progreso, considerando que en el más allá han de desarrollarse y realizarse los grandes principios sociales del Cristianismo que en el orden de la rehabilitación ha tenido siempre aplicación perfecta en todos los hombres de buena vo- luntad que han querido regenerarse en Cristo. Con ello, la sofisticación política actual será batida en reti- rada ignominiosa, pues según el autor antes citado, «el Espiri- tismp toca las cuestiones más graves de la filosofía, á todas las ramas del orden social, que abraza á la vez al hombre físico y al hombre moral, es por lo mismo toda una ciencia, toda una filosofía que no puede ser aprendida en algunas horas como cualquiera otra ciencia; habría tanta puerilidad en querer ver todo el Espiritismo en una mesa giratoria, como en ver toda la física en ciertos juegos de niños». Así es, que es ineludible deber nuestro, aclarar nuestros propósitos y hacer luz, mucha luz, sobre nuestros sinceros ideales é inmiscuirnos en todos los asuntos que compiten al hombre de la tierra incluso su política, para que allí donde sea necesario producir un bien ó atajar un mal, éstemos firmes, no dejando prevalecer jamás el sofisma en la vida pública, que la verdad inconcusa debe desacreditar. Una ciencia airada y perseguidora que sistemáticamente atacara sin razón ni apoyo positivo la ciencia espirita, no puede prevalecer en la conciencia de los hombres sabios ni tampoco en la vida pública sensata y estudiosa; pues quedarán abando- nados y desacreditados sus causantes el día en que los elementos sanos de la sociedad, convencidos de la veracidad espirita com- prendan la misión de cada cual en este expiatorio mundo, y sacudiendo el actual amodorramiento, despierten empleando las aptitudes y medios de que disponen en favor de la elevación de su espíritu y por consiguiente de la masa espiritual de los pue- blos cumpliendo la doctrina sublimó de Cristo, que expresa- mente enseña que la riqueza, el talento y el poder se tienen no para satisfacer placeres egoístas, sino para servir al pueblo, es- pecialm^ente á aquellos de nuestro linaje que carecen ó poseep 70 luz y unión en menor grado, el poder dar cumplimiento á las necesidades materiales".. Hasta ahora podemos decir que la democracia ha sido casi sólo de palabras; un ramo de,elocuencia parlamentaria y de lite- ratura periodística; pero tenemos la seguridad de que en defini- tiva los espiritistas se ganarán la confianza del pueblo, porque con su democracia práctica, sus buenos hechos y sus obras, cuyo desinterés y nobleza se dedica al servicio de las necesida- des públicas y sociales, será plenamente reconocido. Grandioso se nos presenta con esta faz el Espiritismo que á la par que confía en la infinita bondad del Ser Supremo, es bas- tante perspicaz para comprender los preparativos á una nueva vida social de alto provecho y que por solo amor á la humani- dad, á nuestros queridos hermanos en este valle de lágrimas, se presta al honorable sacrificio de todo, con tal de inculcar á los hombres el sentimiento de fraternidad desinteresada, cuyo fin es para bien de toda la humanidad. Animo, pues, habitantes de la tierra, seamos todos humil- des y aprovechados discípulos de Cristo, y en nuestros actos imitémosle tal cual El hizo durante su estancia en este planeta, sin añadir ni quitar nada de su vivificante espíritu; pero cui- d^ndo de que no sean sólo los labios los que pronuncien sus obras, es menester dar ejemplos de bondad, de benevolencia, de veracidad, de desinterés y sobre todo de caridad y amor: sin esto sería estéril todo sacrificio y abnegación. Miguel Mayol. La sombra de ayer, es la sombra de hoy I Siguiendo mi tarea, contestaré á un espiritista de Mequi- nenza, el cual me dice lo siguiente: «Hermana mía: Le escribo abrumado por el asombro y el dolor. Un sobrino mío, casado y con dos niñas pequeñitas, muy apreciado en este pueblo, navegaba por el Ebro conduciendo carbón; se le antojó dejar su barquilla y entró en otra. Subía el ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 71 barco con vela, y al llegar á un punto determinado, los tripu- lantes tomaron las perchas para empujar el barco hacia arriba, porque les hacía poco viento; pero lo hicieron con tan mala suerte', que al sacar la percha del agua resbaló mi sobrino, aga- rrado á la percha, y se cayó al río, que, según dicen süs com- pañeros, se quedó derecho, y no le llegaba el agua á la altura del pecho, y como todos sabían que era un buen nadador, nadie le auxilió, y el agua se lo llevó rápidamente á la profundidad y se ahogó sin que nadie se preocupara de salvarle, porque todos sabían que él nadaba perfectamente. Y como en el lugar donde cayó hay muy poca profundidad y él era un joven sano y robusto, que bien podía hacer esfuerzos para salvarse, pien- so y sospecho si alguna fuerza invisible lo hizo caer como una masa de plomo. Yo le vi tres días después de haberse ahogado, que el agua lo arrojó á unos tres cuartos de hora más abajo del sitio donde cayó, y asistí al levantamiento del cadáver. ¡Ay, hermana mía! ¡no parecía él! ¡qué horroroso estaba!... Por Dios le pido que pregunte á su guía por qué mi sobrino, que era un muchacho tan bueno, ha tenido una muerte tan desgra- ciada, viéndose tan abandonado rodeado de sus compañeros y amigos. No me guía la curiosidad, ¡líbreme Dios de ella! es que presiento que mi sobrino ha pagado algo de ayer, ¡y es tan bueno aprender y enseñar!...» Hasta aquí la carta del espiritista, y como mi ocupación actual es ser maestra de pármlos, como me ha dicho un espí- ritu (muy acertadamente), no dudo en interrogar á los espíritus que me rodean para que éstos, si lo tienen por conveniente, me contesten y me enseñen, para yo á mi vez enseñar á los que llegan hasta mí, que en este mundo formamos una cadena desde los más sabioá- hasta los más ignorantes, y todos servimos en la escuela de la vida: los grandes p^ra catedráticos, los pe- queños para modestos auxiliares, que sostienen el orden entre los muchachos revoltosos. Yo indudablemente soy uno de estos auxiliares. n (iNo te quede la menar duda; cada cual tiene su puesto se- ñalado para desempeñar su papel en el gran teatro de la vida, unas veces de primer actor y otras de humilde comparsa; pero que tanto vale el uno como el otro si á conciencia se posesionan de su papel. Tú, por esta vez, has aceptado de buen grado y 72 LUZ Y UNIÓN hasta con agradeciráientó el humilde trabajo que te han enco- mendado; sigue cumpliendo á conciencia y lo demás no te pre- • ocupes por ello, porque preocupándote sólo conseguirías per- turbar tu imaginación, y eso no te conviene en manera alguna, ' que hartos siglos has perdido tras de vanas quimeras, y hora es ya que te ocupes de tu porvenir. »E1 joven que ha muerto ahogado en un sorbo de agua, sa- hiendo él luchar con embravecidas olas, ha muerto como debía morir, como él lo pidió.. Cada cual muere como le corresponde; nadie tiene una hora más de agonía que la que en justicia debe tener, y por mucho que vuestros sabios, que vuestros hombres estudiosos se quemen las pestañas estudiando noche y día el problema de la vida, tienen todos que decir en su fuero interno; Sólo sé, que no se nada. «Podrán desdeñar, como las desdeñan, las comunicaciones de los espíritus; pero mal que les pese somos los espíritus los intérpretes de la verdad eterna... ¿Que hay mucho que estu- diar? ¡quién lo duda!... ¿Que hay que estar sobre aviso? ¡es in- dudable! No hay verdad que no esté rodeada de errores, como no hay error que no nos impulse á pensar; pero dejaré las di- gresiones para otro día y te diré que el humilde joven cuya muerte en el agua hoy lloran sus deudos, fué ayer un magnate poderoso perteneciente á la iglesia romana, hombre rico, adu- » lado de'sus servidores; no conocía á sus antojos valla; ver y vencer era su divisa. Salió una tarde de su palacio completa- mente solo; le gustaba buscar aventuras lejos de la ciudad, y alargando su paseo se encontró á orillas del mar, muy distante de donde habitualmente vivía. Era una tarde hermosa; los últi- mos rayos del sol poniente cubrían el agua de dorados reflejos y el alma más indiferente tenía que decir, ¡hay un Dios!... El prelado se detuvo de súbito al ver á una joven sentada al pie de unas rocas, la que, llevando su diestra á su boca, hacía el ade- mán de enviar besos á las movibles olas que -mansamente deja- ban en la arena su blanca espuma. El se quedó sorprendido y admirado, porque ]a joven era hermosísima, y aunque su traje era sencillísimo y parecía pertenecer al pueblo, estaba encanta,- dora enviando besos.á las olas. »—¿Qué haces, niña?—le preguntó el prelado sentándose junto á ella. »—Envío besos á mi amado; él es marino, .y al marcharse me dijo que todos los días, á la misnia hora, viniese á este sitio, donde tantas veces nos habíanaos jurado eterno amor, y que le ÓRGANO OFICIAL. DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 73 enviase ósculos amorosos por medio de las olas, que él á su vez también me los enviaría hasta el feliz momento de volvernos á reunir; y yo, fiel á mi palabra, todas las tardes vengo, le rezo una salve á la virgen del ctmor hermoso, y después le mando piis besos al que pronto será mi esposo. ))La joven, al hablar así, con tanta sendllez, con tanta inge- nuidad y tanta-inocencia, estaba tan seductora, que el prelado sintió correr por sus venas el fuego del deseo carnal, del goce impuro, y olvidándose de su sagrado ministerio y del respeto que debía inspirarle aquella virgen inocente, se arrojó sobre ella, la estrechó contra su pecho^' y ciego, loco, frenético, quiso manchar su frente con sus ardientes besos; mas la niña se re- volvió entre sus brazos como una leona herida y le dijo: «Antes la muerte que la deshonra»; y le golpeó el rostro con tal em- puje, que la bestia humana, enfurecida, murmuró con rabia: «¿Quieres morir? pues, muere; mía no serás, pero tampoco serás dé nadie»; y ebrio de furor la levantó en sus brazos y la arrojó al mar, diciendo con brutal ironía: «Vete, vete á llevarle tus besos»; y frenético, lanzando maldiciones, se alejó de aquel lugar sin sentir el menor remordimiento, creyendo, por el con- trario, que había estado en su perfecto derecho castigando la rebeldía de aquella niña que prefería la muerte á_ la deshonra. »E1 prelado de ayer es el humilde joven que hoy ha muerto ahogado, rodeado de sus más íntimos amigos; no merecía mo- rir de otro modo el que asesinó á una niña indefensa sin más conápañía- que su virtud. La sombra de ayer, es la sombra de hoy. —Adiós». III Por mucho que quieran negar la ley de la expiación algu- nos hombres muy dados al estudio, los hechos se imponen, y ante los hechos hay que inclinar la cabeza y decir: Podrán dis- cutir las causas, pero los efectos hay que aceptarlos, y decir: Lo que toco, lo que veo, lo que se desenvuelve y se desarrolla delante de mí, no puedo negarlo; el efecto no puede ser más desastroso, más desconsolador, más horrible; la causa, induda- blemente, no puede ser , buena, porque un árbol sano no da frutos podridos. Se huye de la culpa, por eso se huye de la éxpiación, por- que ésta nos humilla, nos empequeñece; pero por mucho que nos estorbe, cuando llega el momento de cumplirse la senten- 74 luz y.^ unión cia, cae sobre nosotros el peso de nuestro ayer y la se realiza, sin ejecución letrados ni verdugos; se cual cumple la ley y cada es verdugo de sí mismo, que la sombra de ayer, es la som- bra de hoy. Amalia DomincxO Soler. Estudios Hace ya mucho tiempo que todos los hombres de dentro ciencia, cada uno del credo filosófico en que milita, se vienen ocupando del estudio y análisis de los elementos constitutivos no ya del de planeta sino todos los Tierra, planetas ó mundos de que se compone nuestro para de ello deducir planeta solar, con algún fundamento, si los demás mundos sis- temas de y que se constituye el Universo, pueden ser y estar constituidos á su vez délos mismos elementos. Para ello se han dividido los filósofos en grupos y cada grupo ha tomado un nombre y cada nombre lleva .su bandera; bajo la cual, se agrupan los afines á los principios filosóficos que cada cual sustenta y defiende, tratando á la vez de definir todo lo que está fuera de ese grupo, de esa bandera y de esa filosofía de cada particular uno. De aquí proviene la divergencia de opiniones, la diferencia de cfite- rios y la diversidad de afirmaciones más ó menos cada fundadas, según que grupo se ha aproximado á la verdad, que en la Tierra se aspirar puede y conocer hoy. No cabe duda que estas divergencias y esta diferencia de nes sobre la verdad apreciació- que se persigue, han causado alguna en las conciencias perturbación y han retrasado algunos siglos el moral científico progreso y de la humanidad terrena. Los científicos se han concretado á estudiar y analizar los fenómenos físicos de la de naturaleza, los fenómenos prescindiendo psíquicos que se realizan fuera de lo que llamamos materia y los otros por el contrario, haciendo caso omiso de los fenóme- nos fisicos, se han encerrado en el círculo de la psicología, dirigiendo sus investigaciones hacia lo desconocido, inventando principios filosófi- eos que han aprovechado para hacer más confusas las verdades á todos que aspiramos y perseguimos. De aquí nacieron la dualidad de unos la trinidad y de otros, dualidad y trinidad que no tienen razón de ser, desde el momento en que unos y otros, admiten y afirman, que hay una sola ley, una sola causa y un solo principio de donde parten todos los fenó- menos que se manifiestan en el Universo físico y moral.- Bueno es que unos y otros se hayan dividido para estudiar todos los efectos naturales que en la Naturaleza se producen, porque dada la cor- tisiraa vida del hombre en la Tierra, le faltaría tiempo para estudiar y analizar todos los aspectos de la verdad absoluta, que se manifiesta por grados y en formas infinitas, pero han caído en el error de querer soste- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 75 ner principios heterogéneos, dando por resultado una dualidad, que los unos llaoian materia y otros llaman espíritu. Los unos afirman y sostienen, que todo cuanto en el Universo se rea-, liza es'del espíritu, y por el espíritu, apoyándose en la tesis, de que esa causa única, es Dios, y Dios es espíritu y los otros, que no admiten ni creen en ese Dios espíritu, afirman que la materia y sólo la materia es la causa de todos los fenómenos psico-físicos y psicológicos. A demostrar estos errores y á desvanecer este dualismo, tienden estos deshilvanados artículos que con la venia de los directores de esta Revista y la benevolencia de sus lectores, iré dando á la publicidad. En ellos trataré de demostrar la unidad, ya se trate de la materia, ya se trate de la substancia ó de las fuerzas que concurren á la realiza- ción de todos los fenómenos de la Naturaleza; porque si bien los efectos son múltiples y variados hasta lo infinito, la causa que los, producen no puede ser más que una, como una tiene que ser la ley que los presi- de y una la substancia de donde nacen,, como una es la fuerza que los impulsa. • Ahora bien. Antes de entrar en materia debo manifestar á mis lecto- res, que esta tesis,está inspirada no en los principios científicos y filosó- fieos que poseo, que son muy insignificantes por cierto, sino en la doc- trina que sustentan dentro de la filosofía espirita algunos seres del espacio, que en una serie de conferencias nos manifiestan con la tenden- cía de implantar en la Tierra la unidad de la substancia, de la fuerza y de la, materia con el titulo de Ciencia única y Universal; y hago esta manifestación franca, leal y sincera, para que el mérito queen ello pue- dan encontrar los lectores, lo atribuyán á esas entidades inteligentes y el desmérito, á mi poca y limitada inteligencia y defectuoso modo de metodizar los conceptos para definir las conclusiones que de ello se des- prenden. Estos seres bondadosos que llenos de amor se dignan venir á nosotros para estrechar las distancias que nos separan y los antagonismos que nos dividen por la diferencia de criterios y apariciones, sobre los efectos y las causas que los producen, han afirmado y sostenido repetidas veces, que debemos hacer constar: que para evitar dualismos científicos, reli- giosos y fisiológicos en que han incurrido los pensadores más eminentes del racionalismo, del teísmo y del positivismo, que por los hechos y la razón tenemos fatalmente que reconocer á un sér único y total, causa de todo lo que es, siendo y estando, de infinitos modos en cada instante ilimitadamente. Este ser es la esencia animadora, es siendo y manifes- tándose sin limitación alguna en el instante eterno de su infinitud; por consiguiente, la esencia única del ser total, no se realiza como muchos creen, porque esto implicaría limitación en todos sus atributos y no sería infinito y absoluto ó significaria un ser incompleto, realizable y perfec- tibie; no se puede, por tanto, asignar al ser infinitamente absoluto y abso- latamente infinito, esas formas y maneras de estar que nuestra limitada inteligencia admite como jalones que nos marcan los espacios y el tiempo, así como las temporalidades de nuestras existencias que en la vida de relación nos limitan el espacio y las infinitas formas y modali- dades que pasa la vida individual y colectiva, sé nos presenta el tiempo y espacio en nuestro progreso infinito y porque no se puede probar que 76 LUZ Y UNIÓN Y... el tiempo y el espacio, tienen una realidad absoluta porque ese mismo ser absoluto y eterno, se impone á nuestra razón. Algunos objetarán que estas ideas se nos manifiestan en las esferas de la actividad vital, pero no es así en lo que corresponde á nuestro desarrollo esencial, esto se puede demostrar reduciendo la actividad vital solidaria en el Universo, á la unidad. Pongamos un ejemplo. Supóngase un solo ser orgánico con su actividad esencial inmutable y la fuerza orgánica correspondiente á la participación de la vida uni- versal que le corresponde, y este ser ocupara necesariamente lo infinito en la eternidad como ser orgánico sin limitaciones de causa y efectos aun siendo consciente y esciente en grado infinito, ¿podría tener este ser noción del tiempo y del espacio? ¿podría darse cuenta de la vida que es efecto de las relaciones de convivencia individual y colectiva en los elementos constitutivos organizados y asociados? Para desvanecer nuestras dudas sobre éstos y otros puntos-trascen- dentales, vienen las inteligencias extra-carn ales con la permisión exclu- síva, á revelar la resolución de algunas ideas cosmogónicas que se agi- tan actualmente en la mente de algunos filosófos positivistas y que dentro de algún tiempo serán resueltas satisfactoriarnente por experi- mentación directa de los sentidos carnales. Antes de seguir adelante, voy á permitirme transcribir, algunos pen- samientQS de los que hemos recibido de uno de nuestros comunicantes en una de las sesiones. Dice así: Queridos hermanos. Desde estas esferas de luz emanada de nuestros propios seres, en que los reflejos de los astros se obscurecen; desde este plano espiritual, como diría algún teósofo contemporáneo poco habituado á los planos astrales del misticismo oculista, podemos sencillaménte observar y sentir las infiuencias del pensamiento que'pe- nosamente se agitan en la tupida malla de las células encefálicas com- primidas en la caja craneal .en que se concreta y difunde la actividad esencial de los seres organizados en la Tierra. Esta forma de nuestra sensibilidad orgánica, corresponde á nuestra organización fluidica por cuanto se naanifiesta de un modo superiormen- te más tenue y más radiante que los fiuidos eléctrico, calórico y lunáíni- co, porque núestra irradiación nose detiene, no se acumula, ni se re- fracta en los cuerpos ni en los organismos materiales. Sin embargo, de esta poderosa facultad de sentir los estados de la conciencia de nuestro ser y á nosotros extraña, nos es imposible y nos será-siempre, distinguir y apreciar la fuerza esencial que engendró y animará eternamente la inteligencia en los seres y la fuerza vital que acomoda en sus foVmas manifestativas á los estados variables deU desarrollo esencial, ó sea de las facultades intelectuales que son los caracteres de la esencia infinita. Tampoco conoceremos jamás la fuerza orgánica que particulariza y especifica los seres por grupos, géneros y familias, ni siquiera llegare- mos á penetrar la fuerza que consideramos física, que también regula- riza específicamente las formas y es.tados de la materia sólida en lo que se considera como cuerpos simples y compuestos. Con este raciocinio se podrá derñostrar, que para nuestras inteligen- cías nos será más fácil explorar el campo metafísico que el mundo ma- terial, porque pensando, conociendo y sintiendo', realizamos nuestra ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 77 esencia, siempre solidariamente con nuestras propias ideas y asociándo- nos á la vida intelectual y efectiva que en solidario concierto se des- arrolla en el Universo, porque siempre y en todas partes, por la exte- riorización del pensamiento, las ideas circulan y éstas establecen el' movimiento inter-espiritual que producen la transmisión del pensamien- to de ser á ser y entre todos los seres; por lo tanto, dentro de la vida universal, la causa-agente de la vitalidád orgánica en su manifestación constante, universal é infinita, puede atribuirse á esta manifestación y á esta acción inteligente de los seres pensantes. Del mismo modo que atribuímos á una causa animadora la actividad inteligente en nuestra naturaleza esencial, así debemos reconocer, que los efectos de la Voluntad absoluta manifestándose en lo infinito, son causa de la vida intelectual, individual y colectivarnente considefada. En este sentido, debemos, estudiaremos los fenómenos que en la vida se producen, para determinarse en series infinitas de organismos en formas y estados distintos y siempre variables. Estudiando, analizando y reco- nociendo estas premisas, lógicas y racionales, nos será más fácil encon- trar experimentalmente los orígenes de la vida planetaria, que por sus caracteres de universalidad de que debemos ocuparnos, dejando á un lado los procedimientos prácticos y especulativos de la ciencia terrena, intentaremos también penetrar los secretos de la vida histogénica en los organismos tan difícil hasta ahora de precisar y dirigir los elementos animadores, vitales y organismos que constituyen las organizaciones in- dividuales y colectivas. Para fijar bien estos temas, nos es conveniente meditar y estudiar, para desarrollar. Cuando nuestra inteligencia, hermanos míos, se remonta al ser único y total, causa de las causas y reconocemos su poder, su sabiduría y su justicia infinita, manifestándose infinitamente y de infinitos modos para completar ante nuestra razón todos los atributos y caracteres de lo infi- nito, tenemos que reconocer también en nosotros mismos limitadamente, estos mismos atributos y caracteres inconmensurables en todos los seres animados, cuyos organismos forman parte de la vida universal é infinita. Todo cuanto corresponde á la causa animadora en su naturaleza esencial é infinita, lo iremos reconociendo sucesivamente por sus carac- teres, pero jamás por la substancialidad de la causa. Por esta razón nos será más fácil identificarnos con las ideas de ab- -solutividad é infinitud, estudiando é investigando directamente, que basándonos sólo en las causas anteriores y finales. Sin embargo, estudiando los caracteres de los fenómenos naturales, se pueden explorar también fácilmente las esferas de la vida intelectual, porque admitiendo que los hechos se originan, se producen, se relació- nan y se propagan solidariamente, se pueden admitir también ios ferió- menos físicos obedeciendo ~á causas inteligentes solidariamente relació- nados; investigando podremos llegar á sentir las impresiones de ese eter fulgurante que llena el espacio infinito y que se raodaliza, porque en esas primeras manifestaciones de la esencia, principia el movimiento y la vida de los elementos cósmicos en que podemos apreciar la causa animadora de esa fuerza etérea que seguirá siendo para nosotros miste- riosa, pero real; y no podemos considerarla material, porque en el 78 LUZ Y UNIÓN origen de la materia comienzan las manifestaciones vitales, y ese agente que para nosotros es inmaterial no puede ser la nada, pero será fulgor, efluvio, destello animador, ó algo asi como el alma de lo infinito en su infinita potencialidad inteligente y creadora. Razonando asi, algún día en la Tierra llegarán á unirse, ideal y prác- ticamente, las ideas externas del materialismo y del espiritualismo, den- tro de la ciencia espirita ecléctica para los terrenales, anímica y racio- nal para los seres que como nosotros podemos objetivar nuestro pensa- miento en nosotros mismos, produciendo la exteriorización de las ideas y recíprocamente la inter-comunicación mental de que particularmente nos ocuparemos en estos ensayos, en los que confiadamente esperamos pronto importantes resultados. De las generalidades expuestas por las entidades pensantes del espa- cío á los individuos congregados para recibirlas, han deducido las con- secuencias que son útiles para poder admitir de buen grado los funda- mentos en que se basan para fundamentar la ciencia única y universal en la Tierra. - Al hablar de las ideas de fuerza y substancia, animadora de la vida, del movimiento y de la actividad solidaria de las partes en el Todo, tenemos, dicen, que reconocer que no existen ni pueden existir para nosotros, dotados siempre de intelectualidad y desarrollo, otras vérda- des absolutas más que en .las esferas metafísicas, porque sólo en ellas "se encuentra.nuestra idealización y el límite de lo apreciable y compren- sible á la razón. Dicen que sin las verdades fundamentales y sin las premisas necesa- _jias para raciocinar filosóficamente y sin la experimentación científica, no puede haber ciencia posible que se apoye en la verdad y sostengan por deducciones lógicas é inducciones racionales que satisfagan á las conciencias individuales y colectivas. Por otra parte, nosotros sabemos también, por experiencia propia, que todos los fenómenos que impresionan maestros sentidos, no son más que el resultado de causas anteriores y presentes que no se repiten en las mismas condiciones de efectividad, de lugar y de tiempo; por consi- guíente, nuestro raciocinio tiene que proceder por analogías para dedu- cir leyes y fijar los principios científicos que han de servir para las in- vestigaciones sucesivas, teniendo en cuenta que los fenómenos en sí se presentan con caracteres múltiples, como efectos del funcionalismo soli- dario de los agentes que inmediatamente influyen, obedeciendo á otras causas anteriores con variada intensidad apreciable para nosotros y con relativa claridad y precisión conforme á nuestra capacidad intelectiva y á nuestro-grado y estado de sensación. De aquí que todos los hechos formulados científicamente resulten opinables y establezcan el desacuerdo hasta que las verdades de hoy resulten utopias después; de este modo, de utopia en utopía, se ha po- dido progresar en cuanto comprende y satisface en la Tierra, á la vida material y á los goces sensuales, llegando á la situación presente, en q.ue el derecho á la vida y el disfrute de las temporalidades se consi- deran como iniquidades sociológicas. Para resolver estas iniquidades sociológicas, no se, encuentra más lenitivo, bien pasajero por cierto, que ensayar principios económicos ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 79 sobre la provlsiÓD y reparto de la riqueza pública, ya que los grandes pensadores encuentran deficiencia en estos problemas dentro del derecho positivo y buscan en la fuente del derecho natural, fundándose, en el deber que la moral pública y privada pueda aceptar y el Estado impo- ner bajo la égida de Libertad, Igualdad y Fraternidad. Los que sólo juzgan por sentido cornún y sienten la presión y la com- potencia de las instituciones, se sienten inclinados á exigir el régimen moral que se desprende de los principios democráticos, pero desenten- diéndose de los deberes recíprocos que el concepto de confraternidad establece. Por otra parte, los dogmas filosóficos y religiosos en pugna constante se encuentran lastimosamente desacreditados para educar y dirigir las conciencias, atentos solamente al mejoramiento de su exis- tencia orgánica; sin embargo, á pesar de todas estas vicisitudes y con- trariedades que en la historia de la humanidad terrena se registran, las conciencias y las artes, de aplicación á estas existencias carnales, han progresado; pero, ¿por qué? sencillamente, porque la ley ineludible del desarrollo y perfección tiene que cumplirse irremisiblemente. La sociedad •actual, por esta misma razón se encuentra en un medio más satisfactorio que en épocas anteriores para solicitar grandes y pro- fundas modificaciones en la organización social; pero como el sentido moral se halla perturbado por falta del criterio científico que necesita, la incredulidad en los destinos ultraterrestres hace que las generaciones presentes de la Tierra se inclinen , más al reconocimiento de esa otra moral egoísta y acomodaticia, que consiste en la tolerancia social, pero esta tolerancia reciproca, algo útil aparentemente, por el altruismo de los que conceden algo para obtener tranquilamente , mayores recompen- sas, ha existido en todas las instituciones antiguas, hasta las que garán- tizan por dádivas la gloria eterna. Efecto de todo ello, nunca como ahora se ha sentido en la Tierra la necesidad de una revelación científica, transmitida por colectividades espirituales asociadas, ó espíritus redentores, dispuestos á sacrificarse en penosas existencias corporales para ejercer el apostolado científico en todas las regiones y en todas las esferas sociales para producir pacifica- mente ó por la fuerza si es necesario, hasta implantar la Era de la eman- cipación y rehabilitación de las almas para asociarse todas á la vida uní- versal y para que sepan cómo y por qué existen en este destierro, de dónde vienen y á dónde van. Para entrar en este concierto de la vida conscientemente, es preciso también que la ciencia única y universal, nos ilumine el camino con la explicación de las fuerzas naturales aplicándolas al bien y al beneficio de todos y al perfeccionamiento de la vida social, solicitando el concurso de los elementos que los habitantes de esferas superiores nos ofrecen. Es necesario también la ilustración científica y moral, porque sin ella, no podremos disponer de la fuerza que esa unión de voluntades es- ' pirituales pueden facilitarnos, para remover todos los obstáculos que la disparidad de ideas y sentimientos nos-separan. Cuando el apostolado de estas inteligencias vaya apareciendo en. la Tierra convertido en sabios y valerosos apóstoles, surgiendo de las cía- ses más modestas y enseñando en la teoría y en la práctica, que el ori- gen de la vida,es esa fuerza animadora y universal que se revela en 80 luz y unión hálitos incoercibles é impalpables en los gérmenes microscópicos de la vida material, nadie podrá negar la existencia de la fuerza y de la vida, como consecuencia y del movimiento que es el resultado de la actividad inteligente de los seres en todas sus esplendentes manifestaciones vitales uniendo y organizando á las colectividades según su situación y estado de desarrollo, realizarán la unión del mundo espiritual mostrándose á los sentidos carnales como organismos fluídicos comunicándoles sus im- presiones directamente por el reflejo de la conciencia en esa atmósfera que nos envuelve y que hemos llamado periespíritu. Entonces la trans- misión mental del pensamiento nos pondrá en comunicación con otros mundos, desapareciendo, las barreras de esas regiones del Eter, en que lo misterioso, lo ignorado y lo metafísico, se nos presenta y revela como verdades inconcusas. Entonces será cuando se inicie en la Tierra esa Era tan deseada de Libertad, de Fraternidad y de la emancipación de las conciencias y con ella el término de los sufrimientos del cuerpo y de las aflicciones del ' espíritu. Benito Rodríguez. ¡Los niños!... (En lina fiesta infantil) Otra vez los pequeñitos »Somos de Dios enviados, contemplo'cerca de mí y de su gran religión (ángeles de Dios benditos); ios mensajeros sagrados; me dicen con sus ojitos: los ungidos esperados «Mira, ya estamos aquí.. del credo de la razón». »Somos la generación Así hablan los pequeñitos que qnunciaron los Mesías; con los ojos muy abiertos traemos una gran misión: (ángeles de Dios benditos); derrumbar la tradición que dicen á los proscritos: con sus leyendas sombrías. «¡La verdad os brinda'sus puertos!» «Venimos á derrumbar ¡La verdad! ¡la clara luz! los vetustos monasterios; ¡la ciencia! el racionalismo venimos á demostrar, que rasga el negro capuz, que á Dios se debe adorar diciendo que no hay más cruz sin templos y sin misterios. que la que da el fanatismo. »Que no hay más ley que el amor, La nueva generación ni más credo que el deber esto nos viene á decir; de ayudar en su dolor es muy grande su misión: al que sucumbe al rigor viene á suplantar la razón de su horrible padecer. que es la FE del porvenir. »Que no hay Santos protectores, ¡Venid, venid, pequeñitos!... que no hay Cristos milagrosos ¡alegrad mi ancianidad! que calmen nuestros dolores; (ángeles de Dios benditos); que sólo hallaremos flores miradme, en vuestros ojitos si hacemos actos piadosos. resplandece la verdad. ÓRGANO OFICIAL DE LA-LIGA E. ESPAÑOLA 81 ¡La verdad! ¡bendita sea! Acercaos, niños, sí, sí, de ella yo siempre iré en pos, que por vuestra ingenuidad porque es la luz de la idea; á Dios culto le rendí. que la verdad centellea, ¡Niños! venid hacia mí... ¡porque es el alma de Dios! ¡Vosotros sois la verdad! Amalia Domingo Soler. Juicios sobre el demonio ó diablo «Y por la tarde le trajeron muchos'ende- moniados y echó de ellos los demonios y sanó todos los enfermos». (Mateo, c. VIII, v. 16; Marcos, c. I, v. 32 á 34; Lucas, c. IV, v. 41). ^ Muchas conjeturas se han formado y se forman aun sobre la perso- nalidad del demonio; pero los Evangelios nos dan bastante luz para des- cubrir 'esa figura tan renombrada y de tanta importancia que se le ha dado. Quizá de los mismos Evangelios han tomado las religiones positivas los datos para propagar esa idea tan descabellada por no haberse tomado el trabajo de interpretar debidamente las verdades alli consignadas. Creer en una personalidad que está en perpetua lucha con la divini- dad Suprema, es la mayor aberración.' Creer que el demonio reviste una gerarquia que rige una parte del Universo y que las almas que caen bajo su poder no tienen salvación posible, es una supina torpeza. Pues en ese caso el espíritu de Cristo tampoco hubiera escapado de las garras del demonio y sujeto al poder del príncipe del infierno. Puesto que el demonio andaba en su compañía y lo prueban las mismas palabras del Cristo, pues refiriéndose á la elección de los Apóstoles, dice bien terminante; «¿No soy yo el que os escogí á los doce y con todo uno de vosotros es un diablo? Decía esto por Judas Iscariote que, no obstante de ser uno de, los doce, lo había de entregar». (Juan, c. VI, v. 70 y 71). El que después de leer ese pasaje aun dude de lo que significa el diablo ó demonio, que es igual, no dejará de ser un verdadero miope de enten- dimiento. Pues si Judas Iscariote era un diablo porque no tenia los sen- timientos humanitarios de los otros apóstoles, eso prueba que el verda- dero diablo es la personificación del mal y que cualquiera persona de sentimientos perversos es un verdadero diablo. Ese diablo, pues, ó demonio que propagan esas religiones, sólp es una alegoría. 82 LUZ Y UNIÓN El verdadero diablo es¡ pues, el autor de toda mala tentación, esto es, la representación del mal, bajo su poder cayó el Mesías. Pero véase quién fué el que sucumbió y el que se levantó. Pues el espíritu de Jesús que fué entregado por un diablo á otros diablos, que eran sus perseguí- dores. El ascendió á las regiones celestiales; mientras que Judas, al arrepentirse de su falta, se ahorcó, es decir, cometió doble crimen; y por lo tanto, su espíritu fué el que sucumbió. Es decir, que si como dice un refrán: «para muestra con un botón basta», según sucedió al desdichado Judas Iscariote que el mismo Cristo dijo que era un diablo, sucederá á los demás diablos; puesto que siendo éstos los hombres de malas tendencias, sus mismas maldades son las que los conducen á sufrir las consecuencias de ellas. En este caso el diablo mayor se gloria en que sus subordinados encarnen en la humanidad para que cometan sus perversidades á fin de imponerles después sus correcti- vos á medida de sus deseos. Y no obstante Jesús, .acompañado de un diablo, cumplió su misión lanzando diablos y aquel diablo nada decía á eso ni se oponía á que Jesús los reprendiera y los despachara de su residencia, siendo diablos los que se posesionaban de los hombres. Pero aun hay más; que hay diablos malos y buenos, puesto que según los representantes de las religiones y particularmente de la católica, los hombres que realizan obras incomprensibles para ellos, aunque éstas sean sublimes, están poseídos del demonio ó diablo que es igual. Hasta el mismo Jesús fué calificado de poseído del demonio, por los que no podían soportar sus palabras como confirma el pasaje siguiente: «Quien es de Dios escucha las palabras de Dios, y si vosotros no las escucháis es porque no sois de Dios. Respondieron los judíos: ¿No decimos nosotros que tú eres samaritano y que tienes demonio». (Juan, c. VIII, V. 47 • y 48). , Ya se ve, pues, qué fundamento tenían los judíos para decir que Jesús tenía demonio, estando precisamente hablando de Dios y de su reino y como era natural esto suscitaba discusiones entre los oyentes, como va- mos á ver: «Y volvió á haber discusiones entre los judíos por sus palabras y mu- chos de ellos decían demonio tiene y está loco, ¿para qué lo escucháis?»; y otros decían, «esas palabras no son de endemoniado, ¿puede el demonio abrir los ojos de los ciegos?» (Juan, c. X, v. 20 y 21). Y sí al enviado celeste calificaban de endemoniado, ¿qué no será á los demás? Y en todos tiempos han sido y aun hoy son calificados de poseídos del demonio los que andan en busca de la verdad y la verdad propagan. órgano oficial de la liga e. española 83 Así también hoy el Espiritismo es calificado de obra del demonio por los secuaces del obscurantismo y de la mentira. Veamos, pues, á quién hay que creer que sea más verídico que Jesu- cristo. Pues al referirse El á Judas Iscariote, no dice que es el diablo sino que es un diablo. Esto quiere decir, pues, que son muchos, lo que corrobora que los verdaderos diablos son como hemos dicho los hombres de malas tendencias, y las religiones positivas hablan de un solo diablo, es decir, de una sola personalidad. Pero al decir el Evangelio «los endemoniados y que echaba de ellos los demonios», se explica que son muchos. Hoy también los obsesados ó poseídos de los malos espíritus se hallan en el mismo caso. En resumen, siendo el demonio la representación del mal y siendo éste él que excita á cometer los grandes crímenes, examínese la historia de la humanidad y véase quién ha cometido los más abominables crime- nes. La historia de la inquisición nos da una prueba bien evidente que confirma quién ha estado en la verdad y quién en el error. Si el Espiritismo es, pues, obra del demonio, siendo su propaganda en pos de la verdad y del progreso, la religión católica que ha sido un verdadero azote del género humano, que ha causado millares de inocen- tes victimas, ¿obra de quién será? Si hasta ahora se han comprendido, pues, las cosas al revés, ya es tiempo de que su faz vaya cambiando y se comprendan al derecho. El diablo, pues, en realidad no existe, los diablos si, y éstos son todos los espíritus encarnados y desencarnados dominados aun de tendencias á la maldad. Y la lucha del diablo con Dios, que dicen esas religiones, entiéndase la lucha entre el mal y el bien. Y bajo este punto de vista la religión católica ha estado mucho tiempo convertida en verdadero diablo como representación del mal, sosteniendo la lucha con el bien. Pero como el bien es venido de Dios y, por lo tanto, es más poderoso que el mal, puesto que éste es creado por los hombres, el bien ha venido triunfando sobre el mal. Sin embargo, aun esa religión sigue con sus tentativas; pero si cuan- do poderosa no pudo vencer, ¿cómo va á lograrlo con sus ya debilitadas fuerzas? Los tiempos se acercan, pues, del triunfo completo del bien sobre el mal y de la verdad sobre el error; y como esa religión ha sido la posee- dora del mal, no le quedará otro remedio que cantar la polinodia ante la faz del mundo. El diablo, que es la representación del mal, cargará con ella y desaparecerán el uno y la otra para siempre de la tierra. Faustino Ysona. 84 LUZ Y UNIÓN Al Pueblo (Poesía medianímica) ¡Pueblo!... conjunto imponente os oculta los . abrojos de grandezas y de gloria, por seguir la llama viendo. que vas dejando en la historia Ese es el pueblo, en sufrir un surco resplandeciente. heroico, y firme en querer, Con tu lema prepotente, indomable al combatir que es trabajar por vivir, y generoso al vencer; ves á los necios huir apasionado en saber como legión de vestiglos, torpes agravios vengar, por las cumbres de los siglos y cuando llega á lograr y en su inercia sucumbir. de la justicia el derecho, ¡Gloria al pueblo! es el que alienta ya no consiente su pecho huyendo de la doblez, otro afán, que perdonar. y sin hablar de honradez Ese es el pueblo; en sus lares en el alma la sustenta; difunde calor y vida; el que tiene por afrenta por su libertad querida deber su dicha al favor; cruza montañas y mares. el que desprecia el honor El que adora en los altares , que presta el oro y la raza; del valor y de la ciencia el que al trabajo se abraza á la excelsa Providencia, para salir vencedor. cuya bondad infinita Ese es el pueblo, el que mira esparce su luz bendita ' impávido su destino, sobre la humana conciencia. y no le arredra el camino El pueblo, tan sólo adora y hasta en su llanto se inspira; lo real, lo grande, lo bello, el que domando su ira todo lo inmortal, aquello se levanta justiciero, que virtudes atesora; y noble, digno y austero, ansia inmensa le devora luz á su razón reclama, para seguir avanzando, siendo el último en la fama, sus afanes consagrando y en el morir el primero. á la justicia en la tierra, Y aunque su martirio veo todo lo que el alma encierra hacia Dios se precipita; para seguir progresando. y en su corazón palpita Salud ¡oh! pueblo, prrebol lo que siente, lo que crea. de los cielos de la vida; Esa llama de la idea clara antorcha desprendida que entre abrojos va luciendo, de entre los rayos del Sol. y su poder extendiendo En el ardiente crisol delante de nuestros ojos. de las múltiples edades. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 85 Van dejando tus bondades tus glorias los trovadores; la belleza y la verdad, á tan mágicos loores y por tí la eternidad vaya unida mi canción; se puebla de humanidades. mis pobres versos no son En los acentos mejores dignos de tanta grandeza, de su poético cantar, pero tienen la nobleza conseguirán ensalzar de salir del corazón. Un Espíritu. ¡Amor! ¿Qué puedo yo deciros de la palabra amor? ¿Qué, que vosotros no es- téis,ya hartos de saber, de sentir quizás? Porque es indudable que todos, todos por perversos que sean han sabido amar, que por mala que sea una persona dentro de su misma maldad siempre hay algo bueno, algo grande que demuestra que Dios no ha privilegiado á nadie, sino que la maldad proviene de la atmósfera en que habitamos y en la cual nos he- mos formado nosotros. Iluminemos, pues, si nos es posible á esos seres que se han obscurecido y no han podido ver el camino que ellos mismos se trazaron, áspero, sí, pero que á su término se ofrecía á su vista fértil campiña bordeada de menudas y máltiples florecillas que en un tiempo les hablan de brindar aroma fresca y grata. La palabra amor es sublime en todas sus acepciones, pero el que con más intensidad sentimos es el sacrosanto amor de nuestra madre. El hombre que en Su niñez no la ha conocido, sus sentimientos no han po- dido desarrollarse en todo su vigor, pues es como un pequeño que en las primeras lecciones del abecedario perdió al maestro y el maestro sublime de la vida es la madre. Al niño le es preciso la madre como á las plantas el agua, pues sin la cual terminan por mustiarse. Hay también un amor que si todos lo profesáramos tal y como lo en- seña la fraternidad, este mundo no se hallaría en el estado miserable que se encuentra. ■' Para ese amor es preciso desechar de nuestros corazones, infames rencores y viles egoísmos y que el estandarte de la Caridad tremole in- cesantemehte en nuestras manos y después podremos realizar en un todo el verdadero amor universal. Pero, ¿cuándo sucederá esto? ¡Tardará, si, tardará! Pero, si se realizan por completo mis ardientes aspiraciones, en- tonces si que querría de nuevo habitar este globo, porque una paz dul- císima emanará de todos los corazones Emilia de la Cueva. 86 LUZ Y UxNIÓN ¿Qué debían? Anoche llovía esa agua menudita que á mí tanto me encanta verla caer, y después de la cena me quedé en casa con mí hijo Rafael y Dolo- res, mujer de clara inteligencia y talento natural, á la que profeso gran afecto. Cuando la conociera yo soltera y ella casi una niña que hacía los oficios dé niñera en casa de una cuñada mía. Se-educó entre nosotros y llegó á ser una fervorosa espiritista. Era la víspera de los Santos y yo, recostada en una butaca de mim- bres, les oía hablar de Espiritismo; de pronto me pregunta Dolores: —¿Usted no va al cementerio, señora? —¿Para qué?... Desde muy joven no he pisado esos sitios que me ins- piran un sentimiento penosísimo... Muchas flores... Mucho fausto, para conmemorar las separaciones de seres que tanto quisimos... No es nece- sario... Guando los necesito vienen sus espíritus y me protejen ó me alientan. —Pues yo quizás tenga que ir con mi prima á llevarles coronas á las dos niñas que envenenaron el año pasado. — ¡Dos niñas envenenadas! ¿Cómo fué eso? Que me lo cuente ma- maica... —Cuéntaselo, Dolores. —Pues sí, aquello fué una.lástima... Mi prima es emporronadora y todos los días se marchaba al almacén, para ayudar con su jornal á los gastos de la casa y su madre se quedaba haciendo los servicios domés- ticos y cuidando de dos niñas que tenia, rubias y hermosas como un sol. El mayor es un zagalón de 10 años que también se marchaba al trabajo con su padre, y en la casa no quedaban m.ás que las dos niñas, una de 6 años y la otra de 3, con la abuela. Los domingos no sabe usted, señor ra, lo que gozaba la pobre madre con vestir sus tres hijos con lujosos trajes y salir de paseo con su marido. Las chiquillas eran lá admiración del barrio por donde pasaban, con sus lazos azules ó rosa sobre los cabe- líos dorados, haciéndoles-.decir á las vecinas: — ¡Parece que las quieres casar ya! Y mi prima cada día más ufana y sintiendo más amor por aquellos dos ángeles, si el amor de las madres puede crecer, no tenia otro vivir que su trabajo y su familia. Al lado de su casa vivía otro matrimonio, al que les acompañaba la madre del marido. Las dos amiguitas se juntaban de noche á coser repita ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 87 de las niñas y del atice, pues la vecina estaba esperando en breve la hora de su primer alumbramiento. El vecino dormia todas las noches en sus brazos á la pequeña deseando tener otra hija igual. Mira cómo las querían Rafaelito, que les regalaban dulces y muñecas. En esto dió á luz la vecina un niño ó una niña, pues no me acuerdo, y todos muy satisfe- chos del estado de la parida volvieron á sus ocupaciones, quedándoselas abuelas arreglando cada una su casa y cuidando de las nietas y de la enferma. Tres días después, la suegra de la parida, se presentó por la mañana en casa de mi prima con. una perolita de barro llena de caldo de gallina para que se lo tomaran con sopitas las niñas, porque era lás- tima tirarlo estando tan rico y"la enferma había deseado tomar chocóla- te... La abuela, muy agradecida, la puso á calentar mientras la otra se marchaba, y les dió mi tía de comer á las niñas en dds tazas. —¿Quién era tu tía, Dolores? — Pues la abuela de las niñas, tonto... Mi tía, con la cucharita de la menor probó el caldo y se sentó en el tranco de la puerta mientras las niñas se comían las sopas... Pero no había pasado un cuarto de hora cuando la carita de la pequeña se descomponía y devolvía cuanto se había comido... Después tuvo más vómitos y fuertes dolores en el vientre, mientras que á la mayorcita le pasaba lo mismo... La abuela asustada, sin saber atender á las dos, acostó en la cuna á la pequeña, en su camita á la mayor, y cuando ella quiso auxiliarles y pedir socorro, cayó sin fuerzas al suelo como sus nietas,^ oyéndolas que con débiles vocecitas pedian agua. ¡Oh! sería horroroso para la pobre anciana aquellos mo- mentos, hasta que perdió el conocimiento y quedaron las tres infelices á merced de su gran desgracia. —¿Quién las socorrió?—preguntó Rafael. —^Pues el niño que volvía del trabajo por el almuerzo, y vió á su abuela tendida en el suelo y á sus bermanitas que le pedían agua. — Les daría... —A la menor, y salió pidiendo socorro... Allí hay pocos vecinos y cuando llegaron unos partieron en busca del padre, otros en la del mé- dico y algunos quedaron cuidando á los enfermos... A mi tía la acostaron y cuando yo llegué, ya estaba allí el médico y habia muerto la pequeña sin auxilio de nadie y sin recibir las caricias de sus' amantes padres á quienes.había llamado llena de angustia en sus últimas horas, sin com- prender por qué la abandonaban en la prueba cruel de su dolorosa muerte. —¿Y la otra niña) Dolores? —Declaró lo que había pasado y murió también... Mí tía, como tomó tan poco caldo, se salvó pero estuvo más de tres meses en cama. —¿Y los padres? 88 LUZ Y UNIÓN —El llegó primero lleno de dolor, pero la llegada de la madre fué el colmo... Allí lloraban hasta los hombres..'. En una misma mesa colóca- ron las dos niñas, que parecian hechas de cera, de preciosas que tenían las caritas, vestidas con sus mejores galas. Y fué lo que dijo el médico, un veneno fuertísimo echado en el caldo, que no recuerdo que nombre le dió... Pero lo que todos decimos á una vez: ¿qué fin se llevaba la vecina con envenenar á dos ángeles y á una anciana? Que se la llevaron presa á pesar de que juraba llorando que no sabía lo que contenia el caldo. En aquella duda de si seria inocente ó no, mis primas la, perdonaron, y la familia aquella más tarde marchó á Sevilla llorando á las niñas con toda su alma. Y mire usted, señora, yo también creo inocente á esa pobre anciana porque se puede ser criminal en la fior de la vida, á cierta edad, pero én la vejez cuando por razón natural la muerte viene serena y nadie duda que lo malo que se hace se tiene que pagar, es du- doso y más, que parecía una buena mujer. A fuerza de pensar, mi opinión fué que el verdadéro criminal quedaba oculto sin conocerle nadie y que la destinada á -morir era,la parida. Todás las noches le guardaban caldo para las primeras horas de la mañana, y' una persona que deseaba mu- riera por razones que no sabemos, como en las casas de los pobres es fácil de entrar sin ceremonias y hallarlo todo á mano, el criminal apro- vechando un descuido de la suegra, echó el veneno én el caldo. La muerte de la parida no era esa y si la de las niñas, dando lugar el desti- no de las criaturas á que la anciana trajera de buena fe el caldo á los dos angelitos. —¡Qué drama tan conmovedor!—exclamé.—Quizás seria algún novio desairado de la vecina enferma; los hombres sin instrucción son muy " fuertes para llevar á cabo sus venganzas. —También es fácil, señora; pero lo cierto es que ni la justicia, ni los padres, ni los que estaban presentes lo sabemos. Ese crimen ha quedado completamente obscuro y sólo el que lo cometió sabrá por qué lo hizo. —¿Y los padres también murieron?—preguntó Rafaeiito. -=-¡Poco menos! Ya hace dos años que murieron sus hijas y parece que están enfermos; pero lo que yo le dije á mi prima: hija, hay penas que no las cura más que el Espiritismo. Calcule usted, señora, el es- panto de la pobre madre al, saber que existia un medio para tener otra vez á sus hijas y quiso conocer el misterio con una tenacidad atroz. Le enseñé todo cuanto he aprendido de ustedes de Espiritismo y parecía que aquel dolor inmenso que no la dejaba vivir se fué calmando. No dudó ni un momento de mis palabras. Le dije que sus hijas podrían volver por la ley de reencarnaciones... Su maridónos escuchaba con religioso si- lencio, aprobando cuanto yo decía y su mujer apoyaba, porque no hay espejo más claro que el sufrimiento para entender la santa doctrina del ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 89 Espiritismo. Cuando estuvieron bien preparados les hablé de una mujer hermosa y joven llamada Angelina, gran medium y que sabe cuanto quiere de allá... —Esa mujer—les dije,—evo,cará los espíritus de vuestras hijas y ellas nos dirán si pueden volver á este mundo. Y fuimos; Angelina les habló con toda su alma, porque esa mujer no se sabe los convencidos que ha hecho. Los espíritus de las niñas nos di- jeron que no les lloraran, que necesitaban morir envenenadas y murie- ron, para que sus padres á la par sufrieran el dolor de su muerte, y la anciana vecina muriera en un calabozo, pero que la mayor no había cumplido su rnisión y podia volver á encarnar en una hija que nacerla de su madre y que desearla le pusieran su mismo nombre, Carmen. —¿Y nacerla otra vez la niña, no es verdad mamaica? porque Ange- lina no miente.. —No, hijo mió, no ihiente, porque como velos espíritus, cuando llega uno que la quiere engañar lo aleja de su lado. ¡No mintió, no! Hoy tiene mi prima otra hija en la que vive el espi- ritu de la mayorcita, mucho más hermosa, aunque los padres la deseaban igual, con el pelo como una endrina y ojos que parecen que hablan y dicen á todo el que la mira: ¡Soy yo que he vuelto otra vez! unas cejas que ni pintadas. Es hermosa y simpática y las vecinas le ponen cruces hechas con cortezas de pan para librarla del mal de ojos. Mis primas siguen visitando á la medium Angelina y le dicen que si hermosa está aquí la mayor encarnada, que más hermoso y feliz se halla el espíritu de ia menor que acompaña á su madre siempre que puede. Les aconseja que se resignen á esa separación, que ya llegará un día en que se vuel- van á reunir y formen otra vez la familia en el espacio, que el amor nunca se olvida ni muere. Y ellos esperan llenos de fe. —Però, ¡qué hermoso es eso madrecica! —exclamó el niño Rafael. Mo- rir no es morir, ¡qué álegria! Es partir á un país bellísimo donde cada uno recibirá su premio ó su castigo. ¡Cómo gozaré naontado á caballo sobre esas hermosas nubes! Pero á Dios ¿cuándo le vemos? —-¡Qué sé yo, hijo mío! Concibo que necesitamos pasar muchas en- carnaciones en este mundo y en otros para poder verle, comprenderle y amarle como se merece y que nuestras obras nos acerquen ó nos alejen deél. —Pues verás que notas traigo este año del Instituto... Y en el latín, que es pesadísimo, me darán un sobresaliente, porque lo que más nos hace sufrir es lo que debemos aceptar con más placer... Esas niñas tan bonitas y tan buenas ¿qué harían para morir asi madrecica? —¡Qué sé yo hijo mío! Matar en otras encarnaciones á sus semejan- tes, ser crueles con el prójimo que se debe amar como á nosotros mismos. 90 LUZ y unión ¡Qué sé yo! Eso quería yo ahora, poder contarte lo que fueron ayer, para que la muerte de esas pobres niñas se grabara en tu memoria y fuera una clara lección para tu adelanto intelectual; Si yo tuviera el talento y el poder de mi querida hermana Amalia, la lección seria completa; pero valgo muy poco para explicar y saber el ayer de los seres. —Si yo soy espiritista, mamá, ¿no sabré qué hicieron esas hermosas niñas para ser castigadas tan duramente? pero si sé que necesito ser bueno para no sufrir como ellas y lo seré. ¿No es verdad, mamaica? —¡Sí lo serás, hijo de mi alma... Sé que lo serás!—dije dejando correr las lágrimas que como rocío del cielo brotaban en abundancia de mis ojos. Margarita. La educación He ahí una misión santa que vienen obligados todos los padres á cumplir, pero son poquísimos los que la acatan; y los más ó la miran con enfriamiento ó educan á sus hijos á gusto de su paladar. Juzgando, pues, el presente por lo general, vemos al militar que nutre en sus hijos el deseo déla guerra, y casi siempre les habla con lucientes colores de los millones de seres que han perecido en ellas, desde el cuchillo de Marte hasta la fecha; el industrial y el banquero enseñan á los suyos á husmear los negocios lo mismo que la zorra husmea á las gallinas; los de más alto copete, á que sigan el aire de soberbia y de orgullo, y los del estado llano á que, abandonados por ahí, aprendan por si solos los vicios y cuanto malejo haya. Asi es, que siendo impulsa- do al retroceso el ser en la infancia, en el principio de la vida, ¿cómo queremos que sea en la adolescencia?... En mf concepto^ creo que no debe ser el orgullo del padre el que sus hijos perpetúen sus costumbres y pasiones, sino el de que sean, sobre todo, buenos; y para que asi suceda debe, antes de enseñarles algo, ra- ciocinar y consultar con esa virtud que se distribuye en todos, denomi- nada «conciencia». Ella, sin duda, nos diria qüe al niño, hasta antes de enseñarle la urbanidad y cortesia, se le debe despertar el sentido moral hasta lo máximo: ella, sin duda, nos trazaría el mejor camino que debe seguir. Y si asi se hiciera, en verdad os digo, que el mundo caminaria más deprisa hacia la perfección y desaparecerían en gran número los delitos que á diario se cometen. • Emilio Botella Pírez. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 91 Comunicaciones El Espiritismo, que desde hace multitud de años se está dando á conocer de una ó de otra forma, necesita indispensablemente ir unido, en sus manifestaciones á la marcha progresiva de las criaturas carnales. Es decir, se procura que lo vayan entendiendo; y hoy de una forma, mañana de otra diferente, avanza á medida que el hombre lo hace. Todas las Religiones, á pesar de haber sido necesarias en realidad para la grande obra, tendrán que ir cediendo el puesto á la única y Universal que ha de ser la que nos ocupa; y éstas irán desapareciendo una tras otra, porque, desde hace tiempo, en muchas se ha terminado su misión. Ya se hallan en muchos puntos del globo carcomidos sus cimientos; bien se nota la inseguridad de sus fortalezas; así había de suceder y así sucederá. Esta nueva Religión que por muchos ha de ser temida, por la mayoría será bien recibida; y aquellos que la teman, ya tendrán que sujetarse á la-imperiosa ley de la justicia. La Religión espiritual es la más dura y es la más dulce; y como en ella no existen componedores que faciliten el perdón de las culpas cometidas, los no bue- nos no la recibirán gustosos; pero los que no temen grandes penas la recibirán con los brazos abiertos, porque cada uno se apropiará de lo que en justicia le corresponda. Con esta Religión el hombre habrá de ser bueno; unos por su propia conve- niencia, y otros que, siendo buenos en sí, harán el bien por el goce satisfecho del bien que realizan; y el mundo entonces, cuando-esta Religión se comprenda y se generalice, será una morada de la dicha relativa y perderá la designación con que hasta hoy.se la conoce de «El gran valle de lágrimas». Todos los adelantos en los ramos del saber humano, son debidos á la ayuda que los hermanos espirituales prestamos á los carnales; y lo hacemos así, no sólo por el bien general de los de abajo, sino que también á nosotros nos alcanza. Un Espíritu. 92 LUZ Y UNIÓN Una explicación según ia teoría del Ociütismo De la Nada á la Nada Según la teoría del Ocultismo, la Nada vuelve á la Nada; que nada existe, no, significan estas palabras; que fuimos formados, es decir, nuestros espíritus salieron de átomos, moléculas, de un polvo imperceptible, y que después de evo- lucionar en las diferentes esferas, volvemos al principio, igual como salió nues- tro espíritu al principio, y como el espíritu no tiene fin, esto significa que somos Nada y á la Nada volvemos. Es un misterio insondable que realmente el cerebro trabaja para llegar á darse cuenta cabal de "tan gran misterio sobrenatural, como dicen en este momento sabios filósofos que escuchan; esta formación de este espíritu que es donde ha nacido esta fuerza y que es la ciencia poderosa que todos estrechan, tratan de profundizarla y llegar al convencimiento de ella. Lie- gará al fin el día en que alcancemos la cima; pero tenemos tantas dudas, que, si recibimos pruebas que tenemos un espíritu y cómo fué su principio, no nos expli- camos cómo teniendo la materia podemos volver á evolucionar para volver á pasar por las diferentes transformaciones; esto lo aseguran y lo prueban muchos otros sabios, mientras hay otros que dudan de todo. Nadie quiere convencerse de que la muerte es aparente fórmula; ésta es la principal duda de toda la hu- manidad materializada, no así de nosotros , que ya hemos pasado por el fluido etéreo y nos damos cuenta de ello, y hemos evolucionado y conocemos lo real y verdadero de cuanto existe en el Universo y en el espacio infinito. Ustedes bien saben que los médicos son los que menos creen que hay espí- ritu; ellos estudian la materia, el cuerpo, los órganos; estudian la cirugía, hacen sus operaciones sin dar con él; son inteligencias excepcionales los que llegan á comprender la ciencia de la medicina; creen que con estudiar los órganos es suficiente y les falta lo principal, la base; de ahí viene que la ciencia mé- dica está á obscuras; sin embargo, en algunas ocasiones ellos han hecho experi- mentos con algunos enfermos, casos de sugestiones, ¿y por qué no lo hacen con los sanos? Los médicos todos creen que el sonambulismo y varios fenómenos que se producen en algunas personas, son enfermedades que hay que curarlas; pero no se ha visto un caso que ellos curen y se den cuenta de éste. r Como ustedes ya están penetrados en algo de esta ciencia, no sé por qué le llaman Ciencia Oculta; no es oculta, pues está propagada por todo el mundo, y al mismo tiempo ya hay pruebas evidentes de los casos comprobados de que ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 93 existe un espíritu que se transforma y evoluciona y que no tiene principio ni fin," y que todos saben que la muerte es fórmula para renacer á la vida. ¿Ponqué, entonces, le llaman Ciencia del Ocultismo, al principio, ahora, siglos pasados? Pero hoy no debemos llamarle sino Ciencia moderna del espíritu- y transmisión del pensamiento, probado científicamente; día llegará que todo esto se haga en todas partes; pero siempre habrán espíritus como hoy, unos su- periores, elevados, que llegan hasta lo infinito y lo comprenden todo, y los espí- ritus inferiores que siempre han existido; éstos no están llamados á estas ciencias. Se publicará luego un libro del Espiritismo Moderno, ó transmisión del pen- samiento por medio de la telegrafía sin hilos, probando que dos espíritus se comu- nrcan con la.mayor facilidad. Livio. Chile-Valparaiso. A cada uno según sus obras Uo esperéis cobrar el jornal que no está devengado... Si al creer que con súplicas solamente se ablanda el amor del Padre y qüe- branta su ley para daros recornpensas inmerecidas, estáis lamentablemente en un error, del que debéis salir ayudados por el escalpelo de la razón y de la ló- gica deductiva, dentro de un sano criterio, eliminando todo género de paradojas malsonantes y procurando que la práctica reemplace á la teoría; mucho leer y mucho hablar y poca práctica resulta estéril y se contradice; porque se cansa el organismo inútilmente. Es, pues, necesario tener en cuenta lo que dejo dicho si algo bueno esperáis hacer para recoger el fruto más tarde, para que podáis cobrar el jornal que sin trabajo no se consigue, es decir, para irse elevando de la animalidad hacia la perfección del espíritu, es decir, en pos de existencias felices tanto en uno como en otros planetas. Como no ignorarás, pudiera significar; pero no lo hago, pues por lo que res- pecta á ambos extremos, moral y material, con harta frecuencia nos hemos diri- gido á unos y á otros y el resultado es el mismo. Así generalizo la cosa y que cada uno tome lo que mejor le cuadre. Un Espíritu. Aznalcollar. 94 LUZ Y UNIÓN Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones Cerrada ya esta suscripciórij hemos recibido de nuestro queridísimo hermano D. Faustino Serio, la siguiente lista de donantes y la cantidad que en ella se in- dica que repartiremos entre las familias más necesitadas. Damos á nuestros buenos amigos donantes las más expresivas gracias por la generosidad con que han acudido en alivio de tanto necesitado y las damos espe- cialmente al Sr. Serio por el interés con que ha trabajado este asunto, interés que le acredita de gran filántropo y buen espiritista. CENTRO ESPIRITISTA «AMOR Y LUZ)»-Vijarü-Holgüin-Cuba Suscripción á favor de las víctimas por las inundaciones de Málaga y Cata- luna en Septiembre y Octubre últimos, llevada á cabo por el Presidente de dicho Centro Ú. Juan Bautista Sierra y otros socios del mismo, cuyo re- sultado es el siguiente: Por la sociedad del Centro, 15 ptas.—J. B. Sierra, 28'75.—S. Qchoa, 2'50. —M. Rodríguez, 2'50.—M. Avila, 2'50.—A. Avila, 2'50.—J. Almanares, 2'50.— M. Mapínez, 0'50.—C. González, 0'50.—P. Avila, 1.—Total, 58'25 ptas. Del Barrio de las Viajacas: J. Cedeno, 3 ptas.—P. Silva, 5.—E. Cedeño, 1. —M. Almansa, 1.—J. Ricardo, 1.—Obdulia Sánchez, 1.—Total, 10 ptas. De Tacámara: Juan Hernández, 5 ptas.—j. M.^ Teruel, 4.—Total, Optas. Sitio de la Caridad: Obdulio Sánchez, 2 ptas. Resumen de la Cuenta ■ Cuya relación que autorizo, confieso ser fiel en todos sus departamentos, cuyos antecedentes obran en mi poder. Holguin 14 de Febrero de 1908.—El Corresponsal de Luz y Unión, Faus- tino Serio. Por el Centro «Amor y Luz», de Vijarú 58'25 ptas. Del Barrio de las Viajacas. ......... 10 » De Tacámara. 9 - » Sitio de la Caridad ; . . 2 » Total. 79'25 ptas. Cange: 5 % de giro. .... 4 ptas. Correo....... 0'25 » Suman 4'25 » Líquido á percibir 75 ptas. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 95 Notas bibliográficas Profissao de fe , por Gustavo Macedo. En esta obra expone su autor la evolución porque ha pasado desde que entró como novicio en un convento hasta salir de la religión católica con un bagaje de dudas y vacilaciones en su fe; más tarde ingresó en el protestantismo sin hallar tampoco en él la calma en su atri- bulado corazón, hasta que habiéndole hablado del Espiritismo pudo asistir á alguna de las sesiones de la Federación Espirita Brasileña y logró convencerse de la realidad del Espiritismo, á cuyo estudio se dedicó con ahinco, logrando con ello reavivar la fe perdida. La obra de Macedo es obra de propaganda llamada á obtener un gran éxito. i'f' ^ El Cuarto Reino de la Naturaleza , por Natalia Urzda, vda. de González, Santiago de Chile. En esta bellísima obra se estudian con gran detenimiento la creación, la vida y el alma y de este estudio saca su autora la necesidad de proceder á clasificar lo existente en cuatro reinos en vez de los tres en que hasta ahora ha estado dividido; de esta nueva clasificación resultarían, pues, el reino mineral, el vegetal, el animal y el humano. Es ésta una obra de verdadero estudio, por la que felicitamos á su autora. La Evolución de la Paz , por Manuel Navarro Murillo. En este interesante folleto su autor expone sus anhelos pacifistas en relación con el Espiritisrno. Es este nuevo folleto una piedra más colocada en el grandioso edificio paci- fista que ha de cobijar un día á la humanidad entera. " , La obra que con tanto talento persigue el Sr. Murillo desde las columnas de su Revista La Evolución y la publicación continua y metódica de esta clase de folletos, debe merecer los plácemes de todos los espiritistas, y nosotros, por nuestra parte, se los damos sinceramente. Movimiento espiritista La mansedumbre católica.—Nos escriben de Reíllo que habiendo desen- carnado la niña Leontina Flerraiz, de cuyo bautizo civil nos hicimos eco en estas columnas, tuvo que ser enterrada en un campo, por no existir cementerio civil en dicha población y oponerse el vecindario, fanatizado, á que se levante á pesar de que la ley lo ordena. Llamamos sobre ello la atención del Gobierno á fin de que obligue á las auto- ridades de aquel pobre pueblo á que cumplan las leyes de la nación, pues no creemos que sea tolerable el que se den tales espectáculos en una nación que se precia de civilizada. Si el vecindario de Reíllo olvida su cualidad de cristiano, que emigre al Riff, en donde podrá dar expansión á los instintos de salvaje de que ha dado prue- bas en esta ocasión. 96 LUZ Y UNIÓN El cádáver de la nina Leontina no debe permanecer ni un día más expuesto á ser devorado por los perros si el Gobierno es Gobierno, de lo contrario demos- trará este último que las leyes de la nación dejan de cumplirse cuando unOs cuantos desequilibrados lo quieren, y esto sería sentar malos precedentes, seño- res,ministros. * ■ ^ • Nuevo Centro .—Según nos participan en atento oficio, fechado en 20 de Febrero último, se" constituyó en Isla Cristina, el día 6 de Septiembre del año anterior al presente, un nuevo Centro titulado «Unión Paz y Caridad», siendo elegidos para formar su Junta Directiva los.señores siguientes: Presidente^ D. Manuel López García; "Vicepresidente, D. Francisco Gon- zález Gómez; Secretario, D. Manuel Alarcón Martín; Vicesecretario, D. Joaquín Sánchez Escudero; Tesorera, D.'' Josefa Aguilera Nieve y Vocales, D. Juan Pliego Moreno, D. Francisco Arbucises Temorano, D. José Clement García y D.® María López García. Agradecemos á la nueva Junta el cariñoso saludo que nos envía y nos hace- mos eco del que por nuestro conducto envía á todos los espiritistas españoles y extranjeros. ;}í Nuevo colega .—Hemos recibido el primer número-de la Revista Reden- ción, que acaba de ver la luz en la Habana, bajo la inteligente dire.cción de nuestro muy querido amigo D. Doroteo Valle y teniendo por administrador á nuestro no menos querido amigo D. Julio Cuevas, á quienes felicitarnos caluro- sámente por su iniciativa, que ha de resultar provechosísima para el ideal espí- rità en Cuba. Deseamos al nuevo colega muchos años de vida.' X . de- ❖ ííJ Fiesta infantil .—El Centro «Esperanza Cristiana», de la barriada de San Martín, celebró, una fiesta infantil, que, según nos dijeron, obtuvo un feliz éxito. El salón, convertido en jardín, presentaba magnífico aspecto. Felicitamos á los organizadores de este simpático acto y les deseamos igual éxito en cuantos realicen. • , - ííi Acto civil .—El día 25 de Febrero último se unieron en matrimonio nuestros buenos amigos y correligionarios D. Pedro Roca y D.® Ignacia Farrés, prescin- diendo para dicho acto de toda intervención eclesiástica. Felicitamos á nuestros jóvenes amigos por la entereza que han demostrado en este solemne acto, á la vez que les deseamos una eterna luna de miel. ❖ Errajas.—Según nos manifiesta nuestro querido amigo y colaborador don Faustino Ysona; se deslizaron dos erratas en la biografía que de él publicamos, una es respecto á su edad, pues sólo cuenta 62 años, y la otra es de su pueblo natal, que es Benimodo en vez de Benicarló. Queda complacido nuestro buen amigo. BIBLIOTECA UNIVERSAL OliUAS PUBLICADAS ANIMISMO Y ESPIRITISMO por ALEJAKDBO AKSAKOE' LA VIDA DE ULTRATUMBA (LA SURVIE) por Mme. RUFIKA ÀOEGGEKATH Cada obra forma dos voluminosos tomos en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada uno 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. Eü ñRTE DE CDñOriETIZñR por CH. LAPOKTAIKB Obra clásica de magnetismo. Un volumen de 448 págs. en 4." mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, 7*50 ptas.—En rústica, 6 ptas. EK PUBLICACIÓN AL PAÍS DE LAS SOMBRAS por E. D'ESPÉBANCE Se publica por cuadernos semanales de á 32 páginas al precio de 20 cén« timos en España y 25 céntimos en el Extranjero.—Pago adelantado. CORRESPONDENCIA iSres. ISascriptores qne han satisfecho la suscripción de 1907 J. Ll.—Molinos de Levante- C. G.—Ponce (P. Rico) L.^. D.—Cienfuegos D. D.—Yaguajay (Cuba) A. v. —Id. id. J. T.—Iznojar P. L,—Ponce (P. Rico) J. S. G.—Laguna del T. J. F. C.-Cruces (Cuba) Sres. 8nscriptores qne han satisfecho la suscripción de 1908 P. C.—Zaragoza C. B. - Ceuta J. C.—Sabadell F. R.—Arenas C. Y.-Cádiz J. C.-Id. J B.—Alicante M. P.-Bell Lloch V. P.-Id. F. C.—Id. J. L.—Lorca (Murcia) W. de la v.—Id. P. F.-Id. M. M. G.—Almería T. O.-Id. J. G.-Id. M. M.—Santa Pola R. D.—Id. C. G.—Id. A. A.—Id. R. B.-Id. J. J. C.-Id. A. S.—M.inaos 'Brasil) Y. J -Id. T. J.—Id. C. D. - Mula (Murcia) P. M.-Id. J. R. L.-Id. J. Ll.—Barcelona A. F.-Id. M. R —Id. J. P.—Id. A. B.—Id. L. A. R.—Eyora (Portugal) P. E.-Madrid V. D.-Id. ■P.-'C.—San Martin J, C. P.—Badalona M. v.— Id. M. R. F.—Valladolid D. D. - Barcelona L. F.-Id. C. S. de M.—Ferrol A. v.—Sabadell Centro «Aurora»—Id. J. C.—Sabadell ■ M. S,—Id. J. G.—La Sellera (Gerona.) F. Y.—Jaén C. S.-Id. (Alcanza al 16 de Enero de 1908) Lá Administración. Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionar con el fjST^ AEspiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, I con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la ^ protección de sus guías espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 26 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRtPCIÓN 1 pesetas Por un año. Extraujero 12 » Número suelto, í'50 » CPAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rue- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certiñcado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos países cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los países en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. — Barcelona Ohra de regalo para el presente año: Elementos de Una Nueva Ciencia, por Mariano Ruth Siuué. Un tomo'en 4.° de 808 páginas, es- meradamente impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118.—Barcelona DIRECTDIÏ REDACTOR.JEF ABRIL DE 1908 SIJMABIO: D. B. Ballesteros.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Españo- la».—Odio y amor, por D." Amalia Domingo Soler.—Sigamos estudiando, por D. Be- nito Rodríguez.—Diálogos espiritistas, porSpero.—Comunicación obtenida en el Gen- tro «Fraternidad», de Sabadell.—¡Luz!..., por D. Emilio Márquez.—Meditación, por D. Francisco Rios.—¡Los negreros!, por D.® Amalia Domingo Soler.—La extraña his- toria del singular hallazgo de Saint-Graal.—Los sacerdotes católicos piden casarse, por D. Salvador Pons y Torres.—Dios ó el Diablo, por Un colombiano.—Notas biblio- gráficas.—Necrologías. Corresponsales Administrativos Mójico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4." de Nicolás Bravo, 19, DRIZABA (Veracruz). Pnerto-Kico.—Faustino Ysona, CAYEY;—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE.—Francisca Suárez, Méndez Vigo, MAYAGUEZ. Caba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO —Delfín Roig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 34, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN —Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 9 1, CIENFUEGOS.—Arman- do I Raggi, Apartado 17, CAIBARIEN —D.'' Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. Kepábiica ¡Luz!... Tiempo es ya sobrado de que la luz se haga y no permanezca más oculta debajo del almud convencional de cada individuo ni de grupos aislados. La luz ha de alumbrar á todos y para ello hay que romper las pantallas que la ocultan; pantallas que pone por delante el interés de cada faltando á la máxima ó concepto moral de todos uno para uno y .vice-versa. Pues, por encima del interés individual está el interés colee- tivo ya sea material ó moral. Cada individuo está llamado á crearse un medio ambiente apropiado á su grado de progreso por la atmósfera que respira; por ejemplo, un beodo en su centro desenvolvente y. con la que vive (muriendo), es com- pletamente dañina, asñxiante para el que no lo es; asi, pues, según el grado de un progreso de cada individuo, así igualmente corresponde medio ambiente, pero esto no significa independencia absoluta, sino re- lativa y sin menoscabo del interés colectivo como única aspiración su- blime necesaria al bien común, y progreso colectivo también. y En teoría todas las iniciativas y proyectos son hermosos y laudables,^ pero en tocando á la práctica todo se desvanece como caslillo de espuma 116 luz y unión y es por el excesivo egoísmo individual reinante que mata las aspirado- nes más elevadas. Tendremos en cuenta que hay ciertos individuos pre- parados para llevar á la práctica un régimen en concordancia con lo que ha de ser la sociedad futura, ¡pero son tan pocos!... que éstos se ven en el imposible de practicar... pero no por esto dejan de ser lo que son, espíritus luminosos... Y volviendo sobre el tema anterior diré que en la parte ignorante que esta confiesa en la parte científica de la que espera su radiación para ver el camino que debe seguir sin mayores obstáculos, tiene á ésta como á una madre cariñosa que presta sus caricias sin fines egoístas y sólo por deber y amor á sus hijos. Asi es, en efecto, pero estando la cien- cía en manos de los hombres ó parte ilustrada, á los hombres toca hacer de ella un buen uso en beneficio de todos y muy especialmente de la parte ignorante. En resumen: que el egoísmo no nos conduzca al terreno de nuestro interés personal y si al terreno del interés general, si no hemos de re- tardar la obra. Sabemos desde luego que cada uno se redime á sí mismo, pues, si se empeña en permanecer á obscuras, por muy clara que sea la luz y por mucho que se esfuercen en mostrársela él no lo verá; sin embargo, atendamos al espíritu antes que á la letra por ser aquél de más vital importancia para los fines que nos proponemos. Y con desinterés y altruismo pidamos luz los ignoros y dénla los científicos que son los llamados á disipar las tinieblas. Que no olviden éstos sus necesidades es lógico, pero que tengan en cuenta el interés moral y material común ó colectivo es muy preciso; en tanto yo, lleno de fe y energía, pido ¡luz!... ¡muchaluz!... Emilio Márquez. Aznalcollar. Un luchador más .—En Yaguajay (Cuba), acaba de reorganizarse el Centro «Monumento Espiritista» eligiendo su nueva Junta Directiva compuesta de los señores D. Antonio Peña Aguilera, Presidente; D. Antonio Tamayo Ricardo, Vicepresidente; D. Abelgrdo Díaz Robledo, Secretario; D. Juan José Bermúdez, Vicesecretario; D. Justo Bejarano Martínez, Bibliotecario; D.José SuárezMon- tero, Tesorero; D. Simón Almaguer Bejarano, Administrador. Al felicitar afectuosamente á los individuos de tan simpático Centro y á los dignos miembros que componen su Junta Directiva por su nueva reorganización, les hacemos presente nuestra profunda gratitud por el cariñoso saludo que han enviado á todos los Centros de la «Liga», en nombre de los cuales les damos las más expresivas gracias á la vez que les testimoniamos nuestros más vivos deseos de que vean realizados los propósitos que les animan. Adelante, hermanos, sólo los que luchan son los que vencerán. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 117 Meditación Pensativo estaba un día de que el humano saber meditando en mi existencia, pueda á nadie responder • 3? con profunda insistencia de una manera concreta, yo solo entre mí decía': á dónde estará la meta ¿Será una vana porfía y el principio de su sér. pensar en el porvenir? »Con tus razones indagas ¿Quién me podrá definir demostrando buen sentido. este grandioso problema? No sabes porque has nacido ¿Está en lo cierto este tema y porque en la tierra vagas. después de muerto vivir? Es justo que satisfagas ¿Por qué nací? ¿por qué sigo ese natural deseo, encadenado á mi pena? aunque yo difícil veo ¿por qué sufro la condena que me puedas comprender, de interminable castigo? pero cumpliré un deber ¿Por qué he de llevar conmigo que de justicia lo creo. tan constante sufrimiento? »Las penas y el sufrimiento ¿por qué no ha de haber contento que por desgracia lamentas para este pobre mortal? es un legajo de cuentas ¿Por qué esta lucha fatal? que pagas á un mil por ciento, ¿por qué este agudo tormento? No hay nada sin fundamento, ¿Podrá haber en este mundo no hay condena sin delito; quién me dé una explicación, por eso todo proscrito, ó alguna satisfacción desde el mendigo hasta el Rey, (de lo que en mis quejas fundo? ha de cumplir con la ley ¿Habrá algún sabio profundo que rige en el infinito. que me quiera analizar, »Que no te apure el tormento y claramente explicar de que tu cuerpo sucumba, el por qué de mi existencia? que en el umbral de la tumba ¿Me responderá la ciencia? está el mejor nacimiento. ¿podrá alguno contestar? No des valor al momento —«No; (dijo una voz sonora que aquí vienes á sufrir, que de lejos percibí). confórmate con (fecir »No analizan eso aquí; que te consuela el saber esa ciencia, aquí se ignora. que allá morir es nacer, Aun no es llegada la hora y aquí nacer... es morir-». F rancisco R íos. Velez-Málaga. 118 LUZ Y UNIÓN ¡Los negreros! I Sigo recibiendo sin interrupción cartas de espiritistas con- tándome tristes historias, suplicándome que pregunte á mis buenos amigos del espacio el por qué de tantos dolores, la causa de tantos sufrimientos. Como en este mundo no es posible obrar á gusto de todos, mientras los unos se consuelan con mis sencillos escritos y re- conocen la justicia de Dios en todos los graves accidentes de la vida, otros tachan mis narraciones de cuentos más ó menos ve- rídicos, y á veces me quedo indecisa y perpleja, sin saber si atender á las preguntas de los que sufren 6 desoír sus ruegos y súplicas; pero hay cartas tan conmovedoras, hay relatos tan tristes y tan dolorosos, que olvido las críticas terrenales y pro- curo consolar á los que lloran, ya que yo, por esta vez, no he aspirado á triunfos académicos, ni á figurar entre los escritores de nombradla; no he querido ser más que cronista de los po- bres, consolando á los desgraciados en sus multiples agonías. Hace pocos días recibí una carta de un espiritista, el cual me contaba «que en Septiembre último un niño de cuatro años, que era el encanto de su rnadre y de su abuela, después de me- rendar alegremente se fué con otros niños á jugar á la orilla del mar, y corriendo y saltando se cayó en el momento que una ola enorme arrastró al niño al agua, y el inocente murió aho- gado, y cuando su madre y su abuela acudieron al lugar de la catástrofe, aunque prestaron al niño todos los auxilios que se prestan á los ahogados, todo fué inútil, y las dos mujeres están sin consuelo desde entonces, y la abuela, en particular, domi- nada por una tristeza inmensa, no cesa de llorar y de supli- carme que te escriba y que te cuente lo sucedido para saber, si es posible, por qué un niño tan bueno ha muerto tan desgra- ciadamente; y^las dos mujeres lloran sin consuelo y me pre- guntan continuamente: «¿Qué ha dicho Amalia?...» »Yo bien sé que te asedian á preguntas; pero el dolor de estas infelices es tan verdadero, que te pido un consuelo para estas dos Magdalenas inconsolables, que no viven ni sosie- gan, siempre pensando en lo mismo, porque su niño ha tenido que morir así». ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 119 No hay nada más elocuente que el lenguaje de la verdad; así es que comprendiendo y compadeciendo profundamente el dolor de esas dos pobres mujeres, pregunté al guía de mis tra- bajos sobre la temprana muerte del pobre pequeñuelo, y obtuve la siguiente comunicación: II «No hay efecto sin causa; y causa poderosa tiene el episodio á que te refieres. El dolor de esas dos mujeres atribuladas es tan justo como verdadero. ¡Qué saben ellas de su vida de ayer! Ellas no ven ahora más que el epílogo de una historia de la cual aun no habían leído más que el título; pero esa historia, que no ha tenido páginas en la época presente, tiene un pró- logo dolorosísimo, y á ese prólogo corresponde ese epílogo. El niño inofensivo de hoy, fué ayer un capitán de un buque ne- grero, del cual era á la vez propietario. Entre sus tripulantes figuraban en primera línea José y Juan, intrépidos marineros que querían ciegamente á su capitán y le obedecían gustosos en todas las infamias que aquél ordenaba, que eran muchas, pues, para burlar la persecución de la justicia, cuando tenía noticias que le arrebatarían la carga de carne humana que llevaba aba- rrotada en sus bodegas, ayudado de José y de Juan, tiraban al agua á los negros, con una prontitud y agilidad que pronto quedaba el barco sin cargamento, y llegaban al puerto tan satis- fechos, después de haber asesinado á centenares de infelices. José y Juan han vuelto á la tierra, unidos á su antiguo capitán, que es el niño que ha muerto ahogado, y la madre y la abuela son sus cómplices de ayer. El que á tantos seres indefensos arrojó al mar, es muy justo que muera del modo que ha muerto y justo es también que los que le ayudaron en su obra nefanda lloren sin consuelo, que los que no tienen corazón, cuando lie- gan á tenerlo, han de sentir para comenzar su regeneración.— Adiós». III Dice muy bien el espíritu, sólo el dolor, pero el dolor in- menso, el dolor que nos lleva á la desesperación, es el que des- pierta nuestro sentimiento, es el que arranca la venda de nues- tros ojos espirituales, es el que nos dice: Levántate y anda, y cual nuevo Lázaro resucita; por eso el Espiritismo es el gran 120 luz y unión regenerador de la humanidad, porque abate nuestro orgullo y nos presenta nuestra hoja de servicios, en la cual encontramos notas que nos avergüenzan, porque vemos que hemos sido ver- daderos sepulcros blanqueados; mucha belleza por fuera y mu- cha podredumbre por dentro; muchos alardes de generosidad, de abnegación, de sacrificios, y en el fondo el más refinado egoísmo, atendieñdo únicamente al lucro personal, á la satis- facción de nuestros apetitos y á crearnos una atmósfera de ad- miración y de respeto por nuestras excepcionales virtudes; y toda la farsa se descubre cuando los espíritus levantan una punta del velo que cubre nuestro pasado, y entonces, ¡ah! en- tonces caen los ídolos de barro de sus vacilantes pedestales y los altares de la mentira se quedan sin sus santos de cartón revestidos de oropel, que pierden su brillo ante el sol de la verdad. No hay escritores, no hay poetas, no hay filósofos bastantes en la tierra para cantar las excelencias del Espiritismo, para hacer historia de sus descubrimientos, para demostrar lo que valen y lo que enseñan las comunicaciones de los espíritus. Bendita sea la hora que los espíritus se manifestaron, por- que ellos nos dicen que Dios es grande, que Dios es justo, que el pecador no se pierde, sino que, muy al contrario, dispone de tiempo suficiente para engrandecerse, porque el progreso de los espíritus es indefinido. Amalia Domingo Soler. La extraña historia del singular hallazgo de Saint-Graal Una tarde del mes de Julio último, en casa de un alto dignatario de la iglesia anglicana en Londres, tuvo lugar una reunión muy interesante. Cuarenta perso- nas escogidas por el dueño de la casa entre las más altas ilustraciones de la po- lítica, de la ciencia y del clero, estaban presentes, entre las cuales podemos citar el duque de Newcastle, lord Halifax, lord Hugh Cecil, el conde Brown- low, S. E., Witelaw Reid, embajador de los Estados Unidos en Londres, el Re- verendo R.-J. Campbell, el Sr. John Evans, la Sra. Myers, la viuda del sabio que empleó la más grande parte de su vida en el estudio de los fenómenos psíquicos, y en fin, los Sres. Oliver Lodge y William Crookes. El Sr. Tudor Pole, un caballero de unos treinta años, alto, sano y vigoroso, tipo perfecto de britigher que sobre el campo de cricket ha preparado sus mus- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 121 culos y sus nervios para triunfar en la batalla de la vida, habla durante más de dos horas delante de esta ilustrada asamblea. El Sr. Pole es un business-man inteligente y honrado que en Bristol dirige una gran casa de importación de granos. Hasta el momento que le sucedieron las increíbles aventuras que nos- otros referimos, creía no tener otra ocupación que la de los negocios, y nunca había oído hablar de telepatía, de ocultismo ni de otras hechicerías de esta clase. En un ángulo de la habitación donde está reunida la asamblea, hay un peque- ño cofre con las paredes de cristal, al cual se dirigen todas las miradas de los asistentes. Este cofrecito encierra un vaso de cristal, de forma absolutamente insólita, como un cáliz de Eucaristía, pero más bajo y más ancho, de color verde azul y de bonitos reflejos. Se diría que dentro de la delgada pared del vaso un artista ha introducido una casi imperceptible hoja de plata, que brilla dulcemente á la luz de las lámparas. Los coleccionistas presentes que han visto y tocado al- gunos miles de vasos en las casas de París y Londres, se declaran incapaces de definir la exacta identidad, procedencia y época del vaso en cuestión. Alguno lo ha hecho remontar á la civilización fenicia, otro dice que la nobleza de los arcos de sus líneas no puede atribuirse al más viejo período de la cristalería veneciana; Sin embargo, todo el mundo está de acuerdo para reconocer la gracia inefable del misterioso cáliz. Este cáliz es el que el Sr. Pole ha milagrosamente encontrado, obedeciendo á un claro y reiterado presentimiento interior. Cierta tarde, al principio del año 1902, el Sr. Pole salió de su casa con la cabeza llena.de cálculos y de cifras, cuando una fuerza interna, indefinible, le detiene durante algún rato, inmóvil en la calle, en este corto intervalo, durante el cual le parece que todas sus facultades estáft suspendidas, «recibe la impresión» de que muy cerca de Glastonbury Abbey está enterrada una reliquia de naturaleza sagrada. El comerciante en granos no paró atención en esta curiosa impresión, pero la impresión se reiteró, la pequeña voz continuaba hablando en su cerebro, cada vez más clara, siempre para decirle que fuese á desenterrar la santa reli- quia, enterrada cerca de Glastonbury Abbey. Esta extraña sensación, tuvo su más grande intensidad en el mes de Diciembre último. Durante este mes, en me- dio de las más absorbentes ocupaciones de sus negocios, el místico advertimiento se hacía sentir. La impresión que guardaba, era como si hubiera soñado con los ojos abiertos. Una vez, el sueño fué tan vivo que tomó un verdadero carácter alucinatorio; vió con los ojos del espíritu el sitio, del que se acordó perfectamen- te, donde la reliquia estaba enterrada; era un pequeño arroyo que afluía á un estanque, en una fábrica llamada Bride's Hill, á media milla de distancia de Glas- tonbury Abbey. Cerca de la fuente sombría de donde nacía el arroyo, vió el pe- queño vaso, sepultado en el olvido, el mismo que estaba cuando la reunión, den- tro del cofre. Las numerosas ocupaciones del Sr. Pole, le impidieron ir en busca de la fuen- te y de la reliquia. Tuvo que mandar á su hermana, con dos señoras de'su confianza. Las tres señoras encontraron sin dificultad la fábrica Bride's Hill, el estanque y la fuente. Buscaron en los alrededores de la fuente y encontraron una pequeña cruz, una cadena de oro, un rubí, y debajo de una larga piedra, que le había de- fendido de las humanas miradas, intacto, con los colores del arco-iris, el santo vaso, anunciado por la voz interior. Tal fué su admiración que no osaron llevarse el cáliz; lo cubrieron de nuevo con la piedra y se volvieron á Bristol, con la cruz, la cadena y el rubí. El señor Pole recibía la noticia del descubrimiento del vaso, con una frialdad absoluta, como si hubiera sido la cosa más natural del mundo, y felicitó á las tres señoras por no haber tocado la reliquia de su escondrijo. Todo esto parece ya bastante importante, pero lo maravilloso de la historia, narrada por el Sr. Pole empieza aquí: Cuando encontró el vaso en la fuente de Bride's Hill, el Sr. Pole estaba en 122 LUZ Y UNIÓN relación con el Dr. Qoodchid, de Bath, por haberle encontrado algunas veces en casa de un amigo suyo. En las varias veces que se encontraron los dos señores no hablaron nunca de vasos, ni de voces internas, ni de Glastonbury Abbey. Siendo el Dr. Goodchid un apasionado coleccionador de antigüedades, muy co- nocido, la hermana del Sr. Pole fué un día á su casa y le enseñó el rubí y los otros objetos que había sacado de la fuente. El Dr. Goodchid, miró aquellas reli- quias por espacio de pocos segundos, miró también á la hermana del Sr. Pole, y con una voz en la que se distinguía bien su emoción, dijo:—Fui yo el que dejé estas cosas en la fuente de Bride's Hill, hace ya muchos, años Entonces la her- mana del Sr. Pole describió la forma y colores del cáliz y el Dr. Goodchid reco- noció en él su vaso que había enterrado en Glastonbury en 1898. Asombrado de estas entrañas coincidencias, el'Dr. Goodchid, pidió á la hermana del Sr. Pole que fuese con él á Bath, y le explicó por cuáles romancescas aventuras había él, confiado el vaso precioso al silencio de la fuente de Bride's Hill, junto con el rubí, la cruz y la cadena de oro. Algunos años antes, el Dr. Goodchid, que es muy rico, fué á pasar un invier- no en la «Cote d'Azur». En 1885, un amigo suyo, que- conocía su pasión por la porcelana y vasos artísticos, le advirtió que en la tienda de un taller de Bordi- ghera había visto un vaso que le parecía de algún valor. El Dr. Goodchid, fué al taller, vió el vaso, comprendió que era una cósa muy interesante y lo compró por 150 francos; cuando volvió á Inglaterra lo enseñó á su padre que se lo quedó. Once años habían pasado y el Dr. Goodchid no había pensado más en el vaso de Bordighera, y visitó tranquilamente París donde le pasó un caso de naturaleza psíquica. Un día del mes de Julio del año 1896, al ir á salir de su cuarto del hotel Saint-Petersbourg, cayó en trance; se le apareció una forma y le dijo, que se en- contraba en un gran peligro, que la copa que compró en Bordighera era la copa de que se había servido Jesucristo en la última cena; y que cuando su padre mu- riera debía dejarla en Glastonbury, de donde sería sacada diez años después y llevada por el mundo para la propagación de la fe de Jesucristo. Un año después, en 1897 murió el padre del Dr. Goodchid y envió la copa á su hijo, que no estaba en Inglaterra. Entonces el doctor fué á Glastonbury, y di- rigido por voces interiores, dejó la copa en la fuente de Bride's Hill. En 1900 volvió á Glastonbury, pero ya no la encontró; todos los años volvió á la fuente, pero nunca con mejor éxito, nunca más la vió, ni oyó hablar de ella hasta el mo- mento en que la hermana del Sr. Pole le anunció su descubrimiento. Es preciso decir que la sola persona á quien había comunicado el secreto de la copa era su íntimo amigo Mr. William Sharp, muerto en 1905, lo cual garantiza su discreción. Esta historia, ex'plicada á su ilustre auditorio por el Sr. Pole, se ha publicado en los periódicos de Londres, despertando en el público un interés increible. Mr. William Crookes, se ha encargado de estudiar á fondo esta emocionante serie de fenómenos psíquicos; veremos la explicación que dará de este misterio. No es preciso decir que bajo nuestro punto de vista no costaría mucho saber si la copa encontrada es la tradicional de Saint-Graal, que según la tradición, no es de vidrio, sino que es de esmeralda. Lo que nos debe interesar es el caso de clarividencia ó transmisión de pensamiento, que constituye la base de este fenó- meno. Traducción de Patricio Esteva. (Anuales des Sciences Psfchiques). No exijas agradecimiento de los favores quehayas hecho, que por mucho que hagas no haces más que tu deber; que si te lo pagan los hombres ya no debe pa- gártelo Dios. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA \ 123 Los sacerdotes católicos piden casarse «Vale más casarse que quemarse». (San Pablo). Ed varios periódicos de España y Manila hemos leído la noticia de que trescientos sacerdotes italianos han presentado una solicitud ó peti- ción al Papa, suplicando que les conceda licencia para casarse. Hace algunos años que la mayoría de los sacerdotes .en las islas de Sicilia, Córcega, Creta, etc., elevaron igual petición á la Santa Sede, alegando que la prolongada experiencia de los siglos ha demostrado ser el matrir monio el único medio eficaz para remover de la Iglesia los frecuentes escándalos é inmoralidades, provenientes del celibato forzado. También los sacerdotes de varias Diócesis de América del Sur han hecho igual petición repetidas veces, alegando con datos y pruebas que la castidad perfecta y perpetua es un imposible para la mayoría de los sacerdotes, y que esa ley del celibato es un fomento y causa ocasional para la comí- sión de actos pecaminosos contra la naturaleza; hasta el extremo de ha- berse asegurado, ofreciendo pruebas, en un libro dedicado al mismo Papa, que «las grandes Diócesis de los Estados Unidos cuentan veintenas sobre veintenas de sacerdotes dedicados á Venus». (Véase la obra del Padre Jeremías Crowley: La JSscweZa ParrogwiaZ, etc.) Cartas de Roma aseguran, que los P. P. Jesuítas son los que más enérgicamente trabajan para que el Papa no reforme ni modifique la ley de celibato haciendo concesiones al clero, opinando que antes de permi- tir al clero casarse, es preferible tolerar que vivan en concubinato, ó COMO P0EDAN, los sacerdotes que se hallan sin fuerzas para cumplir la ley. Claro es,que con estos rigores, la moralidad pública no queda muy favorecida sino perjudicada. Yo creo sinceramente que esas reiteradas peticiones del clero son la expresión del buen sentido común y de la verdad; y por consiguiente, son la manifestación de la voluntad de Dios, el cual jamás, en parte al- guna de las Sagradas Escrituras, ha prohibido á los sacerdotes casarse, como lo prohibe nuestra Iglesia. Siendo el matrimonio una cosa santa, muy santa, un sacramento de gran santidad, no habia motivos para ser prohibido de un rnodo absoluto á los sacerdotes, quienes siendo hombres, necesitan ese medio de santificación general como los demás hombres. Y así vemos que Jesucristo eligió apóstoles casados; y según casi to- dos los escritores eclesiásticos de los primeros siglos (i, ii y iii) de la Iglesia, todos los apóstoles fueron casados y no Se separaron jamás de sus esposas, las cuales acompañaban á ellos y les prestaban sus cui- dados y servicios. (Véase la «Historia del Celibato eclesiástico»). Siendo el matrimonio un sacramento santísimo, ¿qué motivos podrían tener los apóstoles para separarse de sus esposas y abstenerse del santo uso del matrimonio, instituido y santificado poy Dios mismo? Creo, pues, 124 luz y unión como cierto lo que afirman los santos Padres más antiguos, Orígenes, Tertuliano, Clemente, Ignacio, Damasceno, Eusebio y otros, á saber, que los apóstoles no se apartaron de sus esposas, ni se abstuvieron del recto y santo uso del matrimonio. ¿Cómo es posible admitir que los apóstoles dejaron sus esposas, cuan- do vemos á S. Pablo recomendando que los Diáconos, los Presbíteros y los Obispos sean casados, tengan sus propias esposas, para alejar peli- gros, sospechas y murmuraciones? (1 á Tim., 3, 2, 4, 12. Cor. 1 á 7, 2, 28); cuando manda á los casados que no se separen, porque el matrimo- nio es cosa santísima y honrosa para todos? (Hebr., 1, 8, 4); cuando los cánones apostólicos declaran suspenso ó excomulgado al sacerdote que, con pretextos de santidad, abandona su esposa y familia? Las ventajas del matrimonio de los sacerdotes saltan á la vista de cualquiera que no haya perdido el uso de la razón. Casados los sacerdo- tes, la Iglesia y los pueblos no tendrían que lamentar esos grandes es- cándalos que con alguna frecuencia se ventilan en juzgados y curias episcopales, cuando no son encubiertos y acallados por la influencia, por el dinero, por el miedo ó por una piedad mal entendida de los fieles; como los escándalos que no hace muchos años tuvieron lugar en Vigan, Abra, Narvacan, Bantay, Pozorrubio, Tagudin, etc., etc., con gran deshonra para la Iglesia. Casados los sacerdotes, serviríamos de ejemplo práctico á los jóvenes que por instinto tienden á la vida de libertinaje. El matrimonio de los sacerdotes sería un modelo de perfección cristiana que imitarían los sol- teros, formando familias conforme al plan divino, manifestado por el gran Apóstol cuando dice; «Quiero que los jóvenes y las doncellas sean padres y madres de familia». Casados los sacerdotes, tendríamos en nuestra familia un apoyo na- tural en la triste, espantosa y horrible ancianidad ó vejez y en casos de enfermedad grave. En Filipinas, lo mismo que en España, he conocido á muchos sacerdotes ancianos en el mayor abandono, siendo los mejor atendidos aquellos que podían tener á su lado algún hijo natural; pues sabido es que los parientes colaterales lo que desean, por regla general, es que el viejo se muera pronto, para repartirse la herencia. Esta triste situación de los clérigos justifica y explica el afán de acumular dinero que en muchos suele notarse, para pasar menos mal la vejez solitaria. Libres los sacerdotes para casarse, entrarían en el servicio de la Iglesia personas prominentes de alta ilustración y de superior capacidad literaria, procedentes de las clases superiores, y esto daría grandísimo prestigio y lustre á la Iglesia. Si el Protestantismo ha prosperado y pros- pera tanto en el mundo, contando en su servicio activo innumerables eminencias literarias, es debido á que ha seguido fielmente la regla tra- zada por Jesucristo y seguida por los Apóstoles, de permitir el matrimo- nio á los ministros del Evangelio. Hoy puede afirmarse, que las tres cuartas partes del clero romano proceden de las clases ínfimas y plebe- yas que carecen de prestigio moral, y una gran parte han sido capistas y famulos en Colegios y Seminarios. Y aun así, escasean cada día más y más los aspirantes al sacerdocio, por causa de esa ley insoportable, de ese yugo pesado que el Papa impone á los sacerdotes. ¡A cuántos ilus- trados del pais he oído esta frase, «si la Iglesia permitiese el matrimonio ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 125 á los sacerdotes, como Jesucristo y los Apóstoles lo permitían, yo sería también sacerdote». Si faltan, pues, vocaciones al sacerdocio; si los Obis- pos se ven obligados á recoger infantes y encerrarlos incomunicados con el mundo para conservar en ellos una vocación sugestionada y ficticia, culpa es de esa ley insoportable que no la pueden aceptar los hombres adultos y formados que no poseen un conocimiento completo de los des- tinos y facultades más nobles del hombre. Por estos motivos generales y otros de índole más delicada, -creo que es digna del mayor aplauso la conducta seguida por el Sr. Obispo de la Iglesia Independiente, Máximo Ablipey, concediendo á sus sacerdotes la libertad discrecional de casarse, si creen que asi vivirán más tranquilos y podrán servir mejor á Dios y á la Iglesia, evitando peligros, sospechas y murmuraciones, deslices y escándalos. Desearía que la Iglesia romana, sin reservas y sin restricciones, pro- clamase aquel principio moral de San Pablo: «Vale más casarse que quemarse»,—como lo han proclamado y practicado las Iglesias protes- tantes con excelentes resultados para la moral pública. San Juan Crisóstomo predicaba: «Considero tan santo al matrimonio, que es compatible con todas las funciones del sacerdocio»—y San Ber- nardo decía: «Si quitáis de la Iglesia el matrimonio de los sacerdotes, pronto la veréis llena de adulterios, fornicaciones y todo género de pe- cados». Yo, conocedor del lastimoso estado moral del clero, regular y secu- lar en Filipinas, creo un deber unir mi débil voz á la de los centenares de sacerdotes católicos que piensan con San Pablo, con San Crisóstomo y con San Bernardo; y con ellos deseo y pido que se conceda á todos los ministros de la Iglesia la libertad y derecho natural y divino de casarnos cuando lo creamos conveniente para el mayor servicio de Dios y evitar los peligros de comisión de pecados contrarios á la ley de Dios y á la elevada dignidad de nuestra naturaleza. Queremos sea proclamado el principio moralizador de San Pablo: «Vale más casarse que quemarse» en el fuego de las tentaciones y de las impurezas. Por mi parte, estoy dispuesto á cumplir este precepto de Dios, pasando por encima de las leyes humanas, si las circunstancias me lo exigen. Conviene obedecer primero á Dios que á los hombres. Nuestros reverendos clérigos y frailes, pongan la mano sobre el pecho y teniendo á Dios por testigo, digan si no están conformes con las refle- xiones que anteceden: digan si el matrimonio no seria más tranquiliza- dor para sus conciencias, más moralizador para el pueblo, y más honro- so para la clase sacerdotal, que el estado de celibato perpetuo con las frecuentes quiebras secretas y públicas que suelen acompañarle. Su pro- fundo silencio será la prueba más elocuente de que la doctrina expuesta es la más razonable, más conforme á la voluntad de Dios y á la mora- lidad pública. Oiré con gusto sus reparos y objeciones. Salvador Pons y Torres. Presbítero y Profesor en la Universidad Ilocana. 126 LUZ Y UNIÓN Dios ó el Diablo Es mentira gran Dios cuanto diga Y nos dice que hablaron contigo quien audaz comprenderte pretenda; los farsantes infames que imita ¿quién podrá descifrar el enigma y así tiene el descaro inaudito de tu esencia infinita 3? eterna? de enseñarnos un Dios que se írrita. Tu existencia es verdad evidente Dios mutable que sufre y se indigna que doquiera pregona Natura contrariado en sus sabios designios reflejando tu luz refulgente, por un ángel que lleno de envidia pretender demostr-arla es locura. fué en castigo arrojado al abismo... Que tú existes, el Orbe nos dice Si es posible la envidia en el cielo que no tienes principio ni fin y que un ángel abrigue soberbia que aunque tantas grandezas exhibes con horror de ese cielo reniego la más grande es pequeña ante tí. pues prefiero las penas eternas. Que á tu imagen hiciste á los hombres Si en el cielo los ángeles pecan, dice el teólogo inicuo blasfemo qué haré yo, considero al averno y patrañas sin fin en tu nombre menos cruel descender de la tierra imponernos pretende'en su credo. que al infierno caer desde el cielo. Que á su imagen te pinta es lo cierto Y si ese ángel trocado en demonio con su ira y su cólera atroz es quien hace á los hombres pecar, su miseria y defectos sin cuento ¿hubo acaso otro Diablo más docto ¡cuán sacrilega imagen de Dios! que á Luzbel se atreviese á tentar? Un Colombiano. Notas, bibliográficas L'Année Occuliste et Psychique 1907.— (Primer año) un volumen de 304 páginas, por Pierre Piobb. Editado por H. Daragon, precio 3'50 francos. Esta obra expone imparcialmente todas las observaciones verdaderamente serias, los trabajos científicos y todas las teorías notables qué se han hecho du- rante el año 1907, en el dominio de las ciencias llamadas ocultas ó misteriosas, como son: Astrologia, Alquimia, Simbolismo, Esoterismo, Artes adivinatorias, Profeticismo, Psiquismo, Espiritismo y Magnetismo. Es un resumen de muy alto valor. Señala la orientación que ciertos investi- gadores intentan dar al pensamiento contemporáneo dirigiéndolo hacia un grupo de estudios hasta ahóra desdeñados. Prueba, además, que esta orientación puede ser fecunda en el progreso de toda naturaleza. Encierra, también, varios trabajos tan nuevos, tan atrevidos y tan sorprendentes, que obliga á calificarlos de descu- brimientos. Todos querrán leer este libro; el curioso podrá instruirse sobre un movimien- to científico que nadie está en derecho de ignorar, y el sabio encontrará en él importantes documentos que le ayudarán en sus trabajos ó le guiarán en sus experimentaciones. ❖ Pascual Rossi.—Psicología Colectiva Morbosa.—Dos tomos en 8.° pro- longado, precio 2 ptas. tomo. Editores, Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118, Barcelona. Esta preciosa obra forma parte de la valiosa «Biblioteca de Ciencias Filosó- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 127 ficas y Experimentales» que con tanto acierto vienen publicando los editores Carbonell y Esteva. En ella su autor expone con gran competencia las múltiples morbosidades que presentan las muchedumbres y que algunas veces las llevan á los más altos ejemplos de heroísmo y otras á los más repugnantes crímenes. En el primer tomo de este interesanté y bien documentado libro, el malogrado psicólogo italiano, hace un estudio admirable de la psiquis colectiva morbosa, al señalar, con gran acierto, el mecanismo y las formas elementales de la acción morbígena, trazando con acuciosos rasgos los efectos de la psicosis individual y de las pandemias en el alma de las muchedumbres. Pone al descubierto, con hondo sentido crítico la coexistencia, el tono del tiempo y el motivo dominante en las epidemias, haciendo resaltar el paralelismo entre las causas epidémicas y las epidemias mismas, la equivalencia de éstas y sus clasificaciones, la utilidad que en determinadas ocasiones pueden revestir y las formas, verdaderas y erró- neas en que aparecen. Es admirable la exposición que en su libro hace Rossi de ciertas modalidades epidémicas, como la epidemia religiosa de Calabria y la pandemia, también religiosa en Rusia. El capítulo consagrado á estudiar el delito en la muchedumbre es sorprendente por la profundidad de la investigación y el arte exquisito con que pone de mani- tiesto la composición de la muchedumbre, desintegrando los distintos elementos que contribuyen á fraguarla. Analiza uno á uno los componentes del crimen en la colectividad, los elemen- tos que intervienen en el hecho criminoso, tales como los agitadores, la muche- dumbre criminal, los criminales ingénitos en ella, el acrecentamiento de la idea criminosa, las sugestiones inmediatas y los criminales casuales y pasionales. Examina la ondulación psíquica, las mutaciones en la composición de la muche- dumbre y patentiza los peligros que suponen el alcoholismo, los gritos, cantos y danzas criminales, como elementos propulsores ó coadyuvantes de las fermenta- clones criminógenas, la perturbación y locura criminal, la epidemia criminosa, las depresiones psíquicas, las sugestiones y circunstancias anticriminales, etc. No olvida, sin embargo, Rossi otros fenómenos de índole criminosa, que si bien suelen aflorar en la forma antigua tienen un contenido nuevo. Advierte con saga- cidad extraordinaria la incubación y difusión del crimen en la muchedumbre y su trayectoria, al tratar de penetrar en la complejidad de la vida en la muchedum- bre, los fenómenos de contraste y su proyección en el arte y en la vida. También tiene en cuenta Rossi, en esta primera parte de su substancioso libro, la seriación del fenómeno delictuoso en algunos organismos colectivos como el ejército. Ein el segundo tomo del libro de Rossi se estudian cuestiones de suma entidad, y algunas de ellas no sólo revisten excepcional importancia, sino que también atraen la atención del lector, por sus caracteres de palpitante actualidad. Al estudigr el insigne psicopatólogo de Cosenza, la muchedumbre en el arte, exami- na todos los factores que intervienen en el dinamismo social; señala con perspi- cacia y agilidad las particularidades que ofrecen al investigador el folk lore, las artes plásticas, etc. Los capítulos que dedica Pascual Rossi á examinar y exponer la intervención de la muchedumbre en el arte antiguo, en el medioeval, en el moderno y en el contemporáneo, son notables por la sagacidad y el espíritu crítico que revelan. No lo son menos aquellos en que se consagra á analizar la cornposición de la muchedumbre, las emociones simples, el miedo colectivo, el arte egoárquico, su- perhumano y social y la hiperestesia sensitiva. '' Con acierto pocas veces igualado y con sobriedad digna de encomio, bosqueja Rossi las teorías, los métodos y la finalidad de la educación de la muchedumbre, demostrando.poseer ujia cultura honda y vivida. La Psicología Colectiva Morbosa, && un libro útil y ameno que habrá de ser muy discutido por la intelectualidad española. 128 LUZ Y UNIÓN Necrologías El día 29 del pasado Marzo desencarnó en Almonacid de la Sierra, nuestro querido y amado hermano en creencias y antiguo suscriptor de esta Revista, don Manuel López Com P. El sepelio de sus restos mortales fué puramente civil, prescindiendo en abso- luto de toda intervención católica y concurrieron á él casi la totalidad de los vecinos de aquel pueblo que quisieron demostrar en aquel acto el entrañable afecto que profesaban á nuestro buen hermano y á su apreciada familia. El amigo Sr. López conquistó el afecto de sus conciudadanos con su acendra- do amor á la verdad y á la justicia, su nunca agotado cariño le llevó á ser el consejero de sus semejantes que á él acudían en sus cuitas y en sus divisiones. Amigo de la paz y de la fraternidad, enemigo del retroceso y de la hipocresía, fué siempre un hombre modelo, respetado de grandes y de pequeños, su nombre será recordado por todos los vecinos de su pueblo como un buen ejemplo á seguir y admirar. Acompañamos á su respetable esposa y familia en el sentimiento que la ause'n- ola temporal del sér querido les ha ocasionado y deseamos á éste un feliz viaje por las regiones del infinito rogándole que á través de sus delicias no nos olvide. •i- - f- ^ En el propio día 29 otro buen hermano nos dejó para continuar nueva pere- grinación á través de la infinidad de mundos y de vidas, D. Onofre Viladot, me- dium escribiente por mediación del cual se obtuvieron las tituladas «Cartas de Ultratumba»; desencarnó en Ysona, pueblo de la,provincia de Lérida, en el cual ejercía el cargo de Secretario del Ayuntamiento. Era Viladot un espiritista de los de buena cepa; su gestión en el Ayuntamiento de Ysona deja gratos recuerdos en aquel vecindario del cual, gracias á su probi- dad y á su honradez, se había sabido ganar la simpatía. Conocía el Espiritismo desde hace muchos años, aunque sólo hasta 1902 no se le desarrolló la medium- nidad escribiente y algo más tarde- la parlante, resultando ser un medium de primer orden. Al desencarnar Viladot se lleva nuestro cariño y nosotros le pedimos que desde las regiones donde mora siga alentándonos y ayudándonos en nuestros trabajos como lo hizo durante su estancia en la tierra. D.^ Francisca Reig Hamet, desencarnó en Sabadell el día 11 del pasado mes de Marzo. Espiritista desde muchos años, su muerte fué la del justo y aunque su enfermedad le hizo sufrir bastante, nunca nadie le oyó quejarse de su suerte, siendo un gran consuelo para ella cuando podía ayudar con sus ahorros á los desgraciados. Tenía nuestra hermana aldesencarnar 67 años, siendo su muerte material tan apacible que más bien parecía que se dormía. El día 12 á las cuatro de la tarde y sin intervención alguna por parte del clero se celebró el entierro civil de los restos mortales de nuestra hermana, asistiendo á él Muchas personas que habían conocido á Francisca en vida y que por lo tanto habían podido apreciar las altas prendas de carácter que adornaban á nuestra hermana. En el acto del sepelio pronunciaron breves palabras nuestros hermanos Luis ■ Farrés, del Centro «Fraternidad» y Augusto Vives, de la «Aurora». Salve al espíritu liberto. Liga Espiritista Española JUNTA DIRECTIVA: Presidente, D. Jacinto Esteva Ma- rata.—Vicepresidente, Dr. D. José Ceinbrano.—Secretario, don Agustín Brunet.—Tesorero, D. Santiago Durán.—Revisor de cuentas, D. Sanauel Peremarch.—Contador, D. Alberto Andreu. REVISTA: Director, D. Jacinto Esteva Marata.—Redac- tor-jefe, D." Amalia Domingo Soler.—Administrador, D. San- tiago Durán. A80ClAC10?ÍEi$ EFECTIVAS Luz y Unión (Revista), Ferlandina, 20.—BARCELONA. La Voz de la Verdad (Periódico), Ferlandina, 20.—BARCELONA, «La Buena Nueva», Círculo Espiritista, Plaza del Sol, 5.—BARCELONA (Gracia). «Unión Fraternal Espirita», Sociedad de Estudios Psicológicos, Muralla Santo Domingo, 9.—MANRESA. «La Fraternidad Humana», Centro, San Isidro, 77.—TARRASA. «Círculo Cristiano Espiritista», Democracia, 12, 1.°—LÉRIDA. «La Aurora», Centro Espiritista, calle San Cucufate, 21.—SABADELL. «Unión Fraternal Espirita», Centro, San Francisco, 26.—CAPELLADES. «El Altruismo», Centro Estudios Psicológicos, calle Barcelona, 42.—BADALONA. «El Angel del Bien», Madera, 18 y 20, pral., derecha.—MADRID. «El Renacimiento», Centro Espiritista, Viudas, 7.—AL6ECIRAS. «Justicia y Redención», Grupo Espiritista.—ILERAS (Córdoba). «Constancia», Centro, Pasage del Sargento, 9.—MALAGA. «El Faro de Paz», Centro, Arzobispo Mayoral, 12, 2."—VALENCIA. «La Paz», Centro Espiritista.—MAHÓN. «Constancia», Centro, calle de San Roque, 18.—NOVELDA (Alicante). «Felicidad», Centro.—CANILLAS DE ALBAIDA (Málaga). «Luz y Unión», Centro, Levies, 14.—SEVILLA. «Amor Universal», Farró, 4.—SAN GERVASIO. «Amor y Vida», Tainarit, 161, 2.°—BARCELONA. «La Verdad».-BURJASOT (Valencia). «Esperance», Grupo de propaganda espiritista kardeciana. Rue Donizetti, 4.— PARÍS (Auteil). pJ,STA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la protección de sus guias espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRIPCiÓN l España 7 pesetas Por üD ano. . ( Extranjero 12 » Número suelto 0'50 « (PAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rué- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certificado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de su.s respectivos países cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los países en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. — Barcelona Obra de regalo para el presente año: Elementos de Una Nueva Cienciaj por Mariano Ruth Sinué. Un tomo en 4.° de 808 páginas, es- meradamente impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118.—Barcelona AÑO IX MAYO DE 1908 NÚM. 5 jVuestros Corresponsales Nuestra corresponsal en Río Janeiro es-una de las más del Espiritismo figuras preeminentes en el Brasil. Hija del General D. Eduardo José de ta 27 cuen- años de edad Moraes, y está casada con el ilustre pintor D. Alberto Fué Cardoso. su maestro en Espiritismo el Mariscal de Campo D. Francisco Quadros, director Ewerton de la Escuela Militar del Brasil, profesor de la Escuela técnica Poli- y presidente de la Federación Brasileña. Nuestra Espiritista buena hermana es miembro correspondiente de la «Société que de Franca»; directora de la Magnéti- «Liga de Physicas; colaboradora Propaganda das Sciencias Psycho- y representante de las revistas Verdade e Paulo; Luz, de San Pen&amentó, revista piritualisia magnética; Uniao Espirita, de Río moderno, de la misma Janeiro; Es- ciudad; A de la Espirita do Doutrina, Paraná; de Luz da órgano Federaçao tante también Verdade,-^ la Isla.de los Azores. Es de la «Associasao Beneficehte represen- é Instructiva», d'e'San benemérita del Paulo; soda «Azylo é Créche», de la misma, y socia de la «Caixa Auxiliar dos Epipregados Postaes do Brqzil». La Sra. de Moraes Cardoso es de una vasta cultivada y inteligencia, habiendo recorrido Francia é Al honrar España, nuestras columnas Inglaterra. con el retrato de tan ilustrada rendimos un tributo de propagandista, le gratitud y profundo afecto el interés celo realiza con el cometido por de y corresponsal de que esta Revista. Edia de Moraes Cardoso 130 LUZ Y UNIÓN SECCIÓN OFICIAL de la "Liga Espiritista Española' Las próximas fiestas que en honor de I^ardec y de Vives está organizando la «Liga Espiritista Española», á juzgar por sus preparativos, prometen superar en esplendidez á lasque con tanto entusiasmo se inauguraron el año próximo pasado. • La Subcomisión del Centro «La Fraternidad Humana», de Tarrasa, está procediendo, ya al reparto de los trescientos vales para otros tantos pobres que se invitan á participar del Ban- quete que se celebrará el día 7 á las 12 de la mañana, después de haber ido á depositar una corona de flores naturales en la tumba donde se encierran los despojos mortales de nuestro ve- ' nerado maestro Miguel Vives. . Los discursos que se pronunciarán en el Cementerio, es casi seguro lo serán por nuestros buenos amigos el Dr. D. Ma- riano Torres y el ex-diputado á Cortes D. Jaime Anglés. El renombrado Coro «Barcanona» cantará, en aquel acto, el precioso Himno Espiritista de D. Benigno Pallol, que mere- ció el primer premio en los Juegos Florales Espiritistas y al que puso inspirada música el malogrado maestro D. Eladio Hurtado. La comida á los pobres consistirá en los siguientes platos; sopa, cocido y ternera con patatas; postres: frutas y pastas fi- nas, vinos del país, café y cigarros, todo ello abundante, bien guisado y servido por hermanas socias de la «Liga». Terminada la comida, se pronunciarán uno ó dos discursos dirigidos á hacer entrever á los comensales las nociones de eter- nidad de la vida, de la pluralidad de existencias y la finalidad á que debe tender todo individuo. Por la noche habrá una velada literaria, musical y medianí- mica. El programa del día 8 no sufrirá variación alguna. Se han puesto ya á la venta los vales- para las comidas de los días 7 y 8, al precio de pesetas 1'50 y 1 respectivamente; la ÓRGANO OFICIAL.DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 131 petición de los mismos es tan activa, que hace presagiar, su pronto agotamiento. Recomendamos, pues, á nuestros herma- nos de fuera de Barcelona se apresuren á, encargar los que ne- cesiten, si es que desean asistir á estas brillantes fiestas. La Comisión Permanente, organizadora de las mismas, ha decidido dedicar una cantidad prudencial á la compra de mate- rial para el servicio de las mesas, entre el cual figuran ocho grandes manteles de unos 7 metros de largo, dos docenas de fuentes y dos de cucharones, que junto con el que se compró el año anterior irá completando todo el necesario para atender el servicio de 700 comensales. SUSCRIPCIÓN para realizar un banquete y otros actos, en Tarrasa, et mes de Mayo próximo, en honor de Altan Kardec y Miguel Vives. Ptas. Suma anterior. ..... 157'65 De Tarrasa. 0'30 Círculo «La Buena Nueva» 0'60 J. A. . . . . . . . . . 0'50 Pedro Pascuet ' .• . 5 José Oliver Retria • 1 . Isidro Casanovas, de Barberà.. 2 Gabriela O. de Osa, de Necochea 25 Mariana Lavie, de id 25 Camilo Goñi 12'50 Pedro Iraola. 12'50 j. A. ............ . 0^50 Círculo «La Buena Nueva» 1 De un hermano 3 Joao D. de Sá Barreto, de Da-Conquista. 5 Ramón Cullaré, de Haedo 22'50 Total. 274'05 (Continúa abierta la suscripción). 132 LUZ Y UNIÓN En honor del Oran Maestro Aquellos que temieron que al cambiar la «Unión Espiritista Kardeciana» su nombre, por el de «Liga Espiritista Española», se apartaría^ ésta de la senda que respecto á Kardec y su obra seguía la «Unión», se equivocaron completamente; por si el Reglamento de la «Liga»'no fuera bastante explícito respecto del partí- cular, lo sería la esplendidez con que se celebró la velada organizada por la Junta Directiva del nuevo organismo que ha venido á suceder á la «Unión», dedicada á la conmemoración del 39.° aniversario de la desencarnación del recopilador de la doctrina espiritista, del sabio discípulo del gran Pestalozzi, el inmortal Maestro León Hipólito Denizard Rivail (Alian Kardec). El amplio salón de sesiones del local de la «Liga» llenóse Completamente, á pesar del mal tiempo que reinaba; el salón, adornado con guirnaldas de flores y follaje y espléndidamente decorado, presentaba un aspecto de animación y vida que alegraba el ánimo. En el testero de la tribuna se veían dqs hermosos retra- tos al lápiz, originales del malogrado Barbieri; eran los de Alian Kardec y Per- nández Colavida, á quien se rendía con ello el tributo merecido. En el salón y esparciendo un perfume de juventud y belleza, 'veíase á lindas señoritas que coh su presencia alegraban aquella fiesta, como prueba patente de que hay en España mujeres emancipadas del yugo religioso; todas ellas ostenta- ban hermosos ramilletes de flores, con que se les obsequiaba al entrar. Eran las cuatro y media de la tarde cuando dióse principio á la velada, cuya parte artística corría á cargo de la Srta. Rosita Merino, que con su maestría nos hizo saborear las delicias que para los espíritus que sienten reserva el arte musfcal; de la Srta. Genoveva de la Cueva, que acompañando al piano á nuestro hermano Andreu, demostró ser también una consumada pianista, y del hermano Andreu que cantó con arte y sentimiento una hermosa canción catalana, titulada «May Més» (nunca más), obteniendo los tres, en justa recompensa á su artística labor, estruendosos aplausos de la concurrencia que llenaba el salón. Tomaron parte en la velada, obteniendo grandes aplausos, tas Srtas. Pilar Fernández, Consuelo Herranz, María Ferri, Conchita López y los dos ruiseño- res de nuestras veladas Conchita Vilaplana y Josefina López, que obtuvieron una verdadera ovación. Las distinguidas poetisas Amalia Domingo Soler y Matilde Navarro, presta- ron su valioso concurso en tan hermoso acto enviando, la primera, una poésía, y leyendo, la segunda, otra poesía ella misma. La de la hermana Amalia fué leída por la Srta. Emilia de la Cueva y que con gusto publicamos á continuación. Dirigieron también la palabra al público los hermanos Vicente Serra, Armen- gol Farràs, Manuel López, Marcial Simó, Antonio Roca, Clemente Francés, Jacinto Fornaguera, Agustín Brunet, José Casals y J. Esteva.Marata, que diser- taron sobre diferentes puntos de la doctrina, siendo muy aplaudidos. Al principiar el acto, el Presidente de la «Liga» saludó, en nombre de los hermanos que en París forman el Grupo «Espérance», á todos los reunidos, pro- poniendo se acordase enviar un voto de gracias á dicho Grupo y en particular á ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 133 su presidenta Soeur Espérance, y á D. José Font por haber representado á la «Liga» en los actos que los espiritistas parisienses celebran cada año por el aniversario de la muerte corporal del Gran Maestro, pronunciando por ello un discurso en el cementerio del padre Lachaise y colocando una artística corona en la tumba del inmortal filósofo, acordándose así en medio de grandes aplausos. Estuvieron representados en tan hermosa fiesta los Centros «Amor Univer- sal», de San Gervasio, por el hermano Jacinto Fornaguera; «La Aurora», de Sabadell, por el hermano Armengol Farràs, y el «Altruismo», de Barcelona, por su presidente José Casals. En resumen: la fiesta fué un éxito para sus organizadores y para el Espiri- tismo barcelonés. Esperamos que no pasará mucho tiempo que vuelva á haber otra, y que á ésta corresponda un éxito mayor aun. J. Esteva Grau. Con el transcurso del tiempo, mejor del Espiritismo la grandeza se comprende; pues por él, del hondo abismo de la torpe indiferencia nos separamos; y el vicio de pensar únicamente en el sórdido egoísmo de acaparar grandes bienes. De tan fatal maleficio nos separan nuestros muertos, que en verdad se encuentran vivos, y nos impulsan al bien, que es el hacer sacrificios por los débiles que lloran por sus angustias vencidos. No hay ninguna religión que pueda con su ascetismo y sus rezos rutinarios, reclamando donativos para levantar altares y elevar templos magníficos á Santos imaginarios. A Kardec que realice el beneficio de hacer de un sér degradado un hombre creyente y digno. Sólo la voz de los muertos, es la que enseña á los vivos á sembrar en tierra ingrata semilla de sacrificios. • Por eso de Alian Kardec debemos cón regocijo recordar de sus trabajos cuanto bueno y grande hizo; porque enséñó nuevamente la santa moral de Cristo. ¡Espiritistas! que siempre lo recordemos; y unidos digamos todos ¡bendita sea su enseñanza! y bendito el recuerdo dé aquel hombre que nos dijo: «No hay camino más corto para llegar á ser grande, que el martirio». • ¡Gloria á Kardec! ¡gloria! ¡gloria! por los siglos de los siglos!... Amalia Domingo Soler. 134 LUZ Y UNIÓN El Centro «Aurora», de Sabadell, celebró el 12 del pasado mes de Abril uiia velada literaria, en honor de Alian Kardec, en la cual tomaron parte valiosos elementos del mismo y del Centro «La Fraternidad». Fué dicho acto una prueba más del gran desarrollo que en Sabadell han al- canzado los ideales espiritistas. El amplio salón fué llenado completamente por la concurrencia que asistió á tan importante acto, deseosa de rendir homenaje á la memoria del gran filósofo. Los hermanos y hermanas que tomaron parte en dicha velada fueron los si- gui entes: Luis Farrés, María Plana, Teresa Vorrá, María Torra y Martín Font, del Centro «La Fraternidad»; y del Centro «La Aurora», Juan Farràs, Enriqueta Esqiietino, Magdalena Bernet, Elvira Rubill, Rosa Rallos, Asunción Borrell, To- más Palá, María Domènech, Francisca Sampere, Dolores Vila, José Vedri, Fra- ternidad Corominas, Estrella Renom, Marina Torras, Fidela Renom, Augusto Vives y Armengol Farràs que presidió la fiesta. Todos fueron premiados con grandes aplausos por la concurrencia. Fué esta fiesta, al mismo tiempo, que una prueba de amor al gran Maestro, un acto de, propaganda admirablemente organizado y llevado á cabo. ¡Quién lo creyera!... I Leí en varios periódicos el artículo que copio á continuación, y lo copio porque su interesante argumento me impresionó pro- fundarn-ente. Conocedores de la miseria, sabemos lo que sufre un alma que vislumbra la luz y está rodeada de tinieblas. ¡Genio y men- Pero leamos y meditemos: La gloria de un ^oeía.—EL ÚLTIMO BOHEMIO.—Acaba de morir en Lon- dres un poeta excelso y admirable, un poeta ignorado y desconocido hace pocos meses, cuya muerte en pleno triunfo contrasta terriblemente con su vida trági- ca y parece una burla sangrienta y despiadada del Destino. Francis Thompson fué el último bohemio, el prototipo del artista indepen- diente, rechazado constantemente por la sociedad, ignorado de todos, miserable y hambriento, sobrellevando con resignación heroica la tragedia del vivir y hallando sólo como consuelo de sus amarguras y de sus angustias las canciones del arroyo, la propia miseria, que convertia en inagotable manantial de inspi- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 135 ración purísima. La Bohemia de Francis Thompson no era esa Bohemia pinto- resea y romántica de los rapins. de París, puesta en moda por el célebre libro de Murger y artificiosamente perpetuada como una ^ose interesante en todos los rincones de Montmartre y entre la mayoría de los artistas más ó menos manqués. El desgraciado poeta inglés vivió la bohemia verdaderamente trágica, la bohemia del pordiosero sin hogar, sin fuego, sin pan, sin amigos ni camara- das, sin ilusiones y sin amores. Por el laberinto inmenso de las calles de Lon- dre^ arrastró Francis Thompson, durante toda su vida, sus infortunios, vagando desfallecido y hambriento, cubierto de harapos y tiritando de frío, vendiendo fósforos ó periódicos, pidiendo limosna, descansando por las noches en los ba- rrios más pobres y solitarios, acurrucado en el quicio de una puerta ó junto á los montones de basura que husmeaban ios perros. Resignado con su suerte, la única ilusión y el consuelo único de aquel hom- bre desgraciado era escribir versos, que borroneaba entre las torturas del ham- bre y que mandaba á los periódicos, donde seguramente no eran leídos ni ha- bian de ser nunca publicados. Un día, no obstante, el director de la Revista Merry England, menos ocupado ó menos malhumorado que de costumbre, se dignó pasar los ojos por las mu' grientas cuartillas que le mandaba el tenaz y desconocido poeta de la calle. El director, sorprendido y maravillado déla originalidad del artista, de la riqueza de sus rimas y de la poesía exquisita y nueva que encerraban los pequeños poemas de Thompson, los publicó inmediatamente, alcanzando un éxito formi-, dable, que no llegó á oídos del pobre autor, vencido ya en su lucha terrible con la miseria y el desamparo. La aparición de los versos de Francis Thompson fué como una revolución en todos los Círculos intelectuales de la gran Metrópoli. Al narrar un cronista la odisea del infortunado poeta, escribe: «Durante algunas semanas no se habló en los Circuios literarios, en las Redacciones de los periódicos, en los salones del gran mundo, más que de aquellas exquisitas y soberbias poesías publicadas en Merry England. Los críticos más sevei'os entonaban sin restricciones el elogio del nuevo astro que surgía en el horizonte y á quien nadie conocía. Las damas más aristocráticas recitaban de memoria las odas del misterioso vate, sobre todo su Oda al sol poniente, que los intelectuales comparaban con las más espíen- dorosas inspiraciones de Byron ó de Shelley... Entre tanto, el pobre Francis Thompson, ignorante de su triunfo, inconsciente de su propia gloria, desespe- rado de tanto sufrir, cansado de tanto luchar, pensaba sólo en la muerte...» La glorificación del poeta llegaba tarde. Inquiriendo en todas partes y en todos los lugares, el director de la Revista halló un día á su desconocido cola- borador en una bohardilla miserable, donde se había refngiado esperando el término de sus sufrimientos. Su estado no podia ser más lamentable. Enfermo de tantas privaciones, más semejante á un esqueleto que á un sér viviente, se consumía su existencia, minada además por el opio, que había perturbado por completo su inteligencia. El desgraciado Thompson estaba loco, y sin darse cuenta de su triunfo ni de la admiración que despertaba, dejóse trasladar á un hospital, donde por 136 LUZ Y UNIÓN primera vez en su vida supo lo que era un lecho confortable y las atenciones y el cariño de sus semejantes. El pobre bohemio no pudo gozar ni comprender lo que son el éxito ni la gloria. No pudo ver siquiera el libro de sus poesias, que editaron lujosamente sus admiradores. El infortunio que le acompañó durante su vida se cebó en él hasta su última hora, apagando su inteligencia para que no pudiese darse cuenta ni un mo- mento de lo que era la felicidad. Y en aquel cuarto risueño y confortable del hospital, rodeado de sus primeros y últimos amigos, murió el trágico bohemio de Londres.— Espanueva. II ¿No es verdad que la triste existencia del poeta inglés es un relato interesantísimo que se presta á profundas reflexiones? ¡Ali! sí; lós que sabemos que no liay efecto sin causa, no pode- mos menos que dejar volar el pensamiento y preguntar: ¿Qué hizo ayer ese infortunado? ¿era un genio con alas luminosas y pies hundidos en el cieno de los vicios? ¿mató sin piedad? ¿es- tuvo de huésped en el cielo y por sus crímenes lo lanzaron vio- lentamente al infíerno? ¿qué hizo? ¿cómo empleó su tiempo, que ha tenido que venir como ave sin alas, como ciego sin ojos, viendo en su imaginación los resplandores del infinito?... ¡Qué tormento tan horrible!... ¡vivir entre cieno y comprender lo que valen los encantos de la naturaleza! ¡qué castigo tan es- pantoso!... Mi pensamiento forjaba innumerables historias, á cual más crueles, y, sin embai'go, cuán lejos estaba de comprender la verdad. Yo creía que sus innumerables enemigos lo tenían en- cerrado en un círculo de hierro candente, del cual no le era posible salir, y un espíritu, viendo mi tenaz empeño en buscar la causa de tan doloroso efecto, me dijo así: III (qCuán lejos estás de la verdad! Tú crees que ese mártir de la miseria y de la incHferencia social vivía abrumado por el enorme peso del odio de sus enemigos, y... ¡quién lo creyera!... todos sus dolores, todas sus humillaciones, todo su aislamiento, su inmensa soledad, todo responde al deseo vivísimo, al afán inmenso que ha tenido ese espíritu de vivir solo, aislado, des- conocido de todos; pero en una existencia no es fácil conseguir ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 137 cuánto se desea, y algo de su ayer se ha revelado sin él tener fuerza suficiente para evitarlo. Ese espíritu, en muchas exis- tencias ha sido célebre por su talento, por su erudición, por su inventiva maravillosa; y lo mismo á las .entrañas' de la tierra, que á las capas atmosféricas, le ha pedido la llave de sus secre- tos, y se la han entregado los genios del saber; todo lo ha'sa- bido; cuánta ciencia se puede adquirir en la tierra, ese espíritu la ha adquirido; pero... no ha tenido corazón; no se ha conmo- vido ante el dolor ajeno; ha sido un ciego viviendo entre soles; ha sido un sordo rodeado de armonías celestiales; y siempre que ha llegado al espacio, su asombro ha sido indescriptible, porque acostumbrado á vivir rodeado de admiradores, aun más, de adoradores, al verse completamente solo, sin escuchar una voz amiga, sin ver más que una llanura inmensa y un cielo gris, sin un rayo de sol, sin una nube de color de rosa, recor- dando glorias, aplausos, homenajes idolátricos, y luego verse solo completamente, conocer que aquel tiempo sin medida se hacía eterno, ¡qué sufrimiento tan horrible para un espíritu que era la actividad sin descanso, preguntando siempre á la ciencia por un secreto más, y obteniendo siempre la contesta- ción más satisfactoria, y tener después que permanecer en una inactividad completa, llamando á los genios sin obtener la me- nor respuesta! Ha sufrido ese espíritu lo que no se puede des- cribir; hasta que al fin oyó una voz que le dijo: »—¿Quieres comenzar á vivir? comienza á amar; deja de hacer preguntas á la ciencia; pregúntale'á un niño huérfano por qué llora; pregúntale á un mendigo si tiene pan; pregón- tale á un desamparado si tiene frío; consagra algunos siglos á la ciencia más difícil, á aprender á 'querer y á compadecer; huye por,algún tiempo de las pompas mundanas; pasa por la tierra completamente desapercibido, que las glorias terrenales son humo leve. »Y el espíritu, al oir aquella voz, sintió lo que nunca había sentido, y exclamó conmovido: »—Arrostraré todos los martirios; sufriré todas las humilla- ciones; padeceré hambre, frío y sed, con la esperanza de encon- trar después en el espacio un sér que me diga: ¡Bien venido seas! ' ' »Y ese espíritu volvió á la tierra en la triste condición que le habéis conocido; su propósito era pasar completamente des- apercibido; pero su ayer no pudo enmudecer; por eso en medio del cieno en que vivía, cantó á la hora del sol poniente;.^\) Qvo 138 luz y unión cuando la gloria le abrió las puertas de su templo, se horrorizó, recordó sus soledades del espacio y perdió lá razón, gozoso de perderla para no desandar el camino andado... ¡Quién lo ere- yera! ¿es verdad? De cuán distinta manera se juzgan los aoci- dentes de la vida conociendo las verdades del Espiritismo ó juzgando únicamente los acontecimientos por el cristal con que se miran las cosas en la tierra. La ciencia sin amor es un lío seco; el espíritu tiene que deletrear primero en el alfabeto del amor, y la ciencia luego le enseñará, á unir las letras, á formar las sílabas y más tarde los vocablos que digán; ¡Qué grande es Dios!... Adiós/>. IV Dice muy bien el espíritu; sin el conocimiento del Espiritis- rao, se mira sin ver. Amalia Domingo Soler. ¿Quiénes son espiritistas? Muchos se me han acercado preguntándome lo que encabeza estas líneas y entré ellos algunos que por malicia llegán á fantasear viles en- troques hurgando obcesados para llamar la atención de sus secuaces, diciéndoles que la mediumnimidad es cosa del demonio, de hechicería, de encantamiento ó de kabala; como de que el ocultismo y Espiritismo es una especie de magia ó cartomancia, á fin de desprestigiar en lo posible á la admirable ciencia espirita que creen perjudicial á sus intereses creados. A todos contesto que debajo del sol no hay nada oculto, que el tiempo todo lo descubrirá y que poderosa fuerza de voluntad hacia el bien por el bien mismo abrirá las inteligencias y penetrando en ellas la verdadera luz conocerán por el fruto su procedencia. A la mayoría de los habitantes de la tierra se les ha anublado el ca- mino y al cruzarlo cierran los ojos á las vislumbres que patentizan la realidad de las cosas, llamando sobrenatural á todo lo que les es extraño ó no comprenden. Para aclarar los conceptos de cómo se debe conocei' á los que son es- piritistas, los dividiremos en clases á saber: pseudo-espiritistas, espiritis- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 139 tas ignorantes, espiritistas inconscientes, espiritistas esotéricos y espiri- tistas exotéricos. Los pseudo-espiritistas son aquellos individuos que conociendo los fenómenos mediumnímicos los adulteran y mezclan con la prestidigita- ción ó hipnotismo, para por medio de ello poderse lucrar y echando estas falsas redes con el nombre de Espiritismo, pescar en ellas á los incautos que se dejan arrastrar sin antes darse cuenta de lo que son esta clase de pájaros. Esta infame plaga'es una de las causas porque la ciencia excusa algunas veces el querer estudiar el fenómeno espirita, y de que la gente seria se retraiga y tema con horror todo trato con espiritistas, creyén- dolos á todos iguales. Por lo que se hace preciso desenmascarar á estos hipócritas y malvados para que el país sepa lo que son y huya de ellos como si fueran furias infernales. Los espiritistas ignorantes también hacen inconscientemente bastante daño á la causa que nos ocupa, puesto que con rudimentos mediumními- eos quieren formar centros independientes sin relación con ninguno de los formales y sin orden ni concierto se desarrollan mediums que llegan á obsesarse diciendo barbaridades ó haciendo mover mesitas de tres pies interpretando á su manera los dichos que comentan con admiración, no queriendo hacer nada que no sea con la sanción de lo que llaman espíritus directores, escandalizando con una exageración extremada que da lugar á sus convecinos á que les pongan en la picota del ridículo. A estos indi- viduos se les debe aconsejar que antes de reunirse para estos actos hay que instruirse por lo menos con las nociones elementales de los principales conocimientos humanos, hasta poder emprender los estudios profundos de Alian KardeC, las cuales sabidos en detall les darán las dotes necesa- rías para esta clase de reuniones que deben ser siempre dirigidas por personas inteligentes y honradas que les relacionen con los demás cen- tros de su propia nacionalidad. - - Espiritistas inconscientes son todos los hombres de voluntad bien dispuesta que creyendo en el más allá de la tumba y en Dios como Alfa y Omega del universo y que sin él no puede haber lo más mínimo; prac- tican durante su estancia terrenal la sublime moral de Cristo que es la universaL Pues están en equivalente caso que estarían los astrónomos de nuestros días armados de potentes telescopios. Aquellos no hubieran creído en los anillos de Saturno, ni en las montañas y cráteres de la Luna ni en las fajas de Júpiter y sus lunas, ni en el descubrimiento de Neptuno, ni la parte de las cartas geodicicás de Marte; no por eso dejaron de ser astrónomos. Estos espiritistas inconscientes obran como debe obrar todo espiritista, mas les falta el instrumento y los conocimientos para penetrar los arcanos de la ciencia que trata de los espíritus. Sócrates es un ejemplo de esta clase, pues á pesar de que Zopiro viéndole conversar con aquella 140 LUZ Y UNIÓN cara trivial casi grotesca, le creyó dominado por todos los vicios, siendo asi que Sócrates con tal de que se le acercaran hombres de buena volun- tad que desearan ilustrarse, les exponía la verdad dando las reglas y principios para la política y las dotes necesarias á los gobernantes; álos padres de familia les recordaba la economía doméstica, les decía el modo de arreglar eu casa y tratar á los criados; á los hijos les exponía sus deberes para con sus padres y hermanos y á todos les hablaba de Dios que ha dispuesto el mundo con tanto orden y sabiduría, dando á cada sér todo lo que le es útil; diariamente procuraba el despertar de las almas y la mejora de las costumbres, haciendo la guerra á los prejuicios y á los vicios, aclara^ndo y fortificando sus preceptos con ejemplos y dándoles autoridad con el espectáculo de una-vida que nada ocultaba, que todos veían y que sin conocer á Cristo por no haber llegado los tiempos, prac- ticaba su moral. Oía la voz de un espíritu' familiar qüeia historia llama demonio, y fué un apóstol modelo de la más pura virtud. Añadid á este sabio los conocimientos de la ciencia espirita y tendréis quizá un espiri- tista mejor que los actuales. Son espiritistas esotéricos, todos los hombres que iniciados en la doc- trina espiritista, están al corriente de su fenomenología y practican sus actos en secreto en lo interior de sus casas, observando la moral de Cristo y guardando una tolerancia extrema con el prójimo. Esta clase de espiritistas abundan muchísimo en todo el orbe, pues sólo el temor de ser molestados por los que tienen dominio material sobre ellos es la causa de su retraimiento y por ende cubren las apariencias de la religión que los-vió nacer. Pero el día de mañana que variando las circunstancias puedan ser libres de su voluntad, surgirán más espiritistas en la tierra que granos de polvo en un seco verano, porque entonces el respeto bu- mano habrá desaparecido y sólo se anhelará la inconcusa verdad. Ahora son fuerzas esparramadas, pero el día en que se unan formarán un bloque tan potente, capaz para servir de punto de apoyo á la palanca de^ Arquimedes y mover hacia el bien al mundo entero, cristalizando una idea que hará cambiar completamente la faz terrestre.' Por último, vamos á entrar en la explicación de cómo son los espiri- tistas exotéricos; estos espiritistas que irradian por doquier que pasan, que se dan á conocer exteriormente por todo el globo, sacrificándose con verdadera abnegación j)ara el bien de toda la humanidad, llamando hermanos á todos los hombres, como hijos de un solo Padre y cuyo lazo común es el amor. Estos son los espiritistas de buena cepa; los que ahora ya dan buenos frutos y defienden la causa con las armas de la moral de Cristo. De día en día procuran ilustrar más su inteligencia y ennoblecer más y más su corazón para-que la virtud no decaiga y los prestigios 'inaccesibles vivan incorporados enla conciencia popular de su generación. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 141 Dos ramas distintas se desprenden del tronco de estos espiritistas, la una científica especulativa, y la otra filosófica-moral; la primera está representada por los sabios Crookes, Dombroso, Wallace, Flammarion, Acevedo, Torres Solanot y todos los que se han dedicado á esta clase de experimentos científicos y practicar la mediumnidad con su debido control y máquina fotográfica, de cuyas imágenes, señales é impresiones en la parafina y papel ahumado han dado miles de comprobantes de la exis- tencia de los espiritas que se habían prestado á tomar materia de la me- dium; la segunda, la representan los grandes literatos, filósofos y poetas Alian Kardec, Colavida, Amalia Domingo, Denís, Noeggerath, Delanne, D'Espérance y otros muchísimos que seria prolijo enumerar. Todos co- nocen los admirables fenómenos medianímicos aprovechándose de las sabias comunicaciones espirituales que tienen en sus Centros y Ligas para el desarrollo de sus ideales en beneficio de ellos mismos y de la hu- manidad. Gomo Catón de Utica en los antiguos tiempos, bien puede decirse que son la ñor y nata de los hombres y lo más notable por la fidelidad de sus afectos. Procuran tener la virtud que Xenofonte admiraba en Sócrates de amar á Dios sobre todas las cosas, ser justo, sabio y que jamás se prefiera el placer á la virtud, alcanzando una sabiduría capaz de nunca errar y saber distinguir el bien y el mal. Durante su estancia terrena procuran, cantando un himno á la virtud, hacer todo cuanto esté confor- me con la lógica y la razón; en todas las circunstancias la serenidad de sus conciencias, de su dulzura, de su menospreció en cuanto á las vani- dades de la gloria mundana está patente; sufriendo con paciencia á aquellos que les censuran injustamente, sin devolverles la censura ni juzgarlos para no ser juzgados, ni dirigir reproches á las gentes, ni tam- poco ser tímidos, ni maliciosos, ni sofistas, huyendo de toda ficción. Se contentan en cuanto á residencia, lecho, vestidos, alimentos, servidum- bre, con la paciencia, laboriosidad y economia en el modo de vivir y estado en que nació. Recordando siempre que las vicisitudes de este mundo son el resultado de hechos anteriores, como los hechos presentes ocasionarán el destino del porvenir. Por lema tienen el altruismo y la honradez; así procuran formarse un carácter hidalgo, modelo de civismo, de caballerosidad y de nobleza; pensando en el goce de inefable dicha que les espera en la serena mansión donde residen los espíritus adelanta- dos dignos del poder universal que aproxima á Dios; cumpliéndose aquella consoladora promesa de Cristo en el sermón de la montaña: -«Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán á Dios». La templanza, la sencillez de costumbres y su relativa tranquilidad, hace que venzan el tiempo sin marchitar apenas los años, haciendo de ellos una ancianidad inmóvil hermana de la del divino Platón, que se iba 142 LUZ Y UNIÓN acercando á un siglo sin desmayar en su actividad ni perder un ápicn de su claro entendimiento ni de su memoria asombrosa. Para estos espi- ritistas la vejez, no es según la frase amarga de Autifaues: «El altar de los males en donde se les ve á todos buscar asilo». Pues la perseverancia en su buena conducta, armoniza el equilibrio del cuerpo con la ecuani- midad del espíritu y la sujeción constante al precepto higiénico mens sana in corpore sano les salve de estos horrores. Los dioses inmortales (que nosotros diríamos los espíritus), dice Zoroastro, ayudan al mortal perseverante. Esa vida sobria, atendiendo sólo á las leyes de la Naturaleza lo menos sujetas que se pueda por las trabas de la mal llamada civilización, da al libre albedrio su entusiasmo férvido por el progreso en su amor á los libros y á los placeres de la inteligencia ni más ni menos que Pitágoras y Platón en los gimnasios de Atenas. Eespirando en un justo medio ambiente, nunca se extralimitan, siem- pre saben conservar en todo la recta medida y escuchar la sentencia del oráculo «de nada demasiado», ni olvidar el poder sordo de Némesis que abate á los soberbios y reprime todos los excesos, puesto que Dios ha puesto en el hombre potestad de voluntad suficiente para no caer en el mal y saber refrenar las pasiones del bruto. Si un hombre es desgraciado,- como decía Epicteto, es preciso convenir en que su desdicha es obra suya propia, pues Dios en su infinita bondad ha hecho á todos los seres para que caminen constantemente hacia la felicidad y la máxima de Boecio era de que «aquel que es virtuoso es sabio, aquel que es sabio es bueno y aquel que es bueno es feliz». Asi del archivo intenso de esta filosofía saca abnegación y tranquilidad para soportar con valor todas las adversida- des eü este expiatorio mundo y con el ejemplo de su sistema da á reco- nocer al hombre el gobierno de sí mismo con el noscee te ipsum, poniendo^ su voluntad adscrita á la supremacia del bien obrar y llevar por divisa:. Todo por justicia y amor, nada por interés y egoísmo. Como base de la sociedad forman ellos también familias honradas y virtuosas, que, aunque democráticas, se relacionan amorosamente con todas las clases sociales, comprendiendo que la posición sócial de cada uno debe respetarse y acatarse, pues la consideran ser la consecuencia- ineludible del resultado de obras efectuadas en existencias anteriores. Forman también congresos nacionales é internacionales con objeto de establecer una sólida organización cosmopolita y emulando á Savo- narola, puedan en lo posible reformar las costumbres de los pueblos en sentido espiritista, extendiendo su radio de acción por todo el mundo. Afanándose para que todas las esferas sociales examinen con su ejemplo el mejor medio de apoyarse mutuamente en todas sus necesidades y se refiejen sus hechos en la complexión social á fin de que la estimación aL órgano oficial de la liga e. española 143 prójimo stí restablezca y que los hombres públicos no resultep compues- tos de personas que han vivido constantemente en una sola esfera, for- mando una especie de comunidad que en su vida ordinaria no puede apreciar bien las necesidades públicas, porque no han estado en condi- clones de sentirlas ni poderlas apreciar tal como son, pues al querer estudiarlas bajo el punto de vista del observador les falta la imprescin- dible práctica; evitándose de este modo la excesiva diferencia entre gor bernantes y gobernados. Siendo de alta conveniencia la representación en las' cámaras de toda clase social, incluso la espiritista, preocupándose de que unos y otros, gobernantes y diputados, aparezcan y realmente . sean siempre sacados de toda la masa social, distinguidos solamente por el talento y la probidad, y la función de orden que accidentalmente desempeñan no debe durar más que cuatro años, sin reelección. Eimi- tando á Epicteto y Marco Aurelio en la acción insensible de transformar la voluntad de los hombres inñltrándoles en sus almas cierta fuente de amor y persuasión, baria germinar en los corazones sordamente la idea sublime de la Confraternidad humana. Perfumados con esta sana moral, se llenan de suma delicadeza y se hacen aptos para la admirable comunicación espiritual, lá cual les es transmitida por un hermano titulado medium y que en la antigüedad eran liamados profetas ò pitonisas, consiguiendo con ello la plenitud de conocimientos ignorados hasta abofa por las gentes. Allí no se encuentra nada que no sea hermoso, distinguido y exqui- sito, cuando es una manifestación de los espíritus depurados, cuyos sen- timientos delicados superan á los nuestros por mucha luz que tengamos, por residir ellos en un ambiente fastuoso de ciencia y de pureza; por eso mismo ios escuchan embelesados, elevando sus mentes á ese incógnito mundo espiritual, de un gesto persistente, de una aptitud repetida, siem- pre para bien común, y amortiguando los dolores de los sentidos, hacen vivir la belleza á que cada uno se hace acreedor y olvidar por un mo- mento las figuras convencionales y farsantes de los polichinelas que por desgracia nos rodean. Termino estas cuartillas notificando al lector que, aunque somera- mente, he expuesto con integridad ,y franqueza mi parecer respectó, de «¿Quiénes son espiritistas?» No es extraño haya dejado algo en el tin- tero. Por mi parte creo queda suficientemente explicada la idea para formarse criterio fijo. Rogando á los interrogantes estudien, sin prejui- cios de ninguna clase, todo lo concerniente á este asunto en los libros, revistas y periódicos espiritistas que les puedan dar mayor ilustración. Miguel Mayol. 144 LUZ Y UNIÓN Estudiemos Con la persistente insistencia que la índole de estos trabajes requie- ren, procuraremos establecer, por deducciones lógicas y racionales, el concepto que tenemos del sér único y total, causa inteligente de todas las causas, que inteligentemente se manifiesta indefinidamente de infinitos modos en el Universo. A este sér increado, sin principio, siendo y èstando en la Creación conforme á su naturaleza esencial infinita, debemos atribuirle todas las formas y todas las sucesivas maneras de manifestarse las criaturas, como emanaciones de la esencia Absoluta. Para no incurrir en dualismos filosóficos, que no harían más que im- posibilitar el progreso científico, tenemos que ponernos de acuerdo entre la filosofía y la moral y confiar este criterio filosófico á la investigación científica, para probar que siendo los seres manifestaciones de una mis- ma actividad esencial, deben participar, como partes de un Todo, de los mismos atributos esenciales, ó sea, la manifestación constante de la acti- vidad esencial desarrollable indefinidamente, en ese período eterno inde- finido é indefinible que consideramos Tiempo, solamente apreciable por las infinitas series de estados, en que relativamente podemos encontrar- nos en esferas de actividad determinada que representa nuestro tiempo por las sucesivas cambiantes de nuestra forma y manera de manifes- tamos. Teniendo en cuenta estos principios fundamentales, tenemos que afir- mar repetidamente, que el 8ér Absoluto, causa de toda actividad, no se realiza en el tiempo ni en el espacio, sino que todo en él es conforme á su naturaleza increada y absoluta; pero como sér esencialmente activo, todas sus manifestaciones son coetáneas, fuera del tiempo y del espacio. Del mismo modo, si nos referimos á nuestro propio sér, encontramos el principio de unidad substancial, que participa de la naturaleza in- creada como emanación del Sér Absoluto, y nuestro origen como causa inteligente sólo podemos encontrarlo en el foco de la actividad esencial, manifestándose como sabiduría infinita. En cuanto á la forma de nuestro propio sér y de todos los seres, se nos presenta siempre individualizada, determinándose en la materia, como resultado de fuerzas y movimientos que constituyen su manifesta- ción vital y la vida á su vez animada por el principio inteligente, que con la actividad esencial de todos los seres se produce el movimiento y ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 145 el desarrollo de la vida universal infinita, en todos los órdenes anímicos, vitales y orgánicos. Estudiando nuestra propia naturaleza, podremos atribuir nuestro origen biológico á los gérmenes vitales apreciables, á las células proto- plasmáticas de los organismos más sencillos; pero anterior á todo esto existen las fuerzas orgánicas, materia imponderable, el éter incoercible, en donde se producen las primeras condensaciones de la fuerza y las primeras manifestaciones de los elementos vitalizadores. Para que estas formas de movimiento y de actividad vital se produz- can, es preciso» el agente animador, que como elemento de actividad esencial inteligente, sea la expresión de la voluntad absoluta, manifes- tándose en el Universo Infinito. Siempre que nos propongamos investigar el origen de los seres, de las cosas y de las ideas para nosotros apreciables (pero desconocidas en su origen, estado y finalidad), tendremos que remontarnos á la causa primera, reconociendo que todas y cada una de' las partes son esencial- mente idénticas en su naturaleza. De este principio, basado en la unidad absoluta y en la actividad esencial infinita, se deduce la ley de solidaridad universal, con los ca- racteres diversos de las individualizaciones, estrecha y solidariamente unidos por la fuerza universal animadora, que promueve el desarrollo esencial de los seres, que por sus distintos y constantes desarrollos tien- den á la perfectividad infinita, con los mismos caracteres esenciales de la naturaleza^del sér absoluto del que proceden. . Por esta razón, desde el momento en que un sér vital y orgánico cualquiera se manifiesta, debemos suponerle también animado por la fuerza inteligente del Todo Universal, qué corresponde á todo sér indi- vidual y colectivo; y remontándonos también á su origen, debemos con- cederle la eternidad en el desenvolvimiento anterior de los elementos organizados. Científicamente considerado, desde que se nos presenta y muestra, como un organismo inicial, ó en desarrollo, debemos concederle la uní- dad intrínseca de su propio sér esencialmente y substantivamente consi- derado, siempre con sus caracteres de origen y su identidad perma- nente, cumpliendo los mismos destinos que todas las criaturas, en el grado y en el orden que respectivamente les corresponden. Por lo tanto, en este principio de unidad substancial imperecedera, debe fundarse la filosofía racional, asi como en las formas que la mate- ría se nos manifiesta, evidenciando las fuerzas que la impulsan y solí- citan, ha de fundamentarse la ciencia que ha de ocuparse de los fenó- menos que en la naturaleza incesantemente se producen, sin repetirse jamás en la misma forma y del mismo modo. 9 146 LUZ Y UNIÓN Si en nuestro propio sér y por analogia en todos los seres, no encon- tráramós los caracteres de la unidad substancial, ni la filosofía ni la ciencia podrían marchar de acuerdo y seguirían como hasta aquí, pre- valeciendo criterios distintos, sin destruirse jamás los dualismos que tanto perjudican, porque alimentan y sostienen las perturbaciones men- tales que concitan las animosidades entre. los sectarios fanáticos de las distintas escuelas filosóficas, científicas y religiosas. Necesariamente tenemos que ocuparnos del estudio más difícil, por la insuficiencia de nuestros conocimientos y la dificultad de reflejar exac- tamente nuestras ideas incompletas y confusas sobre la naturaleza de las fuerzas y de los elementos materiales, que actúan en nuestro propio sér, en su incesante descomposición y reconstitución orgánica, en los distintos cambios y aptitudes que en cada instante sufre el pensamiento para determinar las ideas y manifestarse subjetiva y objetivamente. Para poder decir algo de lo que conocemos y sentimos de nuestro propio sér, nos será preciso destruir en sus fundamentos la ciencia y la filosofía seculares en la Tierra, y fijar con nuestra escasa inteligencia algunos principios de la ciencia universal, basada en la verdad abso- luta que sentimos, y que iluminados por sus destellos iremos recono- ciendo eternamente los horizontes de nuestra esfera limitada de activi- dad intelectual. No se nos oculta la dificultad con que tropezamos en nuestro trabajo, dada la situación en que vital y orgánicamente nos encontramos los en- carnados, para recibir y transmitir las ideas que inteligencias superio- res extra- carnales se dignan transmitirnos con un fin altamente amoroso, queriendo hacernos participes de las ideas redentoras de libertad, arhor y progreso, que nos han de conducir al logro de nuestros ideales para el planteamiento de la ciencia única y universal en la Tierra. Debemos tener en cuenta que cuando estas inteligencias superiores se tienen que acomodar á las nuestras, más inferiores, para transmitirnos algo que nuestros sentidos puedan percibir las ideas y las enseñanzas por ellos transmitidas, llegan á veces confusas á nosotros, porque nuestra sensa- ción y percepción es demasiado tosca é imperfecta, y frecuentemente incomprensibles muchas veces por falta de los medios de comparación para poder discernir y discurrir con acierto. Sucede también más de una vez, que las inteligencias astrales, aún estando al nivel intelectual que nosotros, sienten, sin embargo, y ven las formas materiales tan distintamente, que para nuestros sentidos cor- porales la materia limita la sensación, y en su manera de sentir, en- cuentran los cuerpos menos consistentes, diáfanos y penetrables; ¿cómo y por qué? Ellos dicen ignorarlo; pero pueden indicarnos sus impresio- nes, si encuentran medios de hacerse comprender, y que nosotros, por ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 147 comparación de sensaciones carnales, podamos admitir como verdaderas sus enseñanzas. Sin embargo de todo esto, se proponen, ofreciéndonos su concurso, ejercer el apostolado científico que ha de realizar la redención de las generaciones presentes y futuras de la Tierra, porque la Era ha comen- zade, y unos y otros, los de acá y los de allá, unos por mérito, otros por sacrificio y el mayor-número por sufrimientos, á causa de las reacció- nes sociales que ahora se producen, y más tarde han de recrudecerse en la lucha de intereses egoístas, hasta que al fin de todos estos trastornos sociales, difíciles de evitar, la razón y la justicia triunfen, y la humani- dad entonces empezará á vislumbrar el nuevo reinado de la paz y del amor, tan deseado hoy por todos los seres que sufren bajo el yugo tirá- nico del despotismo cruel del más fuerte. Benito Rodríguez. ¡Qué horror! I De Boniches (Cuenca) me escribe un espiritista, diciéndome lo siguiente: «En un pequeño pueblecito, llamado Majadas, se encontraban trabajando un padre, de edad avanzada, y su hijo, de 22 años, sacando un pequeño residuo de pina, que se llama tea, utilizando para sacar estos productos una hornilla de dos metros de prolundidad, á donde introducen los materiales, que son pequeños trozos de la llamada tea. Estando dentro de la hornilla el hijo, para arreglar lo que su padre le daba desde arriba, y llegando á este sitio otro padre é hijo, empezaron una reyerta que, según el vulgo manifiesta, le dieron al anciano que estaba dando la tea á su hijo un golpe con el hacha, quedando el herido sin movimiento; y no contentos con esto, cogieron el cuerpo exánime del herido y lo arrojaron dentro de la hornilla, donde estaba el hijo sin poder salir, y llenando el hueco de tro- zos de leña, le prendieron fuego, y allí acabó de morir el an- ciano y murió quemado vivo su pobre hijo. ¡Qué horror! ¿no es verdad? ¡morir quemado vivo el pobre muchacho y tener sobre sus hombros el cadáver de su padre! »¡Qué expiación tan horrible!... Nosotros no somos capaces de sondear esas causas; por eso me dirijo á usted, querida her- 148 LUZ Y UNIÓN mana, para que si lo cree lógico pregunte al guía de sus traba- jos el por qué esos dos infelices han sufrido una muerte tan horrible, en particular el hijo, que, según las declaraciones de los autores, lo quemaron vivo, teniendo á su padre sobre sus hombros. ))No nos guía la curiosidad, puede usted creerlo; sólo desea- mos estudiar y aprender». Hasta aquí la carta del espiritista; y yo impresionada é inte- resada en saber algo de esta tragedia, pregunté al guía de mis trabajos y me contestó lo siguiente: II «Ya puedes comprender que cuando acontecen semejantes horrores, los cimientos àe ese edificio horroroso tienen que estar amasados con sangre. »Esos dos seres que han muerto tan trágicamente, en una de sus encarnaciones pertenecieron á la iglesia romana; eran dos misioneros que pasaban por ser dos santos impecables, muy respetados de sus compañeros de misión; convertían al cristià- nismo á muchos infieles; su predicación era admirable, y los dos esperaban grandes recompensas, cuando uno de ellos enlo- queció por una mujer y no podía vivir sin ella; la seguía á todas partes, y su íntimo compañero le aconsejó que saciara su deseo de hablarla, á ver si después de hablar con ella se cal- maba en algo su ansiedad; y los dos, de común acuerdo, pro- curaron hablar con la joven y su doncella al salir de una er- mita escondida en un bosque. Consiguieron lo que deseaban y traspasaron los límites de la decencia y del respeto; los dos abu-' saron de aquellas dos mujeres; sintiendo después repugnancia, horror, temieron perder cuánto habían ganado en olor de san- tidad, y golpeándoles la cabeza, las hicieron perder el sentido, las arrastraron al fondo del bosque y allí consiguieron hacer fuego y en él arrojaron á sus inocentes víctimas, y satisfechos de su obra impía volvieron á su convento, entregándose con gran fervor á sus martirios de azotarse y destrozar su cuerpo para acallar los deseos- de la bestia humana. Murieron pronto aquellos locos homicidas, y en el espacio vieron claro, y los dos juraron morir queníados para pafiecer el mismo martirio de aquellas dos infelices víctimas de su lujuria y de su infamia, que las dos les perdonaron y les prometieron servirles de guía órgano oficial üe la liga e. española 149 y de consuelo, ya que tanto tenían que padecer, porque si bien no eran espíritus encenagados en el crimen y había en ellos verdadeja creencia religiosa, su religión estaba muy lejos de llevarles al buen camino; aspiraban á la santidad, y para pare- cer santos impecables, no titubearon en matar á dos infelices mujeres, creyendo que así castigaban su lascivia y se purifica- ban sus almas. ¡Cuántos errores! La purificación del alma se obtiene por otros medios; no -martirizando á nadie, no destru- yendo existencias de seres indefensos; así, pues, esos dos espí- ritus han pagado con su martirio lo que hicieron sufrir á sus inocentes víctimas. Ya ves si yo tenía razón al decirte que cuando acontecen semejantes , horrores, los cimientos de ese edificio horroroso tienen que estar amasados corí sangre.— Adiós», III Es verdad; dolores tan terribles tienen que ser-el fruto po- drido del árbol del crimen; y cuando vemos morir tan trágica- mente á ciertos desgraciados, hay que murmyrar con profunda melancolía: ¡Qué desgraciados son los que lo son!... ¡Qué he- renda tan espantosa dejan los atropellos! ¡Cómo se obscurecen las virtudes entre las violencias y el desenfreno de las pasiones! ¡Qué fuerza de voluntad se necesita para no dejarse llevar de la impetuosidad de los deseos materiales que convierten al hombre en un bruto indomable! PoF eso el estudio del Espiri- tismo es tan necesario para educar al hombre, para convertirle en un ente racional, en un sér reflexivo, que no se deje llevar del ímpetu de sus insensatas pasiones, sino que sepa poner un freno á sus concupiscencias y consiga engrandecerse por sus virtudes y por su .verdadero racionalismo, para figurar digna- mente en la sociedad y en su hogar, entre la gran familia hu- mana ^ en el pequeño nido donde se moldean los redentores de los pueblos, y sólo el estudio razonado del Espiritismo 'podrá regenerar al hombre. Amalia Domingo Soler. No culpes jamás á tu hermano por lo que estás sufriendo, que sería blasfemar de la justicia de Dios. —La venganza presupone un espíritu atrasado; otros dirían un alma vil—el perdón un alma elevada. 150 LUZ Y UNIÓN Comunicaciones Hace muchos siglos que la tierra inundando se está de sangre; siempre la fuerza bruta contra la fuerza inteligente; siempre el fuerte contra el débil. Hoy el pastor lanza sus perros rabiosos sobre las ovejas descarriadas, él sabe que ellos las despedazarán, pero no las llevarán al redil. ¿Por qué hace ésto? por odio, el odio es un mal consejero; por orgullo, el orgullo entorpece los cere- bros. ¿Quieres saber qué resultado dará ésto? es muy fácil presagiar en asunto tan ciáronse oprimirán, se les huirá, desatarán la cólera de la gente ignorante, os causarán toda clase de males; las cabezas pensadoras y los' creyentes since- ros juzgarán este acto, cruel, sangriento, anticristiano, le juzgarán de una tras- cendencia desastrosa é infructuosa á la vez; mas en cambio la ignorancia hará gala de sabia é inquebrantable obediencia, algunos pocos os rodearán, otros se alejarán tristes y sombríos, como aves asustadas por la detonación del arma del cazador. Amad al pueblo que os insulta y acribilla, él no tiene la culpa de su mi- seria moral é intelectual. Los Césares romanos daban públicos espectáculos con sus víctimas, divertían al pueblo con su crueldad y su barbarie: cuando inmolaban á los_ cristianos el pueblo reía. Los Césares de hoy inmolan la conciencia, no tienen circos para de- gollar y levantar piras; pero tienen templos donde excomulgan á sus víctimas del amor de sus semejantes. Los mártires de aquellos tiempos sombríos y luctuosos, iban á la hoguera cantando, aguardaban á la fiera devorante con la frente ergui- da, iluminada su cabeza por la luz de las esperanzas eternas: Vosotros debéis aguardar vuestro martirio con la sonrisa del amor y el perdón; ellos cantaban, predicad-vosotros con el ejemplo y con la palabra. Veinte siglos han pasado y aun juegan con las brisas de los tiempos aquellas sublimes palabras: «Perdónalos, Señor, porque no saben lo que hacen». Seguid serenos y tranquilos. Las grandes obras las han realizado, no los más fuertqs, sino los más conven- cidos de la,eficacia de su obra. Sois pocos, pero os temen, y si no os temen, ¿por qué sujetaros como bestias dañinas? Al perro inofensivo se le acaricia la lustrosa piel; al perro fuerte y ce- loso guardián del hogar, se le encadeua, porque se le teme. Compadeced al tirano que envenena la fuente de Amor y caridad y da esa agua á las almas entorpecidas para enloquecerlas y volverlas rabiosas; «Amaos los unos á los otros», dijo el Cristo; su representante^vaga esto in- necesario. Orad por él, y por sus desgraciados secuaces. Manuel. Medellín (Colombia). ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 151 Alabado sea Dios. Hermanos: Una vez realizados los feroces instintos á que nos impulsa la ma- teria, y la atracción decrece hasta que el corazón llega á hastiarse de las pasio- nes que en él se despertaron, y que no fueron sino rápidos colapsos que murieron al nacer, pero sí rojopieron sentimientos de un alma por otra que llega á presen-" tirios, vislumbrarlos ó comprenderlos, entonces la atracción aumenta vigorosa- mente, y las suaves brisas del amor estrechan aun más los lazos que las unen. ¡Oh, hermanos míos! Las pasiones nacen heridas de muerte, viven un día para morir al otro, abrasadas por el inmenso fuego dé los deseos; podéis decir que nacen con el virus de los vicios para caer en la tumba del olvido; pero Jos senti- mi'entos, los destellos del alma viven como las flores, emanando deliciosos aro- mas de sus pistilos y cálices; y .cuando s"é extinguen en la tierra, es para morar en estas celestiales é infinitas regioneg,. La sencillez del corazón de la mujer le hace ver sinceridad en donde no hay más que deseos libidinosos é impuros; le hace ver amor donde no hay más que adulación y engaño; y en una sonrisa, en un signo imperceptible, en una pala- bra cree encontrar la felicidad desnuda. Y ese signo, esa sonrisa y esa palabra, suelen ser preludios de muchos siglos de acerbo llanto. ¡Hombre! ¿Cómo quieres y cómo exiges virtud en la mujer, si desde que la conoces, desde que cruzas con ella tus primeras palabras, pones toda tu sagaci- dad en prostituirla? ¡Y tú, mujer! ¿Cómo quieres constancia en el amor del hombre, si desde que le conoces, y también desde que cruzas con él las primeras palabras-, estudias el modo,de engañarle? ¡Hombre y mujer de la tierra que en vez de atraeros por las emanaciones di- vinas del amor os atraéis por los placeres! ¿No comprendéjs que tanto las más arrogantes formas del hombre, como las delicadas y sonrosadas carnes de la mu- jer más bella se transforman y deshacen, y vuelan á la atmósfera, á ese inmenso depósito de materiales de vuestro mundo? El amor á la materia, como deseo, muere; el del espíritu, como sentimiento, es infinito. Yo amé con delirio á la materia, y ésta me legó su tristeza; pero el casto é inmenso amor de un sér invisible me redimió ¡Bendita sea tu alma- noble y ge- nerosa! Isabel. Higuera de Vargas (Badajoz). No pretendas escudarte con el mal proceder de los demás hombres; mira que cada uno debe dar estrecha cuenta de sus actos, no de las faltas agenas. —Por crítica que sea la situación en que te encuentres, no olvides de que así lo dispone Dios, quizás para purificarte, y que puede convertirte una piedra en pan. —No-ceses de ser indulgente con tu hermano; más lo ha sido contigo Dios. —No está el valor en vengar una ofensa; está en perdonarla. 152 ■ LUZ Y UNIÓN Armonía ' Dictado medíanímico obtenido en el Centro de Estudios Psi- cológicos «.Constancia^-), de Málaga, por el medium R. G. T. Cierto es, queridos hermanos, que vivís en un mundo de pruebas y expiación: es muy cierto que también es una academia de estudio y preparación ppra alean- zar vida más pura, más elevada y más feliz; pero también lo es, que vuestra exis- tencia de penalidades sin cuento y de innúmeras, injusticias, perdurará todo el íiempe que estéis inaptos para otra, que sintetice vuestro modo de ser y obrar y esté en perfecta armonía con la elevación moral de vuestro espíritu. Si esto es así, ¿por qué no ha de serlo también que trabajéis, luchéis, y hasta si preciso fuere, sufráis y os inmoléis, por la consecución de la verdadera aspi- ración ó ideal superior del hombre en ese planeta, que depurando sir espíritu en el crisol de las reencarnaciones, ha llegado á ver claro, sin espejismos ni idola- trías, las causas y concausas de las injusticias de esa vida? ¿No es ese planeta, propiedad absoluta de sus moradores? ¿No sois todos por igual hermanos, hijos del mismo origen espiritual y ma- terial? ¿No os saluda á,todos por igual la aurora con sus refulgentes albores y os despide el día con las sombras de la noche? ¿No está por doquier esparcido en la atmósfera, el aliento que vivifica vues- tros pulmones, oxigenando la sanguínea circulación? ¿La madre naturaleza, no es pródiga, hasta en sus menores detalles, derra- mando á manos llenas la savia de la vida, alimentando desde el bruto al microscó- pico insecto, vistiendo de bellos colores las flores que embalsaman el ambiente? ¿Nada os dice, la sociabilidad que notáis-, hasta en los animales, acuáticos, volátiles y cuadrúpedos; enseñándoos con el ejemplo deda sociabilidad de la vida, como debíais,, ya que estáis dotados de mayor intelecto; como debíais, repito, marchar para que la fraternidad impere, el amor, domine, y alcanzar vida más feliz y llevadera? Pues entonces, si todo respira alegría, libertad, armonía y marcada sociabili- dad en todas las especies animales; si todo sonríe en la naturaleza y canta himnos al trabajo, al amor y al progreso, ¿por qué el hombre, es tan miope, que no lee en ese gran libro, que Dios ha puesto en su mano? ¿Por qué desoye ese bellísimo canto? ¿Por qué, por último, no entra en la armonía de todo lo creado, haciendo el concierto natural, donde sólo es una dis- cordante nota? ¿Por qué lia de.ser la humanidad, la raza animal inteligente, por excelencia, en el planeta, el animal divinizado, quién ha de alimentarse siempre de la expío- tación de su hermano? ¿Por qué ha de perdurar tanto en ese mundo el sentimiento del égo, querien- do unos vivir y medrar á costa de los otros? ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 153 «Nadie, absolutamente nadie, tiene derecho á disfrutar y menos derrochar, Ínterin exista un solo sér, que de lo necesario carezca». Así han predicado infi- nitos sabios en ese mundo, y aunque yo no lo soy, sino un pobre espíritu que vivió con envoltura material femenil, en mi última encarnación, os digo; «que nadie tiene derecho, estando útil, á holgar, ni á disfrutar; que todos, absolutamente todos los habitantes de ese planeta, deben trabajar; el trabajo es vida y el contraviniere que esta ley natural, no tiene derecho á vivir». Cada cual, en relación á sus fuerzas y á su inteligencia ha de laborar en tra- bajo útil á la vida; no á'la muerte, ni al fanatismo, ni á la ignorancia, sino en todo aquello útil á la higiene, á la alimentación, al gusto estético, á la expansión del espíritu, al adelanto de la ciencia, y sobre todo al mejoramiento y miento engrandecí- de la especie, y concluyo recordándoos, que una es la Ley, uno es Dios, su dictador, justo y omnipotente. La Ley, de El derivada, nadie es más. que otro; las virtudes lo son todo. Vivid, amad y trabajad; pero haced ley que dictamine de una vez para siem- pre, que todo el que quiera vivir, tiene que trabajar en algo útil á la vida. Dolores. ¡Arrecia la persecución! Nuestros lectores recordarán que nos hemos hecho eco re- petidas veces de la persecución de que son objeto nuestros her- manos de Colombia por parte del clero católico; recordarán nuestra buena que hermana D." Petronila Hoyos fué víctima de un atentado, pues llegóse á colocar en la escalera de su morada una bomba de dinamita el día y á la hora en que acostumbra- ban reunirse en sesión ella y sus amigos; recordarán, también, que el clero logró que el Gobierno decomisara cuántos libros allí hemos enviado, y no contentos con ello, el Medellín arzobispo de publicó una circular en la que casi se recomendaba el negar el pan y la sal á los espiritistas. Esta persecución que parecía centralizada en el mento de departa- Medellín, toma ya más vuelos, alcanza ya al arzobis- pado de Popayán, cuyo prelado se nos descuelga con la circular siguiente que copiamos á continuación para satisfacción del refe- rido arzobispo y para que nuestros lectores de vayan enterándose cómo las gasta el clero católico allí donde puede hacer dominio. pesar su 154 LUZ Y UNIÓN CIRCULAR Arquidiócesis de Popayán.—Poparán, Diciembre, 26 de 1907. Señor Cura de... Como uno de los deberes que incumben al Obispó es el- de velar constante- mente por la conservación del depósito sagrado de la fe entre los fieles, y la Constitución Officiorum et munerum ordena que procuren los Obispos arrancar de las manos de los fieles todas las publicaciones malas y peligrosas, denuncia-, mos como prohibidas en virtud de la citada Const. Aptca. dos publicaciones es- piritistas que comienzan á circular en nuestra Arquidiócesis. l ';S„ Luz y Unión , órgano oficial de la U. E. K. (Unión Espiritista Kardeciana Española).—Director: J. Esteva Marata.—Redactor Jefe: Amalia Domingo Soler. —Carbonell y Esteva, Editores, Barcelona. 2.° Los Albores de la Verdad. —Periódico semanal de estudios filosóficos y morales.—Director, el mismo de la revista anterior. Debe V. recordar á los fieles que les está gravemente prohibido leer, conser- var, difundir, ó de cualquier manera sostener tales publicaciones y cualesquiera otras que directa ó indirectamente enseñen ó defiendan el Espiritismo. Aprovechamos de esta ocasión para insistir en las recomendaciones que hici- mos hace poco sobre las malas lecturas, por medio de .nuestro Secretario Ge- neral, y recomendar á V. una vez más que despliegue todo su celo y vigilancia para apartar á los fieles de las lecturas peligrosas. Recomiende V. á los socios- de las Cofradías y Asociaciones Católicas que existan en su parroquia, que for- men una liga santa para combatir eficazmente, con obras y oraciones, esa funes- tísima peste de las almas. Procure V. combatir un error muy difundido y de muy malas consecuencias: el creer que cuando uno ha recibido educación cristiana y tiene bien cimentadas sus creencias puede entregarse impunemente á toda clase de lecturas. Si así fue- ra, la Iglesia no prohibiría las lecturas peligrosas para la fe sino á los que care- cen de esa misma fe, y lo contrario es lo que sucede: las prohibe á sus hijos, los católicos. Por lo demás, no olviden los fieles que una vez que la Autoridad de la Iglesia prohibe la lectura de una publicación cualquiera, peca quien la lea sin la debida autorización aunque le conste por experiencia que no encuentrapeligro en dicha lectura. Esta Circular será leída en días festivos, en todas las misas que en dichos días se celebren en las Iglesias y capillas públicas de la Arquidiócesis. Dios-guarde á V. Manuel Antonio, Arzobispo de Popayán. Lo subrayado lo es del propio arzobispo, con lo que de- muestra que está convencido que no hay peligro pat^a las almas en leer esta Revista, y q-ue de lo único que se trata es de çimen- tar, por su parte, la tiranía en las conciencias, privándolas do ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 155 leer lo que la Iglesia no quiera, aunque le conste.por experien- cia que no encuentra peligro en dicha lectura. Cábenos preguntar al arzobispo de Papayán, si no hay pe- ligro en la lectura de esta Revista, ¿por qué priva de leerla á sus feligreses? Si no hay peligro en la lectura de los periódicos espiritistas, ¿por qué recomienda á sus obispos que los arran- quen de las manos de sus fieles? ¡Muy poca confianza tiene en la fe de sus fieles este señor arzobispo, cuando tanto teme que la lectura de nuestras pági- nas la haga bambolear! ¿Es que está convencido él, como nob- otros, de que el edificio de la fe catòlica es tan endeble que basta el menor embate para derrocarlo? Viva tranquilo el señor arzobispo; la verdad es la que está, llamada á imperar en el mundo; los errores se desvanecerán; sólo la verdad persistirá. El que está seguro de vivir en ella nunca teme los embates del error, que es lo que nos sucede á nosotros. Puede la persecución continuar; nuestros hermanos de Co- lombia y nosotros, puesta nuestra fe en Dios y en el Espiritis- rno, seguiremos difundiendo la verdad á pesar de los arzobispos de Medellín y Popayán. Jamás se vió luz tan diáfana como la que procede del espíritu que á pesar de estar semioculta debajo del celemín de la ignorancia y ana^ tematizada por la orgullosa astucia y por sólo el instinto de conservar los principios embriogenarios, sin embargo su diafanidad ha trasparen- ciado todos los obstáculos y de época en época ha desparramado un potente foco que iluminando más de un genio, éstos han sabido reverberar sobre los otros con mayor ó menor provecho, puesto que negado será hacerle ver á un ciego los colores. Sin embargo, hemos de tener presente que no toda la humanidad se ha compuesto de ciegos y sí son muchos los que se han asimilado parte de esta luz y salido de la obscuridad en que yacían. ¡Es el tiempo de las luces! exclaman por, doquier ¡como si hubieran llegado al summum del progreso! Pero ¡oh! que á pesar de tanta luz la humanidad sigue á obscuras, pero noes porque esté faltada de la luz 156 luz y unión «spiritual que ilumina hasta lo más escondido, desapareciendo la igno- rancia y en suina el mal que impide un estado de bienandanza, de amor, de paz y fraternidad de los seres entre si. La carencia de la luz espiritual trae consigo el mal régimen y no es posible por ningún concepto que haya una buena organización sea cual fuere... En todo la impresión del momento, impresión pasional é ilusoria que trae por consecuencia funesta el desbarajuste y la ruina de toda iniciativa altamente progresiva. Que esto haya ocurrido de aqui atrás no es extraño, dado el estado de mayor ignorancia; pero hoy que es el tiempo de las luces, no debe oeurrir y no ocurrirá si nos asimilamos mucha luz espiritual que será la que nos prepare para desarrollar toda iniciativa de trascendencia en el orden del progreso material. Recordemos este pensamiento del apóstol del bien Miguel Vives: «Bueno es ser sabio, pero es mejor ser bueno». Cuyo pensamiento creo yo es simbólico y abarca todos los órdenes de la vida humana. Emilio Márquez. Aznalcollar. El alcoholismo El alcohol tiene la virtud de desenterrar la risa. Ese es el peligroso poder del alcohol, que disipa-las penas y hace volver la risa. Ayer al mediodía caminaba una mujer por el lado norte de la calle Veintiocho, cerca de la Cuarta Avenida. Su paso era un poco vaciiante y no muy natural. No era joven ni vieja,—tal vez de cincuenta años, tal vez de treinta—una de las mu- chas mujeres de treinta años que la pobreza y el sufrimiento hacen aparecer como de cincuenta. Su vestido negro, deteriorado y con algunas manchas. Su cara era honesta aunque también deteriorada y marchita, su cabeza iba desnuda y su pelo era entrecano. La mano con que levantaba ligeramente su vestido es- taba rugosa y sus venas hinchadas. Esa mano se había ocupado en muchos tra- bajos rudos. :í: La mujer parecía vieja, pero sus maneras y acciones eran por el momento las de una joven. Su andar no era muy firme, y eso fué lo tínico que delataba su con- dición al principio. Al caminar miraba á su rededor como una niña de catorce años. Iba cuchicheando consigo misma. Dejó caer por un segundo su falda, é inclinán- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 157 dose con cierta impaciencia la levantó dejando escapar una alegre risa que hizo sonreir también á los transeúntes. ¡Esa risa contó toda su historia! Los hombres que pasaban habían mirado indiferentes á esta gastada obrera, sin que hubiesen notado quizás su paso algo vacilante, puesto que la fatiga y el cansancio muchas veces producen ese efecto*. Pero todo el mundo se fijó al oir esa sonora risa é inmediatamente todos supieron que esa infeliz mujer había be- bido con exceso; Si ella hubiese sido joven y bien vestida y en su semblante re- velase una mujer feliz con grandes oportunidades para una vida decente, esa risa habría parecido casi natural y no habría causado sorpresa. Pero viniendo esa risa de una mujer marchita, todos comprendieron que detrás de esa risa se ocul- taba otra causa que una simple alegría natural. Algunos que tñiraban á la mujer se rieron también, otros la despreciaron irritados y muy pocos la vieron con lás- tima y simpatía. Riéndose, recogió su vestido, mirando en torno con sus ojos marchitos, como· buscando simpatía y una apreciación amistosa del pequeño incidente ridículo que á ella le pareció chistoso. Y entonces, con su paso vacilante pero suficiente para llegar segura á su hogar, desapareció de la vista. De todos los que la vieron quizás los más dirían después; «He visto esta tar- de una mujer borracha», sin agregar ninguna otra cosa. Pero este periódico desea agregar algo más, y especialmente para los prohibicionistas, los reforma- dores morales y otros hombres y mujeres bien intencionados que están comba- tiendo el alcoholismo en todo el país. La borrachera es repulsiva, pero lo es sobre todo y de una manera chocante en una mujer que la ostenta públicamente en la calle. La borrachera debe ser combatida, y toda persona que ha tomado parte activa en ese combate, está ha- ciendo un trabajo noble, cuando Jo hace sensatamente. Nosotros deseamos que los prohibicionistas y todos los reformadores hubiesen podido ver á esa pobre mujer, triste, marchita y gastada por el trabajo, que hubiesen podido comprender sus sufrimientos y el poder del alcohol. Esa comprensión les habría ayudado in- mensamente en su lucha.'En todo combate es muy importante conocer las armas y el poder del enemigo. La risa de esa infeliz mujer contó la historia del poder del alcohol, historia que debe estar présente en la mente de todo hombre y de toda mujer que trabajan por la temperancia y el adelanto moral. . ^ • El alcohol produce ciertos efectos en favor de sus víctimas, y si se, desea dominar el alcoholismo, se debe procurar producir esos mismos efectos favora- bles en mayor ó menor escala. Esa pobre mujer nació, como otros seres humanos, con la risá en su alma. Pero esa risa fué sepultada profundamente, tal vez desde su infancia! La pobreza, los sufrimientos, el duro trabajo la sepultaron. Largas y penosas noches á causa de los hijos, de las enfermedades y contratiempos, se- 158 LUZ Y UNIÓN pultaron en lo profundo la risa y la alegría. El alcohol tuvo la virtud de hacer brotar á la superficie la risa que yacía en 6l fondo casi olvidada. Y esa pobre cara triste, gastada y marchita, siquiera por un segundo volvió á t^ner su antigua expresión de alegría que nunca debió perder! Si deseáis, pues, combatir el alcohol, tratad de hacer de una manera noble lo que ese alcohol está haciendo*de una manera degradante. El alcohol hace que el pobre olvide siquiera por un momento su pobreza. Pues combatidlo aliviando al pobre en su miseria. El alcohol disipa precariamente las penas y hace brotar la alegre felicidad de la infancia. Pues combatidlo disipando permanentemente la tristeza. Tratad de hacer volver la felicidad del sér humano fatigado, displicente y abrumado de trabajo. Si deseáis que esa mujer abandone el alcohol ella lo dejará. Pero ¿qué es io que le ofrecéis? ¿Le pedís, como un favor para vos, ó en respuesta á vuestra predicación y consejos, que lleve una vida dura, triste y fa- tigada, sin que tenga jamás un momento de felicidad y de expansión? Pues le pedís demasjado. ¿Habéis notado cómo y cuándo ha disminuido la embriaguez? Pues ha sido precisamente cuando los salarios y la prosperidad se han aumentado. Y casi ha desaparecido junto con la pobreza y la miseria. Hallamos la embriaguez sobre todo en las clases desesperadamente pobres. El alcohol es el rey de los barrios pobres; allí aprieta con sus manos las gargantas de las víctimas de la pobreza, que están hambriadas y recargadas de trabajo, así como también aprieta las gar- gantas de sus víctimas que están demasiado alimentadas y ricas en medio del ocio y los excesos que facilita la riqueza heredada. Esa pobre mujer se rió quizás por primera vez, después de muchas semanas de duro trabajo, y se rió porque estaba embriagada. Pues ayudadla para que se ría sin el estímulo del alcohol. Alegrad su vida. Haced que el mundo sea para ella más amigo, hacedle la vida más digna de vivirla, y no hallaréis trabajo en persuadirla que deje el alcohol. Lo que se puede decir de ella es aplicable á mi- les que toman en exceso; Ellos no son pobres porque beben, sino que beben porque son.pobres. Ellos no están tristes porque beben, sino que beben por- que están tristes... ■ _ (Thp EveningJournal). New York, Marzo 31 de 1908. Madame Ruffina de Noeggerath (La bonne maman) Madame Ruffina de Noeggerath, apellidada La bonne maman por los espiri- tas franceses, la recopiladora de las hermosas comunicaciones publicadas bajo el título de La Survie, en francés y La Vida de Ultratumba, en español; la au- tora, casi podríamos decir, de esta obra que ha merecido el honor á muy pocas ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 159 acordado, de ser traducida á todos los idiomas europeos, desencarnó en su casa de París, Rue Milton, á las 5 de la tarde del día 15 del pasado Abril, á los 87 años de edad. Con ella ha desaparecido de la escena terrestre una de las mejores propa- gandistas del Espiritismo; toda una larga vida de desengaños y sacrificios por este gran ideal, no habían podido amenguar su fe ni abatir su ánimo, como tuvo ocasión de comprobar no há mucho un redactor del gran diario parisién Le Matin, al ir á visitar, en su departamento de la Rue de Milton, á la decana de los espi- ritistas franceses. La labor de Mmè. de Noeggerath dentro del campó déla propaganda espirita, es una de las más intensas y afortunadas que se han realizado hasta el día; su espíritu pertenecía á aquella falange de elevados seres que fieles continuadores de la gran obra del inmortal Kardec, todo lo arrostraron antes que dejar de pro- pagar el ideal que tan gran maestro les había legado. Desde las columnas de esta Revista, la «Liga Espiritista Española» une su pésame al de los espiritistas del resto de Europa y transmite á la familia de la gran espirita sus más sinceras demostraciones de cariño por la gran pérdida que acaban de sufrir, en la seguridad de que el espíritu de la que fué en la tierra La bonne maman, no les olvidará, ni nos olvidará á nosotros que la tomamos como á modelo, prestándonos con los efluvios de su amor los alientos necesarios para continuar la obra de amor y caridad que tenemos emprendida, que era su obra. Notas bibliográficas De la importante revista de Valparaíso (Chile) Revista de Estudios Psicoló- gieos, copiamos la siguiente y autorizada opinión, acerca la obra de regalo de este año, por la cual damos las más expresivas gracias á tan estimado colega. Elementos de una Nueva Ciencia por Mariano Ruth Sinué.—El libro Ele- , mentos de una Nueva Ciencia, es una bella obra que hace honor al espíritu qüe la concibió. En su parte científica y trascendental encierra en su filosofía mu- chos conocimientos qué por estar impregnados de la más pura moral estos ejem- píos son de mucha utilidad para todos los iniciados en la ciencia del saber, que es el alimento con que se nutre el espíritu del sér inteligente. El libro contiene además un material de lectura muy sencillo y de lo más va- riado que lo hace interesante por su fácil comprensión hasta para la más limitada inteligencia. Es asi esa obra, se hará recomendable por sí sola, está completa- mente conocida por los que la han estudiado y comentado, dando su juicio como un veredicto en honor de su justo mérito, como tributo de su reconocimiento. Y será esta segunda edición la que la hará popularizarse, sembrando sus be- líos frutos, por doquiera que el hado del saber la haga marchar para bien y co- ' nocimiento de la humanidad.—E, de la Barra. El Mundo Oculto , por A. P. Sínnett.—Constituye este libro uno de los mejores alegatos que hasta el día se han escrito á favor de la teosofía, y 160 LUZ Y UNIÓN aunque la opinión que expresa del Espiritismo no es de las más lisonjeras, no eso podemos ni debemos la, por negar castellano gran importancia de esta D. traducida al por José Jiménez obra, Serrano, y editada Juan Torrents. por nuestro amigo y hermano Forma El Mundo Oculto, dos tomos en 4.°, de unas vende 500 al páginas en total precio de 5 ptas. el tomo. y se Gracias mil al hermano Torrents por el envío. ^ í*: Do Paiz da Luz .—Comunicaciones obtenidas D. —El Fernando de no haberlo recibido por Lacerda. con bastante nos el juicio crítico anticipación tan impide poder hacer un completo como hubiera sido nuestro deseo. Por demos decir ahora sólo que las comunicaciones po- en el contenido, son hermosísimas enseñanza, tanto y de por el fondo moral gran que en ellas como las digámoslo así, de los campea espíritus por firmas, que las han dado. Formarán dos tomos en 8.° Agradecemos prolongado y de unas 268 cada uno. á su autor páginas ó recopilador el envío del tomo completar nuestro juicio al recibir 1esperando el 2.° poder Movimiento espiritista Segundo Congreso Espírita de México .—De dos ha de el grandes y resulta- ser «Segundo Congreso positivos de Espírita de México», celebrado la este nombre en durante ciudad los días 1 al 15 del mes de Abril de este se tomaron en el acuerdos de año, cual gran importancia para el porvenir del sólo México Espiritismo, no tan en y en toda la América del Sur, sino ideal la que hasta el de nuestro en Europa latina, para pues se trató en una de sus Confederación sesiones de formar una espírita Latino-americana, acordándose que la la última sesión Junta Permanente que en se nombró, designase una Comisión que estudie dicho proyecto. El no conocer aun las conclusiones adoptadas en tan nos imposibilita de poder extendernos importante sobre Congreso, el mismo cual hubiera sido deseo; nuestro en el próximo número lo haremos á sernos el posible, reservándonos el for- mar juicio final cuando hayamos recibido leído la memoria Entre y de dicho tanto y sean cuales sean las conclusiones Congreso. no nos que felicitar á adoptadas, me- nuestros hermanos podemos mexicanos por el decidido amor hacia el Espiritismo y afán de propaganda del mismo que en todos sus actos se revela. En atenta circular, el Centro comunica espiritista de Maceio la (Brasil) «Mello Mala» nos que en Junta general celebrada en 9 de Febrero del fueron corriente año elegidos para formar la Junta Directiva del mismo los hermanos que tomaron posesión de sus cargos el 15 del siguientes, mismo mes: Alepio de Carvallio, Presidente; Melhodioda Siloa Manoel Maia, Moraes, Secretario; Joao Luis de Almeida Vicepresidente; bral, Procurador Marqués, ó Tesorero; Ozeas Ca- Contador; José Barbosa Junior, Bibliotecario. Deseamos á la nueva Junta gran acierto en sus año que deberán trabajos, esperando el ocupar sus puestos que será una el Espiritismo brasileño. época de engrandecimiento para ' I AÑO IX NÚM. 7 SIJIIABIO: D. Isidro de J. Olivares.—Timbre de gloria, por La Redacción.— Ideogenesis, por D. Manuel Pareja Medina.—Sigamos estudiando, por D. Benito Ro- dríguez.—¡Cuántas historias!, por D.® Amalia Domingo Soler.—Asociaciones.—Des- pedida, por D. Luis Farrés.—Carta interesante, por D. Martin Font.—Dictado media nimico.—Comunicación medianimica.—Justo tributo, por D.^ Amalia Domingo Soler. —El Espiritismo en Nicaragua. - Un pensamiento.—Movimiento espiritista. Corresponsales Administrativos néjico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4.® de Nicolás Bravo, 19, DRIZABA (Veracruz). Paerto-Rico.—Faustino Ysona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE. Caba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO.—Delfín Roig y Roseil, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 34, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN.—Luis G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- doj. Raggi, Apartado 17, CAIBARIEN.—D.®'Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN.—Manuel Y. López L., Carrera 6.% n.° 248 bis, BOGOTÁ. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedella, Dtor. de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés», PEHUAJO. —Zoilo Casas, LOBERIA.—Atilano Hervas, Tucumán, 1736, BUENOS AIRES.—Pedro Iraola, NECOCHEA.—Manuel Torres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S.JOSÉ DE COSTARICA. Islas Pilipinas.—Casimiro Peña, San Rafael, 110, (Manila), SAN MIGUEL. Brasil.—Agrippino Gómez Veado, Rua Municipal, n.° 3, CIDADE DO MURIAHÉ (E.stado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Bahia).—Edla de Moarés Cardoso, San Francisco Ha- vrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Bahia de Samana), SÁNCHEZ. —Aurelio León, SAN FRANCISCO DE MACORIS. República de Aicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Ecuador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CORRESPONDENCIA iSres. il$nscriptores qne han satisfecho la suscripción de 1908 J. M.—Cádiz. J. J. B.—Yaguajay (Cuba) J. P.—Cervera (Lérida) A. G.—Villanueva de la R. N. A.- Juana Diaz (P. R.) M. G —Mahón J. P.—Irún J. del C.-Id. id. B. V.,-Id. M. P.—Madrid 1. O.—Ponce (P. R.) M, M.—Cardenate(C.) F. F.—Sta. Rosa de Toay A. S.—Infantes B. S.—Ciudad Real G. M.—Id. id. F. O. —S. Martin J. C.—Jalapa (México) C. P.—Id. id. J. V.—Gabá F. M. —Mayagigua (Cuba) A. L.—Linares J. S. —Palma de Mallorca V. M. —Villanueva de (C.) F. S.—S. Juan de P. R. M. dos S. C.—Manaos (B.) G. D — Lares (P. R.) S. G.—Beas de Segura P. C.—Barcelona J O. B.—Mequinenza (Z.) L. B.-Id. id. R. R. —Coamo (P. R.) J. C. M. —Almodov'ar del A. R.—Sedi Bel Ábbes C. G.-Id. id. Campo (Alcanza al 16 de Abril de 1908) La Administración. ANO IX JULIO DE 1908 NÚM. 7 Nuestros Corresponsales D. Isidro de J. Dlivares Honramos hoy las páginas de esta Revista con el retrato y algunos datos bio- gráficos de nuestro activo y celoso corresponsal en Managua (República de Ñi- caragua). Nació nuestro hermano el 15 de Mayo de 1863 y tiene, por consiguiente, 45 años. Hijo de un liberal de ideas muy avanzadas, pero á pesar de eso, educado en el seno de la religión católica, pronto comprendió nuestro hermano los erro- res de que ésta está plagada, renegando, por consiguiente, de ella, y aunque nunca llegó á ser un materialista en el verdadero sentido de la palabra, había cobrado tal horror á todo lo que parecía tener algo de sobrenatural y misterioso, que á causa de ello rechazó por mucho tiempo la idea espiritista á la cual pre- tendía atraerle un anciano que vivía con la familia de nuestro amigo. Sin embargo, un día que empezó la lectura del libro El Cielo y el Infierno, 194 LUZ Y UNIÓN de Kardec, á ruegos de su anciano compañero, comprendió que aquello que su espíritu desde largo tiempo buscaba, era la doctrina publicada por aquel libro. A pesar de que leyendo las obras de Kardec y otras se había formado ya un concepto muy elevado del Espiritismo, los desengaños que sufrió con varios me- diums, que como vulgarmente se dice, le querían hacer tomar con sus comunica- ciones gato por liebre, hicieron que nuestro hermano no entrare en la senda de la propaganda activa del Espiritismo, hasta que en 1903 se puso en relaciones con el hermano Jonás Alvarez, en el que halló un medium de toda su confianza, lo que le animó á emprender los trabajos de propaganda necesarios para la formación de un Centro espiritista en- aquella población. En la actualidad, nuestro hermano es uno de los más firmes adalides con que cuenta nuestro ideal en aquella república. Desde estas columnas, honradas hoy por su imagen, enviamos á nuestro her- mano un fraternal saludo que le rogamos comparta con todos los espiritistas ma- nagüeños. Timbpe de glopia El mundo avanza; resurge nuevo y poderoso de entre las ruinas de un pasado brumoso y letal, en que la inteligencia durmiente del hombre yacía inerte y sin propias iniciativas en brazos de las más absurdas con- cepciones. Creado al nacer el espíritu, caía ante las gradas de la muerte, con la muerte en el alma y el terror ó el excepticismo en la conciencia para no elevarse jamás sobre la vida. Jugaba á los dados toda su eternidad. Pobre por naturaleza para luchar ante las más enormes adversida- des, sentíase infaliblemente perdido por debilidad y enconqendaba su suerte á la clemencia. Lasciate omni speranza. Entbnces algunos hombres se levantaron sobre la punta de los pies, y diciéndose elegidos de Dios, ofrecieron al hombre su salvación á un pre- ció bien oneroso: la abdicación de la facultad de pensar y la sumisión más completa en los hechos de la vida. Eran los mediadores entre Dios y el hombre, y lo que ellos ataran so- bre la tierra, habría de ser atado en el cielo. Asi, Dios mismo, quedaba sometido á sus designios por un compro- miso formal con ellos, ya que no podían dominarle con el propio im- perio. / ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 195 Y Dios, consecuente con sus compromisos, haría en el cielo lo que ellos dispusieran desde la tierra. Más tarde se cayó en la cuenta de que siendo el hombre, por sí mis- mo falible, habría de llenar el cielo de arbitrariedades y colocar á la Di- vinidad en graves riesgos de injusticia y se declaró ex propia autoritate á un hombre infalible para decidir e£c cdíáedrfl. Entonces se pusieron al habla con Dios, y Dios, sin duda, les prome- tió inspirarlos en sus decisiones, á pesar de los formidables discursos del obispo Strosmayer. Asi, un hombre quedó convertido en Dios sobre la tierra. ¿Quién puede oponerse á un poder tan absoluto? ¿Habrá alguien bas- tante osado para ello? Un anatema, una excomunión dictada por ese poder, bastaría para hacer trepidar las esferas del cielo. Es que Dios arroja lejos de sí aigu- nos libertos que se han permitido pensar libremente en uso de las facu.l- tades que El mismo les ha concedido. Pero enfrente del Vaticano se levanta la estatua colosal de Giordano Bruno... Más firmes que las rocas del Capitolio, se levantan de nuevo, sobre la fe razonada, aquellas rocas de la antigua Fócida, allá sobre las vertien- tes del Parnaso, que en un tiempo afirmaban la planta de alguna Pitoni- sa de Delphos. Y es que la Verdad, entristecida al paso del error, cubre su lumbre -como el Sol al paso de Mercurio, que nos anunció el s eñor ComaSj y re- nobra sus eternos esplendores cuando el error de los hombres abandona sus dominios. ■ - Y sobre el alto pedestal de la Razón, que se alza sobre la roca de la Ciencia, la fe de Galileo y de Servet dejaba hundir sus pies entre las lia- mas del poder teocrático, segura de sobrevivir á su bárbaro martirio. Cristo bajaba humildemente la cabeza ante los insultos de los sacerdotes y el Bautista prestaba su garganta para satisfacer el odio de una enco- petada meretriz. Voltaire habria despedido con una sonrisa burlona la nueva de su ex- comunión y Victor Manuel con una carcajada. Nosotros no hemos de hacer burlas sangrientas de la excomunión que nos notifica el «Hogar Católico», porque la burla es una blasfemia para los que seguimos la ley del amor. No hemos de hacer alarde de nuestra indiferencia, porque la indife- renda lleva en su seno la penumbra del odio. No hemos de seguir á la Iglesia católica en sus frases maldicientes, porque «sólo los malditos maldicen». 196 luz y unión No han de brillar en nuestra pupila los relámpagos de la ira, porque no somos iracundos. Gracias al Espiritismo hemos logrado ya expulsar de nuestra alma los bajos sentimientos de la venganza, las insidias del orgullo, los egoísmos y la enemistad. Hemos depurado nuestro espíritu del sentimiento del despecho^ el más acerbo sentir del odio. No queremos pasear por la Iglesia que nos excomulga ninguna mira- da compasiva, por si nuestra compasión la inflige una situación de infe- rioridad mortiflcante. Créannos los primates católicos: nosotros en cada hombre vemos un hermano, y donde encontramos un hermano, le amamos con el más puro amor de benevolencia y le devolvemos bien por mal. Les amamos, pues, aunque nos excomulguen, pero sentimos el tiem- po que pierden en maldecirnos. Tiempo perdido, sí, porque es inútil el tiempo empleado en arrojar fuera de una comunión á quien nunca ha estado dentro de ella." Y es éste, para nosotros, un timbre de gloria. La Redacción. Ideogenesis I recapitulando Antes de entrar al asunto que nos hemos propuesto en estos artículos, <■ séanos permitido rectificar aclarando la teoria que hicimos nuestra en los precedentes trabajos que nos hizo el honor de publicar la acertada Dirección de esta Revista, contestando de paso algunas alusiones que tal vez inopinadamente se la dirigen. No es fuerza que el Espiritismo elija de una vez y definitivamente entre el dualismo y el monismo: bastará, por ahora, que dude y lo dis- cuta. Por ahi debe empezar. Si aceptase cualquiera dé las hipótesis & priori y fuera de ei^'amen lógico, posiblemente adoptaría un error harto trascendental y tan funesto como las afirmaciones concretas y capricho- sas en que las religiones han fundado sus deleznables cuerpos de doctrina. Aunque lo afirmen autores y hombres de reconocido mérito, el Espi- ritismo no es hoy una religión. Cierto que el Espiritismo, al plantear su tesis y al excrutar sus prin- cipios generales, encuentra una relación filosófica entre el Universo y la Causa del Universo, trata su aspecto moral reconociendo los deberes y relaciones que éste tiene para con aquella Q-ran Causa. Esta es una con- secuencia inevitable de la fase moral ó si se quiere, de la naturaleza del yo, es decir, de la manera de ser y de sentir del espíritu humano. Hay entre nosotros y la voluntad divina una especie de gravitación que nos lleva por intuición empírica unidos indefectiblemente hacia un centro común de gravedad que se impone y nos llama desde lo descono- cido. Pero el Espiritismo no tiene hoy como fin inmediato y prístino el de precisar esa relación moral educando el modo de sentir del sér inteligen- te, sino el de investigar y desde su principio examinar para conocer en su naturaleza y propiedades, una vez hallado, el espíritu mismo y de esta manera elevarse al dominio y posesión de él, educando por vías se- guras su voluntad para libertarla de los estímulos accidentales hasta constituirla en elemento dócil del Bien de una manera consubstancial y perenne. De modo que aunque nos dirigimos como todo se dirige hacia Dios, nosotros seguimos un proceso muy otro que el de las religiones. El mis- mo que siguen todas las ciencias. No dudamos que Ciencia y religión han de unirse un día en una sin- tesis suprema de bien y de felicidad, pero entendemos que á Dios no se le encuentra con los ojos cerrados y por las solas apreciaciones del sentir, que es un mero aspecto, aunque superior., del instinto. Por algo y para algo nos ha concedido Dios el sentir del sér y sobre éste el sentir del pensar. Pero adviértase que el primero y el más embrionario es el sentir del sér y que después de larga elaboración aparece, en el sér, el sentir del pensar: lo cual en el procedimiento evolutivo que notamos en la Natura- leza, significa bien claramente, que es este sentir de un orden superior y más elevado y que se nos da con un fin útil: el de facilitarnos un medio de conducirnos libremente, conscientemente, hacia Dios, ya que hemos llegado á un estado propio para ello. El sentir del sentimiento es puramepie instintivo y desarrollado y en- noblecido por la educación que da al ejercicio, nos llevaría por si solo no más que al deleite. El sentir que lleva á la conciencia la cultura, ños conduce á la concepción del amor exento de concupiscencias que en- gendra el sublime. Por eso el Espiritismo, racionalista de suyo, trata en primer término de investigar para conocer y de estudiar para saber conducirse; primera, sentándo como premisa ese conjunto de verdades axiomáticas que según los clásicos ostenta el nombre exclusivo de Ciencia, pero cuyo nombre 198 LUZ Y UNIÓN específico es Ciencia objetiva y después, ese conjunto de verdades armó- nicas inducido de aquel primero de verdades axiomáticas, que por ser obra del concurso de la naturaleza-objetiva y abstracta á la vez, es lo que constituye la verdadera ciencia viva y palpitante que no encuentra limites ni vallas al investigar la verdad. No se diga más que el Espiritismo es una mera religión, que no es ciencia, que los espiritistas no saben lo que es ciencia; porque el evoca- dor de esos conceptos, irreflexivo juzgador del Espiritismo, correria el riesgo de ser ignorante de lo que es Espiritismo. El Espiritismo es ciencia que trata del conocimiento del espíritu y de las leyes de la generación y de su desenvolvimiento en su relación con el Universo. Sentado esto, vamos á reasumir y á mantener cuanto tenemos dicho del conocimiento del espíritu bajo su aspecto objetivo, para tratar des- pués su aspecto subjetivo y moral. La química inorgánica nos revela una materia elemental constituida en átomos, supuestas unidades de. materia incompresible de forma esfe- roidal en los cuales se aprecia la existencia ó la concurrencia de una fuerza que establece la ley de su régimen ó de sus relaciones entre si, de masa y de distancia, su gravitación. Este problema se ha discutido ampliamente entre los más hercúleos gladiadores do la ciencia: los unos han sostenido que la fuerza era una propiedad de la materia substantiva y los otros creyendo también que la materia substantiva era una masa homogénea é inerte, han supuesto la fuerza que la anima como un sér distinto en naturaleza de la misma ma- teria y como dueña de ésta, de una naturaleza superior á la materia inerte. Ambas escuelas han admitido un concepto común equivocado; el con- cepto de que la materia elemental estaba constituida por unidades ó ma- sas homogéneas substantivas, incompresibles é inertes. Oigamos á este atento á un hombre de indisputable mérito científico: á Comas Solá, adversario, para nosotros, circunstancial del Espiritismo, á quien aplaudimos con entusiasmo su teoria atómica y la valentia con que la rnantiene. «Yo confieso, dice, sinceramente, que cuando medito sobre la inti- midad de la materia, tal como nos la figuramos por rutina, ó por laa impresiones recibidas, no la entiendo, no puedo concebirla de ninguna manera. Podrá ser por incompetencia mia; pero yo no he podido com- prender jamás qué es un átomo material. Y este átomo tiene que existir, si aceptamos la realidad de la materia como una entidad distinta de la energía, y tiene que existir con las propiedades fundamentales que le han asignado los físicos y los químicos, propiedades entre las cuales^ figura la incompresibilidad, pues si el átomo fuese compresible quedaria. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 199 evidenciado que hay huecos en su interior y que por lo tanto no es un espacio lleno de materia como tiene que ser el átomo. Con este al absurdo concepto llegamos de suponer un cuerpo finito, que está dentro del quantum, dotado de propiedades mecánicas del orden de los indefinida- mente grandes, lo que lleva, como consecuencia, la de las densidades suposición que y masas atómicas deben ser indefinidamente cual grandes, lo no es cierto. »Menos mal si á pesar de estas mortales incoherencias se los explicaran fenómenos naturales por la teoría atómica. Pero muy de debemos lejos ésto; suponer siempre que existe una doble fuerza; cuando menos (cohesión y repulsión), que retiene los átomos á una distancia deter- minada en cada caso. Es preciso, por consiguiente, admitir una emana- ción de fuerza de cada átomo, llámesela cohesión, repulsión, afinidad, ósmosis, fuerzas que resultan obedecer á leyes de complicación inabor- dable, pero cuya existencia es absolutamente necesaria. El átomo entonces á pasa ser simplemente el hueco ó núcleo de una sirve atmósfera de ¿De qué fuerza. nos entonces este lastre que colocamos en el centro dé cada esférula ó atmósfera de fuerza? Indudablemente de no es más, en el nada; fondo, que un resabio del concepto falso que tenemos de cuanto nos rodean. (Este subrayado es nuestro). Induce con tanta claridad el astrónomo Sr. Comas la moderna hipó- tesis de la materia elemental, que sería difícil exponerla con mayor acierto. El Sr. Comas, con la mayoría de los pensadores contemporáneos, sigue la teoria de Haeckel, y en punto á la naturaleza de lo que cono- cemos con el nombre de materia, niega el concepto de la materia como substancia y la ve constituida por una superficie equisensorial de la energia. Este mismo principio es el que hemos querido adaptar al Espiritismo, tomándolo de una escuela moderna ya imperante. De aqui pasaríamos sin dificultad alguna á.la teoria monista que mantenemos, si el Sr. Comas no cuidara de añadir que además de la fuerza ponderable existen otras fuerzas imponderables: la electricidad, el éter, la vida, el alma. Nosotros creemos con el Sr. Comas que Dios no hace nada inútil, y entendemos que para todo no ha tenido que establecer más que una sola fuerza. Para nosotros, estas fuerzas que indudablemente se desarrollan en condiciones dadas, no son otra cosa que manifestaciones distintas de una fuerza única; distintos estados de la energía regida por el número. Tal vez la idea de su varia naturaleza dependa de ese mismo con- cepto falso que el Sr. Comas dice que tenemos de cuanto nos rodea. Las distinguimos porque las unas son ponderables y las otras no se prestan á la ponderación; pero nada fundamentalmente científico nos autoriza para distinguir su naturaleza íntima, hoy tan desconocida. 200 luz y unión En realidad, el Sr. Comas no ha podido franquearse en este punto, porque ha tenido el propósito deliberado de combatir el Espiritismo, sin llegar á la negación de la existencia de Dios y del espíritu. El ha cumplido una consigna. Se ve bien claro en el espíritu total de su artículo: cuando sortea los,rozamientos que pudieran hacerle caer en heregía; cuando se tira á fondo contra las más autorizadas reputaciones que le impiden el paso; cuando pretende demoler el colosal obstáculo de la mediumnidad; cuando quiere apartar el inmenso bagaje de los sabios no clásicos; cuando falsea los hechos para desvirtuar un medium y cuando, siguiendo el sistema de la Iglesia Católica, acuerda no volver á publicar trabajos sobre Espiritismo en La Actualidad, que puedan des- pertar la atención del público profano. Un hombre de la ciencia clásica convertido en sofista, hace una figura tan desventurada como la del Newton teólogo ó la del padre Ca- rulla poniendo la Biblia en verso. Comas cree en Dios sin haberlo visto ante la ciencia clásica; cree en la existencia del alma sin haberla comprobado y niega la mediumnidad; es decir, la posibilidad de que los espíritus se comuniquen y vengan ante los hombres. ¿Cómo verá el universo desde su Observatorio? ¿Pondrá la existencia de las almas, en la que él cree, fuera ó en un lugar circunscrito del universo? Sólo en estos casos estaría fuera de la posibilidad de personarse en comunicación con los hombres. Y si viven libremente y sin limitación de espacio en el universo, ¿por qué no han de presentarse á los hombres siempre que encuentren medios para ello? Manuel Pareja Medina. Sigamos estudiando Para estudiar con algún fundamento y alguna claridad al sér racio- nal en la Tierra, es necesario seguir el método deductivo é inductivo. Si nos referimos al cuerpo físico y fundándonos en sus propiedades materiales, debemos reconocer la unidad de la materia, recorriendo ima- ginativámente todos los estados en que puede encontrarse, dada la infi- nita divisibilidad de los átomos, hasta desvanecerse en nuestra mente el concepto'de materia diluida en la masa etérea de que suponemos inun- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 201 dado el Espacio luflnito; pero de este lógico raciocinio deductivo, no con- seguimos encontrar conclusiones satisfactorias que satisfagan nuestra razón, y la verdad absoluta que buscamos como causa, se aleja indefini- damente, encontrándonos siempre sumergidos en el caos de la materia sin que la causa de su existencia y de su actividad se manifieste. Este es el campo ilimitado en cuyas circunvoluciones viciosas se han agitado y se agitan los materialistas. Por el procedimiento indeductivo reconociendo que nuestra existencia tiene un origen y una causa, encontramos la manera y el último análisis se resuelve en fuerza; y como ésta no puede referirse más que á la causa animadora, ó sea al Sér único y Total, esencialmente activo, manifestán- dose infinitamente, de infinitos modos, conforme á su voluntad absoluta, deducimos lógicamente, satisfaciendo los dictados de nuestra conciencia, que nuestra voluntad es también el agente propulsor que mueve los ele- mentes esenciales inteligentes y las fuerzas de los átomos materiales que limitan, que nos individualizan, caracterizándonos por nuestra manera de estar, en relación y en orden solidario con todos los seres, con todas las cosas, psíquica y materialmente, y como seres animados y animado- res, con la causa de las causas, con el Sér Absoluto, manantial perenne de toda, manifestación psicofísica, porque no puede haber y no hay como suponen los Teosoflstas, Mundo físico. Astral y Mental. Si la materia es una y la fuerza única también, la mentalidad ha de ser otra unidad, cada una de distinto orden y gerarquía; por consiguien- te, contrapuesta é imposible de coexistir ordenadamente, absurdo filosó- fleo que no satisface á la razón, ni resiste á la comprobación positiva. Del mismo modo que el Teosofismo antiguo, santuario de la ciencia, ha fracasado entre sus adeptos actuales, éstos se estrellarán también en los mismos arrecifes filosóficos, lo mismo que los materialistas; porque los primeros Teósofos espirituales, con sus siete planos de la materia, re- conocían siete organismos animados y el último, el de la suprema per- fección, se desvanecía en el éter Universal, en las esferas de la materia- lidad substancial divina, pero al fin en un supremo grado de la materia espiritualizada. Los Teosoflstas actuales, ya reconocen que esos planos suponen regio- nes superpuestas de materia en grado superior respectivo de divisibili- dad, pero esta idea es contraria á las propiedades expansivas de la ma- teria; suponen también, que los planos se refieren á los distintos estados de esta materia y que entran en la composición de los organismos, y ad- miten el sólido ó físico, el Astral ó íluídico y el mental (materia también) dotada de facultades psíquicas conscientes, asi como al cuerpo astral le conceden facultades imaginativas y pasionales; cuando ocurre la sepa- ración por muerte, la materia física asi como el cuerpo astral y físico, 202 LUZ Y UNIÓN se desvanece en el Todo, pero admitiendo como admiten el progreso psi- quico y el desarrollo por evolución del elemento astral y material, es muy difícil ordenar y armonizar estas personalidades y estos elementos contrarios, porque al fin, la materia representa en el cuerpo, lo grosero, lo brutal y despreciable y el individuo Astral, los vicios y las pasiones como representación del mal, un sér siempre imperfecto, en pugna con las personalidades perfectas y conscientes, ¿pero dónde llega la perfec- tibilidad psicológica, ó grado superior de la materia? al Nirvana (limbo eterno de la conciencia) Materialismo también, Trinidad material cons- dente, tan imposible como todos los dualismos y Trinidades distintas ó consubstanciales. No es necesario ocuparse de las Escuelas Monistas ó politeístas fun- dadas y colocadas en los antiguos y modernos Ocultismos. La prueba de su inconsistencia é incompatibilidad, ha sido yes el desacuerdo y la lucha en que se han combatido, para' destruirse y rea- parecer en otras formas modernizadas, utilizando las fuerzas políticas para imponer creencias religiosas ó ateas, según la pujanza de las potes- tades interesadas egoistamente en provecho de los más fuertes. Es preciso, pues, según la presente situación y la diversidad de pare- ceres, de ideas y de procedimientos contradictorios y opuestos entre si, si queremos que la humanidad se una en un solo pensamiento, con un solo fin, el de la unidad substancial, comenzar un nuevo estudio en la Tierra, que será el estudio del Universo. Los fundamentos de la Ciencia Universal que en la Tierra ha de sur- gir del justamente proclamado microcosmos de la Naturaleza. «El Nosce te ipsum», considerado con razón principio de la sabiduría, será nues- tro Lema y confiamos llegar á constituir por la razón y experimental- mente, esa unidad substancial del sér racional en la Tierra y por consi- guíente de todos los seres de la Creación, expresiones individualizadas de la Omnipotente voluntad absoluta, siendo y manifestándose infinitamen- te, de infinitos modos en cada instante de la Eternidad, sin tiempo ni es- pació por ser lo absolutamente infinito y lo infinitamente absoluto. ¿Qué es el átomo, última forma del estado material que nuestra razón alcanza?, un algo, un elemento de fuerza animadora, que en su vida de relación cambia y se metamorfosea su situación, su posición y su manera de ma- nifestarse. Como átomo, la razón nos dice que ha de ser compuesto de elementos animadores también y en esta divisibilidad de las fuerzas ani- madas, llegaremos siempre á la causa animadora, al sér único, á la to- talidad en la unidad. Nosotros quisiéramos fundamentar la Ciencia, cuyo único carácter universal, es psicofísico, puesto que entendemos por psíquico, la fuerza esencial activa, que se manifiesta substancialmente en el mundo físico de ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 203 la materia, no como agente distinto, sÍQo como unidad esencial, siendo activo necesariamente y perfectible en desarrollo indefinido, en cuanto se refiere á su manera de estar en si mismo y con relación á los seres prósi- mos ó lejanos con quien solidariamente comparten y relacionan sus actos mentales y externos. Benito Rodríguez. ¡Cuántas historias! I Varios periódicos fian publicado el relato de un Drama pasional, ver- daderamente interesante, pareciendo imposible que una niña de 17 años tuviera tanta energia para buscar la muerte. En la edad de las ilusiones, de las esperanzas, cuando parece que la vida tiene tan dilatados horizontes, decir resueltamente quiero morir, algo terrible tiene que haber tras de aquella fiorida juventud. El relato dice asi: DRAMA PASIONAL Toledo.—Un terrible drama de los llamados pasionales en el que concurren circunstancias extrañas, es objeto aquí de todos los comentarios. Desde hace algún tiempo sostenían relaciones amorosas una bella muchacha llamada Agustina Gai'cia, de diecisiete años, y Samuel Pascual, de dieciocho. Los novios parecían profesarse entrañable afecto; había en ellos todo el fuego de la primera pasión, con la exaltación que generalmente acompaña á los amo res en los primeros años. Los padres de Agustina debían partir en breve para Madrid y claro es que había de acompañarles su hija. Los novios, al saberlo, tuvieron un horrible disgusto; no podían renunciar al placer de cambiar diariamente ardientes miradas y mutuas promesas de cariño inmenso. Esta fué sin duda la ' causa de que surgiera en ellos la idea del trágico ■drama desarrollado, en el que, al parecer, Agustina fué la que mayor valor y resignación mostrara. No se sabe concretamente la gestación que el suceso tuvo; pero se conocen bien, desgraciadamente, sus fatales consecuencias. Hace dos días Agustina desapareció de la casa paterna y la familia se ha- liaba consternada. Cuando creían que la hija había huido en compañía de su novio, vino á sumirles todavía en mayor desesperación terribles nuevas. 204 LUZ Y UNIÓN Un tío de Agustina había recibido una carta de ella en que le decía que, cuando la leyera, su sobrina estaría ya muerta. Poco después el vigilante del cementerio avisaba á las autoridades que á la puerta de éste se encontraba el cadáver de una señorita y un joven gravemente herido. Este, que era el novio de Agustina, Samuel Pascual, declaró que anoche, á las diez, fueron los dos hasta allí. Agustina se obstinó en que la matase, y como él se negara, Agustina ame- nazóle con que se arrojaría al rio si no lo hacia. Entonces él le dió una puñalada en el pecho, en el sitio designado por la misma Agustina, y después otra en el lado opuesto, también por orden de su novia. En seguida intentó Samuel suicidarse, dándose tres cuchilladas con la mis- ma arma; pero á pesar de los esfuerzos hechos no logró matarse. El suceso ha producido gran impresión, porque las familias de los protago- nistas de este drama son muy apreciadas y gozan de generales simpatías. Queriendo estudiar en ese gran libro inédito de la humanidad, pedí al guia de mis trabajos alguna explicación respecto á este sangriento drama, y el espíritu me dió la siguiente comunicación; II «Tenías razón al pensar que tras de aquella florida juventud había un algo terrible, espantoso, había un crimen cometido por orgullo, por ambición, por afán de adquirir riquezas. Los novios de hoy, ayer estu- vieron unidos por el lazo del matrimonio; eran felices; ocupaban una gran posición social, y un hijo vino á completar su dicha; un apuesto mancebo que reunía belleza, bondad, elevación de espíritu y una inteli- gencia tan desarrollada y tan bien equilibrada, que prometía ser un hombre notabilísimo. Sus padres estaban orgullosísimos de tener un hijo que reunía tantas perfecciones, y soñaban unirle en matrimonio con una joven duquesa, hermosa y distinguida; pero Romeo estaba enamorado desde niño de una joven muy bella, muy buena y muy pobre, porque su padre era un modestísimo empleado, cuyo sueldo era tan mezquino, que su hija Isabel tenia que bordar de día y de noche para ayudar á los gas- tos de su casa; pero Romeo la quería con delirio, y como él era muy rico, no le importaba la pobreza de su amada; él tenia riquezas sobradas para darle el fausto de una reina; pero sus padres se opusieron abierta- mente á tal enlace; emplearon los ruegos, las amenazas; mas todo fué inútil; él dijo resueltamente: «O con ella ó con nadie uniré mi suerte». Sus padres se callaron y dejaron dormido el asunto; pero entre tanto urdieron una trama terrible, arrojaron sobre Isabel el fuego de la ca- órgano oficial de la liga e. española 205 lumnia y la hicieron aparecer ante Romeo como una mujer perdida, encenegada en la prostitución; hicieron llegar hasta él cartas dirigidas á hombres que le ofrecían montes de oro; y Romeo, loco, frenético, le escribió algunas lineas diciéndole: «Te odio, te despreció, ¡maldita seas!; que mi sangre caiga sobre tu impura frente»; y ante la morada de Isa-, bel se mató de un pistoletazo. Ella oyó la detonación, y sin perder mo- mento salió de su casa, y corrió desatentada buscando el rio qué bañaba los muros de la población, y en sus aguas encontró el término de sus dolores. Los padres de Romeo se horrorizaron de su obra y levantaron una iglesia para implorar el perdón de sus culpas, vistieron á muchos santos, derramaron el oro á manos llenas; pero sus remordimientos no les dejaron una hora de reposo y dejaron la tierra desesperados y abru- mados por el peso de su iniquidad. En el espacio se dieron palabra de volver juntos y morir desgraciadamente como hicieron morir á su hijo y á la inocente y malograda Isabel; por eso ahora, ante una contrarié- dad que podían haber soportado y haber procurado hacerla más lleva- dera por medio de una asidua correspondencia, se entregaron á la desesperación, especialmente ella que había sido en su anterior existen- cía la instigadora del crimen, la madre ambiciosa que soñó para su hijo todas las grandezas de la tierra. i»Los criminales no pueden ser felices; por eso esos infelices, en lo más hermoso de su juventud, han roto todos los lazos que los unían á la vida. ¡Hay tantas historias! ¡hay tantos dramas ocultos en la noche del pasado!... ¡se han cometido tantos crímenes por el afán de acaparar tesoros!... ¡Preguntad! ¡inquirid! levantad una punta del velo que cubre el ayer y rogad por los pecadores, que muchos hay en el universo.— Adiós»..- III Bien dice el espíritu: ¡Cuántas historias! ¡Lo que parece más absurdo y más incomprensible, qué sencillo y qué natural aparece cuando se conoce e^por qué de aquel desastroso efecto! Es cierto, ciertisimo, la felicidad no es el patrimonio de la tierra, porque sus habitantes todos somos licenciados de presidio, que hemos vuelto á caer en el momento que nos hemos visto libres, y una vez y otra vez y cien veces hemos cometido la misma falta. Gracias que el tiempo es eterno como la grandeza de Dios, y con el transcurso de los siglos llegaremos á ser sabios y buenos; y cuando sepamos unir el amor y la ciencia, brillará el sol de la felicidad. Amalia Domingo Soler. 206 luz y unión Asociaciones Centro espiritista "L·a Aurora", de Sabadell Sr. Director de la Revista Luz v unión. Muy señor nuestro y respetable hermano: Le participamos que el día 9 del corriente contrajo matrimonio civilmente la simpática joven y propagandista de nuestros caros ideales Dolores Vila Oliver con el joven Luis Aramburo y Romeu, espiritista también, hijo de Josefa Romeu, medium, que de muchos años es cono- cida tanto en Barcelona como en Sabadell, hoy día en Buenos Aires. Fueron testigos del acto nuestros hermanos Augusto Vives y Ramón Saldoni. Fué el acto celebrado con toda la solemnidad que se acostumbra en seme- jantes actos. En virtud de la premura del tiempo, por haberse de ausentar al cabo de dos días, para irse después de desposados los futuros esposos á Buenos Aires, el domingo anterior de efectuarse el enlace matrimonial, nuestra muy querida her- mana Dolores Vila, junto con su futuro esposo, en prueba del amor que siempre ha profesado al Centro espiritista «La Aurora», quisieron venir á despedirse, para alejarse, después de celebrado el acto thatrimonial, á Buenos Aires. Dedicáronles los hermanos del Centro «La Aurora» una sesión medianímica en prueba del amor que á dichos hermanos sienten. Después de dos comunica- ciones muy sentidas, el hermano Presidente anunció á la reunión que en virtud de la próxima partida de nuestra muy querida hermana Dolores Vila, nos quería dar el adiós á todos antes de marcharse á su nuevo destino, á lejanas tierras, en prueba del amor que á todos nos ha profesado siempre. El hermano Presidente dirigió la palabra á los futuros esposos, demostrán- doles lo mucho que sentían los hermanos del Centro «La Aurora» la partida de tan simpática y propagandista hermana, recomendándole á Dolores y á su futuro esposo que cuando estén á lejanas tierras trabajaran aun con más ahinco que no había trabajado ella aquí con la propaganda de su seductora palabra, á fin de dar más luz á la humanidad. En seguida se levantó el hermano Luis Farrés, dando lectura á un trabajo escrito exprofeso para el acto. Al concluir este hermano se levantó nuestra muy querida hermana Dolores Vila. En aquel acto estaba tan conmovida que apenas podía levantarse; tanta era su conmoción que casi no podía hablar, porque se le ahogaba la voz en su garganta, rodando por sus mejillas lágrimas de amor que le salían de su corazón; y haciendo gran esfuerzo para hablar, nos dijo lo siguiente; «Hermanos de mi alma: Profunda emoción embarga mi sér y difícil es para mí manifestarme cual desearía. ÓRGANO OFICIAL ÜE LA LIGA E. ESPAÑOLA 207 «Saludaros á todos desde lo más profundo de mi alma y daros mi adiós, es lo que en estos momentos debo hacer. »¡Ah, hermanos queridos! Dejadme un instante siquiera deleitar mi espíritu evocando los gratos recuerdos que aquí en mi mente afluyen en estos momentos. »¡Ah! sí, todo cuanto me rodea son para mí bellos encantos. Aquí, junto á vosotros, al calor de vuestro amor, ha despertado mi alma. He cantado himnos de amor al Sér Supremo; mi espíritu se ha remontado á esferas de' luz y de amor muchas veces y... ¡me habéis amado tanto! «Entre vosotros he crecido cual crece la humilde violeta en la espesura del bosque, y al partir ahora tan lejos esa violeta guardará la fragancia de su amor para vosotros. «No hay distancia para los seres que se aman, puesto que el amor los une. El amor y el destino me llaman á otro lugar; pero pensad que desde allí, vuestra hermana, vuestra amiga del alma, que tanto os ama, os recordará siempre y guardará en su corazón ese amor santo que siempre os ha profesado. «¡Adiós, hermanos de mi alma, queridos míos! entre vosotros estará mi espí- ntu á menudo; recordadme mucho y mandadme desde aquí vuestros reflejos amo- rosos.—He dicho». ¡Ah! ¡con cuánto amor nos dirigió su palabra! ¡qué acento tan hermoso! Fué tanta la emoción que brotó de su corazón que todos, absolutamente todos, IJorá- bamos como niños. Y ¡cómo no! si todos la amábamos como una madre ama á su hija. Y ¡cómo no! si había crecido entre nosotros y ella nos amaba tanto. Ella era para nosotros un ruiseñor que con sus cantos de poético amor daba calor y vida á cuántos la escuchaban. "Al concluir su oratoria fué coronada de calurosísimos aplausos. Después de un rato de emoción, el hermano Presidente dió fin al acto con un discurso de despedida tanto á Dolores Vila como á su futuro esposo, demos- trándoles lo mucho que deseábamos la felicidad y progreso de. estos dos seres que iban á unirse con tanto amor, diciéndoles que los socios del Centro «La Au- rora» les guardarán una eterna memoria, en particular á nuestra tan querida her- mana Dolores Vila. Después de concluido el acto, todos cuántos eramos allí no sabíamos cómo despedirnos de estos dos seres que pronto iban á desposarse. Dolores Vila y cuántas mujeres estaban allí se abrazaron y se besaron, rodán- doles lágrimas de amor por sus mejillas; ¡qué actos más sublimes! ¡qué expansión más agradable! Estos actos sí que son actos de verdadera expansión del alma. El Centro espiritista «La Aurora» guardará eterna memoria de dicho acto. También le ponemos en su conocimiento que el día 11 del que rige los dos Centros espiritistas «La Fraternidad» y «La Aurora» fuimos por la tarde á me- rendar en el bosque llamado de casa Feu, con la más cordial alegría y frater- nidad. Serían las 3 de la tarde cuando empezaron á afluir hermanos espiritistas por todos los caminos que conducen al lugar de la cita, ó sea al bosque, en medio de la naturaleza, en su más grande esplendor. Los hermanos, al llegar, se fraternizaban y saludaban con la más grande ale- 208 LUZ Y UNIÓN gría y satisfacción, cambiando impresiones, y reinando en todos los semblantes la alegría y la satisfacción.' Después de haber merendado nos reunimos todos juntos y se recitaron algu- nas poesías y se pronunciaron dos discursos, y un hermano leyó un trabajo, ex- profeso para el acto, del hermano, ausente, José García, trabajo que mereció los elogios de todos los hermanos (cuyo trabajo le envío también por si quiere usted publicarlo), concluyendo el acto dando gracias al Padre celeste y á los elevados espíritus por el amor que continuamente nos derraman sobre los her- manos.- / ■ Nos retiramos hacia nuestras casas con la más grande alegría y fraternidad, hablando y fraternizando por el camino, llenos de entusiasmo y con deseos de que se repitan semejantes actos, por ser ellos de verdadera fraternidad y unión y de verdadera expansión del alma. Sabadell 21 de Mayo de 1908.—El Secretario, Tomás Paid. ❖ Cuando estaba ya empezada la composición de este número, hemos recibido esta otra carta del hermano Palá. Sr. Director de la Revista Luz y Unión. Querido hermano en creencias: Le participo que el día 29 del pasado Junio, á las 4 y media de la tarde, celebróse en este Centro una Conferencia que vino á darnos ei hermano José García y de la que guardaremos gratos recuerdos. Dicha Conferencia tuvo por tema: «Influencia de la instrucción y de la edu- cación en la prosperidad de los pueblos. Necesidad de la educación de la mujer. La mujer en sus diferentes aspectos. Himno á la mujer». Empezó la Conferencia el hermano García y á la mitad se dió una comunica- ción medianímica y luego continuó la Conferencia hasta el fin; cantando después el coro del Centro un Himno Espiritista, gustando mucho á todos y saliendo muy animados y bien impresionados de dicha fiesta. Esperamos que el resultado de este acto lo publicará en el periódico Luz y Unión , sin olvidar lo que le enviamos anteriormente para su publicación. Sabadell 11 de Julio de 1908.—Por acuerdo de la J. D.—El Secretario, Tomás Palá. Despedida A mi hermana en creencias Dolores Vila y á su futuro esposo Hermanos: Al proponerme cumplir el dificultoso cometido que me be propuesto, me ha invadido la duda de que pudiese interpretarse como adulación, lo que sólo es hijo de un sentimiento de cariño y de juventud. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E, ESPAÑOLA 209 y nunca tan á proposito como ahora para exteriorizar lo que ha germi- nado, alimentado por el amor á nuestros ideales. Pero yo no quiero despedirme de vosotros, hermanos mios, haciendo un discurso con muchas flores retóricas, no, la retórica no se ha hecho para los que queremos ser discípulos del Espiritismo^ ni tampoco quiero evocar aquí las luchas lentas que hemos sostenido, porque de lucha puede califlcarse lo que nos sucede á muchos que sentimos dentro de nuestro ánimo un no sé qué que nos impulsa, y haciéndonos sufrir nos hace vivir con gozo, y al hacernos llorar nos hace sonreír dulcemente, y al haber encontrado en la fllosofia espirita lo que tanto anhela nuestra alma, nos presentamos á nuestra tribuna y desde aquí esparcimos vida y amor, y todo lo que de bueno podemos poseer. ¡Quién de nosotros será que no le acudirá á su memoria el recuerdo de nuestras flestas literarias y de nuestras giras campestres! Si, tenemos que confesarlo, cuando nos encontramos en un acto de éstos nos sentimos todos envueltos por unas sensaciones tan halagadoras que escuchamos las notas de amor que es- pareen nuestros infantes con sus melodías, y los contemplamos extasía- dos como el artista se extasía al ver el sol que se levanta para iluminar á la tierra, y darle al mar el color de los cielos, con sus mantos de púr- pura y sus olas juguetonas. Mas ¡ay! no hablemos de esto que nos apar- tariamos de nuestro objeto. Os decía que no quería hablar de nada que pudiese parecer adula- ción, ni hablar mucho, porque cuando un sér se encuentra movido por una serie de impresiones que giran á su alrededor se forma un ambiente que produce malestar, pues así yo por todo lo que pueda quiero" abs- traerme de la responsabilidad que pudiese caberme en este caso, y me limitaré á una especie de comparación que yo no sé si vosotros la encon- traréis aplicable en el caso presente. Todos los hechos, hasta los de nuestra vida más íntima, tienen su ma- ñera de ser apreciados, y generalmente puede discurrirse sobre ellos de dos maneras, ó discurrimos bajo el criterio puramente humano, ó bajo otro que podemos llamar ultra-terreno, en una palabra, ó discurrimos co- mo materialistas ó como espiritistas, y saliendo de disquisiciones fllosó- ficas pasemos á los hechos. Partiendo de la base materialista, cuando de nosotros se aleja un sér ó seres amados, tenemos sólo la espereranza, la triste esperanza, de vol- vernos á ver si azares de la vida lo permiten, y sino, si uno de los seres, tiene la desgracia de morir, adiós esperanza ¡adiós flor marcida! y de los.labios llorosos de una madre triste y de una esposa dolorida, sale aquel ¡jamás! que encierra en si una maldición al destino. Mas nosotros, ¡oh! cuánta diferencia, nosotros mientras vemos una nave que se aleja besada por las olas de plata del mar azul, en medio de gritos de despe- 210 luz y unión dida salidos del alma, pensamos que nos separamos sólo por un momento y que volveremos á vernos, aqui ó en otro lugar, para amarse los seres todos los lugares son buenos y ahora estableced la comparación con vos- otros, buenos amigos mios, los que por lazos de parentesco ó de amistad alegrándoos del próximo enlace, se os parte el corazón al pensar que fal- tan pocos dias de que una nave se aleje, y vaya allá lejos, muy lejos lie- vando en su seno seres amados con quienes hemos compartido nuestras luchas por el ideal. Sí, hermanos, ahora en las horas de prueba es donde debemos hacer práctica de espiritistas convencidos. Y ahora dejadme personalizar, y al hacerlo y dirigirme á vosotros dos, desearía deciros mucho pero me quedo sin saber qué decir, pero si que os dirijo un cordial saludo de despedida en nombre de la juventud espiritis- ta, que si no es muy extensa tiene ansias de vida y amor. Adelante, pues, y mucha fe en la vida futura, aunque de eso á mi podéis vosotros darme muchas lecciones. Que la luz potente de la moral espirita no os abandone en el cami- no de vuestra vida, que sea ella el faro salvador de vuestro puerto, y á mí, ¡ay! que me ilumine también esa luz, que de no hacerlo vivirla muriendo. Vivid siempre con la paz y el amor que este buen amigo os desea. Luis Farrés. Carta interesante Con gusto reproducimos la siguiente carta que en nombre del Dentro «La Fraternidad», de Sabadell, nos envía nuestro buen hermano y amigo D. Martin Font. Léanla detenidamente nuestros queridos lectores, pues encierra gran- des enseñanzas, demostrándonos cómo las teorías son muchas las veces que no responden á la práctica y que solamente la experimentación re- petida nos puede acercarnos á la verdad. Felicitamos sinceramente á nuestros amigos del Centro « Lr Frater- nidad» por sus trabajos. Sr. D. Jacinto Esteva. Muy Sr. mío y hermano: Puesto que ha publicado una comunicación en su ilustrada Revista obtenida en este Centro, me permitiré hacer algunas consideraciones sobre este asunto. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 211 Debo participarle que le remitiré algunos de los trabajos dados por el espíritu (que para nosotros lo consideramos maestro), dado á conocer por el nombre de Luis en este Centro, que son dos largos comunicados escritos que abarcan á nuestro juicio una idea sobre el Cristianismo y su misión en el mundo. Tenemos otro trabajo, que podría hacerse un folleto, que trata de dar una explicación de. «El hombre, la Creación y Dios», que en caso de ser digno de ser publicado lo someteremos á su estudio para que hagan de él lo que su juicio les diga,~y actualmente nos está dando cada semana un orden de enseñanzas que con el tiempo les pondremos al corriente de su contenido porque lo considergmos importantísimo. Años atrás hubo momentos que, ateniéndonos á las manifestaciones dé cier- tos autores, hombres reconocidos en el mundo por su ciencia, de cuya autoridad no dudamos y que esperábamos con impaciencia que hicieran luz sobre este asunto de los fenómenos llamados espiritistas que al parecer presentaban razones poderosas que eran suficiente para ponernos sobre aviso y creernos que podríamos ser realmente víctimas de una falsa interpretación. Esperábamos que hicieran luz sobre este pavoroso asunto, pero viendo que las teorías emitidas no respondían debidamente con los hechos que á diario saltan á nuestra vista, nos hemos pro- puesto indagar por cuenta propia. Ateniéndonos á una multitud de estudios hechos durante el transcurso del tiempo que nos ocupamos de estos estudios, realizados sobre el terreno práctico de la mediumnidad, los hechos abrumadores con su lógica nos autorizan ya para levantar la voz, aunque seamo§ sencillos obreros sin instrucción ni tiempo sufi- ciente, pero que lo robamos al descanso porque amamos la verdad. No pretendemos convencer á nadie, pero sí que debemos hacer constar en honor á la sinceridad que nos anima por la verdad, que para nosotros ha llegado la hora de poder alcanzar una convicción profunda y arraigada de la manifesta- ción de los espíritus por medio de la mediumnidad; esto es todo. Hay quienes participan de la opinión que basta leer ó estudiar debidamente la parte filosófica y racional de la doctrina para apreciar su moral; ya es impor- tante, pero no lo suficiente. Ya sé que muchos nos objetarán que no les ha dado resultados satisfactorios la investigación de los hechos medianímicos, pero esto no es razón suficiente para relegarlo al olvido. Para nosotros creemos que este estudio debe ser permanente entre los espiritistas, porque al fin y al cabo los hechos medianímicos son la fuente que fertiliza el campo de la conciencia y ase- gura la convicción de un modo real y positivo de la inmortalidad del alma. Hay quienes creen también que no disponiendo de mediums de efectos físicos ya no se pueden hacer estudios de provecho,"y á nosotros la práctica nos ha en- senado que nos equivocamos al suponerlo. Lo que conviene no estar desprevenido y saber aprovechar todas las ocasiones para recoger datos y éstos siempre tienen un valor muy importante. Cuando es posible reunirse unos cuantos que estén animados de buscar la verdad y se hallan afines por sus sentimientos, la verdad no tarda en manifestarse. 'Cuantas veces nos ha sucedido que yendo á visitar algún hermano enfermo si nos ha acompañado alguno de los mediums videntes, nos han dado pruebas de sus 212 LUZ Y UNIÓN Videncias reales describiéndonos minuciosamente el estado interior de los órganos afectados, generalmente distinguiendo un calor que denota inflamación ó bien, envuelto por una mancha obscura cuya mancha ha desaparecido mediante la cación del apli- magnetismo y la acción de la voluntad, mientras otras veces nos des- criben hasta los remedios que se podrían aplicar. Otras veces al celebrar sesiones de estudios, hemos procurado que el medium parlante se sentara en su lugar correspondiente y preguntado por las sensaciones que recibía de la aproximación de un espíritu antes de entregarse, y por otra parte hemos dispuesto que los videntes estuvieran colocados uno del muy separado otro, poniéndose uno á un lado y que escribiera todo cuanto viera, y al final de la sesión comprobar lo experimentado por el medium y las declaraciones hechas por los videntes en un todo. Hay mediums videntes que tienen la facultad de vertodo cuanto el espíritu se propone decir antes de que el parlante lo pronuncie con su voz, y esto nos ha permitido comprender que el pensamiento del espíritu un momento antes de oiga la que se voz, ya está manifestado por medio de unas formas sea la índole délos según pensamientos. .Con esta clase de observaciones pasan cosas dase el muy raras; caso que el vidente ve, como si fuera una película de multitud de cinematógrafo, formas pasar á medida que el medium parlante habla, pero siempre momento desde hay un el preciso momento que el vidente lo ve hasta que se del oye la voz parlante. Efsto es muy curioso y se presta á muchos estudios y no consideraciones. pocas Creemos que los hechos prácticos nos enseñarán más que las teorías inventadas por ciertos escritores ó fisiólogos, que todo lo fían á sus apreciaciones y pretenden dar solución á lo que no entienden y los hechos pretenden que se manifiesten según ellos quieren, ignorando que los hechos son hechos tanto si estamos conformes como no y al tratar de lo desconocido nos debemos conformar con su manifestación aunque ésfa esté en oposición con nues- tras opiniones y destruya nuestros prejuicios. Por consiguiénte, apreciado director, hoy le remito junto con esta carta las dos comunicaciones que á nuestro entender reasumen una idea sobre la misión del Cristo en el mundo y la influencia de su doctrina. Como se ve, los Evangelios no lo han dicho todo, hay mucho más de oculto que de sabido sobre esta gran doctrina y los espíritus serán los revelarlo encargados de y esclarecerlo, según las declaraciones de ellos mismos en las obras del inmortal Kardec. Se ofrece de V. s. s. q. b. s. m., . Martín Font. He aquí las comumcaciones á que se refiere el Sr. Font. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 213 DICTADO MEDIANÍMICO Misión del Cristo y su influencia .en las antiguas tradiciones civiles y religiosas De aquella edad obscura aún quedan, para algunos, recuerdos vivos que son .aprovechables en estos momentos que una nueva verdad pretende levantarse desde el fondo de los corazones del pueblo; sobre todo, de aquellos que ocupan el lugar más humilde de la sociedad, para orientar á las inteligencias que andan dispersadas entre obscuridades y abrojos de la vida y dirigirlas hacia una nueva senda por medio de la claridad que se desprende de una nueva doctrina que tien- de á construir la pirámide más alta que han saludado las generaciones. El porvenir debe abrirse paso iiuminado por los resplandores que proyecta- rá aún aquella luz potente del cristianismo que difundió un día la esperanza en los corazones abatidos preparando el terreno, para que resplandeciera la verdad en el porvenir. No hay verdad que haya encontrado en ei mundo más oposición, ni que haya sido tan falsamente perseguida y desfigurada, ya desde su propio origen, al lan- zarse sobre las ruinas de costumbres muy materializadas.- Sigamos, pues, sobre el terreno de sus ventajas; frente á frente de las amon- tonadas ruinas que el viejo sacerdocio ejercía, desde aquellos lugares profundos en donde sostenían los secretos de una larga y penosa retención; dentro deaque- líos santuarios destinados ó consagrados al cultivo de la poesía y del arte religió- so, conservan, por herencia, los conocimientos que los genios del espacio habían logrado introducir en el seno de aquellos santuarios, por medio de aquellos que estaban en predisposición por ia fe y demás circunstancias que adornaban al de- voto en su preparación. En las grandes solemnidades del culto privado, durante aquelia veneración con- sagrada al recuerdo de los profetas y videntes, que formaban la galería de los sa- bios Maestros que se habían consagrado al culto de aquellas verdades de orden más elevadas, porque descendían de una relación directa de los genios bien- hechores que habían sido en la Tierra dotados de una extraordinaria claraviden- cia. A estos genios se les llamaba, durante^el ejercicio del culto á los dioses, conservando sus consejos emitivos, enriqueciendo así sus ya arcaicos secretos. Los antiguos sacerdotes egipcios poseían un cierto conocimiento de la vida. Para ellos la situación del alma humana no era un problema obscuro. Para ellos se había descorrido el velo del misterio, describiéndoles las principales leyes que rigen el destino del alma hacia estados superiores preparando sus transmigracio- nes elevadas, y preparándolos por la descripción de métodos más rápidos y fáci- les para poder escalar la dicha de los cielos. No había ley humana ni divina que no se les hubiera revelado durante la evo- 214 LUZ Y UNIÓN cación de sus dioses Esta^ceremonia era preparada por medio del uso de incien- sos perfumando el ambiente que luego producía el efecto de un narcótico que lo- graba entorpecer los sentidos de aquellos sugetcs dispuestos para el caso, y que estaban dotados de una extremada sensibilidad. Pasados los momentos reglamentarios destinados á la evocación, se producían las soberanas reapariciones de los genios del bien, divulgando los misterios de la Ciencia; pero como no les era posible sustraerse siempre á la influencia que ejercían ciertos genios que demostraban estar animados de perversas intenció- nes ó bien traspasados por un dolor intenso, demostraban sufrir los exteriores de una prolongada agonía. Y no pudiéndose evadir del contacto de aquellos genios, concluyeron por distinguirlos por los genios del mal. De ahí se desprendió la creencia antigua, como antiguos eran los procedí-: mientos empleados en el cultivo de la ciencia y del arte de evocar á los genios, la creencia entre ellos de la existencia de los genios del mal, puesto que era una consecuencia evidente desprendida de las prácticas destinadas al culto, poten- cias que solamente se podían librar de su acción mediante ciertos ejercicios pia- dosos y la benéfica acción de la oración. Viniendo á considerar en definitiva, que era peligroso el ejercicio de la evocación para los neófitos ó gente del pue- blo por el temor de producir en ellos perturbaciones propias solamente para des- viar su razón. Y á este fin, todos los legisladores estaban contestes en prohibir bajo duras amenazas el uso de semejantes prácticas por considerarlas perjudicia- les para las multitudes. Sin embargo, las multitudes del pueblo se recelaban y presumían que había fuerzas extraordinarias, y que los iniciados conservaban si- lenciosamente oculto en el sagrado recinto destinado al culto de los dioses; y por esto se formulaban entre los caudillos de los pueblos preceptos de veneración para sus triunfos, porque aquella vaga creencia que tenían que los dioses ejer- cían su marcada influencia en la intervención de los pueblos, era real. Y de la celebración de sus-cantares en las laureadas funciones y solemnidades populares que los sacerdotes cuidaban de preparar con todo el recogimiento y la venera- ción debida, ya fuera en la recepción de un caudillo proclamado como el primero entre todos, aceptándole como á una autoridad investida por los sacerdotes que prescribían el culto á los pueblos. He aquí, pues, el origen de estas eternas contiendas que llaman siempre sin cesar á las puertas del corazón humano, y que las inteligencias se han dirigido siempre para llevarlo en el terreno propio poniéndolo al alcance del mayor nú- mero. Por esto se ha visto de tanto en tanto en el seno de los pueblos y sus antiguas religiones, como se han levantado figuras que han logrado modificar las creen- cias de las masas y dirigirlas á unas modificaciones en sentido más superior, más perfecto y divino. Y como que la verdad es eterna y eterna su acción, siempre el hombre se ha encontrado frente á frente de este espinoso problema de la in- mortalidad del alma y sus relaciones que, ora se ha concebido su existencia múltiple, ora se ha llegado á sintetizar la unidad de la ley en la diversidad de su manifestación. Extraer la verdad de las leyes de la Naturaleza y llevar conocimientos al alma humana, ha sido el esfuerzo realizado por todos aquellos Redentores que son la ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E; ESPAÑOLA 215 luz de los pueblos. Divulgar, inducir aún cuando no sea más que por partes, ha sido la misión de los genios que han reunido las condiciones para servir de es- pejo á la voluntad soberana de Dios, que ha creado los mundos para educar á las inteligencias que en ellos se desarrollan y crecen, á fin de que estudien en este voluminoso Universo, que es la obra eterna en donde se encierran maravillas in- finitas y penetrar en el secreto de sus leyes y divulgarlos á las multitudes que las ignoran. Esta ha sido la tarea que se han impuesto las almas conocedoras de su des- tino é interesadas á elevar las condiciones de los seres en las regiones superio- •res de la vida en su eterna carrera. Tal ha sido la misión de los grandes iluminados que más plenamente han te- nido conciencia de su deber oculto y efectivo á cumplir. Al cristianismo, le cupo la esplendorosa misión de ser una de aquellas mani- testaciones que debía lanzar sobre las diversas regiones del mundo los rayos más luminosos y producir una de las más formidables revoluciones en sentido pro- gresivo. Se trataba de un nuevo enviado; se trataba de una nueva figura que reasu- miera en sí toda la potestad de los dioses para poder levantar el espíritu de las masas y hacer que contemplaran los cielos. Para este fin, se preparó el terreno para que en el seno de los pueblos y á la luz del día llegara á resonar la voz de aquellas verdades que permanecían ence- rradas en el secreto de los iniciados consagrados al culto de los misterios. Era necesario y preciso que el pueblo y las multitudes se llegaran á capacitar de los derechos que les asistían al reconocer una autoridad en. la augusta persona del Venerable Maestro. Era necesario, que aquellas verdades que permanecían ocultas en los santua- rios, llegaran á difundirse por los pueblos y les proporcionaran una nueva espe- ranza. Por esto y obedeciendo á este laudable fin, el Maestro fué saludado úni- camente por aquellos seres que ocupaban el último lugar de la escala social, y cual si fuera una conjura que debiera servir para preparar el terreno de un modo oculto al infundir la idea del advenimiento en la tierra del nuevo Mesías. (Concluirá) Comunicación medianímica Reunidos en familia unos cuantos amigos en casa de José Coello, se evocó á las nueve y media de la noche al espíritu Juan Charneco, y con • la aquiescencia del espíritu protector de la medium, se comunicó en la forma siguiente. (No se le preguntó nada, pues sólo se pretendía una co- municación en la forma que tuviera á bien hacerlo). * 216 LUZ Y UNIÓN Cuánto nae satisfacen, hermanos míos, estas reuniones, y cuán grande era mi deseo de poder asistir á ellas en mi querido pueblo, y rodeado de parte de mi familia. No podéis formaros idea de lo que he deseado este momento, pero ya,que ha llegado, aprovechémosle para dar á seres que tanto quiero, una aunque pobre idea de lo que es la vida terrena y los mil escollos que en ella hay que salvar si se quiere cumplir la misión que ahí se lleva, y para la cual á muchos les falta el valor que se nece- sita para triunfar; algo así me pasa á mi hace ya tiempo. Yo cuando en mi última encarnación estuve entre vosotros, fui un pobre hombre sin instrucción y al que todos respetaron más ó menos merecida- mente, sólo porque á nadie hacía daño; pero no no fui feliz, pues siem- pre tuve aspiraciones á algo más; no creáis que yo deseaba adquirir bie- nes de fortuna; no, mi ideal fué el bien general, el mejoramiento de todos y el poder hacer al pobre la vida menos penosa. No me amoldaba á ver con resignación la explotación de que es objeto el que todo lo produce y sin el cual no habría riquezas ni comodidades de ninguna clase; pero no creía yo entonces en la supervivencia del alma, y creyendo que esa des- igualdad no seria equilibrada nunca, me sublevaba la sangre esa explota- ción del hombre por el hombre. Después que tuve experiencia de la vida me hice cargo de lo que es el mundo gobernado por zánganos que sólo miran á comerse la colmena cuyas abejas no tienen ni auu la... suerte diré (aunque otro jiombre le seria más propio) de sacarle al menos la uti- lidad del agua que necesitan para su obra, que es como si dijéramos la instrucción que necesita todo hombre para defenderse. La instrucción no sólo reporta bienes materiales si que también espirituales, pues la ins- tracción es el alimento del alma; mas yo os he dicho que cuando tuve experiencia de la vida senti un vacio inmenso, y de ahí más de cuatro bromas y chistes que me permitía con todos, pues como no me encentra- ba á gusto con tanta faramalla, todo me fué indiferente, que es precisa- mente lo que os pasa á casi todos; pues no, hermanos míos; no os mostréis indiferentes ante esas grandes lubhas, porque ellas deciden no sólo de vuestra suerte material sino también de la paz de vuestras almas. El hombre que lucha por una idea y por ella sufre las más grandes priva- cienes, encuentra aquí, en la verdadera patria, el galardón que merecen sus obras. ¡Luchad, hermanos! ¡Luchad por vuestras ideas! ¡Luchad, que Dios os dará fuerzas para no sucumbir en la batalla! No quiere decir esto que vuestro cuerpo pueda vencer los obstáculos materiales que se os presenten; no, lo que quiero deciros es que vuestros espíritus triunfarán, porque esa lucha es el trabajo del espíritu, es el progreso indefinido. Yo tenia ideas libertarias, pero tuve el valór que se necesita para saber luchar; mis ideas eran de amor y de paz para todos, pero deseo- nocía el Espiritismo, no sabía que se vive siempre, y creyendo que todo ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 217 terminaría en la tumba me dije á mí mismo: «para cuatro días que uno ha de vivir vivamos á gusto» pero ¡ah hermanos míos! esto no es así; el que así piensa y no trabaja y no piensa en bien de sus semejantes, por- que,pree que el beneficio que reporte su trabajo él no ha de disfrutarlo, se engaña. Todos volvemos á la tierra, y ahí donde se fué egoísta no trabajando sino para uno mismo, ahí donde se perdió lastimosamente el tiempo, se vuelve á empezar la tarea; se trabaja y se trabaja doble; lo que antes no se hizo y lo que hay que hacer todavía. Ya por mí mismo lo sé; he ido muchas veces á la tierra con la misión de propagar las ideas de re- generación social, y siempre me ha faltado valor para cumplir mi mi- sión; no he sido malo, pero he debido hacer mucho bien y no lo he hecho, pues que teniendo ideas más avanzadas que muchas de mis pasiones no las he propagado con el entusiasmo y ardor que debía para despertar inteli- gencias dormidas. No hagáis vosotros lo mismo; poseéis una gran verdad, el grandioso Espiritismo que es la religión de Cristo descartada de fór- muías; pues bien, propagadla, no desmayéis, no os acobardéis, luchad por esa gran verdad que Dios os revela para que haciéndoos buenos por medio de ella, prestéis al desgraciado, consuelo, al desvalido, amparo, y socorráis al necesitado en todo lo que mandada palabra «caridad». No hay que fijarse en que sea de esta ó aquella opinión; el desgracia- do no es más que uno, esto es, uno en cuanto á la desgracia, pues que todos somos hermanos y debemos amarnos, socorrernos mutuamente. Sed pródigos en dar lo que se os da; asi como Dios ha colocado en nuestro camino un sér generoso y noble que desinteresadamente os instruye, sed vosotros tan generosos como él y propagad y practicad la moral sana y sublime que ese sér os enseña así, hermanos todos, es como se es bueno, asi es como se busca á Dios; así, siendo buenos aun para nuestros ene- migos, y haciendo bien por mal es como se obtiene la verdadera gloria, la felicidad eterna; esto es, la paz del alma que á todos os deseo. Juan Charneco. Es copia. Manuel Ruiz Flores. Esta comunicación fué obtenida en 1901 por la medium Natividad Coello, en Higuera de Vargas, en presencia de la familia del espíritu que se llamó Juán Charneco, hombre del campo muy trabájador y honrado aunque no sabia leer ni escribir, tenía ocurrencias morales que le hacían ser querido por todos en el pueblo. 218 LUZ Y UNIÓN Justo Tributo Camagüey (Cuba) 23 Mayo de 1908. Srta. Amalia Domingo Soler. Barcelona. . Ilustrada y querida hermana en creencias: Tengo el gusto de saludar á usted fraternalmente y á la vez el sentimiento de comunicarle el falle- cimiento en ésta, el dia 19 de Mayo del corriente año, de uno de los miembros más prominentes del Espiritismo en este pais, la Sra. Angela González y Guerra. Para que usted pueda darse más perfecta cuenta de la referencia que dé ella acabo de hacerle, á continuación leerá lo siguiente: «Angela González y Guerra, fué la creyente más fervorosa y perse- verante en la gran obra de sostener viva y latente, en esta sociedad, la creencia espirita, siendo, desde su iniciación en Cuba, su más incansable propagandista. Su corazón lo llevaba abierto siempre al -, noble senti- miento de la piedad cristiana, consolando al triste, ayudando al desva.- lído y asistiendo personalmente á los enfermos con la mayor abnegación. Fué fundadora del primer Centro oficial que todos hemos conocido con el nombre de la «Unión Espirita»; Directora educadora de los me- diums y una de las que con más entusiasmo contribuyeron á la publica- ción de La Luz Camagüeyana, órgano oficial de dicha Sociedad. Era, además, una ardiente admiradora de cuanto la pluma inspirada de usted ha dado á la estampa, ó ha publicado, pues muchas veces le oí decir en ciertos casos extraordinarios: «¡Si estuviera aquí Amalia, aprovecharía la ocasión para escribir una de esas hermosas historias que tanto bien nos reportan en el orden moral!» ¡Las ingratitudes y desengaños fué el galardón que hubo de recibir durante su vida llena de sufrimientos y contrariedades!... En alas de la fe dejó la envoltura carnal; fué una espirita conven- cida, hasta en las postrimerías de su vida planetaria, y al llegar al Gól- gota de su misión expiatoria, dejó saldada la deuda contraída. órgano oficial de la liga e. española 219 Hágale saber al mundo este acontecimiento, con la brillantez de estilo hija de su elevada inspiración, pues cuanto de ella se diga en tal sentido, es justicia merecida; es una ofrenda generosa en honor déla verdad. Reguemos á Dios por la felicidad de su espiritu en el seno de la in- mortalidad. R. C. Miranda^. ¿Rogar? no; no es necesario; Dios es tan justo en su Ley, que al ángel de Camagtiey la recompensa le dió, dándole un alma de Santa, un sentimiento admirable, un amor inagotable que entre todos repartió. Pidamos, por el contrario, que ella por nosotros pida; que ilumine nuestra vida con su Santa inspiración. Que imitemos sus virtude's, y su asombrosa constancia, para ahuyentar la ignorancia que es causa de perdición. ^ ■ ^ ¡Angela! ¡mujer bendita del progreso adoradora! ¡tú fuistes fúlgida aurora del gran día de la verdad! ¡Gloria á tu nombre bendito! ¡gloria á tus grandes virtudes! ' fuiste y serás (no lo dudes) ¡un Sol de la humanidad! Amalia Domingo Soler.. 220 LUZ Y UNIÓN El Espiritismo en Nicaragua Conmemoración del 39.° aniversario de la desencarnación del inolvidable cuanto amado maestro Alian Kardec Los espiritistas de Managua (capital de la República de Nicaragua, América- Central), en el deseo de honrar la memoria del amado maestro Alian Kardec, iniciaron el pensamiento de solemnizar el día de su desencarnación ó transforma- ción planetaria. Con tal objeto, invitaron á la logia ocultista martiniana de la misma ciudad, por medio de su jefe el h. Abraham Sotomayor, quien, mediante la venia del Oculto, se asoció con los miembros que la informan:. Ningún acto mejor que la Caridad para honrar al maestro. Se acordó dar un almuerzo á los presos de la cárcel de la policía y un socorro de numerario á los reos rematados de la penitenciaría, y como final,-una velada íntima ó privada, con la asistencia única de los promotores y ocultistas, en razón de que debiendo efectuarse ésta en el templo masónico no podían admitirse ele- mentos profanos, ya que entre todos no había más que unos pocos que no son hh. masones, pero que para este caso se aceptó su presencia. (En este mismo local trabaja la logia ocultista). Al ir á efectuar en la tarde el reparto del socorro á los de la penitenciaría, se hizo con tal oportunidad, que se presentó la de obsequiarles también comida de la que las vivanderas llevan á esa hora para venderles á ellos, y que se compró haciéndoselas repartir. Se concluyó esta parte del programa con un saludo de consuelo y de amor y exhortaciones morales alusivas á su situación y que vino á ser el final de las frases que en el mismo sentido se les dirigían durante la per- manencia-entre ellos, correspondiendo los penados con palabras de respetuoso agradecimiento. A las 7 P. M. se abrieron las puertas de la logia masónica para recibir á los concurrentes á la velada, que dió principio "á las 8 verificándose en el vestíbulo del templo conforme el programa siguiente: 1.° Apertura por el ocultista h. Abraham Sotomayor, encargado de ladirec- ción de la velada. 2.° Biografía de Alian Kardec, por C. Maruri, leída por el h. espiritista Isidro de J. Olivares. 3.° Recitación ó lectura de la poesía «Por la senda del deber», de Matilde Navarro Alonso, por el h. espirita J. Dolores Arróliga. 4.° Discurso por el ocultista h. J. Luis Medal. 5.° Discurso por el ocultista h. Abraham Sotomayor. 6.° Discurso por el h. espirita J. Luis Arce. 7.° Cátedra libre. Hizo uso de la palabra el h. J. Dolores Arróliga, refirién- dose á la conmemoración que se celebraba, á la filosofía espirita en su faz rege- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 221 neradora y circunstancias que lo habían conducido á él á la creencia espirita. Le siguió en el uso de la palabra el h. Isidro de J, Olivares, para dar cuenta de la manera cómo se dió cumplimiento á la parte referente á las obras de caridad he- chas en este día en honor del maestro Alian Kardec. 8.° El h. Sotomayor dió por terminada la velada, rindiendo las gracias á los concurrentes, y á continuación, enmedio del mayor entusiasmo, cada uno de los allí congregados, con un vaso de refresco en la mano, brindaron por el, maestro Kardec, por la difusión de la filosofía espirita, por la fraternidad, etc., y se con- cluyó haciendo circular un vaso del que todos tomaron, con la frase sacramental: «bebed y dad de beber», en memoria de igual acto que el divino Maestro ordenó á sus apóstoles, para sellar la fraternización, dándose todos enseguida, uno á uno, un estrecho abrazo fraternal de despedida. Eran las 11 P. M. . (Entre los números 4.° y 5.° de la velada, hubieron 5 minutos de recreo para tomar refrescos). Con sumo placer copiamos del Diario de Nicaragua, en su edición del día 1.° del próximo pasado Abril, las siguientes líneas referentes á la fiesta que los espiritistas de Managua celebraron en honor de Alian Kardec. Velada espiritista. —Ante una regular concurrencia de señoras y caballeros, se vericó anoche en el Centro Psicológico de la capital, una velada á la que asis- tieron kardecianos, teósofos y ocultistas, con motivo de la transformación plane- taria del maestro Alian Kardec. Por invitación de la sociedad espiritista, abrió el acto el jefe de la misma D. Isidro J. Olivares, con la lectura del maestro referido. A continuación tomó la palabra un ocultista, y disertó acerca de lo finito é infinito, buscando la relación entre estas dos Ideas y encontrándolas en lo indefinido, así: «Si las formas del sér existiesen solas, es decir, lo finito é infinito, estarían separadas por una barrera infranqueable. Habría Dios á un lado, el mundo al otro, y en medio el abismo. Era preciso, pues, para enlazarlos, el término medio de lo indefinido, porque ló indefinido participa de lo finito por el límite, y de lo infi- nito por el cambio continuo de límites ó sea la evolución». Habló también de los poderosos lentes psíquicos con.que los ocultistas escu- driñan la inmensidad, diciendo entre otras cosas: «De la misma manera que Gali- leo dirigió hacia el cielo la lente del telescopio é hizo saltar la piedra angular del firmamento, hundiendo en lo infinito una profunda mirada, que va á sorprender á la tembladora estrella, hasta detrás del velo de plata de la vía láctea». Siguieron varios discursos y recitaciones alusivos al acto, por los señores Bartolomé Ibarra, José Dolores Arróliga, Jesús de la Rocha y otros. Concluidas las ceremonias del caso, se tomaron varios refrescos, y á petición de algunas señoras, el Centro espiritista pasó á su local para hacer la evocación del espíritu del festejado maestro. Al efecto, formada la cadena fiuídica por to- dos los hermanos del Centro espirita, y colocado el medium en el interior, que ■ era una virtuosa y apreciable señorita de esta capital, se hizo la evocación in mente, apareciendo la entidad luminosa de Kardec, llevando á los predilectos discípulos la voz de ultratumba, transmitiéndoles palabras de amor, de cariño y de consuelo. 222 LUZ Y UNIÓN Previamente, durante la mañana del día de ayer, los espiritistas obsequiaron con un suculento almuerzo á los presos de la policía, y por la tarde se distribuyó un óbolo á los de la penitenciaría, obsequiándolos también con una espléndida comida, en cuyos gastos invirtieron una fuerte suma- de dinero. El Comercio, otro importante diario de la misma ciudad, en su edición de la tarde del día 2 del mismo Abril, dice lo siguiente refiriéndose á la misma fiesta: El Espiritismo en Managua—'En el salón de honor de la Logia Masónica tuvo efecto anteanoche un sesión de Espiritismo, celebrada por los aficionados de la capital, á la que concurrieron algunas personas invitadas^ Se trataba de fes- tejar el aniversario de la desencarnación del maestro Alian Kardec. Los iniciadores de la fiesta fueron los espiritistas D. Isidro de J. Olivares, D. Abraham Sotomayor, D. Bartolomé Ibarra, D. Luis Medal y D. José Dolores Arróliga. A las nueve de la noche principió el acto dando lectura á su discurso el señor Olivares. A continuación habló el ocultista D. Abraham Sotomayor, disertando sobre lo finito y lo infinito, escuchándolo la concurrencia con solemne recogí- miento. Siguieron en el uso de la palabra, los Sres. Ibarra y Arróliga, quienes recitaron versos y trozos de artículos sobre Espiritismo, Ocultismo, Fetichismo y Animismo, que de igual manera fueron escuchados con devoción cristiana. Para terminar la velada, se dispuso evocar al espíritu de Kardec, valiéndose de una apreciable señorita de esta ciudad, que hacía de medium, y luego que se formó la cadena fluídica, apareció la entidad luminosa del maestro, quien habló aconsejando á sus discípulos las prácticas del amor, el cariño y la fraternidad común, enviándoles, qdemás, frases de consuelo y alentándolos para que conti- nüen en su obra de progreso social. Terminado el acto, la concurrencia fué obsequiada con refrescos. En la mañana del mismo día, el Centro Psicológico había obsequiado con un almuerzo á los presos de la policía, y por la tarde se distribuyó un óbolo y se dispuso también una comida para los reos de la penitenciaría: todos los gastos fueron sufragados por los miembros de la sociedad. Felicitamos calurosamente á nuestros buenos hermanos nicaragüeños por la trascendencia del acto con que conmemoraron el 31aniversario de la desencarnación del ilustre recopilador de las doctrinas espiritistas, y ha- cemos fervientes votos para que su campaña de propaganda sea tan fruc- tífera como grandes son sus entusiasmos para realizarla. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E.'ESPAÑOLA 223 Un pensamiento El progreso de la humanidad será sumamente grande, cuando pueda conocerse los beneficios que podrán derivarse del estudio de la Ciencia del Espiritismo moderno. El estudio ponderado y filosófico de esta ciencia, llega á derrumbar la gran barrera que separa la humanidad, al lazo indisoluble de la fra- ternidad universal que debe existir entre los pueblos que forman las grandes naciones civilizadas, dándose entre sí la mano las razas que pueblan este planeta. ¿Qué cosa falta para llegar á esto? La fraternidad universal. Para llegar á esto se necesita que los pueblos sientan aquel sentimiento de amor que exhala de la profundidad del alma, regeneradora de la humanidad y exhaladora de los sentimien- tos puros capaces de regenerar por completo la humanidad, desviada del camino real del gran progreso de la fraternidad universal. Progresar y pensar con nuestro pensamiento al progreso indefinido de nuestra alma, que deberá recorrer para llegar á gozar un poco de descanso, después de haber recorrido una infinidad de transformaciones, para llegar á formar parte de la fuerza única creadora y generadora de todo aquello que vemos visible é invisible á nuestros ojos. ¡Qué belleza.fulgurante, incomprensible para la inteligencia nuestra, todo aquello que está encerrado en la Naturaleza, madre de los mundos esparcidos en el Universo! Movimiento espiritista Hemos recibido una atenta circular en la que se nos anuncia la creación de un Centro espiritista en Ribeirao Preto (Brasil) titulado «Centro Espirita de Es- tados de Ultratumba». Componen su directiva los hermanos siguientes: Federico Bernal, Presidente. —Aniceto Jaravelli, Vicepresidente.—Emeterio Ferrer, Secretario 1.°—Manuel Casto, Secretario 2.°—Joanna Vives, Tesorera-Contadora. — Alexandre de Abren, Orador.—Joao Palma, Celador. 224 LUZ Y UNIÓN Deseamos á la nueva entidad una larga y próspera vida para el mayor des- arrollo de nuestros ideales en aquella república. Como acostumba todos los años, el Centro «La Esperanza», de San Martín, celebró una velada literaria y musical en conmemoración del 60.° aniversario del descubrimiento del Espiritismo en América y del 31.° de la desencarnación de Alian Kardec. La fiesta fué un éxito para sus organizadores, á los cuales felicitamos. ❖ ' Actos Civiles .—Han contraído matrimonio civil nuestros hermanos Manuel Puig y Antonia Artigas, del Centro de San Martín de Provensals. Deseamos á los recién casados toda suerte de felicidades en la nueva vida que para ellos empieza. En Carboneras (Cuenca), se verificó el día 26 del pasado Junio la inscripción civil y sin intervención religiosa de ninguna especie, de la niña Fe Crescenta, hija de nuestro muy querido amigo y hermano D. José Contreras, Concejal de aquel Ayuntamiento. Con ésta son dos ya los hijos que nuestro buen hermano, consecuente con sus ideales espiritistas, ha librado del yugo católico. También en el mismo pueblo otro buen hermano, D. Cipriano Aunión, ha dado pruebas de su acendrada fe espiritista, inscribiendo sólo civilmente á su hija Inocencia. Bien por los espiritistas de Carboneras; así se honra el ideal que se profesa. Llamamos la atención del Sr. Gobernador de Cuenca acerca lo que sucede en el pueblo de Reillo, en donde hace ya más de cinco meses fué enterrada civil- mente una niña en un mal cercado por no existir Cementerio Civil en aquella población. Creemos que bastará este pequeño aviso para que dicho pundonoroso señor Gobernador, haga cumplir al Alcalde de Reillo lo que ordena la ley. Estaremos á la mira de este asunto, aunque confiamos que el Sr. Gobernador obrará como la ley le ordena. - If: . El Centro «El Altruismo», de Badalona, celebró el día 19 del actual una fies- ta literaria musical y de propaganda espiritista, en el local del Ateneo Obrero de dicha población. Por la premura del tiempo sólo podemos decir que esta fiesta tuvo un feliz éxito del que pueden y deben estar orgullosos nuestros buenos hermanos de «El Altruismo». En el próximo número nos ocuparemos con más extensión de este importante acto. Liga Espiritista Española JUNTA DIRECTIVA: Presidente, D. Jacinto Esteva Ma- rata.—Vicepresidente, Dr. D. José Cembrano.—Secretario, don Agustín Brunet.—Tesorero, D. Santiago Durán.—Revisor de cuentas, D. Samuel Peremarch.—Contador, D. Alberto Andreu. REVISTA: Director, D. Jacinto Esteva Marata.—Redac- tor-jefe, D." Amalia Domingo Soler.^—^Administrador, D. San- tiago Durán. AS0C1AC10]%'E$$ EFECTIVAS Luz Y Unión (Revista), Ferlandina, 20.—BARCELONA. La Vo^ de la Fercíaá(¡Periódico), Ferlandina, 20.—BARCELONA. «La Buena Nueva», Circulo Espiritista, Plaza del Sol, 5.—BARCELONA (Gracia). «Unión Fraternal Espirita», Sociedad de Estudios Psicológicos, Muralla Santo Domingo, 9.—MANRESA. «La Fraternidad Humana», Centro, San Isidro, 77.—TARRASA. «Círculo Cristiano Espiritista», Democracia, 12, 1.°—LÉRIDA. «La Aurora», Centro Espiritista, calle San Cucufate, 21.—SABADELL. «Unión Fraternal Espirita», Centro, San Francisco, 26.—CAPELLADES. «El Altruismo», Centro Estudios Psicológicos, calle Barcelona, 42.—BADALONA. «El Angel del Bien», Madera, 18 y 20, pral., derecha.—MADRID. «El Renacimiento», Centro Espiritista, Viudas, 7.—ALGECIRAS. «Justicia y Redención», Grupo Espiritista.—ILERAS (Córdoba). «Constancia», Centro, Pasage del Sargento, 9.—MÁLAGA. «El Faro de Paz», Centro, Arzobispo Mayoral, 12, 2.°—VALENCIA. «La Paz», Centro Espiritista.—MAHÓN. «Constancia», Centro, calle de San Roque, 18.—NOVELDA (Alicante). «Felicidad», Centro.—CANILLAS DE ALBAIDA (Málaga). «Luz y Unión», Centro, Levies, 14.—SEVILLA. «Amor Universal», Farró, 4.—SAN GERVASIO. «Amor y Vida», Tamarit, 161, 2,"-BARCELONA. «La Verdad».-BURJASOT (Valencia). «Esperance», Grupo de propaganda espiritista kardeciana. Rue Donizetti, 4.— PARÍS (Auteil). liSTA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la protección de sus guías espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRIPCIÓN 7 pesetas Por un año. i ^ Extranjero. 12 » Número suelto 0'50 » CPAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rue- ga añadan 0*50 pesetas para el franqueo y certificado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos paises cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los paises en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandlna, 20, principal. — Barcelona Obra de regalo para el presente año: Elementos de Una Nueva Cienciai por Mariano Ruth Sinué. Un tomo en 4.° de 308 páginas, es- meradamente impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Catalufia,118.—Barcelona DIRECTOR- REOACTOR:aEF AGOSTO DE 1908 SIIMABIO: D. Salvador Pons y Torres, Pbro.—Liga Espiritista Española, por D. J. Esteva Grau.—Discurso de D. Jose Font.—Ideogenesis, por D. Manuel Pareja Medina.—Estudiemos, por D. Benito Rodríguez.—¡Desde muy lejos!, por D.® Amalia Domingo Soler.—Justicia humana, por D. Nicolás Fernández Blanca.—Dictado me- dianímico.—La Asamblea Espiritista de Guayama.—Lu liiejor de lo iriejor, por doña Amalia Domingo Soler.—La fantasma de Villanueva de Gállego, por D. P. Barrieras. —Centro Espiritista «La Irradiación».—Junta Permanente del Segundo Congreso Es- pirita de México.—A nuestros hermanos. Corresponsales Administrativos néjico.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4.® de Nicolás Bravo, 19, ORIZABA (Veracruz). Pnerto-Rico.—Faustino Tsona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco 1. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE. Cuba.—Adolfo Garda, Real, lo, MANZANILLO.—Delfín Roig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 54, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN.—Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- do J. Raggi, Apartado 17, CAIBARIEN.—D.® Rosalia Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. BeprïH>Iica de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN —Manuel .Y. López L., Carrera 6.®, n." 248 bis, BOGOTÁ. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedella, Dtor. de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés», PEHUAJO —Atilano Hervas, Tucumán, 1736, BUENOS AIRES.—^ Pedro Iraola, NECOCHEA.— Manuel Torres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Islas Filipinas.—José M.® Herrero, calle Concepción, 177.—QUIAPO. Krasil.—Agrippino Gómez Veado, Rua Municipal, n." 3, CIDADE DO MURIAHÉ (Estado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Bahía).—Edia de Moarés Cardoso, San Francisco Ha- vrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Bahía de Samana), SÁNCHEZ. —Aurelio León, SAN FRANCISCO DE MACORIS. República de Kicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Kcnador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CARBONELL y ESTEYA--Editores--'^^^"^lA^R"cVL"^^^^^^ Nuestra; fuerzas Mentales Rodo de emplearlas con provecho en el comercio, ia indnstria, las artes, los olidos, y en general en todos los actos y situaciones de la vida por Prentice Mulford Cuatro magníficos tomos encuadernados á la americana. 4O pesetas ANO IX AGOSTO DE 1908 NÚM. 8 Nuestros Corresponsales Salvador Pons y Torres, Pbro. Nació en Pierola, provincia de Barcelona, 1858. En 1878 entró en la Corpo- ración de PP. Agustinos, misioneros para Filipinas. En 1885 pasó á regentar pa- rroquias en las Islas Filipinas. En 1899 salió déla Corporación para dedicarse exclusivamente al Profesorado y enseñanza de la juventud. En 1900-901 publicó «La Defensa del Clero Secular Filipino»^ 2 volúmenes. Desde 1901 vive dedica- do al Profesorado en la Universidad Ilócana y otros colegios filipinos. Ha cola- horado en ios periódicos filipinos La Democracia, El Progreso, El Adelanto, El Renacimiento, El Grito del Pueblo, El Tiempo, El Pueblo, Ang Suga, La Independencia, La Patria, La Nueva Era, Algo es Algo, La Juventud Ilocana y otros. En 1900-901 sostuvo una polémica en El Progreso, de carácter teoló- gico con un total de cincuenta y seis artículos. Pasan de trescientos los artfcu- los de colaboración gratuita en la prensa filipina, desde 1900, de carácter filosó- fico, científico, político y religioso. Es de ideas reformistas,, liberales y demo- oráticas, á pesar de la educación contraria recibida entre los frailes. Hoy es Profesor de Filosofía y Ciencias Morales en la Universidad Ilocana y-gran de- fensor de los principios y doctrinas espiritistas. En las últimas elecciones muni- cipales. Noviembre 1907, fué elegido primer concejal de Vigán, ciudad de cuarenta y cinco mil almas. La labor de propaganda espirita de nuestro buen amigo Sr. Pons de todos es bien conocida y apreciada; ella le hace digno de toda nuestra consideración y respeto. 226 LUZ Y UNIÓN y Liga Espiritista Española Siguiendo el camino que se han trazado, ios individuos déla Junta Dirctiva de la «Liga» organizaron para celebrarla el sábado pasado, día 15 por la noche, una velada artística, cuyo programa se publicó en La Voz de la Verdad, y el cual habrán leído sin duda nuestros lectores. Unos 550 eran los concurrentes á esta fiesta y á no ser aquel día la Fiesta Mayor de Gracia y á hacer más buen tiempo, seguramente hubieran sido muchos más los que á ella hubieran asistido, sin que por eso dejase de llenarse el amplio salón de sesiones de que dispone la «Liga». Iba dedicada esta fiesta al Grupo «Espérance», de París, afiliado á la «Liga-», y á su digna presidenta SRGAXO OFJCJAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 271 propia vida err nosotros mismos y en la relación solidaria, declarámonos eclécti- camente psico físicos, puesto que vemos en todos tiempos y en todas partes la fuerza añimadora, .expresión de la voluntad absoluta, manifestándose en el Uni- verso infinito, infinitamente y de infinitos modos, comprendiendo desde los ata- mos animados, hasta las colectividades astrales, siendo, estando y viviendo en solidaridad, en movimiento de aptitudes, de inteligencia y de inter comunicación, representada por atracciones, por afinidades y por todas las relaciones armóni- cas que la ley universal de amor infinito impone á todos los elementos y manifeV taciones cr-eadas. Con este criterio psico,físico, nos proponemos esclarecer cuanto nos sea posible, la naturaleza del sér racional en la Tierra, discurriendo primeramente sobre-la virtualidad esencial animadora, que caracteriza su manera de ser, con- forme su esencia emanada del sér absoluto como virtualidad potencial individua- lizada, simple, sin componente alguno que limite sus caracteres de integridad, de infinitud y de universalidad, como partes integrantes de la esencia animadora del Universo infinito. '.¿Podremos nosotros fijar el principio de nuestro propio sér? Tendríamos que remontarnos á la idea de lo increado, de la nada, del absurdo religioso, últi- ma razón del materialismo, ilógico en sus raciocinios. Bástenos admitir y respetar nuestro origen y nuestra existencia en el. sér de toda realidad, como^ manifestación de su manera de ser; busquemos el origen de nuestra manera de estar en el momento indeterminado de la eternidad, determi- nándose en cada instante sin aparente sucesión de actos, es decir: en todo tiem- po y espacio, sin espacio y sin tiempo apreciables, porque el sér siendo", es en la Eternidad, y lo eterno, es inmutable é imperecedero. Apoyándonos en el materialismo, podemos establecer la hipótesis de que la manifestación de los átomos compuestos, animados, vitalizados y organizados conforme á la naturaleza de su constitución, procedería existencia de los seres en su aspecto físico, vital y anímico, porque ta fuerza animadora concentrada en partículas atómicas, constituyendo átomos, moléculas ó cuerpos, se nos presen- tará siempre como organismQS animados, que al cohexistir con otros, establecen relaciones de actividad que origina el movimiento y la vida de las colectividades en armónica solidaridad de actividades. Prescindamos por ahora del desarrollo atómico molecular y orgánico, debido á la esencia perfectible que anima á las partes componentes de los organismos compuestos, y fijémonos en el germen atómico que representa la individualidad humana en el instante de la humanización en la Tierra. Ante todo, debemos recordar lo que otras veces dijimos, de que nuestro pro- pió sér en cuanto á la espiritualidad, su naturaleza psíquica y su cualidad esen- cial, es siempre y en cada instante un germen potencial de desarrollo, üna vir- tualidad esencial realizándose indefinidamente tal cual sea su desarrollo esencial, su actividad potencial, su virtualidad vitalizadora y su capacidad mental, pudien- do concretarse en un átomo de materia rarificada, en conformidad con la ma- nifestación orgánica que se determine etj el instante de la reencarnación, sien- do en cuanto su naturaleza esencial, indestructible é invariable, en cuanto á su manera de estar según corresponda á las condiciones de la organización á que 272 LUZ Y UNIÓN se somete, sin detrimento de su potencialidad vital y de sus facultades anímicas; es decir; que orgánicamente se reduce á la molécula germinal orgánica, y psíqui- camente mantiene y conserva su desarrollo esencial. Estos procesos preliminares de organización carnal, son generales para todos los seres organizados y con algunas variantes, pueden referirse también á las organizaciones minerales y vegetales; porque en todos los organismos encontra- remos átomos compuestos, partículas animadas de fuerza animadora,, detenni- fiándose en cada caso, según su estado de desarrollo esencial. Antes de intentar revolver el Génesis misterioso para nosotros de la vida orgánica, tenemos que ocuparnos de las fuerzas que lo integran en su origen y las que contribuyen á su desarrollo orgánico. No debemos los deístas admitir la inmediata intervención de la voluntad su- prema para la aparición de los seres, ni fiar los actos de generación á las leyes químicas, como pretenden los materialistas. Nosotros, psicólogos ante todo, de- bemos reconocer como fuerza, la expresión de nuestra voluntad, manifestándose en la esfera propia de nuestra actividad y de las demás actividades reunidas, determinándose para un fin; debemos encontrar las causas determinantes de los hechos que se producen con arreglo á las leyes invariables, subordinadas á la Ley Suprema de la voluntad absoluta. Sería muy fácil establecer hipótesis que sirvieran de punto de partida para generalizar las ideas, pero la ciencia y la razón exigen que-las ideas abarquen y comprendan hasta donde sea preciso, buscando las causas y los efectos de lo anterior y posterior, lo que nos circunda y lo que nos relaciona con la naturaleza universal. Por esta rázón, el Teosofismo admite que los seres mentales, reuniéndose con los astrales en un cuerpo físico, adquieran, los cuerpos organizados en la Tierra, propiedades químicas, orgánicas, fisiológicas, vitales é instintivas, cohe- xistiendo casi distintamente tres serés en una misma individualidad, y de su opo- sición y lucha constante sobrevienen las perturbaciones, la descomposición con frecuencia y el triunfo algunas veces del sér mental, de la materia con facultades psíquicas y racionales. Como las religiones positivas y las escuelas individualistas, racionalistas y selectivas, se informan en esta triple existencia de tres seres en un mismo orga- nismo carnal, debemos nosotros ocuparnos ante todo, de las consecuencias que se derivan de estas afirmaciones, de lo que se refiere al ejercicio de las faculta- des mentales y así podremos amenizar un poco nuestras disquisiciones, sobre los actos conscientes y la inter comunicación del pensamiento, y veremos más claro, que los fenómenos de comunicación que ensayamos y producimos son un caso particular de la solidaridad de ideas que forman el pensamiento colectivo, primera forma de la identificación moral que corresponde á los seres racionales, libres y fraternalmente constituidos. Cuando se dice axiomáticamente, que no hay efecto sin causa, se establece un procedimiento racional para la investigación científica, mediante la observa- ción directa para las aplicaciones inmediatas, pero más trascendentalmente para la generalización de las ideas filosóficas que deben remontarse á los orígenes de las causas y á los resultados teóricos en la sucesión de los hechos que á su vez ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGVV E. Eai'AÑOLA 273 obrando como causa, producen nuevas manifestaciones activas que se producen como efectos que determinan otras causas. Con este criterio debemos ocuparnos de la fuerza, como causa y del movi- miento observado en la materia, como efecto de la fuerza que lo promueve. Todos los pensadores' que se han ocupado de la naturaleza de los cuerpos y de los seres en la Tierra, procediendo por observación de los hechos, han admi- tido bajo distintos aspectos y denominaciones, fuerzas que obraban en la materia y admitieron en los cuerpos físicos propiedades generales á todos, y particulares á cada una de sus formas indeterminadas. En cuanto á la materia organizada, fuerzas son también las que provocan la Génesis orgánica y mantienen su des- arrollo hasta su descomposición, en que precipitándose ó sublimizándose la mate- ría, se resuelve en fuei^zas productoras de nuevos organismos que sucesivamente se reproducen, viven y desaparecen removiendo y utilizando las fuerzas repre- sentadas en las organizaciones pasadas y presentes. Esto ha sido y continúa siendo el campo científico y filosófico de las escuelas materialistas. Algunos de estos pensadores positivistas, han procurado inducir por razona- miento, las causas que producen tan sorprendentes y variados efectos, y sé han encontrado^n el reino llamado inorgánico, con fuerzas misteriosas que estable- cen reglas yleyes invariables para la composición y descomposición atómica de los cuerpos y de sus elementos constitutivos. Respecto al reino orgánico, vegetal y animal, han reconocido una causa de existencia, que no es, ni puede ser, efecto de las propiedades de la materia, y esta fuerza organizadora que establece la diferenciación entre los seres y el des- arrollo especial en las individualidades, la denominaron fuerza orgánica, y enton- ees, hubo escuelas organicistas; pero observando otros, que de los sistemas fun- cionales de los órganos, resultaban los estados particulares y sucesivos de los seres con sus caracteres propios que mantienen su individualidad permanente, tuvieron que admitir otra fuerza animadora, en representación de las fuerzas de- terminadas por el funcionalismo orgánico, y en esta vida de relación de las partes, encontraron la causa de su existencia individualizada, y admitieron la vitalización' como fuerza superior á la orgánica y los vitalistas defendieron que todos los fe- nómenos físicos, químicos y orgánicos, están subordinados á la fuerza vital que anima á los organismos. Estudiando las manifestaciones vitales de los seres, se observó que los orga- nismos vivos se caracterizaban por sus aptitudes para mantener su existencia y la vida de relación con otros seres y se encontró la fuerza animadora que mani- festándose intelectivamente como efecto de una actividad más ó menos cons- cíente, debía proceder de una fuerza superior inteligente, obedeciendo á leyes sabiamente dispuestas desde las primeras formas y los primeros gérmenes que aparecieron en la Tierra, hasta que por perfeccionamientos sucesivos se maní- fiesta esta fuerza en el sér pensante y racional. Sobre las facultades intelectuales y anímicas, se ha discutido mucho; acerca de la naturaleza y origen de la fuerza que produce el pensamiento y desenvuelve las ideas en los seres pensantes, se ha dicho muy poco, y los que, como los teó- sofos, han imaginado la existencia de seres purificados, constituyendo la forma 274 LUZ Y UNIÓN superior de la materia representada en los seres y en los planos de la mentali- dad, no han resuelto nada sobre la causa y origen de estos estados, de las mate- rializaciones mentales. Por consiguieate, todos los que se han ocupado de las funciones psíquicas de los seres, admitiendo un alma superior á las representaciones orgánicas y vitales, han buscado su origen en los gérmenes primitivos ó en los elementos atómicos del éter, dotados de fuerza animadora ' y virtualidad orgánica vital y psíquica. ¿Cómo será posible, pues, con estas diferenciaciones de criterio y con tales apreciaciones, ponerse de acuerdo respecto á la causa única? Siempre que los efectos se atribuyan á dos ó más causas distintas, la consecuencia no es cierta, porque desaparece el principio de la unidad de causa confirmada por la variedad de los efectos ordenadamente desarrollados en el tiempó y en el espacio en que nuestra inteligencia puede sentir, pensar y conocer. Por esta razón, no existiendo ciencia basada en una verdad fundamental, per- manente y universal, creemos llegado el momento de fijar los caracteres necesa- rios para establecer en la Tierra una ciencia única, generalizadora de las ideas que satisfagan á todas las inteligencias que actúan en el Universo. Por esta razón, también, hemos repetido tantas veces el concepto de fuerza y la forma en que se resuelve y se determina en las primeras y sucesivas concrecio- nes del éter, como substancia incoercible é imponderable, pero esencialmente activa en todos los estados y formas en que la voluntad absoluta se mani-~ fiesta. V Para llegar á estas concepciones metafísicas, procedemos por inducción de los hechos de inter comunicación del pensamiento y por los fenómenos psíquicos determinados en la materia etérea que trascienden á la conciencia de los seres racionales comprobados en la Tierra. La inmortalidad del alma que representa en cada uno y en todos los seres la persistencia de su individualidad, puede establecerse la filosofía racional del es- píritu porque el aspecto superior de los seres en su naturaleza espiritual para de- ducir su origen, se funda en los hechos conocidos é induce Su finalidad por los resultados trascendentales de desarrollo esencial en sucesivo y solidario perfec cionamiento de todos los seres del Universo. Al estudiar al sér racional en la Tierra, podríamos afirmar que es una perso- nalidad, un sér pensante condicionado temporalmente en la Tierra para manifes- tarse orgánicamente conforme á las condiciones vitales en que sucesivamente pueda encontrarse el planeta cuya vida se desarrolla dentro de la actividad vital de su sistema solar, así como de éste con otros indefinidamente. Por estas afir- maciones no pueden satisfacer hoy á la ciencia terrena porque está informada por distintas escuelas filosóficas que por ser múltiples, son incompletas y contra- dictorias entre sí. Tenemos, pues, que estudiar la personalidad humana antes independientemente de su organización carnal, la organización fluídica de los seres. No es el estado normal al que debemos aspirar por ser una situación transi- toria, sino que por ella nos disponemos y preparamos para intervenir más tarde en el funcionamiento particular de los mundos, debiendo entenderse por organi- zación mundial no las formas carnales en la Tierra, sino lo que corresponde á las ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA ■275 organizaciones de los seres racionales en cada mundo, conforme al estado de materialización en que se encuentre. Por está causa, cuanto digamos respecto á las fuerzas actuantes en la Tierra, tiene que referirse sólo á las organizaciones planetarias, porque en distintas con- diciones, distintas fuerzas se requieren, apropiadas siempre á su condicionalidad, porque las mismas fuerzas físicas que actúan en la Tierra, cambian en intensidad y movimiento en otras regiones y en otros mundos. * Acaso encontraremos una sola fuerza, con propiedades físicas, que sea apre- ciable del mismo modo que en, todas las esferas del Universo, y esta fuerza ha de ser la que resulte de la solidaridad vital, porque en ella se determinan todas las actividades de los seres vivientes; y como todas las zonas, todas las regiones y todas las esferas están ocupadas y compenetradas entre sf por las actividades de los seres, ese lazo físico que las une al servicio de la fuerza anímica, forma un ambiente de vitalización en que todos los seres se encuentran representados y participan de su influencia conforme á su estado de desarrollo esencial. Esta fuerza que en la Tierra se reconoce muy imperfectamente como magnetismo, en otras regiones se aprecia y considera como principal elemento de inter comuni- cación, aumentando su importancia según el impulso de la voluntad que le impri- me movimiento. La fuerza magnética, es la representación de la vida eh todos sus aspectos^ es la que relaciona las partes con el Todo, lo mismo en los seres infinitamente pequeños, que en las colectividades de seres y de mundos, en todas las formas que solidariamente pueden establecerse las relaciones vitales y armónicas de las actividades parciales y totales. Por ser esta fuerza tan importante, la vamos á estudiar en primer término,- prescindiendo por ahora del magnetismo terrestre que son combinaciones de fuerzas absorbidas y reflejadas de unos á otros astros; nos dirigiremos principal- mente al hipnotismo personal, de cuyo conocimiento y dirección depende princi- pálmente el perfeccionamiento y el progreso de la humanidad terrena y la suboi> dinación de todas las fuerzas, á la voluntad de los seres superiores y de las co- lectividades constituidas en series superiores. Nos será muy fácil este estudio, porque todos sentimos impresiones externas que impresionan misteriosamente nuestros sensorios en forma de atracciones y repulsiones, de afecto y simpatía y dentro de nuestro propio sér despiertan las sensaciones anteriores restableciendo las ideas adquiridas con los conocimientos que en cada instante se adquieren, se cambian y se tonalizan conforme á las im- presiones recibidas. Después de los fenómenos apreciados por la sugestión y auto sugestión, po- demos deducir consecuencias importantes para mejorar las condiciones sociales, que han de satisfacer las necesidades materiales y han de perfeccionar las inteli- gencias en el sentido moral que ignoran y maldicen porque no se conocen á sí mismos ni se sienten fraternalmente unidos á sus semejantes. Después, podremos conocer y estudiar las fuerzas poderosas que bien dirigi- das, pueden transformar las condiciones de la existencia y subsistencia de las generaciones, llamadas á establecer mediante la fuerza magnética las relaciones inter astrales que las fuerzas subordinadas ya han dejado traslucir. 276 LUZ Y UNIÓN Con alguna razón, hace ya tiempo se nos ha revelado, que el Espiritismo en- tre los encarnados, será el Magnetismo con los desencarnados, y que el Magne- tismo de vivos, es el Espiritismo de los muertos. Por algo también todas las ma- nifestacionés de Inter comunicación, han llegado á la Tierra por procedimientos magnéticos desde la tiptología al sonambulismo lúcido. El Magnetismo como fuerza que nos compenetra y nos une, es lumínico, se refleja de todos los seres y adquiere cambiantes y tonalidades que exjjresan la situación y las formas manifestativas de cada sér y en cada instante; y como to- das estas fuerzas reflejadas tienden á polarizarse y á establecer el equilibrio con las fuerzas contrarias, con la sola diferencia de que las fuerzas anímicas ó de- pendientes de la voluntad, se atraen siempre y tienden á unirse, á identificarse, obrando directamente por el impulso recibido y no por conflicto de reacciones contrarias. Benito Rodríguez. (Continuará). Mi Credo Yo creo en Tí, mi Dios, Dios de bondades, cuyo poder á toda parte alcanza; sin Tí los mundos estos no existieran, ni guardaran el orden que así guardan. Yo creo en Tí, mi Dios, porque perdonas á todo aquel que falta, no empleando contra él nunca el castigo como predican los que no te aman. ¿Cómo en Tí hallar rencor. Dios amañtísimo, si eres más puro que las mismas auras, si no cabe en tu espíritu sublime usar contra el delito la venganza? Haz, Señor, porque espíritus ligeros nó apresen nuestras almas y hagan que la avaricia, los réncores y las pasiones malas, trunquen la voluntad que nos sostiene y nos aleje de tu luz preclara. Dios de la Caridad santa y bendita que eres paño de lágrimas de los pobres que lloran en silencio porque el hambre y la sed jamás apagan, inspira á los mortales que te siguen ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 277 y de todo pecar al bueno aparta, que hay espíritus, Dios, tan atrasados que á los que ejercen bien el mal los lanzan. Apártanos del crimen y la envidia que en lugar de elevarnos nos aplastan; sé nuestro guía en el luchar continuo de esta continua y engañosa farsa y el bien así con tu fluido hermoso al fondo irá de nuestras pobres almas. Haced que la materia no sea juguete de pasiones malas y que sólo se emplee para alabarte,' cual los que buenos son todos te alaban. Sea la rectitud nuestra bandera, la insignia sacrosanta que nos lleve hacia Tí, como los ríos van hacia el mar en su continua marcha. Concédenos el don. Dios de bondades, de nunca castigar al que nos falta y que hagamos acciones meritorias á todo aquel que nos las haga, malas. Nada de engaños, ni egoísmos necios, que esos son cocodrilos que se arrastran; luzca la luz en nuestros pechos, luzca como divinas ráfagas, así estaremos elevados siempre é iremos siempre de la fe en las alas, para llegar á Tí, Dios, y pedirte la perfección divina que nos falta. Rogámoste, Señor, que entre nosotros no haya rencores, ni intención malsana, que nos miremos siempre como hermanos y nuestras almas sean como hermanas; que nunca el mal entre nosotros ponga infranqueable valla y que reine la paz siempre bendita de la que ostent-as Tú la hermosa palma. No del vicio ostentemos el estigma que mancha, llévanos á la luz donde fulgura como sol de bondad tu rica gracia. Yo creo en Tí, mi Dios, todo grandeza; yo creo en Tí, mi Dios, todo esperanza; luz que guía al que vive en el pecado, bondad sublime, santidad que encanta. 278 LUZ Y UNIÓN Hacia Tí guiaré mis pensamientos y hacia Tí marcharán todas mis ansias. Yo creo en Tí, Señor; Tú eres el bueno, el santo y el humilde, el que nos salva. Tú eres. Señor, el alma brilladora que del mal ños aparta, haciendo de las nuestras espíritus de luz que á Tí te alaban. Creo en Tí, mi Señor. Tú eres el grande y el poderoso que en, los mundos manda. Francisco Campoy. I Unos, espiritistas del Brasil me han escrito una carta afectuosa, diciéndome muy que acuden á mí para ver si darles explicación satisfactoria puedo sobre un individuo de su Centro, sbna dignísima por todos per- conceptos, cristiano, que cuánto ordena cumple con el evangelio de Cristo, laborioso, honrado, trabajador, prudente, servicial, abnegado, reuniendo, en todas las fin, cualidades que distinguen á un hombre de bien. Se casó y un niño vino á llenar de alegría su saron cinco tranquilo hogar; pa- años, y, desgraciadamente, aquel hogar, nido de la virtud, se transformó en una sucursal del infierno, nuestro hermano porque sorprendió á su esposa en el momento que fal- taba á sus deberes conyugales. Sin instante llevó á su infiel perder compañera á casa de sus padres, niño, el quedándose él con el cual no volvió á llamar á su madre, á pesar de su corta edad, y si oía que la nombraban, se iba inmediatamente del aposento. Su padre lo puso en un gran colegio, donde el niño era muy atendido, gracias á la su el cual pensión que le pagaba visitaba padre, con frecuencia. Pasaron siete años, un la y día madre del niño se presentó en el colegio con la de ver á su hijo, pretensión y en cuanto le dijeron á éste que su madre ría verle, el niño que- echó á correr, cruzó jardines, saltó varias cercas, trepó á un alto paredón, hasta lograr salir del refugiándose colegio, en una casa cercana al colegio, cuyo director se ÓKGAXO OFICIAL UE LA LIGA E. ESPAÑOLA 279 apresuró á darle aviso de lo ocurrido al padre del niño, el cual acudió inmediatamente, se llevó á su hijo, haciéndole saber á su esposa que no cometiera otra imprudencia semejante, por- que tenía poder para desterrarla muy lejos, y se encolerizó de tal modo que no parecía el mismo; y ahora me dicen los espi- ritistas brasileños, ¿cómo un hombre tan bueno, tan pacífico, tan tolerante, tan compasivo, inculca á su hijo tal odio á su madre, que no quiere que ella habite la misma población donde ellos viven? ¿Cómo un espiritista sin tacha se deja dominar por el genio de la venganza, por el odio más profundo y más im- placable, no contentándose con odiar él solo, sino que se com- place en que su hijo odie también? Y un espíritu murmura en mi oído: II «No tiene el padre que tomarse ese trabajo; es el espíritu del hijo el que induce al padre á que sea inexorable con la mu- jer adúltera, porque ese niño es un espíritu tan esclavo de su honra, que ha preferido siempre su martirio antes que faltar á sus deberes sociales; en muchas existencias ha estado unido por el amor con el que hoy es su padre; pero nunca se han podido unir con el lazo del matrimonio; siempre han pertenecido á familias opulentas separadas por odios políticos ó religiosos. En su existencia anterior, el niño de hoy era una gentil doncella, y su padre de hoy un apuesto mancebo; los dos se amaban con delirio, pero los padres de ambos dijeron, antes muertos que unidos. El le propuso á ella la fuga; pero ella le dijo: «No; antes muerta que faltar á mi deber; si no nos podemos unir en la tierra. Dios nos uñirá en e] cielo»; y se refugió en un con- vento y allí murió antes de profesar. Es un espíritu tan digno, tan elevado, tan puro, que no puede estar en contacto con las miserias humanas. Hay verdadera incompatibilidad entre ella y las impuras pasiones terrenales. En esta existencia volvió á la tierra buscando al amor de sus amores para vivir en brazos del amor más puro, eligiéndole por padre para reposar en su compañía de tantas luchas por divisiones y odios de familia; pero se-conoce que aún no tiene ganada tanta felicidad; y su madre descendió hasta el abismo de la degradación, para que tuviera que huir de su contacto; por eso, aunque muy niñoj se separó de ella; no la volvió á nombrar; no quiso manchar sus labios con su nombre; y cuando más tarde le dijeron: «Esa es 280 luz y unión tu madre», huyó de ella como se huye de un asesino. Así es que no es su padre el que alimenta el luego del odio en su hijo, es el hijo el que domina á su padre, porque hay completa incompatibilidad entre ese éspínlu y los vicios. Ese niño es un alma pura; ha sacrificado siempre su felicidad en aras de su deber.—Adiós». III Encuentro muy racional la comunicación que he obtenido, porque un alma grande no puede transigir con los reptiles; todo lo más que podrá hacer es no aplastarlos, es no pulveri- zarlos con su aliento; pero vivir con ellos, respirar su ambiente, dormir bajo un mismo techo, imposible. Y no es crueldad del espíritu, es imposibilidad material, es la verdadera incompati-. bilidad entre los caracteres; abismo que no puede cegarse en una existencia. Hay que dejar al tiempo que apague los volca- nes de la concupiscencia y que infunda en las almas puras la virtud más difícil de adquirir, la compasión para los caídos; esa es la gran virtud, la que se domina y dice: ¡Dios mío! ¡que pase por el lodo sin mancharme, pero que salve á los que nau- tragan en el cieno de los vicios y las impurezas! Esta es la gran virtud. Amalia- Domingo Soler. Suseripeión á favor de D." Adela CDuñoz Suma anterior 14- ptas. D. Nicolás Jerragiit, de Felanitx. 0'50 » D. Benito Salazar, de Bilbao 1 » De Un espirita, de Valencia 1 » D. Vicente Torres, de Madrid. 5 » D. Tomás S. Escribano, de Madrid 5 » D. Pascual N., de Madrid 5 » D. Benito Rodríguez, de Madrid 5 » D. José Agulló, de Madrid 2 » D. Domingo Rodríguez, de Pontevedra 0*50 » D.® Vicenta Matilla, de Pontevedra. . .' 0'25 » D. Ricardo Boleas, de Tharsis. 2'50 » Suman. . 41*75 ptas. (Sigue abierta la suscripción). ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 281 Comunicación obtenida de un espíritu, en 15 de .Marzo de 1905, en la villa de Higuera de Vargas La virtud y sólo la virtud es culto agradable á Dios; que es virtud Poder, vir- tud Amor, virtud Ciencia; esas son las virtudes que debemos reconocer en el Padre, á quien sólo debemos adorar. El culto qué no infunde amor, no es culto. El culto que no da fruto, no es culto. Adora á Dios el que estudia al hombre físico, el que estudia al hombre moral, el que estudia al hombre intelectual, el que estudia al mundo interno y al mundo externo, á los seres todos, y á la creación toda, ó en parte. Adora á Dios, el que cumple con su deber; el artista, en sus artefactos; el agricultor, en sus producciones; el literato, en sus libros; el científico, en sus estudios. Adora á Dios, el pobre, en la conformidad de su pobreza; el ricp, en la sabia administración de sus riquezas al mayor bien posible. Adora á Dios, el que-se sacrifica por el bien de sus semejantes. Este último es el que más adora i'Dios, porque menos se ama á sí mismo, y más ama á sus semejantes en la acción y en la caridad, ó amor práctico: «Obras son amores y no buenas razones». Los que se sacrifican por el bien de las criaturas aman á Dios en el máximo amor, si su poder por la práctica de la caridad es acompañado por la actividad. El hombre consta de alma y cuerpo. El alma es luz é inteligencia. El cuerpo sólo es instrumento que le sirve para sus manifestaciones en la vida material. El que se perfecciona á sí, mismo ó perfecciona á los demás en inteligencia ó sentimiento, ora al Señor, Padre de todo lo creado. El que ha sufrido agravios y perdona á sus enemigos, ora á Dios, tributa cul- to al Padre y sigue á Jesús, que en la cruz suplicaba piedad para los que le ha- bían crucificado... ¡Padre!... ¡perdónalos, que no saben lo que hacen! Concluida esta definición, y por no ser ya más extenso, diré á mis hermanos todos: - ¿Qué falta hacen los templos de piedra, las imágenes, altares ni sacerdotes? ¿No es inmenso lo Infinito, cuya mqrada el Padre llena con su grandeza? ¿Qué templo más grande queremos para adorarle?" ¿Ya se contemple de día ó ya de noche tachonado de estrellas, que son otros tantos mundos que moran nuestros hermhnos? La casa del Padre tiene muchas habitaciones. Pues bien, Jesús condenó, según el Evangelio, la idolatría, que siguen las reli- giones positivas, con todos sus formulismos y dogmas, y .todo ello es contrario al. Evangelio; seguid la doctrina santa por su sencillez; primero, porque nada hay que hable más al sentimiento, doctrina que es la que más eleva al espíritu. Ella, observada en su pureza, es él sendero más seguro que hay ,para agradar al Pa- 282 LUZ Y UNIÓN dre y Señor, y el único camino que conduce con paso más seguro por la senda de la perfección, que es lo que constituye el progreso. Jesús con sus enseñanzas dió á conocer al Padre en toda su grandeza; pero las inteligencias de los que le escuchaban no podían comprenderlo; sólo explica- ba aquello que podían comprender, y lo que no, por medio de parábolas; de aquí el que dijese: «Muchas cosas podría deciros, mas no podríais llevarlas». Las parábolas son las que han constituido la lucha de las inteligencias, bus- cando en el período de veinte siglos su verdadera interpretación. Hoy, gracias á nuestros hermanos del espacio que han querido comunicarse con vosotros, por diferentes medios, y debido á nuestras brillantes luces, es que se debe el conocimiento de la verdadera doctrina, á seguir cumpliéndose así la promesa santa que Jesús hizo, que más tarde vendría el Enviado por él, el Espí- ritu de Verdad, que habrá de guiar á la humanidad por el recto sendero de la vir- tud. Esos tiempos, queridos hermanos, han llegado ya. El Espíritu de Verdad está ya con vosotros, que es la enseñanza que os dan vuestros hermanos queridos de ultratumba. Sólo debido á nosotros que hemos descorrido el velo que os tenía sumidos en la más crasa ignorancia, es que una parte, aunque pequeña, de la humanidad pue- da ver claro el camino que habéis de recorrer para llegar á lá meta de vuestras aspiraciones con paso más rápido. ¿Qué sería de vosotros si los espíritus bue- nos, dignos mensageros de nuestro Padre Dios, no os hubieran iluminado para se- guir constantes nuestras enseñanzas? Continuaríais siendp víctimas de aquellos hermanos que han puesto todo su empeño en teneros sumidos en la más torpe ig- norancia, para de ese modo satisfacer sus más degradantes aspiraciones. ¡Cuán- ta responsabilidad pesa sobre ellos! ¡El Señor les perdone como les perdonamos nosotros! La enseñanza espiritista, al proclamar la verdad desnuda, en todo su esplendor, es la encargada de hacer desaparecer para siempre todo lo que constituye la rèmora de la humanidad; las clases privilegiadas que han considera- do á los demás seres humanos como instrumentos ó viles esclavos, creyéndose superiores, algunos hasta de diferente sangre, y otros... personas consagradas por virtud del mismo Dios, y, como tales, acreedorés aí homenaje de sus inferió- res, tiranizándolos y humillándolos. Basta, pues. La nueva ciencia que se apoya en la doctrina sencilla, como he dicho ya, enseñada por el Maestro y Mártir, viene hoy á regenerar la humanidad, sin ostentación, cual el Mesías. Hermanos: causa horror el pensar en los extravíos de las generaciones. Tra- bajad sin descanso para que brille él Sol de la fraternidad universal. Adiós. Isabel. Medium E. G. R. Es copia. Manuel Ruiz Flores. Nota del copiante: Hechos de los Apóstoles XVII, 24 y 25.—«El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, ese, como sea Señor del Cielo y de la Tierra, no habita en templos hechos de mano. Ni es honrado con mano de hombre necesitado de algo, pues El da á todos vida y respiración y todas las cosas». ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 283 Los niños hombres y los hombres niños He aquí un tema compuesto de dos puntos importantes que parece uno solo. No faltará quien diga: «¿Qué más da la una cosa que la otra? ¿Qué diferencia hay de un niño hombre á un hombre niño?» Esa reflexión se harán muchos, y hasta se reirán de esta ocurrencia; pero para evitar dudas, burlas y congeturas, vamos á hacer algunas observaciones que puedan aclarar este punto; vamos á demostrar no sólo que son dos puntos diferentes, sino que del uno al otro media una distancia incomparable. He aquí, * pues: Un niño, sea hijo de padres ricos ó pobres, inteligentes ó ignorantes, y que desde su infancia demuestra sus tendencias, bien sea á las cien- cias, á las artes, las matemáticas ó cualquier ramo del saber humano, y demuestra también el principio de buenos dotes morales. Ese niño, que á su edad temprana, con su precocidad, puede servir de ejemplo á mu- chos, ese niño es un verdadero hombre, puesto que deja atrás á muchos hombres que comparados con él son unos pigmeos. En cambio, esos que hechos hombres en edad y cuerpo de hombres, que son apáticos al cumplimiento del deber, amigos de la ociosidad y enemigos de la obediencia; esos que no conocen el respeto y la subordir nación; esos que cualquier cosa, por insignificante que sea, les hace renegar y maldecir; esos que huyen de la buena educación y prefieren seguir la rutina de las frivolidades y de los vicios, aunque sus mayores traten de inculcarles las buenas costumbres de la vida, esos son los hom- bres niños, puesto que les falta la capabidad para apreciar las cosas, para distinguir lo bueno de lo malo y para ajustarse á las cosas serias que guian al hombre por el verdadero camino de la vida. Ya ven, pues, los que dudan de que en vez de uno sean dos puntos, si hay ó no hay diferencia de la una cosa á la otra. Ahora bien: ¿Cuál es la causa que origina ese contraste entre los seres humanos? ¿Será porque Dios habrá creado dotadas de una gran inteligencia las almas de los unos y desprovistas de ella las de los otros? En este caso Dios seria un monstruo. Cualquier padre de familia, me- dianamente honrado é instruido, seria más justo y más sabio que Dios. ¿Será porque al incorporar á la vida humana serán unas almas más aplicadas que las otras? Esto tampoco es concebible en el tema que tra- tamos, puesto que ponemos el ejemplo de los niños, sean de padres ricos. 284 luz y unión Ó pobres, inteligentes ó ignorantes y que desde su infancia denotan un desarrollo precoz, y el ejemplo de los hombres que por su manera de ser resultan unos verdaderos niños. ¿Será, pues, porque á los unos se les proporciona más adecuados ele- mentos para desarrollar su inteligencia que á los otros? Volvemos á tro- pezar con la misma contrariedad. Pues ya se sabe el ejemplo que hemos puesto entre los niños hombres, y el mismo ejemplo ponemos para los hombres niños. Y aun más. Se ven niños hpmbres, hijos de¡padres igno- rantes, que la inteligencia que desarrollan desde su infancia no se la pueden proporcionar sus padres, puesto que no la poseen. Y se ven hombres niños, hijos de padres instruidos y de buenas dotes morales, que se empeñan en inculcarles á esos hijos, y éstos siempre siguen con sus trece de repeler las reflexiones y buenos consejos de sus padres. Conque, ¿en qué quedamos? ¿En qué consiste esa diferencia? ¿No nos podrán explicar este enigma los representantes de las reli- giones positivas? Esperamos la contestación afirmativa y satisfactoria, sin salirse, por supuesto, de las reglas ó dogmas que tienen consignadas. Esto es, dentro de la regla de que las almas son creadas para tomar carne enseguida, y al volver á dejar la carne, esperan en la otra vida el juicio final. Sin salirse de esa regla es que queremos resuelto el problema. Pero si en vez de eso nos vienen con que eso sólo puede resolverse con «la reencarnación de las almas». Que el desarrollo de los unos (los niños hombres) lo han adquirido con un trabajo constante ó probo y laborioso en las diversas encarnaciones al través de los tiempos, y que los otros (los hombres niños) es que han encarnado menos veces (que son espiritus más nuevos) y por lo tanto han tenido menos tiempo para progresar. Si lo resuelven bajo este punto de vista, ya es otra cosa. En este caso esta- rán de acuerdo con nosotros y deben abjurar de esas religiones caducas que ya no tienen razón de ser y pasarse á engrosar las filas de nuestra doctrina. Esperamos, pues, la contestación. Faustino Ysona. El día 29 del pasado Agosto, y á una edad avanzada, desencarnó la madre ' de nuestro buen amigo y hermano en creencias, el músico mayor de Ingenieros D. Ildefonso Urizar. Esperamos que nuestra consoladora doctrina le servirá de lenitivo, y, al mismo tiempo le enviamos nnestro más sentido pésame, así como felicitamos al espíritu liberto para el que pedimos una oración á nuestros hermanos. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 285 Un triste peso, ó la verdad desnuda Sí; un triste peso, que se vota en fruslerías, en cintas, en flores, en ador- nos, en bibelots... en refrescos, en bebidas, en infinidad de cosas superficiales, que no hacen falta, de las que se puede prescindir sino en todo, en parte... un triste peso de los... que se despilfarran, es tan sólo lo que hace falta para soste- ner una institución que se dice que se ama, una creencia que se dice profesar, un ideal que se .tiene el dqber de sostener... y ese triste peso, que ningún sa- orificio costaría separarlo mensualmente, no se tiene, no se dispone de él para venir á contribuir, á sostener los gastos de local y luz, para seguir esparciendo la creencia, para ayudar á hacerla propaganda y, sin embargo, se llaman adeptos, espiritistas los que así proceden. No: no es adepto, no es creyente, no es espiritista el que no da pruebas de amor al ideal que aparenta amar, que dice que profesa. El amante del base ball, es suscriptor del periódico qué da cuenta de ese sport; es socio de la liga á que pertenece y contribuye con su bnota y la sus- cripción al sostenimiento de ambas instituciones. E|. masón cumple con su cuota y sostiene el periódico de su ideal haciéndose suscriptor de él. El político contribuye al sostenimiento del diario que defiende su partido y cubre con su óbolo los gastos del comité á que se afilia. El literato paga su cuota para el sostenimiento del Circulo ó ateneo donde se defiende y propaga aquello que ama, y contribuye, del mismo modo, al sos- tenimiento de los periódicos y revistas de su Indole. El gallego se inscribe como socio de un centro regional; el canario hace lo mismo con el circulo á que pertenece; el dependiente separa un peso ó más para la asociación en que se inscribe... Sólo el espirita, el que se llama espirita, sin-serlo, porque lo dice pero no lo prueba, es el que quiere que la sociedad en que se reúne para practicar, laborar ó contemplar las experiencias espiritas, sea gratis, que se sostenga del aire, 6 de la caridad espléndida del que la preside ó dirige, y que el periódico sea gratis también y se le reparta del mismo modo. Esta es la mayoría. ¿Es cierto? ¿Por qué sucede esto? Pues simple y sénci- llámente porque no se es lo que se dice ser, porque de lo contrario no se proce- deria asi. Hasta los cultos á la Virgen tal ó cual, ó al santo H. ó B. se sostienen con lo que sus devotos dedican, para que no sólo pueda el párroco J.. atender á él, ó á ellos, sino para demostrar que se ama el ideal. Y todas las sociedades y todos los periódicos, sean de la índole que sean, se sostienen y viven y progresan y engrandecen. T sólo á las sociedades y á los periódicos espiritas les pasa lo contrario y viven vida lánguida, ó mueren por falta de recursos. Alguien nos dice: «Es que en los periódicos y sociedades profanas, de índole diversa, se busca y se encuentra otra cosa, pues unos por los puestos, otros por las ventajas que reciben, ven en ello remunerado el sacrificio de la cuota ó suscripción que emplean... pues en las de Beneficencia, por ejemplo, se tiene médico y botica gratis, en las de recreo, música y expansión igual... Pero no queremos seguir, pues los que asi se expresan están demostrando dos cosks: una, su egoísmo é interés material, y otra que no son espiritas ni han compren- dido el Espiritismo, por más que ellos lo crean y se llamen adeptos, y la prueba es que en los centros y periódicos espiritas se encuentran no sólo los placeres materiales, sino los que no se hallan en las otras asociaciones, que son los pla- ceres del alma, los placeres del espíritu. . 286 LUZ Y UNIÓN Porque en un centro espirita, ó en un periódico espiritá se encuentra instruc- ción, adelanto, placer, distracción, beneficencia, material y con- suelos, fuerza, espiritual, amor, etc., etc. Lo único que no hay, lo único no se encuen- tra que es, placeres sensuales, diversiones frivolas y influencias vanas, puestos obtener remunerados, para destinos, goces materiales, que si al cuerpo, dañan al producen placer alma... pero ¿á qué seguir? Volvamos al principio, ó sea al peso, que tanto les cuesta á algunos para contribuir á sostener el separar local donde se práctica y estudia la filosofia rita, ó el triste medio espí- peso que debe disponerse para al ni le hacen pagar el periodista á periódico quien gratis, ni le regalan el papel, ni los sellos el franqueo, ni los talones para para realizar el cobro del mismo Y periódico. ¿sabéis por qué hablamos asi? Porque es preciso, porque la verdad no debe ocultarse, porque hemos leido el manifiesto últimamente Director publicado por nuestro y sabemos, si, sabemos de antemano, que será como en de- sierto: sermón predicar perdido. Dias ha estábamos reunidos varios hermanos, después de una sesión, de re- pente uno de los y presentes dijo: —Caballeros, vamos á sentarnos, entremos á refrescar de (estábamos á las puertas un eafé). Entramos como movidos por la sugestión del invitante y rodeamos una mesa. —Pidan. —¿Qué desean?—dice el mozo. —Ún láguer—dice uno. —A mí una ensalada—exclama otro. —Yo, café con cognac. - —¿Y usted?—dice el mozo dirigiéndose á mi. —Nada—contesté;—agua fria. —¿Cómo? ¿Usted no toma nada? Pida otra cosa—dice el convidante. —No deseo nada más que agua. —No puede ser. Quiere usted un wiskey, una copita de vino ó refres- co? algún Tráigale, si, tráigale otra cosa. —Gracias—dije,—no deseo más que agua. Seguimos conversando y refrescándonos un rato y terminamos con el obse- quio de unos tabacos. —¿Cuánto se debe? v . —Uno treinta. Y yo, tomando el agua, decia: Uno treinta; con treinta centavos hubiéramos refrescado todos, agua con panales y hubiera quedado un peso para la Sociedad. Después supe que el pagano aún no habla abonado la cuota del mes está- bamos á y 25. ¿Lo veis? Y ahora con la llegada de la Nautilus... ¿cuántos pésos no habrán gastado en paseos y refrescos y cintas y flores y propinas, multitud de espiritistas que no están asociados porque no pueden (dicen ellos) disponer de un triste peso sostener el para local? ¿Cuántos espiritistas no se gastan mensualmente uno, dos, tres ó cuatro pe- sos, asistiendo á los cinematógrafos á ver pasar las cintas ó películas... cinema- tográficas? Que conteste el que los ve uno y otro dia, ó mejor dicho, noche, en vez de asistir á los Centros á instruirse ó á consolar y dar luz á las turbadas almas que la necesitan. Péro asi es y será la humanidad por mucho tiempo, y por eso creo, á oca- siones, que tiene razón nuestro Presidente cuando nos dice: «Convénzanse, hermanos, estamos muy atrasados, tenemos que reencarnar muchas veces para poder darnos cuenta de lo trascendental que es el luchar». Espiritismo: es en vano ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 287 Pero no; nuestro deber es luchar y seguiremos luchando. Dejemos que cada cual haga de su capa un sayo, que ya verá á su tiempo que, al ponérsela, no le sirve ó porque la hizo muy estrecha ó demasiado an- cha... que así también es la conciencia de cada cual. Y que me prueben que cuanto he dicho, no es la pura verdad. . El Dr. Cláritas. (De Luz y Verdad, Habana). . Impresión En medio de cantos de vida y amor, de sentirüiento y poesía, bien está sacar á relucir cosas que existen en nuestra vida, que son como tina pequeña nube, que á veces toma grandes proporciones y se agiganta, y con la misma facilidad se deshace y se reduce á nada. Guantes veces el ser que se mira las cosas desde un punto elevado, se le entristece el alma, y más los espiritistas que en algo podemos conocer á fondo la psicologia de las multitudes. No la habéis visto á la multitud que se agita al impulso de un ora- dor que desde la tribuna del mitin todo quiere encenderlo y pone en sus palabras el sello del odio; y el pueblo, ese buen pueblo se levanta exalta- do, crispando los puños, apasionado, delirante, con el alma encendida de pasión y el corazón envuelto de ira... y después de una jornada de gritos, después de haberse organizado una sociedad humana á su gusto, vuelve á su hogar y ¡qué contraste! todo es silencio y calma; viene de un lugar donde sé han invocado todas las trajedias de que hablan las historias y ahora todo es reposo. Allá en un rinconcito que parece un pedazo de cielo está durmiendo el niño con su boquita abierta dibujando una sonrisa, sus rubios cabellos se deslizan sobre su sien como corona de jazmines, aque- lia cuna que parece un jardín donde crecen y florecen las flores de la ilusión. Ha visto un cielo allá lejos, ha soñado que todos los hombres hablan de ser iguales, ha visto que no habían de haber ejércitos de hombres que empuñan fratricidas armas; ahora no ve nada de esto, ahora ha descendí- do á la realidad, y aquel cielo pintado por hábil mano con rojos y negros colores, lo ve con su azulado manto, las calles que iban llenas de sangfe y los palacios incendiados convertidos en hoguera, ahora todo esto no lo ve, sino que contempla el tierno infantito que soñando le sonríe, ve aque- lia esposa que todos los días y á todas horas le sonríe con sus labios de carmín, ve á la gente, aquella gente que le pintaron al pie, de las barri- cadas, los ve pasearse por las calles, por aquellas calles que vió llenas de sangré, y ahora están exhuberantes de vida y movidos al impulso del espíritu de ciudadanía. Aquellos palacios encendidos y ardiendo entre llamas, están inundados de luz y festín convertidos en lugares de orgia, y los hogares humildes, ¡oh! éstos respiran aire de santidad, pasa lama- ñaña y lanzan perfumes de violeta y jazmín para embriagar el andbiente, viene la calda del día y los pájaros dan el ¡adiós! desde sus nidos amoro- sos, viene la noche con sus sombrías horas de meditación, y el hombre 288 luz y unión piensa y pregunta; ¿por qilé, por qué tanta lucha? y una voz honda como salida del rumor de las olas del mar y como tomando eco en los peñascos de los montes, le dice: busca más allá, no te culo de quedes en este cir- hierro que te impide progresar, no creas en los redentores táñeos expon- que sólo te adulan, pregunta á las flores porque tienen color y aroma, pregunta á los pajaritos porque al despertar de la mañana can- tan aquellos himnos saturados de amor y de poesía, pregunta á las olas del mar porque con su espuma formando mantos de púrpura, besan las playas de nuestras ciudades, abre ese libro inédito de la historia busca humana, y en el corazón del hombre un ayer muy triste y un porvenir ha- lagüeño, y cuando te respondan, pregúntate á ti mismo porque piensas, porque amas, quien te ha dado estos angelitos que son sangre de tus ve- nas, y todos los días te esperan con los brazos abiertos y sonríen si tu sonríes, lloran cuando tu estás triste, y te miran solícitos beso pidiéndote un ardiente, y entonces, ¡oh mortal! te verás pequeño, muy pequeño, pero rodeado de florecientes caminos para progresar y perfeccionarte, y no tendrás nécesidad de ídolos que quieran salvarte sin tu adelantarás engrandecerte, y en tu camino venciendo obstáculos, suavizando aspere- zas, y cuando tus infantitos aprendan á deletrear el derás abecedario, tu apren- las primeras de ese otro que empieza diciendo: Cuán es Dios mirado grande con el telescopio del Amor y la Ciencia. Luis Farrés. Por el fruto se conoce el árbol Nuestro hermano en creencias D. Pedro Martínez Garda (de La Unión) nos escribe muy apenado porque su angelical esposa, su inolvi- dable compañera, el ángel que con sus blancas alas ha cubierto su ho- gar, santuario bendito, donde su sacerdotisa adoraba á Jesús con tal que todos fe, los días contemplando su imagen permanecía media hora en religiosa meditación, amparando á cuantos pobres podi^ y siendo el consuelo de todos los afligidos, cuando aún no había cumplido ocho lustros, en breves horas ha dejado este mundo, donde no hizo más que practicar el bien, como esposa modelo, como madre amantlsima, como amparo dé los débiles... Nuestro hermano nos pide que preguntemos á nuestros amigos del espacio quién fué su esposa en su anterior encarnación, y nosotros le decimos que por él fruto se conoce el árbol, que cuando en este mundo de miserias y penalidades se distinguió por sus escepcionales virtudes, es porque indudablemente de la luz venia, en la luz estaba, y á la luz habrá vuelto. Sobre la historia de estos seres no hay que preguntar, no más hay que recordarlos con veneración, con amor inmenso, y con ansia vi- visima de imitar sus buenas obras y seguir sus luminosas huellas. Sólo nos resta decirle á nuestro hermano, que se puede dar por di- choso por haber tenido á su lado á un sér que venia de la luz, en la luz estaba y á la luz ha vuelto. BIBLIOTECA UNIVERSAL OBBA8 PrBLlCABAS AMIMIBIIO Y HSFlBIflSMO ALbjaaubo AKÍ^AKOF lii "Flda di Wltíiítisliit (L3, Survic) ^ ' ™ '^ a ob c}kbath Cada obra forma dos voluminosos tomos en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada uno 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. Bll ABTE BS MAi'lílTIEAB por CB. LAFOATAHKK AB PAÍS B1 BAB BOMBBAB por B'FSI^pfbancf Cada obra forma un voluminoso tomo en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada una 7'50 ptas. —En rústica, 6 ptas. KW PLBL·ICACION EL ESPIRITISMO Y LA ANARQUIA por J. BOÜVFBA' Se publica por cuadernos semanales de á 32 páginas al precio de 20 eén»< timos enTSspaña y 25 eéntimos en el Extranjero.—Pago adelantado. CORRESPONDENCIA S^ces. Sascriptores qne han satisfecho la snscrlpción de 1908 M. P.—Bell-lloch J. R. M.—Loja (Granada) J. C. C.—Vera (Almería) R. P.—Managua C. B.—Arcos de Medinaceli A. P. M.—Rabat (Marrue.) V. M.—Id. F. S. B.—Pla de Panadés J. R. A —Mayagüez (P. R.) M. M. - Id. F. S.—Lorca (Murcia) J. T.—Loja (Granada) F. B. Y.—Id. A. R. G.—Ponce (P. R.) M. T. deC.-Pozocañada (A.) C. O.-Id. A. E.—Manila (Filipinas) M. M.—Toa Baja (P. R.) M. M.—Id. R. S.—Elche (Alicante) V. A.—Barcelona P. P.-Id. V. M.-Id. id. A. V.—Palamós (Gerona) T. P.-Id. G. A. de la Paz.—Id. id. D. O —S. Fernando (Cádiz) J. R. F.—S. Quintín de M. J. C.—Id. id. A. M.—Cantería (Almería) P. C.—Barcelona J. G. T.—Puebla de Zara- F. Y.—Cayey (P. R.) A. S.-Guayaquil (Uruguay) goza (México) J. A.—Tarrasa L. L. R.—'La Unión (M."') R. de M. C -Río de Janeiro A. B.—Talavera de la R. J. A. C.—Laredo (Santan.) ü. M.—Ciudad Rodrigo R. C.—México (Alcanza al 3 de Agosto de 1908) La Administración. STA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo deEedacción, con la asidua colaboración de espiritistas de gran valia y con la protección de sus guías espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSGRIPCIÓN l España. 1 pesetas Por nn año. .< ( Extraojero. 12 » Número suelto 0'50 » CPAGO ADELANTADO} Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rue- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certificado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos países cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los países en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. — Barcelona Obra de regalo para el presente año: Elementos de Una Nueva Cienciai por Mariano Euth Sinué. Un tomo en 4.° de 308 páginas, es- meradamente impreso. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña,118.—Barcelona AÑO IX OCTUBRE DÉ 1908 NÚM. 10 D. Francisco Parés Llansó Coronel de Sanidad Militar El día 8 del actual desencarnó este buen amigo y correligionario, victimare traidora pulmonía. El Sr. Parés era autor de varias obras, entre ellas Misterios del Alma, que ha llegado á alcanzar su tercera edición. Hombre de fino trato social, supo captarse buenas y duraderas amistades en cuantas partes le llevó el ejercicio de su carrera.'' Su particular manera de apreciar el Espiritismo y los fenómenos que consti- tuyen su origen, era del todo diferente de la nuestra, lo que motivaba que si como amigo le apreciábamos, como correligionario le considerábamos víctima de una obsesión espiritual, ó cuando menos, víctima de un intenso amor al estudio del ocultismo, que le llevó á formular ciertos principios incompatibles con el verdadero Espiritismo. Deseamos al buen amigo Sr. Parés un feliz despertar en el espacio, y acom- panamos á su respetable familia en el natural dolor que la partida del sér tan querido ha debido causarles. 290 LUZ Y UNIÓN Liga Espiritista Española Eestival á favor del "Grupo Benéfico" de.señoras, para la instalación de su taller de costura — Latentes aún en nuestro corazón las ducidas gratas por la última velada impresiones celebrada pro- el día 15 del mes, en el local de la «Liga pasado Espiritista Española» en obsequio y ho- nor de los Delegados de la obra rir toda «Espérance», vuelven á su fuerza las adqui- con que nos la tuvo el día 4 del actual produjo que la noche lugar por á beneficio del taller de allí costura que se ha iniciado. Las distinguidas hermanas que componen la Comisión or- ganizadora, echaron mano de todos los medios tenían á su alcance para que la que fiesta tuviera el éxito lo mayor tanto, posible y, por mayor fuera la suma de lo recaudado los El amplio salón para de pobres. sesiones, brillantemente ba alumbrado, esta- lleno de bote en bote, presentando lón Biblioteca magnífico aspecto. El sa- estuvo siempre ocupado por los hermanos iban allí que para ver los regalos que se sorteaban y expuestos los que estaban en escaparates de dicha Biblioteca, formando un hermoso conjunto. " Delante de la puerta de entrada y presidida por una comi- sión de hermosas señoritas, se instaló la bandeja, que al final de la sesión se vió había producido 72'55 á 111 donadas pesetas, que añadidas unas por sonar Espéranee y las que se obtuvie- ron de la venta de números, arrojan un total de 274'75 que formarán la base de la pesetas, caja para los pobres que dichas her- manas constituyen. Eran las 9 y media cuando el Presidente abrió la velada le- yendo una carta que nuestro querido hermano José París, Font, de había escrito con este objeto en nombre de sonar ranee Espé- y que publicamos á continuación. Terminada la lectura de dicha carta, que fué premiada con una salva de aplau- sos, expuso á los asistentes el objeto de la velada que se cele- ÓRGANO OFICIAL. DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 291 braba, haciendo historia de lo sucedido en las dos veces que se había propuesto llevar á cabo la idea que daba origen á esta fiesta, la primera en el año Ú898, cuando la gran fiesta del Tea- tro Lírico y la segunda en los años 1904 y 1905 en el Círculo «La Buena Nueva», contando esta vez con el precioso apoyo del gran espiritista D. Felipe Senillosa, y que vino á tierra no por falta de medios materiales sino por falta de cohesión entre los socios de aquel Círculo, esperando y teniendo confianza por las pruebas que de su abnegación habían dado, en que las her- manas que componen el taller de costura no se arredrarán ante ningún sacrificio para sacar adelante una idea que tan buenos frutos podría dar, ya que por parte de los que están en situa- ción de hacerlo no se les regateaban los medios materiales para dar un buen empuje á la obra que tenían entre manos, como lo probaban los donativos de soeur Espérance y la señora Vda. de Senillosa, que asistió á esta fiesta donando en la bandeja 50 pe- setas, terminando con breves palabras de recuerdo por.aquellos que como sceur Etpérance no podían asistir personalmente á dicha fiesta y pidiendo un aplauso para ellos. El coro «Barcanona», que ya ha tomado carta de naturale- za entre las fiestas espiritistas, cantó la hermosa barcarola de Clavé «Al mar», mereciendo una gran salva de aplausos de to- dos los asistentes al acto. Un corista de este coro, el joven José María Recio, recitó con gran sentimiento una hermosa poesía titulada «¡Pobre niño!», siendo su labor muy aplaudida por la concurrencia. Después siguió la niña Josefina López, recitando una her- mosa poesía de la Srta. Genoveva de la Cueva. Alberto Andreu, Contador de la «Liga», cantó con lamaes- tría y sentimiento á que nos tiene acostumbrados, un raconto de «La Favorita», acompañado á piano por la señorita Emilia de la Cueva, mereciendo ambos una ovación de parte del públi- eo que les oyó. José Nadal y Genoveva de la Cueva recrearon nuestros oídos tocando á violin y piano el aria de «La Boheme», que obtuvo numerosos aplausos. Vino luego uno de los números que más se esperan en nues- tras veladas. Conchita Vilaplana recitó una de las poesías que mayores aplausos han obtenido; era la titulada «Gratitud», de nuestra querida abuelita Amalia, dedicada á la memoria del gran patricio argentino D. Felipe Senillosa. Está poesía, recita- da en obsequio á hallarse presente al acto la Sra. Vda. deSeni- 292 LUZ Y UNIÓN llosa, conmovió en gran manera á todos los presentes por la ex- presiva manera de recitar de Conchita. El público premió su hermosa labor con una estruendosa salva de aplausos. Después de este número, tan lleno de sentimiento, el coro cantó la hermosa pieza del gran Clavé, «Las Flors de Maig», que fué muy aplaudida al terminar. Había concluido la primera parte, y anunciados por la pre- sidenta de la Comisión organizadora los quince minutos de des- canso, pasaron, los que no lo habían hecho antes de empezar, á ver los objetos que se sorteaban, mientras La familia Cayo. hacia su entrada en el salón y se instalaba en el estrado. El eminente ventrilocuo D. Luis Soler, que se había brin- dado á tomar parte en la fiesta dado el fin benéfico que en ella se perseguía, presentó al público, al empezar la sesión , á dicha íamilia, compuesta de cinco monigotes, el padre, la madre, dos hijos y un negrito más negro que el azabache, con unas fachas tan estrafalarias, que dieron que reir en grande á los concurren- tes, con los cuales sostuvo una animada conversación que, po- niendo .á dura prueba las facultades-del señor Soler, hizo las "delicias del público durante largo rato. No somos aduladores, pero hemos visto muchos ventrilo- cuos y hemos encontrado pocos que nos hayan gustado tanto como el señor Soler;,la habilidad de éste y lo bien caracteriza- dos que estaban los distinguidos miembros de la hermosa fami- lia Cayo, hacen que nos atrevamos á asegurar á nuestro amigo brillantes éxitos y una feliz suerte en el ejercicio de su profe- sión. El público premió la artística labor de nuestro amigo con una ovación, haciéndole repetir algunos de los números. Al señor Soler siguió el celebrado músico y maestro señor Amat que, acompañado de nuestros amigos Andreu y Mongui- llot, hizo verdaderas filigranas al ejecutar en su bandurria algunos de sUs números predilectos, demostrando que. el título de maestro en dicho arte que le damos lo tiene bien merecido, ya que se trata de un hombre aplaudido por los principales pú- blicos de España, Francia y Alemania. Las salvas de aplausos con que la concurrencia premió su labor, no fueron más qye la expresión unánime del entusiasmo que despertó el eximio artista. El tercer número de la segunda parte lo llenaron «Los Pes- cadors», de Clavé, en que el coro demostró las cualidades que hacen de él uno de los mejores de Barcelona, pues salvó las di- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 293 ficultades que encierra la ejecución de aquella hermosa pieza, con suma afinación y arte. Volvió Conchita Vilaplana á subir al estrado y recitó con admirable entonación una hermosísima poesía de nuestra her- mana Amalia, que le valió una estruendosa salva de aplausos como muestra del cariño con que el público espiritista la escu- cha siempre. Nuestro amigo señor Andreu cantó con mucho arte, acom- pañado al piano por la señorita Genoveva de la Cueva, la her- mosa melodía Ideale, que le valió muchos aplausos de todo el auditorio. La insigne poetisa D.'' Matilde Navarro Alonso," que tenía que tomar parte en esta fiesta, se vió imposibilitada de hacerlo por causas ajenas á su voluntad. La veterana de los escritores espiritistas, D." Amalia Domin- go Soler, queriendo contribuir en la medida de sus fuerzas al mayor éxito de esta fiesta, envió una hermosa poesía que fué premiada con una gran,salva de aplausos. El Dr. M. Gaudier, que hace poco ha llegado de Puerto Rico, envió para ser leído un hermoso soneto en el que hace su profesión de fe espiritista. Cantó luego.el coro una hermosa retreta y la «Marsellesa Espiritista», y entre una animación extraordinaria tuvo lugar el sorteo de los regalos que se habían anunciado, resultando premiados los números siguientes; Premio 1." . núm. 581 2 » 868 3 » 362 4 » 211 5 » 426 6. » 797 » 976 8 » 811 Días después D.'' María Cunin, Vda. de D. Felipe Señillosa, hizo otro donativo de 50 ptas. á las hermanas del taller de eos- tura. En nombre de éstas damos á la generosa donante las más expresivas gracias. 294 LUZ Y UNIÓN De la obra de "Éspérance" Queridos amigos, hermanas y hermanos e. c. de España. La obra «Espérance», de París, y su tan digna como infatigable pro- pagandista la bondadosa hermana Espérance, os envían sus más frater- nales saludos y las más expresivas gracias por la hermosa velada que en honor de su presidenta la hermana Espérance y de su obra celebras- teis en la noche del 15 de Agosto pasado, fiesta á que tuve yo con mi esposa la dicha de poder asistir durante nuestra corta estancia en Bar- celona. Hermosísimas son estas veladas familiares que ponen eo contacto á los hermanos y propagandistas de la doctrina filosófica fundada por Alian Kardec, de ese genio que ha sido el más fiel servidor de Cristo, consolador por su doctrina razonada, hija del más puro espíritu de ver- dad y que será, no hay duda, un día la regeneradora de la humanidad. Este día llegará cuando por todas partes se formen Grupos que vayan esparciendo y enseñando á las masas la doctrina espirita, haciendo que se penetren perfectamente del bien que al alma aporta, y sobre todo se den cuenta de la ciencia de la Ley de la Survida y su complemento la ley de la reencarnación. ¡Ah, cuántos egoísmos y cuántos hechos repro- bables dejarán de cometerse el día que el sér humano se penetre bien de esa verdad moral, de que venimos á este mundo para progresar ó esta- cionarnos según nuestros actos, y que tal sér á quien hoy, movidos por un egoísmo material, pasajero y perecedero, hacemos,un daño, ha sido ó será en una de sus reencarnaciones miembro tal vez de nuestra propia familia, y quien sabe si nuestro padre ó nuestro hijo! ¡Ah! entonces sí marcharemos á pasos agigantados hacia la fraternidad humana, puerto seguro de la doctrina espirita. Este es uno de los rayos más brillantes que salen del luminoso faro del Espiritismo y que deberíamos, hermanos míos, aprender á dirigir bien para despertar y libertar los cerebros de la muchedumbre que tan- tos siglos de fanatismo y de ignorancia científica han adormecido. Para llegar á un buen resultado no hay más que seguir inspirándose en el camino trazado por el insigne Kardec, que con su gran genio narró la ciencia de la Survida de una manera tan magistral y tan clara, como nunca lo hiciera Tucídides, con unos argumentos tan claros que ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESLAÑOI.A 295 parecen salidos de la pluma de Aristóteles. Puede decirse que á fuerza de estudiar la naturaleza llegó á conocer el corazón humano y sus necesi- dades de una manera tan sabia y tan sencilla, que es necesario siempre, para compararle, acudir á los genios de la grande época griega, únicos que le igualan por la claridad de sus escritos. ¡Y pensar que un genio así ba tenido... ¿cómo diremos? discípulos que-han intentado llevar su doctrina por otros caminos! Los infelices perdieron bien inútilmente.su tiempo. ¿Quién no se acuerda de Rousseau, qué fundó los Rousseausistes, el cual, impulsado por una incomprensible vanidad y craso error, quiso hacer una especie de mezcla de Espiritismo y catolicismo, como si fuera posible mezclar la libertad con el fana- tismo y la verdad con el oscurantismo? El resultado fué desastroso y deplorable porque hubiera podido emplear mejor su gran talento de apóstol siguiendo el buen sendero, mientras que su resultado ba sido la nada y el olvido. ¿Y qué diremos del señor Nicasio, de famosa memoria? Puédese ima- ginar un iluminado más raro, que con ceguedad tan incomprensible pretendiese llevar, viento en popa, la nave del Espiritismo, y lo que hizo fué navegar en medio del mar de la ridiculez y de la chacota general de los enemigos? Aquel hombre, buscando su particular interés, llenó de tristeza á los amigos que buscan el progreso en el estudio de la ciencia y de la razón. Aquella perdida nave estrellóse por fin en los escollos del Gobierno civil, y sólo quedará como memoria de la obra de aquel extraviado el dicho vulgar: «Los esgarrats cap á Sans...» ¡Triste recuerdo de aquel hombre á quien conocí personalmente! Segurísimo estoy de que su espi- ritu, libre de la materia carnal, al contemplar claramente su pasado, sufre atrozmente de haber tenido semejante aberración. Sirva lo pasado de experiencia á los que movidos por una impa- cíente vanidad les vengan deseos de marchar solos: sólo obtendrán la nada como resultado, mientras que con la grande unión se llegará á hacer obra útil y de Ipz. La gran amistad fraternal, como la gran unidad de pensamiento que une la obra «Espérance», de Paris, con el Centro de Estudios Psicoló- gicos y «La Buena Nueva», hace que os digamos, amigos y hermanos de España, bajo la efigie de Kardec: Pregonemos nuestra hermosa filosofía, siguiendo las huellas de tan sabios cuanto modestos propagandistas y apóstoles como Colavida, Torres-Solanot, Vives, Amalia Domingo Soler, Sellés, Navarro Murillo, Pbro. Pons, Dr. Torres, Sanz Benito, Jacinto Esteva y tantos otros que sería muy largo enumerar y que con unión han trabajado y trabajan generosamente por la humanidad, conduciéndola hacia el verdadero Dios por el amor y la ciencia. 296 LUZ Y UNIÓN El Espiritismo sin Kardec sería como el cristianismo sin Cristo, esto es, imposible. Por la obra kardeciana «Espérance», de París, vuestro hermano e. c., José Font. Paris 27 de Septiembre de 1908. (Leído en el festival que reseñamos). Aviso á nuestros ^uscriptores Prosiguiendo esta Revista su costumbre de regalará sus suscrip- tores cada año una obra de verdadadera valia, les auunciamos que para el próximo ■ afio preparamos una, original de nuestro activo y celoso colaborador D. Faustino Ysona, cuyo título será: En parangón la verdad con el error. Por las materias de. que traíará esta obra creemos será bien acepta- da por nuestros abonados. Las condiciones en que se servirá esta obra-regalo son las siguientes: La obra-regalo se entregará á nuestros abonados al efectuar el pago de su suscripción. La obra-regalo tendrá el mismo tamaño que la que hemos repartido este año y se entregará encuadernada á la rústica. Los suscriptores de fuera de Barcelona deberán remitir junto con el valor de la suscripción media peseta más para remisión del regalo por correo y certificado. Los que quieran recibir la obra encuadernada en tela deberán remi- tir, además, una peseta, valor de la encuademación. De modo que los abonados que recojan el libro en esta Administración sólo deberán pagar las 7 ptas. de su suscripción y 1 más en caso de querer la obra encuadernada. Los del resto de España deberán remitir 7'50 ptas. si la quieren en rústica y 8'50 si la quieren en tela. Los del extranjero deberán remitir 12'50 ó 13'60 según si la deseen en rústica ó tela, respectivamente. No tendrán derecho á reclamar el regalo los que efectúen el pago de su abono después de transcurrido el año próximo. Llamamos también la atención de nuestros suscriptores que tengan deseos de guardar la colección completa de este año, se sirvan repasar los números que tienen en su poder, á' fin de que si les falta alguno poder pedirlo con tiempo á esta Administración ó al corresponsal más próximo al lugar de su residencia. ÓRGANO OFJCIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA ^ 297 La mujer Là mujer que es toda amor, Tú has guardado el sacro fuego es la que puede en verdad en los templos del pasado; prestar á la humanidad siempre te has sacrificado un consuelo á su dolor. con un entusiasmo ciego; Con evangélico ardor siempre en tu ferviente ruego se va al campo de batalla por el débil has pedido; sin temer á la metralla siempre te has compadecido que las existencias corta; de todos los criminales, el peligro no le importa; evitando grandes males su amor á su miedo acalla. por el bien que has esparcido. Pues siendo tan animosa Si en todo lo bueno eres y tan amante del bien, primer actor en escena; siendo del hombre el sostén si tú haces tuya la pena como hija, madre y esposa, de quien quieres, y no quieres; es su misión tan hermosa, si el ideal de tus deberes que hay que decir con fruición: es ser útil para todo; —Mujer, en tu corazón .si no le temes al lodo todo lo bueno halla nido; donde se asfixia el cuitado, ¡bendita tú, que has nacido y sólo te has ocupado como ángel de bendición!' de buscar el mejor modo Tú vas á los hospitales, de salvarle; siendo así, á los tugurios insanos, creo muy justo y natural en donde hay seres humanos que al progreso universal víctimas de horribles males; te asocies; ya que hay en tí tus más dulces ideales amor inmenso. ¡Ah! Sí; sí; son difundir el consuelo; ¡todo lo bueno en tí impera! todo tu afán y tu anhelo Y el Espiritismo espera es consolar al que llora; de ti tu ayuda valiosa; ¡bendita sea la hora eres noble y generosa; que llegastes á este suelo! ¡sé para el bien la primera! ¡Bendita! pues tu influencia Trabaja con ardimiento, es siempre tan provechosa, propaga el Espiritismo, como hija, madre y esposa haz el bien por el bien mismo, (eres del amor la esencia). sea tu Dios el sentimiento. La religiosa creencia Atiende á todo lamento, te debe su propaganda: no desoigas el clamor tú al hombre le has dicho ¡anda! del que sufre del dolor corre de un ideal en pos, la dolorosa influencia, escucha la voz de Dios: y consagra tu existencia que seas su apóstol te manda. ¡á la piedad y al amor! Amalia Domingo Soler. (Leída en el festival á favor del taller de costura de la «Liga Espiritista Española»)- 298 LUZ Y UNIÓN Ideogenesis IV RECAPITULANDO Si consideramos el individuo en su estado de sujeto, encontramos un sér que obra en potencia ó de un modo inmanente y este sér es también una fuerza que obedece á la ley de sus excitaciones. Cuando el mundo externo obra sobre su naturaleza, su cualidad de percepción recibe aque- lias imágenes que están dentro del plano de su capacidad de percibir y mediante la«actividad que le es propia, examina por su atención las ideas que aquellas imágenes le presentan, asociándolas, combinándolas y extrayendo de ellas creaciones complejas ó idealizando sus principios ó sus caracteres de tal forma, que en sí mismo crea un mundo que va perdiendo las formas concretas para constituirse en formas indefinidas y abstractas que viven sólo en esa función inmanente del espíritu que se reconcentra en sí mismo y tiende á converger sobre un punto íntimo y central del sér, que es el que recibe las inspiraciones directas del Abso- luto, esto es, de la Esencia intelectual del Universo. Asi, el espíritu, es un sér potencial virtualizado por la inspiración in- telectual del Absoluto que obra en las intimidades de su sér, el cual se explica estas inspiraciones según la capacidad que le permite su estado, en relación con el mundo objetivo ó externo que excita su posibilidad de obrar. Por ello, en la facultad de querer del espíritu, se reflejan á un tiempo mismo las sensaciones intimas del pensar ó entender y las del sentir, de un modo apropiado y circunstancial á su estado de calificación evolutiva. No necesita el espíritu, pues, el concurso de sus elementos afines auxilia- res para pervertir las inspiraciones de la inteligencia: le basta Su propia imperfección y el sentimiento propio. Creemos fuera de toda duda si comparecemos ante un concepto que se funde en el sistema evolucionista, que desde su origen, el espíritu se des- envuelve ó se transforma (se cualifica) mediante una ley protectora y di- rectriz que rige indefectiblemente su progresión ascendente sin la cual ésta no podria realizarse, porque desconociendo el espíritu el objeto de su creación, no podría dirigirse inconscientemente á un fin ignorado y mucho menos encontrar los medios conducentes para ello. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 2Í9 Por eso, desde que surge á la vida individual se encuentra amparado, además de la ley de gravitación que lo conserva en unidad independietote^ por la ley de su afinidad, de su instinto y de su inteligencia. leai Pero al lado de estas leyes, sigue en paralelo su trayectoria, otradoy que denominamos voluntad. ¡Ay, los que creen que la voluntad no admite reglas de ninguna ley posible, padecen un prejuicio que es necesario extirpar, porque es ese mismo concepto falso que tenemos de cuanto nos rodea y que tantodeç menta Comas Solá! i «d Mr. Flammarion, el más popular y el más filósofo de todos los aSítí-ói nomos, excrutando los fenómenos de la voluntad, se expresa en estos télè ' minos: (1). «El porvenir que está en germen en el presente, es consecuencia déi pasado; no hay efecto sin causa; el que conozca las causas, conocerá los efectos. Lo que sucederá no puede dejar de suceder, porque viene deteip minado por causas positivas. La voluntad humana que nos parece dotada de cierto libre albedrio, es una de estas causas y tampoco puede dejarí-de decidirse por el motivo preponderante». ' ;í(d Repetimos que el sér es una fuerza constituida en potencia sensible, que, por tanto, se excita con toda suerte de sensaciones, las cuales modb fican su naturaleza normal y expontánea. Asi, cada sensación, sufre esta fuerza una modificación extraña que la modela bajo un aspecto determie nado correspondiente al orden sensacional que la afecta y., reaccionaoep el sentido que la impresión la solicita a ite Este fenómeno constituye el sentir propiamente dicho. 1 ni Pero la reacción del sentir determina la radiación de una fuerza que actúa por reflexión inmanènte en el mismo sér y lo decide á obrar eniuià sentido dado á su posibilidad. Esta radiación de fuerza que llamamoslvo- luntad, inside otras veces sobre sugetos ú objetos extraños y los modifier igualmente determinándolos á obrar por sugestión. bLsH No todos los sugetos tienen la posibilidad de exteriorizar esta fudrza con igual intensidad y eficacia. Como todas las manifestaciones de ¡ii®; fuerza, se desarrolla esta facultad con el ejercicio. Su posibilidad en>f(jD génesis y desarrdllo, se encuentra en una relación dada entre la poteilcia virtual del sugeto y la resistencia del objeto. q íy Cuando en algún modo esta resistencia es superior á la potencia delisu- geto, éste se encuentra dominado y su esfuerzo volitivo cede su puestmói la conscitación pasional y lo determina á obrar como esclavo de una esa citación superior á sus fuerzas. La voluntad no es libre. Esto sucede áfieá) espiritus débiles, con mayor frecuencia. :,La« ■ . , (Ij La Sureic, páginas 14 y 15, t. L,_ íl 300 LUZ Y UNIÓN Pero la fuerza-alma, espíritu, siempre en ejercicio como energia, evo- 1 Juciona y se desenvuelve en la cooperación colectiva de sus congéneres, merced al tiempo y al espacio. El espíritu aumenta sus potencias y do- mina más fácilmente las excitaciones. Una doble naturaleza viene en su auxilio, que mejora la obfa de su individualización autonómica. A la vez, la sensación de la idea ha ido generalizando sus conceptos y capacitándolo para formular sus concepciones. Comparando las ideas ha formado sus juicios y mediante esta operación del entendimiento, del intelecto, percibe, entiende y penetra un mundo superior: el mundo ético ó moral. La plácida sensación del bien invade sus ambientes haciéndole conce- bir dichas inefables que le llaman desde un porvenir ignoto. Entonces nace en él la fe, esa determinación de la energia del alma que transporta las montañas. La belleza con sugestiones indefinibles y con sus encantos arrobado- res, le atrae con fuerza irresistible, haciendo al fin brotar en linfas exhu- berantes y puras las fuentes del amor. Del amor brota el Bien y en ausencia del bien, el espíritu nota y per- cibe la sensación adversa del mal, siempre penosa y desdichada. Adquiere, entonces, la noción de lo justo y de lo injusto cuando se considera en si mismo como sugeto que vive en relación con otros suget'os que conviven en propiedad de una existencia que ha de respetar y brota en su mente la sensación del altruismo, cuando se siente apoyado en la función solidaria del espíritu de asociación armónica que le revela un mundo de deberes cooperativos encaminados al bien de los demás, único en el que encuentra su bien propio. Entonces, el espíritu también elige, pero tampoco elige libremente; porque la sugestión del bien que ya experimenta en su sér, le arrebata fatal é irresistiblemente hacia el bien. /; Hablando en términos concretos: un espíritu puede conocer que un acto es bueno; sentir vivos deseos de realizarlo, pero se decide por no ejecutarlo. / En este caso ni se siente dominado por la tendencia innata de su sentir ni por la persuasión de su pensar. Pero hay que convenir en que se decide por una persuasión, por un motivo cualquiera que le dicta la Razón ó el sentimiento ó tal vez por un motivo ecléctico que opera circunstancialmente determinando la dirección (felsu facultad de obrar: se decide y obra según la causa preponderante ante su estado en la evolución y en el momento circunstancial. Nunca obra simplemente porque quiere. Si se examina en su fondo cualquier acto, se verá siempre regido por ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 301 un propósito: ya por un movimiento, por una tendencia afectiva ó repul- siva que se elabora en las sinuosidades intimas del sér ó ya determinado por una causa externa en todos los casos insuperable para el espíritu, por tener origen en una excitación superior á la potencia volitiva produ- cida por el sér ante el cual opera. Sólo Dios es libre, sólo Dios es árbitro con libertad y arbitrio absola- to, porque El lo domina todo. Pero de aqui se desprende que hay una libertad, un arbitrio relativo, dado al espíritu como ya veremos después. Del instinto de conservación, asciende el espíritu al amor propio, á veces exagerado que en la vida consciente lo distancia de los demás seres.' En esto vemos un fenómeno perfeccionado de la primitiva fuerza de re- pulsión que conservaba su individuo, así como en el amor al prójimo ve^ mos la expresión sublime de aquella tendencia atractiva que considerà- bamos en la unidad elemental, como necesaria para el concurso armó- nico de los seres. Entre estas dos tendencias, elige siempre el espíritu al fin, con deter- minaciones de egoísmo ó altruismo. En las primeras etapas ó estados primordiales, huye con tenacidad invencible de la aproximación de sus congéneres porque teme la fusión que lo impersonaliza y defiende á todo trance su autonomia, suyo, sobre todas las cosas, con brutal y desenfrenado egoísmo. Más tarde sintiendo confirmada y garantida su autonomía individual, va cediendo á la necesidad de asociación que, en cierto modo, comple- menta y suple sus imperfecciones, hasta que en él, nace el sentimiento provocado por el altruismo. Eütre el egoísmo y el altruismo, encuentra un campo extenso donde puede obrar bien ú obrar mal dentro del límite de su posibilidad subjeti- va, que ya se ha cuidado que esté en el plano de la sociedad ó mundo á que se le destina, La razón erigida en ley, determina su regla de conducta en la asocia- ción y la moral con su más amplios preceptos le da la noción exacta de sus deberes. Todo lo que en el espíritu es fatal según su naturaleza y estado, reci- be su modificación en el derecho ó de la moral universal que es la ley de Dios. Y como es fuerza vivir dentro del bien, siquiera en la medida de la garantia de los derechos del Colectivismo, el espíritu que no puede domi- nar las excitaciones del mal ya que siente ó conoce el bien, se encuentra compelida por la ley jurídica ó moral que corrige sus actos, avisándole sus errores y forzándole á rectificar sus obras reparando, esto es, des- andando y volviendo á andar el camino que emprendió perdido. Así, su 802 LUZ Y UNIÓN Noluntad, va siempre modificada por la naturaleza, la ley ó la moral cbmo agentes educativos. ,113 El mal que para ello sufre, es en cierto modo, porque así nos afecta, una expiación del mal que produjo á otros ó á él mismo, pero está muy lejos del concepto del castigo, tal como lo concibe la sociedad humana, die la expiación que imprime un mal por reparación del orden y venga á la sociedad ó á Dios de una ofensa que se le ha inferido. ,o Tiende sólo á la regeneración del delincuente por un medio experi- mental educador y persuasivo. -No responde éste, pues, de sus yerros ni de las determinaciones de su estado, pero huyendo del mal se esfuerza hfacia el bien. -íi Es la acción piadosa de la Justicia y el Bien que levanta al caido avisándole de sus errores, por ingénitos que éstos sean. Asi nos habla y Hfos enseña Dios por la realidad y la experiencia de las cosas. -Ò Unico lenguaje que de El entendemos. Manuel Pakeja Medina. bi nò- Sasspipeión á favor» de D." fldela CDuñoz Suma anterior 41'75 j ptas. ' . Ildefonso Urizar, de Madrid 1'50 » • j • Dolores Casal, de id. . 1 » Laureano Motilla, de id 1 Policarpo Harrieros, de Villanueva de Qállego 1 >> Juan Caballero, de Segovia • 0'50 » -ó Pedro Català, de Palamós . . r65 » áíS. C.,deid 2 » Ramón Pla, de id 1 » -J5l J- Quintana, de id 0*50 » Qf) Juan Gual, de id 0'50 » Blas Marchante, de id. » ...... ., 1 Pedro Brugués, de id. 0'50 » . . . . Samuel Casanovas, de id 0'50 » José Oliver Betria, de Mequinenza.. 1 » Manuel Ruiz Flores, de Valladolid ^ 2'50 » , Teresa Lamuela, de Almonacid de la Sierra 1'50 » Domingo Cano, de Puigcerdà 1'20 » Soeur «Espérance», de París 11 » ok . Suman 71*60 ptas. (Sigue abierta la suscripción). ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 303 ¿Periespíritu? Cuando el maestro Alian Kardec, al describir la constitución del sér humano, hubo de tratar de periespiritu, el conocimiento de las nuevas teorías produjo én el mundo de la ciencia oficial cierta regocijada algazara. ¡Un cuerpo fiuidico, encargado, entre otras cosas, de relacionar el principio espiritual con la materia! En aquel tiempo, el materialismo había llegado al apogeo, estaba en su plenitud y como dijo Tyndall, más tarde, en la materia, únicamente en la materia se veia la potencialidad y la promesa de todas las formas de la vida. Y ocurrió que como el periespiritu no podia ser visto, oído, tocado ni pesado en las condiciones ordinarias, convinieron los sabios á la violeta, en que la cosa no merecía tomarse en serio por ser, en resumen, uno de tantos delirios espiritistas. Sin embargo, la novedad había sido conocida, estudiada y utilizada por las antiquísimas civilizaciones India, Egipcia y Griega. Si los pseudosabios fueran eruditos de verdad, no lo ignorarían y se hubieran hecho cargo de la importancia inmensa que reportará á la ciencia occidental el conocimiento que les brindaba el maestro Kardec, digno de los mayores elogios, en vez de los chistes imbéciles conque pretendieron mortificarle. Como la verdad concluye siempre por prevalecer y deslumhrar Con su luz á los mismos ciegos que no quisieron observarla, lo que la ciencia oficial se negó á hacer, lo realizaron aislados ó en pequeños grupos, esos Obreros del Progreso, que frecuentemente nos maravillan con sus descu- brimientos. No está en mi ánimo repetir cuanto se nos ha dicho en comunicaciones espiritas. Me propongo solamente ocuparme del estado actual del conocí- miento del periespíritu en el terreno rigurosamente científico, aparte por completo, de las experiencias realizadas con mediums. Hará unos 20 años, próximamente, que el Dr. Baraduc residente en París, inventó el sensitivómetro según unos ó magnetómetro de Fortín (el constructor) según otros. Este aparato sencillísimo y sus aplicaciones, se describen perfectamente en la obra del inventor El alma humana, sus luces y sus movimientos, edición francesa. El instrumento por medio de una aguja imantada, suspendida por un 304 LUZ Y UNIÓN cabello humano ó hebra de seda sin torcer, marca en un círculo de cartón graduado, colocado sobre una pequeña bovina de inducción, que descansa en una base de ebonita, notaciones de atracción y repulsión, según el es- tado anímico del experimentador, sin más operación que la de aproximar la mano al aparato que está revestido por un cilindro y tapa de cristal, impidiendo todo contacto exterior con la aguja. No es preciso ser un prodigio de inteligencia para comprender que quien actúa y deternaina las notaciones de atracción ó repulsión, es única- mente el periespiritu, ya que fueron totalmente descartadas, en repetidas experiencias, las influencias del calor vital, interponiendo un grueso bloque de hielo, entre la mano del experimentador y el aparato, que no obstante continuó rigiendo perfectamente, y la que pudiera ejercer la fuerza magneto eléctrica hümana, puesto que á pesar de haberse envuelto el instrumento en capas superpuestas de las tres substancias más aisla- doras que se conocen, continuó funcionando normalmente. El aparato Baraduc, ha tenido sucesores, el Dr. Joire ha inventado otro, el sthenómefro en el que la aguja imantada en vez de hallarse en suspensión, descansa sobre un pivote, como en las brújulas que se em- plean en trabajos topográficos y dicha aguja, se aisla del exterior por una campana de cristal. El Dr. P. Joire, Presidente de la Sociedad Uni- versal de Estudios Psíquicos é investigador entusiasta, denomina el re- sultado de sus experiencias: Exteriorización de la fuerza, que según él «parece emanar del sistema nervioso y que es capaz de actuar á distan- cía poniendo en movimiento objetos, sin contacto». Son curiosísimas las particularidades que por el sthenómetro se han descubierto en los neurasténicos, coreicos y epilépticos, las que segura- mente tendrá en cuenta la medicina. La tenacidad de los materialistas, continúa haciendo de las suyas y en el mes de Agosto próximo pasado, todavía estaba el Dr. Joire demos- trando á aquéllos, que no es el calor la causa determinante de las oscila- clones de la aguja sthenográfica. Las investigaciones experimentales hechas recientemente respecto á la acción motriz sin contacto, han producido en este mismo año otros va- ríos instrumentos, tales como el del Sr. P. Archat presentado á la Socie- dad Universal de Estudios Psíquicos en Abril último y que es una varia- cióh del aparato Baraduc, del que no difiere esencialmente. El Conde de Tromelin, autor de la obra Los misterios del Universo, ha inventado otro aparatejo que denomina «Motor de fluido» en el cual una aguja gira en distintas direcciones según se aproxime la mano dere- cha ó la mano izquierda. Para no fatigar demasiado la atención del benévolo lector, suprimo numerosos detalles afirmando que en los cuatro aparatos indicados, el ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 305 origen del movimiento en sus agujas es el mismo, la acción del periespíritu. Para dar idea del poder y facultades del periespíritu, conviene también decir algo de las trascendentales y recientes experiencias de Mr. H. Dur- ville. Director de la Escuela Práctica de Masage y Magnetismo de París. Los magnetizadores é hipnotistas, saben que en el sueño profundo (tercer grado y sucesivos) aparece la analgesia ó insensibilidad de la piel. Estudiando este fenómeno dos beneméritos investigadores, el coronel de Ingenieros del Ejército francés Conde Alberto de Rochas y Mr. Durville, hará unos 12 años establecieron las importantes conclusiones siguientes: Que en los estados profundos de la hipnosis, la sensibilidad del sujeto se exterioriza. Que esta sensibilidad forma en el fexterior cinco capas, cuyo espesor disminuye á medida que se alejan del cuerpo físico, aumentán- dose á la vez progresivamente, la distancia que separa entre sí á dichas capas. La exteríorízación de la sensibilidad, no fué, ni lo unánimemente aceptada; muchos la niegan, pero yo debo hacer constar que en mis ex- periencias personales he tenido varias ocasiones de comprobar su absoluta certeza con varios sugetos de ambos sexos, de distintas edades y sin po- ner en juego sugestión de ninguna clase. Pretendiendo averiguar lo que se hacia de la sensibilidad exteriori- zada, Mr. Durville ha continuado sus interesantísimas experiencias, al- canzando resultados sorprendentes é inesperados. Continuando enérgicamente la acción magnética, parece que la sen- sibilidad exteriorizada se condensa y determina una figura fluidica, idéntica á la del cuerpo físico, al que queda unida por un cordón que generalmente se inserta en el ombligo, aunque hay casos en que la unión se verifica por el brazo y aun por el centro cerebro espinal. A esta figura fiuídica, cuerpo astral ó doble de los ocultistas, la deno- mina Mr. Durville fantasma de los vivos. Para los espiritistas, no puede ser otra cosa que la exteriorización del 'periespíritu. El cuerpo fluidico, desde su aparición se sitúa á unos 60 ó 60 centi- metros y á la izquierda del cuerpo físico, adoptando la posición do aquél. Mr. Durville ha hecho actuar recíprocamente el doble de dos sugetos el uno sobre el de otro y de seis veces, cinco el resultado ha sido conclu- yente. Con buen éxito también ha hecho que actúen á distancia, los dobles, viendo y oyendo. Para la comprensión de este fenómeno es necesario ad- vertir, que el cordón que une el cuerpo físico con el fiuídico, no presenta las mismas dimensiones en toda su longitud, sino que de trecho en trecho presenta abultamientos, ganglios quizá, que le permiten extenderse, alar- garse considerablemente. Con inagotable paciencia, ha experimentado con diversos sugetos 306 LUZ Y UNIÓN (del sexo femenino todos), llegando á demostrar que las sensaciones de ver, oir, oler, gustar y tactar, las percibe solamente el cuerpo fluídico cuando está separado del físico, que según la gráfica frase de una de las sugetas, no es más que un saco vacío, cuando no está ocupado por el cuerpo fluídico. Igualmente ha conseguido Mr. Durville, que el doble actúe sobre la materia produciendo raps, empujando una puerta entornada y por último pesándose en una balanza preparada ad hoc lo que permite apre- ciar una pesantez superior á diez gramos é inferior á veinticinco. Adivino la pregunta que está deseando formular el lector. Bl doble ¿puede verse? - Los sensitivos lo ven, según su grado de sensibilidad, unos perfecta- mente modelado y coloreado, otros con menos precisión y blanquecino y los de menor sensibilidad en forma vaga é indecisa. Todavía no ha sido posible fotografiarle. En la obscuridad absoluta, se puede siempre demostrar su existencia y determinar el lugar que ocupa, mediante el enápleo de pantallas fos- forescentes, de sulfuro de calcio, soleadas, que permanecen negras cuando se colocan sobre el cuerpo físico y se iluminan brillantemente por la acción de los rayos N cuando se ponen sobre el cuerpo fluídico. Pero si no se puede ver más que en las condiciones apuntadas, en cambio, todos pueden sentirle. El doble ó. cuerpo fluídico, rehusa los con- tactos por no serle agradables; pero cuando se le manda por el opera- dor, accede, y al tocarle se percibe una sensación, de frío húmedo, que asciende por el brazo hasta invadir todo él tronco, cuando el contacto se prolonga. Las experiencias de Mr. Durville continúan y no sólo él sino otros varios trabajan con ardor, para confirmarlas y ampliarlas, yo mismo estoy formándome sugetos, sanos y aptos para contribuir con mi granito de arena al levantamiento de esta pirámide en honor del Progreso. Se acerca el día en que la ciencia oficial tendrá forzosamente que reconocer la existencia de ese cuerpo fluídico, periespiritu, doble, cuerpo astral ó kama, llámase como se quiera, que apesar de su evidente rea- lidad sistemáticamente se niega. Y asusta pensar en la revolución tremenda que ese reconocimiento producirá en la ciencia, sobre todo en medicina. Pero esas revoluciones incruentas, recompensa merecida del estudio y el trabajo, son las que mejoran la actual condición humana, las que nos elevan, las que nos ensalzan, haciéndonos más ilustrados, más feli- ees, más buenos. Semper ascendens. V, Gr. Ruy Péeez. Madrid 27 Septiembre 1908. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 307 ¡Qué malo es ser malo! I Con verdadero espanto, con angustia indescriptible, como si yo sintiera sobre mí el peso enorme de muchas planchas de hierro que me aplastaran y me convirtieran en un montón de carne y huesos sin forma alguna, así sentí sobre mí una carga superior á mis débiles fuerzas, cuando leí un suelto refe- rente á una mujer que se durmió siendo niña y se despertó en la edad madura, puesto que se durmió cuando contaba 13 años y se despertó 32 años después. El suelto dice así: UN SUEÑO DE 32 AÑOS.—Londres, 1.° de Agosto (ll'lO piañana).— Sto- Jcolmo.—Una muchacha que llevaba 32 años aletargada, despertó ayer de su profundo sueño. Se trata de Carolina Kailsdatter, quien en el año 1876 cayó en Tin letargo, del cual no ha vuelto hasta ahora Entonces su familia, alarmada, hizo que la visitasen varios médicos, suponiendo que había muerto. Aquéllos reconocieron que el corazón funcionaba regularmente, y que, más tarde ó más temprano, Carolina volvería á la vida. Durante los 32 años, la familia ha su- frido diversas vicisitudes en su fortuna; pero siempre ha estado atenta á su cuidado. Ahora, al volver á la vida, Carolina Kailsdatter se da perfecta cuenta de todo y juzga imposible que haya dormido tanto tiempo. Cree haber pasado una sola-noche. Cuando fué presa del letargo tenia 13 años, y su deseo, no obs- tante su edad, es continuar haciendo vida de niña, para lo cual ha mostrado desde luego afán de ir á la escuela para aprender á leer. El caso es comenta- díssimo.—Harrisson. Varios espiritistas vinieron á verme con la pretensión que yo preguntara sobre la causa de sueño tan prolongado, y yo les prometí pedirles á los espíritus luz sobre tan interesante asunto, no-confiando empero que contestaran á mi demanda, pues mu- chas veces me dicen: «Dejad que los muertos entierren á sus muertos; bastantes historias tenéis en la tierra para hacer co- mentarios sobre ellas; dejad en paz á los muertos de ayer». Pero como yo no pregunto por vana curiosidad; como el móvil que siempre me guía es enseñar con ejemplos lo maloquees ser malo y lo bueno que es ser bueno, quizá por esto se mués- tran los espíritus más complacientes y me tratan con cariñosa benevolencia, puesto que ven que mi único placer en este 308 LUZ Y UNIÓN mundo es enseñar las primeras letras del Espiritismo á los que desconocen por completo la supervivencia del alma y su pro- greso indefinido. Con verdadero recogimiento, con vivísimos deseos de leer el prólogo de la historia que en esta existencia está escribiendo la mujer que ha dormido 32 años, me puse en relación con el espí- ritu, que me dijo así: II «Buenos son tus propósitos, y al que pide se le da, y al que llama se le abre. Tú pides, tú llamas, tu intención es laudable; el agua que tú bebes no sólo calma tu sed, sacias á la vez á muchos sedientos. Escúchame, y Dios prolongue tus días sobre la tierra, para que des pan á los hambrientos de justicia y des agua de vida á los que encuentran secos todos los manantiales de ese mundo. ))La mujer que al parecer ha dormido tantos años, en reali- dad su cuerpo ha estado inerte, en completo reposo, en tanto que su espíritu ha contado todas las horas de su expiación, y no sólo las ha contado, sino que ha visto el suírimiento de otra mujer que también estuvo 32 años encerrada en un lóbrego calabozo, sin más culpa que ser honrada, que guardar el res- peto debido al nombre de su amado esposo. La mujer que ahora se ha despertado, fué en otra existencia un padre de la Iglesia, un'hombre poderosísimo que tenía derecho de vida y muerte sobre sus vasallos. Entre los empleados de su corte, estaba un hombre digno, que vivía feliz con su joven esposa, á la cual el prelado requirió de amores. Ella le rechazó indignada, y él la dijo: «Si accedes á mis deseos, serás completamente dichosa; si te obstinas en tus desdenes, despídete de la luz del sol, porque sólo habrá sombra para tí». «Mientras tenga luz en mi con- ciencia, me basta». «Pues vive con tu luz en el fondo de un calabozo». Y la joven fué encerrada en los subterráneos de un convento de monjas, y allí permaneció 32 años, hasta que la muerte piadosa rompió sus cadenas. El prelado entretanto se frotaba las manos de contento y decía: «No es mía, pero tam- poco es de nadie». Al morir ella, murió él, el cual, después de sufrir mucho tiempo en la soledad y en la sombra, aconsejado por su víctima, pidió volver á la tierra y padecer el sueño cata- léptico, que es el tormento superior á todos los tormentos, por- que se oye cuánto se habla en su rededor, se asiste á esos con- órgano oficial de la liga e. española 309 sejos de familia, en ios cuales se manifiestan deseos que el en- fermo, víctima del sueño cataléptico, acabe una vez de morir; y no hay agonía como la de aquel que no puede moverse y oye como le preparan el ataúd, adelantando los sucesos. ¡Compade- ced á los que tienen dormido el cuerpo y en perenne vigilia al espíritu! Para estos desventurados es el crugir de huesos y el rechinar de dientes. »La mujer que ha despertado ha pagado una deuda terri- ble. Estudiad en esa página de la historia universal y decid: «¡Qué malo es ser malo!» —Adiós». III ¡Ah! sí; sí; cada día que pasa me horroriza más la vida de los delincuentes, de aquellos que consumen su existencia en los presidios y en las regiones donde las nieves proporcionan todos los dolores. ¡Qué hermoso será vivir en otros mundos, donde, en vez de sombrías penitenciarias, se levanten templos, donde los sabios enseñen á la juventud estudiosa todo cuanto la ciencia puede demostrar y manifestar para instrucción de las generaciones venideras. ¡Ah! sí; sí; yo pido á Dios que me ilumine, que me des- pierte, que me dé las alas del águila y la perseverancia de la hormiga para tener mi granero en la tierra, en el cual mi cuerpo encuentre un hogar humilde, y mi espíritu anide en la cumbre de la montaña para estar más cerca de Dios, pues aun- que en la creación no hay ni alto ni bajo, por un algo inexpli- cable creemos que Dios está donde brilla el sol, alto, ¡muy alto! y es que instintivamente reconocemos nuestra pequeñez, y nos vemos lejos, muy lejos de Dios. Amalia Domingo Soler. El día .27 del pasado Septiembre fué inscrita en el registro civil una her- mosa niña, hija de nuestros hermanos Antonio Monguillot y Concepción Mundo-, siendo testigos de dicho acto D. Alberto Andreu y D. José Vallverdú. Se pusieron á la recién nacida los nombres de Esperanza, Albertina y Lo- renza. Reciban nuestra más sincera felicitación nuestros queridos amigos y desea- mos á la recién nacida una feliz estancia en este mundo. -3Í0 LUZ Y UNIÓN Sigamos estudiando Ya habrán podido observar nuestros lectores y sobre todo aquellos que más se hayan fijado en estos estudios, que por procedimientos inductivos hemos lie- gado con alguna facilidad, á la par que con sencillez, al reconocimiento de la fuerza única y universal con el fin de demostrar., que esta teoría no es inventada como efecto de unas bases puramente imaginativas de una escuela filosófica y sistemática. , Ahora debemos probar también, que nuestras ideas responden en todos los casos á las exigencias de la lógica racional y demostraremos, por los mismos razonamientos, las relaciones que unen y armonizan todos los organismos desde los más rudimentarios, hasta las combinaciones orgánicas y vitales más perfec- tas, desde las propiedades vitales de los núcleos celulares, hasta las más pode- rosas manifestaciones de la vida en los Globos estelares, así como en las iníini- tas relaciones que en cada instante se establecen para el desarrollo universal de los seres, en todas Sus condicionalidades de los espacios y de los mundos, des- bordándose en constantes y sucesivas vitalizaciones con orden y armonía, reani- mandq por todas partes los elementos de las infinitas combinaciones vitales y vitalizadoras. Si nos fijamos en que desde el átomo que representa el origen, hay una causa que conduce á un fin evolutivo que obedece á las leyes á que esencial y mate- rialmente está sometido recorriendo las múltiples combinaciones de estas fuer- zas, y nos fijamos en cualquiera de las formas portentosas de los Astros, Conste- laciones y Sistemas, encontraremos siempre, que desde las fuerzas elementales hasta las más portentosas actividades del Universo, obedecen á una causa ani- madora preestablecida, sin que podamos llegar á las regiones de lo Infinito, que desde nuestro punto de vista podemos abarcar en lo anterior y posterior á nues- tro presente, flotando en las tinieblas de la inmensidad. Lo mismo en el germen potencial que en un organismo cualquiera que nos fijemos, que en cualquier sér completo en su especie, podemos, estudiando su vida de relación, reconocer el desarrollo alcanzado en su esencia activa y vis- lumbrar las relaciones que le unen á la vida universal. Pues si esto sucede en los órdenes físico, fisiológico y anímico, con más razón podemos afirmar la solidaridad universal del pensamiento, que es el efecto de la causa inteligencia animadora que nos alienta y nos fortalece como una virtuali- dad emanada de la inteligencia infinita y de una potencialidad que obedece á la Omnipotencia Absoluta. Todo lo que es solidario entre sí, participa de la fuerza, de la vida, del pen- samiento y de las partes que constituyeu una parcialidad y de ésta con otros afines; totalizándose así las causas y los efectos que la vida y la idealidad pro- mueven en todos los órdenes manifestativos de las actividades individualizadas, totalizándose siempre y repartiendo los resultados del progreso. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 341 Ya tendremos ocasión de ampliar estas ideas, tantas veces tengamos que tra- tar de los estados particulares en que la fuerza, la vida y la inteligencia pueden encontrarse, representando siempre virtual y potencialmente la fuerza única, la inteligencia infinita en la vida solidariamente repartida y parcialmente conden- sada en las formas materiales. Refiriéndonos á nuestro asunto principal, podremos considerar la representa- ción de la fuerza magnética, como el resultado de la actividad, es decir, que el magnetismo como todo lo que consideramos fluidos, no son más que expresiones de la actividad qué imprime formas de movimiento en la vida de relación, así como el pensamiento, también, es la expresión de nuestra capacidad intelectual y forma manifestativa de la conciencia. En este sentido debemos admitir, que todos los seres están-vir'tualmente do- tados en gu actividad esencial, de fuerza físicu, orgánica, vital é inteligente en el grado que le corresponde. Por consiguiente, en las partes, como en las colectividades, se manifiesta la fuerza, la vida y la inteligencia que en ellas se producen. El magnetismo animal, personal y planetario que en la tierra se admite con distintos caracteres es, predominando el personal sobre los seres afines y por acción solidaria las colectividades, multiplicando su energía magnética sobre los elementos físicos, asociaciones orgánicas y organismos sociales de la humanidad terrena, de éstos y de unos á otros los centros colectivos pueden ejercer su acción magnética sobre las fuerzas que en todos los órdenes actúan en la natu- raleza y en las esferps intelectuales, porque el magnetismo individual es el resultado de la vida, y ésta de la actividad orgánica; por consiguiente, los ele- mentos celulares vibran y manifiestan su consistencia produciendo fuerza orgá- nica, vital y magnética, ésta como resultado total de las actividades productoras. De donde resulta: que los seres dispondrán de- mayor fuerza magnética, cuanto más equilibrados se encuentran, hasta el punto de que un solo sér de superior moralidad y de relativa inteligencia, pueda ejercer poderosa influencia magnética sobre las colectividades y las Instituciones .sociales, del mismo modo que puede dominar las leyes físicas, orgánicas y vitales armonizándolas y dán- doles dirección conveniente. De estos seres superiores, algunos se han distinguido en la Tierra como ge- niosy redentores, confirmándose así la teoría que sobre el magnetismo vamos á exponer. Esta fuerza, como toda fuerza, debemos considerarla como efecto de la acti- vidad vital en todas sus manifestaciones para deducir, que de la vida física, orgánica y anímica, se produce el magnetismo terrestre que todo lo envuelve y compenetra irradiándose en toda la esfera de la actividad vital del planeta. Allá en sus límites, esta fuerza se combina con las procedentes de otros mundos, y de esta manera, la vida trasciende y solidariamente se propaga y de cada una de las parias llega á los horizontes immensos que totalizándola la devuelven solidaria y equitativamente repartida. No debemos de extrañarnos, pues, que por el magnetismo se haya iniciado en la tierra el Espiritismo, porque la fuerza magnética es el vehículo conductor de las formas del pensamiento, estando como está subordinado al agente propulsor 312 LUZ Y UNJÓN de la conciencia manifestándose volitivamente en todas y en cada uno de sus actos conscientes; por esta razón, la voluntad mueve, dirige y gradúa el esfuerzo muscular subordinando las fuerzas orgánicas por la voluntad. Ya nos ocuparemos después de las condiciones en que esta fuerza dirigida por la voluntad ejerce sobre otros seres las órdenes de su voluntad propia; veremos también como en estos casos se cumple la ley de amor representada por atracciones, afinidades y .simpatías, porque siendo cierto que todas las fuer- zas se atraen para unirse y compenetrarse, en ningún caso se repelen aunque en la observación nos inclinemos á reconocer los efectos de repulsión. Ya dijimos hace tiempo, que todo en el Universo representa sumandos, par- tes integrantes de un todo homogéneo. Puede haber entre las sumas parciales diferencias numéricas de cantidad y calidad que representen más ó menos unidades de cantidades supuegtas, pero como todas las restas de cantidades homogéneas pueden sumarse, estas diferen- cias desaparecen cuando se llega á los signos de igualdad. Hay que tener en cuenta, que las fuerzas se encuentran en los cuerpos en equilibrio inestable, porque en cada instante son absorbidas é irradiadas de unos á tros cuerpos y éste es el origen de todas las fuerzas y el resultado del movimiento interatómico de las actividades que recíprocamente se influyen de unos cuerpos y de unos organismos á otros. Dejando sentado que el magnetismo como todas las fuerzas, es forma de ese movimiento irradiado de la actividad esencial, de ese agente etéreo para-nos- otros invisible é inmaterial porque traspasa los límites que alcanza nuestra inte-, ligencia sobre la divisivilidad de la materia, y concretándonos al magnetismo terrestre, debemos reconocerlo como fuerza superior, porque es el resultado de la vida en todas las esferas. Digimos también que la vida es otra fuerza de ese movimiento porque es el resultado de la actividad orgánica y del mismo modo admitimos fuerza orgánica de los sistemas funcionales, porque la actividad funcional proviene de acciones y reacciones fisiológicas y éstas de las combinaciones químicas continuando la serie hasta llegar á la materia etérea y á la fuerza animadora de sus átomos. He aquí que por todas partes que nos dirijamos así como por todos los razo- namientos que queramos emplear para el esclarecimiento de nuestros estudios, podemos llegar desde cualquier punto que partamos, á la solidaridad universal de la vida, cuyo lazo de unión se manifiesta por una fuerza vital y vitalizadora del Universo que consideramos magnetismo, forma de movimiento que se porta en cada caso conforme á las circunstancias vitales que concurren en cada una de sus manifestaciones. Comprendido así el magnetismo, debe satisfacer á todo, magnetizador cons- ciente que al dirigir su influencia magnética sobre otro sér, lo hace en represen- tación de la vida universal y que por tanto debe producir una acción benéfica convencido de que moralmente practicado, producirá beneficiosos resultados, en cambio, malévolamente ejercido sufrirá de rechazo las consecuencias de todo acto reprobable y contrario á las leyes de atracción y simpatía. Hemos insistido y debemos insistir aún mucho, sobre la utilidad y convenien- cia de aunar las voluntades para obtener buen resultado de influenciación mag- órgano oficial üe la liga e. española 313 nética, pero es preciso para conseguirlo estudiar antes las condiciones en que la fuerza magnética puede producirse por el estado físico, orgánico y anímico de los concurrentes á estos actos de práctica magnética. Siempre entre distintos individuos se encontraron condiciones magnéticas diferentes, pero siempre que las voluntades no se opongan pueden aunarse y lie-, gar hasta la identificación y con ésta, la fuerza necesaria para poder producir los fenómenos que se produzcan. Si el lector se ha fijado bien en el fondo de esta deshilvanada exposición, habrá comprendido la importancia que tiene para el progreso científico y moral la perfección y sinceridad en las relaciones de la vida social y más limitadamente en la influencia de un magnetizador sobre el sujeto que desea curar sus dolen- das ó modificar los errores de su inteligencia ó extravíos de voluntad. De todos modos, para evitar dificultades y desmayos en algunos individuos, adelantaremos la idea de que, siendo el magnetismo una fuerza bienechora como elemento vital superior y á la vez vehículo trasmisor, siempre producirá efectos beneficiosos si el magnetizador procede con sana intención y humanitarios pro- pósitos. Poco ó casi nada podemos enseñar sobre estos puntos, pero creemos necesa- rio llamar la atención sobre el estudio más profundo del-magnetismo para poder distinguir y conocer sus diversas aplicaciones, porque esta fuerza adquiere pro- piedades é intensidades variables según las condiciones en que se produce, se dirige y se propaga. Sobre esto sí que tendremos que revelar algo ignorado psi-- cológico y mental que la ciencia terrena no podría explicar ni admitir con su criterio materialista, ó espiritualista dogmático. Para comprender, es necesario estudiar la importancia que tiene la fuerza magnética en las vibraciones etéreas que hieren los sentidos corporales y que impresionan la fuerza vital y orgánica repercutiendo en el sensorio total y en las percepciones especiales que impresionan la actividad esencial reflejada en la conciencia, es preciso y necesario cultivar algo la ciencia espirita universal. De esto seguiremos ocupándonos más adelante, con el fin de aclarar algo más estos estudios para aquellos que quieran utilizar su fuerza magnética y desean obtener los resultados que corresponden al bien obrar. Benito Rodríguez. (Continuará). LA RAZÓN ESPIRITISTA.—Así se titula un nuevo colega que salió aj pú- blico el 3 de los corrientes y cuya Dirección y Administración se hallan en la calle de Fioridablanca, 77, pral., 1.®. Los precios de suscripción son los siguientes: España, un año 3 ptas. ■ » semestre 2 » . » trimestre. . . 1 » Extranjero, un año 5 » ^ Número suelto 0'05 » Deseamos al nuevo compañero de luchas una larga y próspera vida y^esta- blécemos gustosos el cambio. 314 LUZ Y UNIÓN Comunicación Conforme el hombre se va ilustrando, conforme se v^a perfeccionando en el ¿umplimiento de sus obligaciones, conforme va adquiriendo nuevos çonoçimien- tos, así su espíritu va saliendo dentro de la nube densa y obscura que no le per- mitía antes distinguir la verdadera senda que debiera seguir; antes de conocer los principios verdaderamente morales, estaba como el preso que se encuentra en un calabozo obscuro é infecto, de pies y manos atado, y que no pudiendo mo- verse está inutilizado para obrar: ésta es la imagen viva de todo aquel que sujeta sunnteligencia, sus sentidos, á una piedad errónea, y no quiere salir del límite que le trazan aquellos seres orgullosos qne su soberbia abarca hasta los arcanos de la deidad suprema. Este es el infeliz preso asido de la inteligencia; no le es dado romper esas cadenas; no tiene voluntad propia; no tiene derecho á refexio- nar, ¡infeliz! Su ignorancia le hace víctima del orgullo de los demás. Pero no le sucede así al espíritu reflexivo: piensa, medita, investiga, compara, analiza y des- cubre que es libre, que no tiene límites el horizonte de la vida intelectual; que su misión en la tierra no está cumpliéndola por un acaso, un capricho, una casua- lidad, sino que tiene un fin que cumplir, expiando sus faltas pasadas, ó siendo un misionero que le está confiada la rehabilitación de la humanidad. Compréndese muy bien que ciertos seres estén mejor dotados para adquirir estos conocimientos, á la vez que otros los rechazan; esto proviene de las capa- cidades intelectuàles de cada individuo; de como cada uno haya mejorado sus dotes morales. Pues tanto los que hoy son hombres ilustrados como los ignoran- tes, los ha dotado Dios de una inteligencia igual, resultando de esto que sólo depende la manera como cada sér aproveche lo que le ha sido dado; éste es el libre albedrío que tenemos todos para progresar, cuyo fruto constituye la victo- ria y los triunfos que podamos presentarle al Creador cuando sea llegada la hora de medir las acciones de cada uno. Los hombres pueden ser ó muy buenos ó muy malos; su libre albedrío les es perjudicial ó provechoso, pero todos sjn excepción los ha formado Dios iguales, con la sola diferencia de que unos aprovechan lo que otros desperdician. Cada uno de vosotros podéis hacer mucho bien al alcance de vuestras facul- tades. Se os pedirá cuenta de lo que-pudisteis hacer y no lo hicisteis; no hay sér que no pueda contribuir al progreso moral, si no con obras de caridad porque los recursos no lo permiten, con el buen ejemplo, con la enseñanza. En fin, no hay monrento en que el espíritu que desea progresar no encuentre los medios de poder recojer una semilla para el campo de la eternidad. Hoy estamos en vía de un adelanto moral grande; están llegando los tiempos en que la verdad luzca al través de las tinieblas que tantos siglos la han ocultado; hoy será el principio de ese día que no debe tener sombra, dehesa armonía que ha de unir los corazo- ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 315 nes en una llama ardiente: la Caridad cuyas brillantes luces no las extingue el fuego de la envidia; ha llegado la hora en que el hombre libre pueda gritar que su Dios es el Amor, la Justicia y la Caridad; que entre sus hermanos no existen los celos; que es su Dios la nobleza de los sentimientos, que está en todo cuanto le rodea. Si es verdad que ésta causa abrojos á los primeros luchadores ó após- toles del Espiritismo, también serán más grandes los laureles cuando la humanidad regenerada por el buen ejemplo pueda recojer el fruto de sus desvelos. Nada será, entonces, nada, digo, todo cuanto hayais hecho; estaréis demasiado recom- pensados de vuestra labor. Bendita mil veces la Caridad que es el lazo que une á la humanidad doliente. —Adiós. Medium, M. A. La avaricia de cien siglos I Por muy acostumbrados que estemos á ver hombres cuyas rarezas y excentricidades llaman poderosamente la atención, siempre sorprende ver á un desdichado, víctima indudable- mente de sí mismo, que como dicen muy bien los espíritus, el papel de verdugo no tiene que hacerlo nadie para castigar las faltas de otro; cada uno es verdugo de sí mismo; que en la eterna justicia de Dios cada cual recoge la cosecha de su siem- bra. Leyendo los periódicos encontré un suelto que al leerlo murmuré: ¿qué causa habrá dado este efecto? «¡La avaricia de cien siglos!...-», dijo una voz. El suelto decía así: UN AVARO.—En la calle de la Paloma, número 22, se encontró dias pasa- dos á un casero moribundo con un ataque de hambre. Llevado al hospital, falleció. Ese hombre vivía en la mayor miseria, durmiendo en un camastro con trapos en un rincón de la habitación. Ayer, al presentarse el Juzgado en la habitación donde vivió el avaro, encon- tró debajo del camastro 31.000 pesetas en valores del Banco. :II «Sí, repitió la voz de un espíritu. La avaricia de cien siglos es,la que ha dado á ese infeliz el tormento que ha sufrido en 316 LUZ r UNIÓN esa existencia, que ha tenido todas las torturas que produce el hambre, siendo dueño de una mediana fortuna que le ponía á Cubierto de todas las necesidades materiales, pues tenía lo sufi- oiente para vivir^ni enmdiado ni enoidioso; pero no ha tenido más remedio que comenzar el saldo de sus cuentas, á lo cual está muy dispuesto ese pobre espíritu, que al fin se ha conven- cido que las riquezas de la tierra, con toda su cohorte de gran- dezas y fastuosidades, no representan en la, eterna vida del espí- ritu más que la sombra, el aislamiento y la más completa sole- dad. El hombre que hoy ha muerto de hambre ha sido durante ctm el rey fiel oro;, ha tenido el talento suficiente para emprender siempre negocios lucrativos, y las arenas de los de- siertos se han convertido en sus manos en polvo aurífero, y los guijarros sin valor alguno en piedras preciosas, en piedras de oriente de incalculable valía; ha sido el hijo mimado de la for- tuna, como decís en la tierra; en todas las empresas que él to- maba parte, la suerte le sonreía; pero nunca se saciaba su sed de riquezas; mientras más oro atesoraba, más oro quería ate- sorar; pero el oro en sus manos se convertía en infecunda arena, porque nunca le sirvieron süs tesoros para consolar á un desventurado. Jamás vistió á un huérfano; nunca escuchó los lamentos de un anciano desvalido ni de una viuda atribulada; él, sí, disfrutaba de sus riquezas, vivía con la magnificencia de los soberanos de Oriente, satisfacía sus menores caprichos; pero las sobras de su mesa no las aprovechaba ningún pobre; sus perros, hartos, no las consumían; pero su servidumbre no podía dar ni un pedazo de pan sobrante. ¡Ay del criado que se atre- viera á ser compasivo!, enseguida era despedido por su desobe- diencia; y así vivió cien siglos, hasta que al fin escuchó la voz de su guía que le dijo: «¡Infeliz!... ¿no estás cansado de vivir en la sombra? Tú no has manchado tus manos con la sangre de tus semejantes, pero... has dado el peor ejemplo que puede dar un hombre no siendo asesino; has tenido agua abundante en las fuentes de tus propiedades y le has negado el agua á los peregrinos hambrientos; se, han podrido los frutos en los árbo- les de tus huertos antes que dar á los pequeñuelos lo que te pedían con sus miradas ansiosas; no has derramado una gota de sangre de tus semejantes; pero para aumentar tus fabulosas riquezas has acaparado las primeras materias alimenticias y han muerto centenares de niños y de ancianos de inanición, de hambre, y este proceder ¿qué te ha dado?, oro en la tierra y sombra en el espacio, y si has visto algún rayo de luz, ha sido órgano ' oficial de la liga e. española 317 de los incendios que han producido las multitudes alocadas por la desesperación del hambre; y si has oído alguna voz, esayoz ha dicho: «¡Maldito seas, verdugo avariento! ¡maldito seas! Vuelve en tí, desdichado, vuelve en tí; atesora virtudes y no monedas»; y el infeliz avaro escuchó la voz de su guía y ha comenzado á no disfrutar de sus riquezas y á sufrir las angus- tias de la pobreza; por eso en su última existencia no pudo re- sistir á su antiguo vicio de atesorar; pero su tesoro no le pro- porcionó placer alguno; ha sido fuerte para resistir la tentación de los goces terrenales, ha dado un gran paso respetando sus propósitos de enmienda. Cuando vuelva comenzará á ser gene- roso, dando agua al sediento y pan al hambriento; y cuando veáis esos cuadros de miseria, de sufrimiento, y contempléis un montón dé oro oculto entre sucios harapos, no digáis ¡qué hombre tan imbécil! ¡cuánto puede la avaricia y la estupidez! No; inclinaos con respeto ante un espíritu que con un arranque de enérgica voluntad ha dicho: «¡Quiero ver la luz! ¡quiero re- generarme! ¡quiero dar el primer paso en la senda del sacrifi- cío! No más egoísmo, no más exclusivismo, no más miseria espiritual». Respetad á esos pobres espíritus que dan el primer paso para engrandecerse, porque dado el primer paso se sigue avanzando ha.sta llegar á ser un modelo'de abnegación y gene- rosidad.—Adiós». III Mucho me satisface la comunicación que he obtenido, por- que es una buena lección para no criticar ni hacer cálculos erróneos sobre las acciones y el procedimiento de los demás. Cada sér es un capítulo de la historia de la vida, y cada uno desarrolla sus sentimientos, sus aspiraciones y sUs propósitos en la medida de sus conocimientos adquiridos en sus pasadas encarnaciones. No debemos juzgar la conducta de nadie di- ciendo si nos parece un imbécil ó un sabio, porque como des- conocemos sus existencias anteriores, no podemos hacer un juicio exacto de su modo de ser. Yo agradezco muchísimo á los espíritus las enseñanzas que me dan, pues por ellas iré apren- diendo á no juzgar por las apariencias, que son el antifaz que se ponen los hombres en el gran baile de máscaras que se cele- bra durante el carnaval de nuestra vida; Amalia Dumingo Soler. 318 LUZ Y UNION Número extraordinario Nuestro estimado colega La Voz de la Verdad, á fin de solemnizar su primer año de publicación, un número extraordinario prepara que creemos será aceptado por todos los tistas espiri- con verdadero deleite, tanto por su contenido como siendo por- que éste una síntesis de nuestras doctrinas, podrán ha- cerlo servir de medio para popularizarlas entre los que las des- conocen. Creemos que es un acierto rnás el que ha tenido nuestro colega al abrir una suscripción especial para este número, ello facilitará pues á los Centros y Grupos los medios de efectuar una buena labor de propaganda con muy poco dinero. He aquí el proyecto de nuestro colega, al que felicitamos por adelantado por el seguro éxito que le espera: «Próximo á cumplirse el primer año de la publicación de este semanario, queremos solemnizarlo con la publicación de un número extraordinario compuesto de ocho páginas del mismo tamaño del presente y que encierre en sus columnas una sin- tesis suscinta y clara de las doctrinas fundamentales espiritistas, á fin de que sirva de número de propaganda que podrán repar- tir, entre sus conocidos, nuestros correligionarios. NUESTRO EXTRAORDINARIO contendrá artículos tra- tando sobre el alma en la anestesia, el alma en el sueño mag- nético, el alma en los fenómenos espiritistas, opiniones de hom- bres notables, la fuerza magnética y psíquica, el periespíritu, pluralidad de existencias, pluralidad de mundos habitados y prensa espiritista mundial. NUESTRO EXTRAORDINARIO, á pesar de constar de doble número de páginas del normal, se venderá al mismo precio de diez eéotimos, pues deseosos de contribuir con todas nuestras fuerzas á la propaganda de nuestro caco ideal, estamos dispuestos á realizar toda clase de sacrificios con tal de lograrlo; en esta noble tárea confiamos que, como siempre, recibiremos el apoyo de nuestros queridos correligionarios españoles y ame- órgan'o oficial de la liga e. española 319 ricanos, á cujo fin y con objeto de que la propaganda que bus- caraos resulte eficaz, abrimos una suscripción entre ellos bajo las siguientes condiciones: De 1 á 10 números. á 10 cts. uno. De 11á 30 » á 8 » De 31 á 50 » á 6 » De 51 en adelante. á 5 » A nuestros corresponsales se les reservan los raisraos precios de costumbre. donativos recibidos Grupo «Amor Fraternal», de Cádiz, ha remitido 2'50 pese- tas; le corresponden 41 números. Policarpo Barrieros, i pta.; le corresponden 10 números. Grupo «Amor y Vida», de Barcelona, 1 pta.; le correspon- den 10 números. Esperamos secun- que nuestros entusiastas correligionarios darán con verdadero interés la idea de publicar este extraordi- nario, como decía muy bien nuestro estimádo que, colaborador, el distinguido abogado Sr. Pareja Medina, al iniciar este pen- samiento en su entusiasta artículo publicado en el número 27 de este semanario: «Hemos de hacer todos un estuerzo para que cuando haya haber suficiente se haga una tirada monstruo, con cuantas páginas sean necesarias, para dar una idea suscinta, pero general y completa, de la teoría espiritista, una relación detallada de los fenómenos comprobados y otra de las conclu- siones adoptadas por los más conspicuos hombres de ciencia del mundo. »Este número se repartirá gratis á todos los hombres de ciencia intelectual». que en España forman el elemento Ha llegado la hora de llevar á la práctica esta hermosa ini- ciativa, confiamos no nos y que en esta ocasión, como siempre, ha de faltar el de cuantos sientan de verdad nuestras doc- apoyo trinas. La Redacción». 320 LUZ Y UNIÓN Bibliografía La Realidad de los Sueños , Fhos de Elpisa.—Precio 0'50 céntimos, Biblioteca de La Irradiación, Madrid. ¿Pueden los sueños convertirse en realidad? Tal es el problema que el autor desarrolla con acierto buscando argumentos hasta en los antiguos libros, escritos, según se afirma, por inspiración divina, como son el Génesis y los Evangelios de San Mateo. - Explica de un modo magistral la desencarnación ó paso de la vida terrestre á la de ultratumba y el despertar en la otra vida. iii Castelar desde Ultratumba por Psiquis. — Precio 0'50 , céntimos, Bi- blioteca de La Irradiación, Madrid. Comunicaciones medianímicas del eminente tribuno en donde se v,e el estilo é ideas del que en vida fué admiración del mundo entero. La sencilla enumeración de los títulos de las mismas /.wz y Libertad, Las falsas religiones y La verdadera causa es suficiente para darse cuenta de la importancia de los temas que desarrolla. Los problemas de ultratumba son objeto hoy de concienzudo estudio sobre todo en el extranjero, y por eso cuanto se publique sobre el particular es mere- cedor, por lo menos, de la atención del público que no sea materialista. La Irradiación ha publicado también al precio de 50 céntimos, los siguien- tes folletos instructivos, que recomendamos á nuestros lectores: El hipnotizador práctico, por Pélletier; La sugestión aplicada á la pedur gogia, por el Dr. Berillón; Influencia de la imaginación de la madre sobre el feto, por el Dr. Drzewiecki; La lectura del pensamiento ó la adivinación muda, por Tarchanolf; El secreto de Onofroff ó la transmisión del pensa- miento, por Favius de Champville; Aplicaciones terapéuticas del hipnotismo y La sugestibilidad de los niños, por los Dres. Tokarski y Berillón; Terapéutica hipnótica, por Brunet; La transparencia del cuerpo animal como prueba de la muerte y como método de diagnosis, por Elmer Gates; Instrucción práctica para fotografiar los espíritus de ultratumba, por Anastay; ¿fl musicolerapia ó aplicación de la música á las enfermedades, por Daúbresse; Manual del magnetizador práctico, por Regazzoni; Procedimientos Magnéticos, por Durville. ^ Estando en prensa el presente número recibimos la noticia de la desencarna- ción de nuestro querido hermano en creencias D. Mateo Badell. No dudamos que nuestra consoladora doctrina servirá de lenitivo á su atribu- lada familia. iSUMABlO: D. Manuel J. López L. —¡Gloria á un mártir!—Honrar á los muer- tos, por 'D. V. G. Ruy Pérez.—Psicologia transcendental, por D. Alberto Brenes.— Suscripción.—Círculo «Franklin».—Estudiemos, por D. Benito Rodríguez.—No hay efecto sin causa, por D." Amalia Domingo Soler.—Ideogenesis, por D. Manuel Pareja Medina.—La fuerza mental, por D. César Bordoy.—Responsabilidad de las Religió- nes, por D.^ Amalia Domingo Soler.—Comunicación.—Ecos y noticias.—Aviso á nuestros suscriptores. Corresponsales Administrativos ]!Iéjico;;;;J-=f3é Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de _^^--Líincón, Calle 4." de Nicolás Bravo, 19, ORIZABA (Veracruz). Pnerto-Kico.—Faustino Ysona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirujano, MANATI.—Francisco I. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE. Cnba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO.—Delfín Roig y Rosoli, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—^Eulogio Infiesta, calle Cuba, 34, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN.—Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- do]. Raegi, Apartado 17, CAIBARIEN.—D.®'Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN —Manuel J. López L., Pasaje Hernán Cortés, 9, BOGOTA. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedella, Dior de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Al'gentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés» PEHUAjO —Genaro Ragno, calle Suárez, 635, BOCA (Buenos Aires).—Pedro Iraoia. NE- COCHEA.—Manuel Torres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Islas Filipinas.—José MA Herrero, calle Concepción, 177.—QUIAPO. Itrasii.—Agrippino Gómez Veado, Rua Municipal, n." 3, CIDADE DO MURLAHÉ (E.stado de Minas-Geráes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Babia)!—Edla de Moarés Cardoso, San Franci.sco Ha- vrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salu.stiano E. Conde, (Bahía de Sainana), SANCH EZ. —Aurelio León, SAN FRANCISCO DE MACORIS. República de Aiicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Cenador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CARBONELL y Nuestras Fuerzas Mentales Modo de emplearlas con provecho en el comercio, la industria, las artes, los oficios, y en general en todos los actos y situaciones de la vida por Prentice Mulford Cuatro magníficos tomos encuadernados á la americana. . . . 40 pesetas AÑO IX NOVIEMBRE DE 1908 NÚM. 11 Nuestros Corresponsales L Manuel J. López L. Creemos que la mejor nota biográfica que podemos dar de nuestro querido hermano es transcribir lo que nos contesta en atenta carta acerca de este asunto: «Así, pues, si lleva V. á efecto su propósito, publicando el retrato de mi hu- milde personalidad, deje á un lado todo rasgo biográfico y redúzcase á decir que mi existencia la he puesto al servicio del Espiritismo, desde que tuve la felicidad de vislumbrar escasamente los mundos de luz que en su seno guarda, y por estar perfectamente convencido de que con el transcurso del tiempo, cuando esta doc- trina haya hecho crecer el número de los que piensen por sí mismos, reduciendo el de los que se conforman con tener su conciencia en andadores, encontrarán en él la solución de los más inexpugnables problemas, llevando así la tranquili- dad al fondo de nuestras almas adoloridas y trocando en racional, la estúpida resignación de tantos seres que yacen en el fondo de lo que impropiamente lia- man desgracia; no basta sufrir y resignarse al sufrimiento, es necesario, como dijo uno de nuestros hermanos de esa, saber por qué se sufre n por qué se re- signa, para no estallar, en nuestro encono, contra Dios, por creer, como sucede á la mayoría de los humanos, que El se complace en ver á sus hijos como se re- tuercen en el dolor, invirtiendo aquella expresión del Génesis que dice: «Y Dios 322 LUZ Y UNIÓN hizo al hombre á su imagen y semejanza», y ios que no encuentran el por qué de las penalidades de la vida, hacen á Dios á semejanza del hombre, de lo que están viciadas todas las religiones que se disputan el poder temporal; diga V. que no obstante tener que luchar á brazo partido para ganar el pan diario, trabajo de una manera diminuta en propagar en todas partes y á toda hora la Moral Cris- tiana, contenida en la indefinible, á fuerza de ser buena, filosofía espirita; diga usted que yo he sido el inmediato víctima de la sustracción de las obras espiri- tistas en las Oficinas del Correo de Bogotá; agregue V. que yo, sin ninguna ca- pacidad intelectual, gracias á la bondad de la Doctrina Espirita, logré constituir un grupo de honrados adeptos,, que se denomina Centro «Guía del Cristiano», en una de las poblaciones donde está más arraigado el fanatismo católico; donde se han valido de las más bajas calumnias para empañar en lo posible el brillo de fa- millas modelo de moralidad; y agregue V., por último, que sin más autoridad que la conferida por ese Centro, yo soy quien se abalanza á llamar la atención de los dignos Representantes del Librepensamiento, especialmente á aquellos que estén de acuerdo con la «Liga Espiritista Española» y á los Honorables Miembros del Congreso de Libreros, para que aboguen con, el mayor interés posible porque se destruyan las vergonzosas trabas que en pleno siglo XX! se atreven á poner en Colombia para la introducción por los Correos de la República de obras espiri- tistas, que ultrajando el buen sentido, han calificado de inmorales individuos em- pleados del Correo, que de seguro jamás se les ha ocurrido elevar sus ojos á las inmensidades del espacio». ¡Gloria á un mártir! El 29 de Septiembre último falleció en Burjasot (Valencia) el gran espiritista D. José Qodó Gil, Presidente del Centro espiritista de Valencia, en el cual desempeñó distintos cargos; y cuando la gravísima enfermedad, que le llevó al sepulcro, le hizo renunciar á todo trabajo, el Centro espiritista «Amor Sapiencie» cerró sus puertas. Fué Godó Gil un hombre notabilísimo, un luchador incansable, que con admi- rabie valor aceptó la cruz de su expiación sin exhalar una queja. Sus primeros años fueron tristísimos, hasta tuvo que mendigar su sustento; ejerció más tarde diversos oficios; contrajo matrimonio dos veces, pero la sole- dad era su destino. Espiritista convencido, practicó el bien, sin que su mano de- recha supiera lo que hacía su mano izquierda; era ¡un Santo! y como santo fué martirizado por una enfermedad dolorosísima, tumores en la cabeza, que se re- rapidez; no encontraba refugio en ninguna parte, hasta producían con pasmosa que en Burjasot, una mujer que nació para ser hermana de la Caridad, se com- padeció de su infortunio y admitió en su hogar á Godo Gil, que seis meses des- pués murió con la mayor resignación. ¡Espiritistas!... consagremos un recuerdo á un Santo y digamos: ¡Gloria á un mártir! ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 323 Honrar á los muertos mOKíÓLrOGO La escena representa un gabinete modestamente amueblado. El Doctor, personaje como de 50 años, entra enjugándose las manos con una toalla. Concluyó por hoy la consulta gratuita; la diaria inspección de las lacerias humanas; la penosa confirmación de nuestro actual atraso. Porque nuestras enfermedades, como todos nuestros contratiempos y quebrantos, tienen el mismo origen, igual procedencia; ¡la ignorancia! Los médicos comprobamos esto, diariamente, muchas veces. Los padres, con frecuencia, no dejan á sus hijos los conocimientos ni los medios de fortuna necesarios para resolver los apremiantes proble- mas de la vida... pero en cambio la herencia morbosa, el legado de sus enfermedades y vicios, nunca falta. El alcohólico engendra hijos epilép- ticos; el tuberculoso sólo produce seres que tarde ó temprano serán tísicos también. ¿Y por qué se casan todos esos desgraciados? Por ignorar el daño irreparable que ocasionan á la humanidad, au- mentándola con miembros podridos que acrecentarán sus males. La sociedad, también ignorante, es la primer responsable de lo que ocurre. Mientras sea posible que haya seres privilegiados que derrochen inútilmente, en un solo dia, cantidades con las que toda una familia po- dria mantenerse un año...; mientras millares de seres humanos carezcan del alimento necesario; de vestidos adecuados á la estación; de habita- cienes confortables é higiénicas, donde la ventilación sanee el ambiente y el sol alegre la vida...; en tanto pueda darse el caso de que un cris- tiano se muera de hambre en ciudades populosas, para abominación y vergüenza de esta sociedad farisaica y egoista, ¿cómo no ha de haber raquitismo, anemia y cuantas enfermedades describe la patologia? Hace falta instrucción, mucha instrucción, para que un grado mayor de cultura individual y colectiva concluya con el egoísmo ó por lo me- nos lo modifique, haciéndonos más humanos, más compasivos, más buenos. (Asomándose á la puerta del foro como si hablara con un criado): —¡Julián! No estoy para nadie... Ya me entiendes; no estoy para nin- guua consulta corriente; pero para algún caso urgente, para una verda- ñera necesidad, sí. Los médicos no podemos ni debemos negar nunca nuestro auxilio á una necesidad apremiante. (Transición). 324 LUZ y UNIÓN Y ahora, cumplidas ya las obligaciones diarias, vamos ¡pobre cora- zón mió! á penetrar en el santuario augusto de los recuerdos. No sé qué extraño placer se encuentra al recordar nuestras amarguras. ¡Hoy hace un año! ¡Qué lentamente transcurre el tiempo para los desgraciados!... Hace un año era yo feliz. Todos envidiaban al doctor Herrera, médico famoso, según dicen, con una esposa adorada, mi santa Margarita, buena como una bendición de Dios, y un hijo idolatrado, Julio, mi Julio inolvi- dable, orgullo de sus padres y esperanza malograda de la patria. (Con ternura), ¡Con qué fruición recuerda la memoria mía, sus triunfos de estudiante! Sus nobilísimos sentimientos y la claridad meridiana de aquella poderosa inteligencia. En su cerebro cabían todas las verdades, como en su corazón todos los afectos. Se hizo ingeniero y pensando, antes que en el propio medro, en el progreso y engrandecimiento de la patria, un dia, alborozado, entusias- madísimo, vino á abrazarme diciendo: —¡Papá, papá, ya lo tengo! —¿Qué es lo que tienes, hijo mío? ¿qué adquisición es esa que tanto t& alegra y entusiasma? —La idea que perseguia con tanto afán, papá. El medio seguro é infa- lible de asegurar las buenas cosechas en España y con ellas la prosperi- dad, la abundancia, el bienestar general. ¿Te parece poco? Y se puso al trabajo con el ardor y la fe de un iluminado. Poco después, el clarin sonoro de la prensa, llevaba á todos los pe- chos la risueña esperanza de un próximo y envidiable porvenir, de un seguro resurgimiento de la grandeza patria. La opinión pública á su vez formó el partido de la política hidráulica^ sin más bandera ni programa que la realización del proyecto de mi hijo, consistente en canalizar los grandes ríos de España, recogiendo y dando dirección á sus aguas, para que antes de verterse en el mar, fecundizasen los miles de hectáreas de terreno, improductivas hoy por la sequía. Se acabarían las malas cosechas y sobrevendría la abundancia. ¡Qué dicha tan grande se veía venir! En todas partes enaltecían el genio del joven ingeniero Julio Herrera. Una oleada constante de alegría y cariño, parecía envolvernos en dulcísimos efluvios. ¡Erarnos felices! (Transición). Mas ¡ay! que como el humo se deshizo aquella ventura, que creía in- terminable. ¡Hoy hace un año, y todavía me estremezco de horror al recordarlo!. Hace un año, dos falsos amigos trajeron á mi hijo mortalmente herido en un duelo á espada... La madre, al ver aquellos hermosos ojos insi- nuantes y acariciadores, que la agonía empezaba á poner vidriosos... al ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 325 contemplar aquella boca que tantos millones de veces había besado con el amoroso deliquio maternal y que ahora borbotaba una espuma san- guinolenta... viendo aquel cuerpo hermoso y robusto, con la lozanía de la juventud, abrazado diariamente con la locura del cariño y que enton- ees, contraído por el dolor y empapado de sangre presentaba un aspecto horrible... dió un grito, un solo grito espantoso (que aún me parece estar oyendo), y cayó al suelo, como herida por un rayo, muerta instantánea- mente por la tremenda fuerza de la trágica emoción. Quedé mudo de espanto... aturdido... idiotizado ante tan rudo golpe. Mis sienes latían como si quisieran estallar. Los sollozos me ahogaban y un nudo invisible apretaba mi garganta y oprimía mi pecho, producién- dome horribles sufrimientos. Traté de curar á mi hijo, haciéndome superior al dolor, en un es- fuerzo sobrehumano, ya que desgraciadamente nada era posible hacer por la madre... pero ¡todo fué inútil! La muerte implacable llegaba á toda prisa. Tuve el consuelo inefable de que me reconociera antes de morir y me dijese: ¡Perdóname el disgusto que te causo! ¡Adiós! Una amorosa mirada y un débil apretón de manos, fueron su despe- dida... (Aumentando la intensidad dramática). Yo no quería convencerme de la realidad, pretendiendo hacer volver la vida con el calor de mis besos á aquel cuerpo adorado ya frío. Y cuando la terrible realidad se impuso, senti la furia de la rebelión y vertí mi odio á la humanidad en insensatas imprecaciones. Maldije al mundo entero, que consiente esos crímenes y á veces los provoca, desvirtuando el concepto del honor. ¿Cómo ha de tener honor un homicida? La vida no es nuestra, pertenece á Dios y sólo á El le corresponde disponer de ella. ¡Cuánto sufrí al verme solo; al recorrer estas habitaciones vacías; al sentarme á la mesa solitario é inapetente, contemplando los lugares que ocuparon los inolvidables desaparecidos. Un día me atreví á preguntar á la Justicia divina: ¿Por qué me has privado de mi tesoro? ¿Por qué me has arrebatado á mi esposa y á mi hijo, mis dos grandes amores? Y oi una voz, que parecía estar dentro de mi mismo, decirme: ¡Calla, insensato, y no blasfemes de la bondad inñnita de Dios! ¡Calla y espera! No tuve que esperar mucho. Aquella misma noche, sin estar comple- tamente despierto ni dormido, no obstante la obscuridad absoluta de mi alcoba, disfruté la dicha incomparable de volver á ver á mis queridos ausentes. Reparad que digo ausentes y no muertos, porque los vi vivos y son- Tientes, contentos de su nueva forma de vida... y no podría, no acertaría 326 LUZ Y UNIÓN á explicaros, cómo me hicieron entender que eran felices viviendo una vida superior á la nuestra y que yo podía aumentar su dicha, dedi- muy cando mi vida actual á una sola cosa, á realizar el Men. ¡Alucinación de un cerebro débil!, diréis quizá. No, no fué alucinación, sino un hecho real, positivo, evidente. Un aviso providencial y santo, una prueba más de la comunicación entre los de allá y los de acá. Este aviso é instrucciones quedaron grabadas en mi corazón y en mis pensamientos. Estudié la filosofía kardeciana y modifiqué radicalmente mis sentimientos. Embriagado de luz y de amor, ya no maldije, sino compadecí á la sociedad compuesta de seres hermanos míos, compañeros de peregrinación, que á veces proceden equivocadamente... ¡porque no saben más! Pero el aunque muy despacio, muy lentamente, progreso se realiza, dulcificando las costumbres. Las guerras son menos frecuentes; los duelos son más raros cada día, y empieza á entreverse que el hombre, (Con acento de convicción profunda) como la creación entera, sigue las admirables leyes de una evolución progresiva, que sólo puede acelerarse cuando el amor y la paz unan en fraternal é indisoluble abrazo á todos los hombres, sin diferencias de co- lor, de religión ni de raza... Y mientras eso llega, yo, para honrar á mis muertos, sigo adorán- doles, y sin dejar de quererlos, ahora consagro mis amores á los desva- lidos, á los pequeños, á los débiles. Sostengo á mis expensas un hospital para niños pobres, en donde tiernas fiores, maltratadas por el infortunio, recobran muchas veces esas la salud y la alegria, ¡la poesia de la vida! y encuentran siempre los cuidados y atenciones que exige su estado y que la miseria no permitía tuvieran en sus hogares. Cada vez que arranco una vida á la muerte, me figuro (Con ternura). tengo un hijo más; y me he hecho á mi mismo solemne que juramento de ejercer en ellos las funciones de padre, man- (que voy cumpliendo) teniéndoles educándoles hasta conseguir convertirles en buenos seres y útiles á si mismos y á la sociedad, para desde el fondo de mi alma incre- par á ésta diciéndola: —Me arrebataste una esposa y un hijo amantisimos por sostener aún costumbres bárbaras. A cambio de aquellos dos, ahí tienes, ¡muchos, muchos, igualmente nobles y buenos! Y así creo yo que es como mejor podemos honrar á los muertos. (Telón lento). V. G. R UY P ére;Z.. Madrid, Septiembre 1908. ÜKGAXO OKICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 327 Psicología transcendental San José de Costa Eica, 24-9-908. Sr. D. Rogelio Fernández Güell. Un fenómeno que me ha llamado mucho la atención y que observo y estudio con particular cuidado por su rareza y transcendencia, es el relativo á la plura- lidad de personas ó formas psíquicas que, de la medium ó de las entidades espi- rituales que se manifiestan, se desprenden. El desdoblamiento de la personalidad de los mediums; ó de otros individuos que poseen cierta cualidad al respecto, es harto conocido de quienes se ocupan en esta clase de asuntos. En condiciones dadas, el doble de una persona se se- para, pudiendo percibirse aún en lejanos sitios y ejecutar actos y hacerse oir casi como si fuese la persona misma. Los casos de aparición á distancia, ó de télefania, como los llama Aksakof, no reconocen otro origen. El descubrimiento del cuerpo fluídico ó periespíritu ha permitido explicar de manera satisfactoria tan extraño suceso, y á uno parecido cuéntase que debió en mucha parte su ca- nonización Alfonso de Ligorio, por habérsele conceptuado milagroso. Pero el que se produzca un triple y hasta un cuádruple, cosa es que descon- cierta al par que maravilla. Y, con todo, el hecho es positivo. De ello dan testi- monio diversos pasajes de las actas del Circulo «Franklin», que publicarán oportunamente. La primera vez que tuve conocimiento del hecho fué una noche en que la medium del indicado Circulo, á poco de comenzar la sesión, expresó de pronto y con extrañeza que se veia á un mismo tiempo en dos ángulos de la sala, ade- más de sentir y palpar su cuerpo material. A eso, sin embargo, no di importancia, tanto por ser imposible comprobar la certeza de lo afirmado, como porque hasta entonces no tenia noticia de que pudiesen verificarse casos de tricorporeidad; pues, en efecto, ni en libros, ni en revistas he leído nada por el estilo. Posteriormente, el fenómeno ha ido determinándose mejor. Cuando se pre- sen ta el caso, además de la voz corriente de la medium se oyen, á un tiempo, dos voces muy semejantes á aquélla, ya junto á alguno de los concurrentes, ya algo distantes. En ocasiones las formas fluidicas llegan á materializarse tan bien, que se pueden tocar al acercarse á uno. Hablan como la medium y, por lo común, se limitan á llamar la atención para que las noten. Por su parte, los extraterrenos Ruiz y Mary han dado repetidas pruebas en el mismo sentido. El primero suele cantar y hacer que lo acompañe lo que él llama su doble, y la segunda multiplica su persona con bastante facilidad. En dias pasados observé el hecho más interesante de esa especie que se ha realizado en el curso de las sesiones. Llegué á una de ellas después de comen- zada y de haber comparecido Mary y cuadruplicado su persona, La insté para 328 LUZ Y UNIÓN repitiera la prueba de modo que pudiese cerciorarme bien de que cada for- que espiritual era independiente, descartando asi la posibilidad de un error de ma óptica, de acústica ó de cualquier otro género. Accedió de buen grado y, to- mándome de la mano, me condujo al centro de la habitación, donde permanecí el en pie con los brazos cruzados sobre el pecho. A ese tiempo se tocaba en pia- no la «Marcha de Boulanger». Oyóse á Mary cantarla, como acostumbra hacer- lo, alto y con animación, mientras que tres Marys—si se permite la frase—me asieron de los brazos y aproximando sus rostros al mío, tan cerca que casi me tocaban, decian en tono jovial expresiones como éstas: «¿Me oye V.? ¿me oye V.? Soy yo... Aquí estoy... aquí estoy...» La escena duraría medio minuto. Desde que comenzaron á hablarme aque- Has entidades, el ruido que hacían y también el del piano, no me permitieron percibir la otra voz que cantaba; pero mis compañeros me dijeron que no cesa- ron de oírla al propio tiempo que escuchaban las otras. El contacto de los tres pares de manos que se apoyaban en mis brazos fué perfectamente sentido y duró lo que el acto que he relatado. Por lo demás, en otra sesión posterior, «cuatro Marys» á un tiempo dejáronse tocar y examinar sin dificultad. La explicación obtenida de la misma Mary en cuanto á esas extrañas mani- festaciones, es que hay individuos en uno y otro plano de la vida que poseen la cualidad de pluralizarse por actos voluntarios, y aun involuntarios á veces res- pecto á los encarnados, en dos ó más entidades simultáneamente, quedando todas unidas por un lazo fluídico, lo que permite que se restablezca la indivi- dualidad normal en un momento dado. La operación se lleva á efecto por el fraccionamiento del periespíritu, cuya sutileza y especial estructura la hace posible, en ciertas circunstancias. El es bien interesante, por lo cual de desearse sería se estudiara en los caso Centros en que se practican experimentos de la misma naturaleza, á fin de ob- tener, por otros conductos, nuevas comprobaciones y de ver si es posible avan- zar algo más en esa dirección. Al siglo pasado débese muchísimo en lo que atañe al conocimiento científico del alma; mas quedan todavía no pocas cosas por averiguar y, acaso, importan- tes rectificaciones que hacer con ayuda de más intensa labor: que la misteriosa Psiquis consiente en levantar el velo que la cubre, sino como alta recom- no pensa al esfuerzo perseverante. Alberto Brenes. (De La Voz de la Verdad). Sas3t»ipeión á favop de D." Adela CDañoz Suma anterior. 71 60 pías. Salvador Seilés, de Alicante 5 » Suman. 76'60 pías. (Sigue abierta la suscripción). ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 329 Círculo "Franklin" Sesión, del 4 de Julio de 1908; de las 8 á las 10p. m., con asistencia de las personas que autorizan la presente acta, dos señoras, la medium Srta. Ofelia y tres niños. I Después de un prolongado intervalo de espera y estando la habitación obs apareció, á un extremo de ella, una lucecita que desde cura, luego se compren- dió provenía del cocuyo con que suelen alumbrarse nuestros aparecidos. Al re- la luz fué grados viéndose un resplandor que iluminaba el recinto deder de por á ratos, débilmente. Acercóse la luz á los espectadores y se reconoció á Mary agitándola con la mano; dió las buenas noches y principió sus experimentos. infe- Fué paulatinamente alumbrándose la cabeza, el rostro, el busto y la parte rior del cuerpo, de manera de blanco. que podía distinguirse muy bien. Vestia «¿Quieren ustedes ver cómo se forma la tela con que nos cubrimos?»—pre- guntó.—Con mucho gusto—fué la respuesta. Entonces dió á palpar una especie de trapo esponjoso y de cortas dimensiones. Comenzó á agitarlo y poco á poco formó una pieza larga y como de cincuenta centímetros de ancho, color gris. se «Ya están las enaguas; vean cómo me las pongo»—dijo. Y á medida que las ena- guas iban cubriéndola de la cintura para abajo, las otras blancas que tenia la puestas se arrollaban y desaparecían al tocar el suelo. A continuación, formó blusa; dió á tocar los botones y el género y se la puso instantáneamente, sin el movimiento de brazos que para cubrírselos con las mangas ejecutan las muje- res. Del propio modo, y sin dejar de alumbrarse con la mano que le quedaba libre, formó, y se puso, un traje de seda y luego otro de lana color negro. Este color fué pedido los circunstantes. Cada operación relativa á la hechura por y puesta de un vestido duró un minuto más ó menos. Expuso nuestra amiga que la voluntad era el único agente que operaba el fenómeno que estaba verifieán- dose, como todos los demás de su clase. cantar advirtió que deseaba que la Hizo que se tocara una pieza para y oyeran conversando al mismo tiempo que su «doble» cantaba junto al piano; y, en efecto, mientras que ella, visible en medio de la sala, hablaba, se percibía su voz junto al instrumento, cantando de manera bien clara. Instó después á uno de los presentes (al Sr. Brenes) para que le tocara la oa- bellera, agregando: «Este pelo se deshace con mucha facilidad; su existencia es sólo momentánea; pero el que yo di á usted la otra vez es permanente. ¿Lo conserva usted todavía?»—Si, Mary; nunca se separa de mi; pero dígame: ¿de dónde lo tomó usted?—«Una prima mía, que vive en Nueva York, lo conser- vaha en un relicario. De ahí lo tomé y lo traje».—¿Conoce su prima la desapari- ción?—«Si; pero piensa que se debe á una travesura de mi sobrino Miguel An- gel. Esa señora se encuentra ahora en Boston». 330 LUZ Y UNIÓN II Transcurrido un intervalo de veinte minutos, se reanudó la sesión. Presen- tóse Mary trayendo un ramillete de grandes jazmines que tomó de un jarrón, y lo entregó á una de las señoras presentes, diciendo; «Fíjense bien en el experi- manto que voy á ejecutar». Se retiró á distancia de unos dos metros, se inclinó hacia adelante, alumbró el suelo junto á sus pies, y continuó: «Ahora voy á atraer con el pensamiento las flores del ramo». A poco, una tras otra, fueron cayendo en el espacio iluminado en presencia de todos. Después pidió permiso para atraer de la misma manera una dalia de las existentes en el jardín del Sr. Brenes, que está como á un kilómetro de distan- cia, y, concedido que la fué, hizo inmediatamente que cayese en las manos de dicho señor una dalia á medio abrir, que se reconoció desde luego y se compro- bó al día siguiente, ser de la procedencia anunciada. Tanto la medium como las demás personas estaban distantes del sitio en que cayó la flor, de modo que no puede caber la menor duda respecto á la autenticidad del hecho. A efecto de renovar el aire de la sala, que se sentía caliente, se dirigió Mary á la puerta que da al patio, la desatrancó y se puso á abrirla y cerrarla con fuerza, teniéndola asida por la perilla, á vista de los presentes, pues la clari- dad que entraba era suficiente. Conseguido el objeto que se proponía, dijo; «Quiero que perciban bien la luz astral». Levantó el brazo derecho y á la altura de la cabeza situó la mano; entre los dedos índice y pulgar apareció una luce- cita, de donde fueron irradiando otras á manera de vibraciones luminosas, has- ta formar un disco de unos veinte centímetros de radío, aproximadamente. La luz era tan tenue, tan suave, que, lejos de ofender la vista de quien la miraba con fijeza, producía más bien una sensación de frescura y bienestar. De todas las luces conocidas no hay ninguna á la cual pueda compararse esa que los ex- traterrenos denominan astral. Para producirse se requiere un foco que sirva de base á la operación. En este centro se ha utilizado con buen éxito la luz del co- cuyo ó luciérnaga. III Desapareció Mary y llegó Miguel Ruiz. «Deseo que esta noche me vean»— fueron sus primeras palabras. Hizo que todos se pusieran en pie, de frente á la puerta de salida al patio; la abrió, tomó una niña de la mano, recomendó que nadie se moviera de su sitio, porque necesitaba estar tomando mucho fluido para no desmaterializarse; y, á vista de los presentes, y alumbrado por la luz de la luna que le daba de lleno, se dirigió al jardín atravesando un ancho patio, y se puso á coger unas rosas. Hecho esto, con paso mesurado regresó á la casa y en- tregó las flores á uno de los presentes, á quien dió un fuerte y entusiasta abra- ¡Era Ruiz un triunfo que alcanzaba al cabo de numerosos y difici- zo. ese para Ies trabajos! Estaba radiante de alegría é instó para que lo examinaran. Situóse en el quicio de la puerta; con la claridad de. la luna se percibían eí calzado, los pantalones, el saco, el pelo—que era largo y á manera de peluca, con esa seque- dad del pelo muerto—y el sombrero alto que portaba. No se notaban bien las facciones á causa de la sombra que proyectaba el ala del sombrero y por estar ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 331 contra la luz, dando frente á los espectadores. Pidió que le tocasen el bigote y se pudo notar al tacto un crecido bozo. Durante esta escena, por encontrarse Ja sala muy escasamente alumbrada y estar fija la atención de todos en el fenómeno, no fué posible saber el lugar, estado y posición de Ofelia. La sesión de esa noche fué improvisada y de ella sólo un corto número de personas tuvo conocimiento. Los amigos de lo Invisible resolvieron que la hubie- ra en celebración del 4 de Julio, dia en que festejan los angloamericanos el ani- versarlo de su independencia, á la que tanto contribuyó con sus luces, esfuerzo y patriotismo el sabio y benemérito Benjamin Franklin, cuyo nombre lleva nuestro Circulo. Terminó. Alberto Brenes.—B. Corrales.—J. M. Alfaro Cooper, Director General de Esta- dística. San José de Costa Rica, 27 de Septiembre de 1908.—Es conforme.—El Secre- tario. Solón Corrales. (De La Voz de la Verdad). Estudiemos Siempre que tratamos de aplicar los principios de la ciencia única y univer- sal á la interpretación racional de los fenómenos naturales observados en la Tierra, nos encontramos con graves dificultades para expresar nuestro pensa- miento y es también muy difícil el que se comprenda rectamente el criterio cien- tífico que racionalmente nos conduce al principio de la unidad absoluta, única base que la ciencia puede aceptar para establecer la verdad absoluta como fuente de todo conocimiento. Nosotros tratamos de inculcar la idea de absolutividad y de infinitud como base de una filosofía racional exenta de dualismos, que siempre llevan consigo la negación de principios, porque el sentido común reconoce que la verdad es abso- luta en todas las infinitas manifestaciones del pensamiento. Por eso hemos repetido muchas veces, que la fuerza es la expresión de la voluntad absoluta, lo que implica: que toda manifestación de la actividad esen- cial del Sér Absoluto, representa la energía de su absoluta voluntad en cual- quiera de los grados de desarrollo potencial en que nosotros podemos apreciarla. A partir de esta energía que se manifiesta de infinitos modos y en todos los grados de intensidad posible en cada instante, nos encontramos con las formas particulares y combinadas de estas energías, actuando unas sobre otras, y deci- mos: que estas influenciaciones son fuerza que imprime movimiento; por estas razones añadimos, que las fuerzas son formas del movimiento. Cuando estas fuerzas se manifiestan en partículas etéreas incoercibles, las 332 LUZ Y UNIÓN consideramos como fuerzas animadoras de los átomos, de los cuerpos, de los organismos y de los mundos; pero como vemos, la fuerza y la materia etérea no tienen para nosotros, en sana lógica y racional filosofía, existencia real, sino resultados distintos, formas variadas de la actividad esencial animadora del Sér Absoluto. Continuando el desarrollo de los elementos etéreos, reconocemos, como for- ma primaria de la materia, los átomos y las partículas combinadas formando ele- mentos racionalmente supuestos, pero inapreciables á los sentidos. En las leyes que observamos para las conglomeraciones atómicas en sus acciones y reacciones, tenemos que admitir composiciones distintas en los cuer- pos inorgánicos, apareciendo otras formas de movimiento como la electricidad, el calórico y el lumínico, esto en cuanto á las manifestaciones de la naturaleza física, que no se producen de esta manera correlativa, sino al contrario, por seg- mentación de los elementos orgánicos en sus renovaciones vitales; exponemos esta teoría para mayor claridad y comprensión de lo que entendemos por fuerza, movimiento y materia en sus distintos estados de fluidez y para distinguir los fluidos materiales. Continuando sin ocuparnos de sus génesis, en los cuerpos organizados nos encontramos con otras formas del movimiento, y esta fuerza la consideramos como fluido orgánico, teniendo en cuenta que un organismo es un conjunto de elementos organizados en plasmas y protoplasmas, células, tejidos y órganos funcionales. Para que todo esto resulte armónico y en unidad de partes con un todo ani- mado y en constante desarrollo, es preciso admitir otra forma de movimiento, reconociendo una fuerza vital resultado de todas las fuerzas anteriormente cita- das, coexistiendo y manifestándose en un organismo completo, según su natura- leza y conforme á la especie que corresponde. Reconociendo que los organismos constituyen á su vez familias, especies y se- géneros, que por sus'caracteres constituyen colectividades orgánicas de los res entre sí, estableciendo la vida solidaria en un mundo ó en una región cual- quiera, nos encontramos con otra forma de movimiento, resultado de las activi- dades físicas, fisiológicas vitales, y esta fuerza superior que emana de todos y los cuerpos y de todos los seres, que los envuelve y da formas posibles en la materia universal y los compenetra á todos, la consideramos como fuerza magna expresión totalizada de los seres de un mundo. Claro está estas formas de movimiento, estas fuerzas y estos que fluidos, cambian de intensidad en una misma región y han de ser variables en sus esta- dos conforme, á las demás fuerzas predominantes en cada tiempo y lugar; pero su naturaleza será siempre la misma, porque siempre y en todas partes nos en- contramos con la única causa del movimiento y de la fuerza, «la actividad esen- cial absoluta», representada en todos los estados y formas posibles, en la mate- ria universal las de los infinitos seres que producen los cambios y las for- y en mas del movimiento y de las fuerzas que en la Tierra observamos en distintos de estados y condiciones, así como en los mundos, con desarrollo vital, ó sea fuerza magnética; que en la totalización constante de la actividad esencial de la vida colectiva en cada mundo y en sus esferas animales se desarrolla. ÓRGANO OFICIAL UE LA LIGA E. ESPAÑOLA 333 Con esto creemos dejar bien sentado la teoría de las fuerzas, que son, como admite la ciencia terrena, «formas de movimiento», pero dejando sentado: que el movimiento obedece á la virtualidad esencial activa, manifestada en forma ema- nada de la energía universal subordinada á la voluntad absoluta que impulsa la actividad esencial infinita. No debe bastarnos comprender así el magnetismo en sus caracteres gene- rales, es preciso además estudiar la manera cómo se halla repartido y á disposi- ción de los elementos constitutivos de los cuerpos, así como por su repartí- miento y la cantidad de que cada organismo está dotado, puedan distinguirse las formas y los caracteres distintivos de cada especie y de cada sér particular. Esta fuerza magnética es la que individualiza á los seres como á los mundos, conservando las formas típicas y admitiendo las variantes que el desarrollo esen- cial imprime en las formas y estados de la vida particular y sedal. Hemos dicho también, que, en la Tierra, el magnetismo es una fuerza que obra como vehículo transmisor del pensamiento y hay necesidad de comprobarlo con un sencillo razonamiento. Si, como hemos visto, el magnetismo' es el resultado de las fuerzas físicas, orgánicas y vitales y además representa todas estas fuerzas permanentes y ani- madas, se comprenderá: que todo impulso de la voluntad en los seres racionales asociados, ha de poner en movimiento la materia física, orgánica y fluídica, para llegar á la percepción del sensorio total, representado por la vitalidad corres- pendiente á la actividad esencial que en cada caso representa la potencialidad volitiva de los seres. Sobre este punto habremos de insistir, discurriendo principalmente sobre las formas transmisoras del pensamiento y "el papel que desempeñan los órganos sensoriales en los centros perceptores del sensorio psíquico, único y total que en último término se refleja en la conciencia. Después nos falta mucho que decir y algo que revelar sobre otras fuerzas sospechadas pero desconocidas todavía en la Tierra, fuerzas,superiores á las magnéticas, pero que necesitan de su con- curso para imprimir movimiento á los organismos, así como la fuerza magnética obra siempre influyéndo sobre las fuerzas vitales, orgéVnicas y eléctricas. Así como hemos dicho que el magnetismo es el resultado de las actividades fisiológicas y vitales y en último término es la suma de todas las actividades de otras fuerzas son es una ó de varias colectividades, así también tendremos que resultado de la actividad que trasciende como todas las actividades, en solidaria correspondencia. También nos ocuparemos de estas fuerzas al establecer la solidaridad del pensamiento, tendremos que deducirlas racionalmente de nuestros pero propiol actos de conciencia y de la manera de transmitirnos recíprocamente el resultado de nuestra actividad pensante, como elemento intelectivo universal y de nuestros actos afectivos que contribuyen al mejoramiento moral de nuestros semejantes. De todos los pensadores de la Tierra, los teósofos y algunos colectivistas modernos, se han ocupado de las formas del pensamiento que constantemente llegan á nosotros de otros pensadores ignorados y desconocidos vulgarmente. También se dice que las ideas flotan en la atmósfera y parece que en ciertos momentos se revelan á varios individuos, y á veces en aquellos más angustiados 334 LUZ Y UNIÓN y tristes por ideas ó acontecimientos desastrosos, ó inspirados por esperanzas halagüeñas, descendiendo á la observación vulgar de los «presentimientos y corazonadas», que actualmente se comprueban por los hechos de transmisión del pensamiento á largas distancias y frecuentemente se reflejan á los sentidos, acontecimientos inesperados con minuciosos detalles, sintiendo los hechos leja- nos como de presente, en nuestra limitada esfera de actividad sensorial. Todos estos fenómenos que siempre se han observado, pueden provocarse por influjo de la voluntad, moviendo la fuerza magnética que hemos dicho, ac- tuando sobre las otras fuerzas que, como superior, puede someter á las inferió- res, poniendo en contacto directo é inmediato á los seres antípodas de la Tierra y zenitales en las regiones del espacio. Con este elemento bien estudiado y comprendido, no caben distancias, puesto que todos los secre'tos de la conciencia se exteriorizan y se ponen de manifiesto para ser recogidos y sentidos: Esta fuerza que en la Tierra obra pasivamente por la falta de unión y volun- tad necesaria para formar seres evolutivos, se comprenderá que, puesta al ser- vicio de la voluntad, puede adquirirse cuánta sea necesaria para transformar la vida social y producir inmensas riquezas en la producción de elementos necesa- rios á la vida material orgánica. Todo puede reformarse, reanimarse y reproducirse, porque del mismo modo que la soberana voluntad promueve la vida del Universo, los seres animados de la substancia del Sér Absoluto participan de la naturaleza infinita y pueden, por el impulso de su voluntad, mover, regir y regular estas pequeñas fuerzas subor- dinadas á nuestra voluntad. Ya iremos poco á poco aclarando los fenómenos espiritistas; mientras tanto, continuaremos dilucidando esta cuestión interesante, con el fin de que los neó- fitos impacientes no llamen á sus protectores del Espacio, .porque conociendo el camino que ilumina la virtud y la ciencia, pueden y deben llegar á los seres que- ridos que aparentemente se alejaron, para saber que la esplendente luz magné- tica que nos envuelve, nos compenetra y nos contiene; todos formamos un solo núcleo en la unidad colectiva en que todos están en uno, y cada uno en todas partes. «Basta quererlo para conseguirlo». Benito Rodríguez. (Continuará). No hay efecto sin causa I Dice un antiguo adagio, que no se cae una hoja de un árbol sin la voluntad de Dios, y si para la caida de una hoja seca tan poderoso ena- peño se necesita, para la caida de un hombre en un abismo, orden muy terminante del Altisimo se necesitará. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 335 De continuo trae la prensa relatos espeluznantes y terroríficos de accidentes desgraciados, y entre ellos me llamó vivamente la atención lo que le ocurrió á un viajero en las islas Canarias. El suelto dice asi: SALVADO POR MILAGRO.—El gobernador de Canarias ha dirigido el si- guíente telegrama al ministro de la Gobernación; Santa Cruz de Tenerife.—Un subdito norteamericano que desde Guiñar se dirigía á la Orotova, se internó en los montes del interior de esta isla, donde se extravió á causa de la niebla y cayó en un barranco profundo casi inaccesible, llamado Pico de la Escalera, donde, herido y alimentándose sólo de yerbas, ha permanecido desde el 28 de Septiembre hasta ayer, en que, por virtud de aviso del cónsul y cumpliendo órdenes de este Gobierno, el sargento comandante del puesto de la guardia civil de la Orotava y otro guardia, auxiliados por vecinos, salvaron al viajero de una muerte segura. Parece hasta imposible que se salvara de la muerte el infeliz viajero que tan crueles angustias debió sufrir en el fondo del barranco, y como todo efecto tiene su causa, en seguida murmuré con tristeza: ¿En qué época se habrá escrito el prólogo de esta triste historia? y acto se- guido me contestó un espíritu lo siguiente: II ,«En época muy lejana, en los albores del cristianismo, cuando las enseñanzas de Cristo habían despertado el sentimiento en algunos hom- bres de buena voluntad, cuando los primitivos cristianos se reunían en las entrañas de la tierra para bendecir el nuevo Evangelio, en aquella época dos paganos, dos idólatras de los dioses, unidos por verdadera amistad, César y Antino, discutían sobre las máximas cristianas. César defendía á los dioses con gran entusiasmo y Antino comenzó á fiaquear en sus creencias porque un cristiano le iba instruyendo en la religión del Crucificado, hasta que llegó un dia que-Antino le dijo á César: Amigo mío, ¡soy cristiano! la luz ha penetrado en mi pensamiento y en mi co- razón y estoy dispuesto á morir defendiendo mi nueva religión, y no es- taré contento hasta que tú reces conmigo el mismo credo. César le amo- nestó severamente, hizo cuanto pudo por disuadirle y convencerle que sólo los dioses podían ser los salvadores de la humanidad, pero Antino á su vez empleó toda su elocuencia para convencer á César que estaba en el error. Este, en vez de atender á las súplicas razonadas de Antino, lo que hizo fué odiarle con todo su corazón, y á tanto llegó su encono, que un día paseando con Antino lejos de la ciudad, para quitar de en medio á un enemigo de sus dioses, condujo á Antino cerca de un despeñadero y lo lanzó al abismo diciendo muy satisfecho: Ya hay uno menos que nie- 336 LUZ Y UNIÓN gue el poder de los dioses, y se alejó de aquel lugar contento de si mis- el se arrepintió de mo; pero como César no era malo en fondo, pronto si una fuerza le impul- su acción y á los pocos dias como poderosisima éste no sai'a, volvió al lugar donde arrojó á Antino y se encontró que detenido en había caído al fondo del abismo, sino que se había quedado César unos peñascos y estaba como dormido, ó mejor dicho, desmayado. pidió á sus dioses ayuda, y tras de muchos esfuerzos pudo conseguir que salir Antino se despertara y á su vez empleara sus escasas fuerzas para de aquel lecho mortuorio. »Antino fué tan todo lo generoso que aunque comprendió ocurrido, no lanzó el menor reproche sobre César, y murió pocos dias después vez me diciéndole únicamente: ¡Te perdono! para que Cristo á su perdone. había sido su »César lloró la muerte de su amigo convencido que él le matador y cuando más tarde encontró en el espacio á su victima, juró le que él no estaría tranquilo hasta que no sufriera el mismo dolor que había hecho sufrir á su fiel amigo. Antino siempre noble y generoso le su reiteró su-perdón incondicional y su cariño, y sus consejos y protec- le ción, pero César dió palabra á si mismo de pasar el martirio se que con fuerzas su- hizo sufrir á Antino, y en esta existencia, encontrándose tú finientes, ha pagado una deuda contraída hace muchos siglos; pregun- tabas que en qué época se habría escrito el prólogo de tan triste historia, ya lo sabes, las religiones han sido causa de muchos crímenes, pobres ídolos los que asientan sus altares sobre cadáveres ó moribundos.— Adiós». Ill de esta Ciertamente que en época muy lejana se escribió el prólogo triste historia, cuando el hombre tiene necesidad de sufrir tormentos tan horribles ¡cuánta sombra hay en su pasado! Esta verdad es muy dolorosa, pero es muy hermosa la verdad, por- la verdad es la maestra de lá vida, es la mejor consejera, es la que que más nos acerca á Dios. Reconociendo nuestra pequeñez, es como nos arrepentimos de nues- tras culpas, y procuramos por medio del sacrificio purificar nuestra conciencia engrandeciéndonos por medio de actos heroicos y de abnega- ción sin límites. ¡Bendito sea el advenimiento deT Espiritismo! por él nos vemos tal cual somos y por su práctica y su estudio llegaremos á ser buenos y sabios. Amalia Domingo Solee. ÓRGAÑO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 337 Ideogenesis V RECAPITULANDO Ya hemos visto por los artículos anteriores que la voluntad, lejos de ser una facultad libre del espíritu, como la tenían considerada los más antiguos filósofos, es una facultad de la energía que reconocemos como principio espiritual, facultad, como cualidad, circunstancial en el espí- ritu mismo y por tanto, condicionada por el estado que éste alcanza en su evolución. No somos libres, ha dicho un astrónomo y filósofo eminente, sino que vamos regidos por diferentes causas, una de las cuales es la voluntad. Elevada á la categoría de causa determinante, ¿cómo puede serlo sin la libertad? Ya lo hemos dicho; la voluntad es una fuerza que responde á la exci- tación de las demás fuerzas según la relación de poder que con ellas es- tablece. Siempre dominada por el Todo de su especie, se determina y obra según las modificaciones que le imprimen los agentes singulares que le son superiores. Estos agentes, ora dependen de la naturaleza, ora de la vida jurídica, ora de los preceptos de la moral. En principio la voluntad es causa por cuanto produce los hechos. Cuando va guiada por las meras sensaciones naturales que promue- ven en ella reacciones expontáneas y yerra, de la naturaleza de las co- sas recibe la sensación que le hace notar los dictados de la experiencia, necesaria al esta- con una lógica imperativa y brutal muy correlativa y do del educando. La naturaleza es una madre cariñosa pero severa é indexible que no permite errores ni ingratitudes á sus hijos. Castiga con igual dureza á todos los seres, que se le rebelan, pero este castigo se proporciona lógica- mente al transformarse en pena ante la capacidad sensorial del delin- cuente. Por eso no afecta por igual al animal que al hombre. Ella transmite al espíritu y luego al hombre la vida y con ella el de- recho á la vida, causa donde toma su origen el derecho humano. Con la inteligencia recibe el sér no ya sólo el derecho á la vida sino la obligación correlativa de respetarla y ayudarla en sí mismo y en los demás seres según los medios que le ofrece la misma naturaleza para conducirla rectamente á un fin óptimo. 338 LUZ Y UNIÓN Esto es lo que se conoce con el nombre de derecho. En este sentido es el derecho la facultad que tiene el sér consciente, de obrar, sin perjuicio de la libertad de los demás: esto es, garantizando la autonomia y la vida integral de los demás seres y la suya propia. De modo que cuando un sér obra contra el derecho humano, perturba el orden de la vida, porque se opone á la realización de sus fines. Enton- ees, juzgándose el hecho atentatorio del derecho, cualquiera que sea su causa en el estado normal del espíritu, debe recibir una sanción del dere- cho, no sólo que repare el daño causado al sér ofendido sino que resta- blezca el orden perturbado para que pueda ver garantía de acierto en el obrar por todos reconocida y respetada como norma de conducta per- sonal, educando al individuo y armonizando la acción colectiva bajo su aspecto funcional orgánico. " Y como en el hecho mismo haya una transgresión de la ley que re- gula la libertad de obrar, al repararse aquélla, reduce á sus justos limi- tes la libertad del transgresor reprimiendo su voluntad y modificando en ésta el impulso expontáneo ó que el sér recibe de su naturaleza ine- ducada. Pero no son el mundo natural y el mundo jurídico los dos únicos agentes que compelen la voluntad en el sentido del bien modificando sus tendencias innatas. Con el mismo fundamento del derecho hay un campo más extenso que aquel que puede recorrer el derecho en la dirección subjetiva del espíritu. Donde está el limite de la vida jurídica sigue otra vida que el dere- cho no puede vigilar porque pertenece á un orden interno en el cual se genera la determinación de la voluntad, campo que es preciso explorar para entregarlo reconocido á la acción del Estado, para que éste esta- blezca sin error posible, un ordenamiento orgánico de completa justicia y eficacia al régimen educativo que á la voluntad conviene. La moral, tiende á los mismos fines que el derecho rigiendo la vida práctica del espíritu bajo la sanción de un sentido intimo que se llama conciencia que, según hemos dicho en artículos anteriores, reside en aquel punto intimo matemático en el cual pusimos la localización de las impresiones del Absoluto. Las transgresiones de la ley moral no quedan desatendidas. Por esta ley nos llama Dios á su amor tocando el más secreto resorte del sér. Pero cuando éste está todavía incapacitado para sentirlas, las desoye. Entonces huye del bien y lejos del bien experimenta el mal que obra como excitación benéfica sobre la voluntad, modificándola en este sen- tido con el tiempo. Véase como la voluntad siendo fuerza promotora de los hechos se ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 339 modifica por las repercusiones efectivas de los mismos, adquiriendo ex- periencias que la transforman y concluyen por regenerarla dirigiendo sus propósitos por el sendero del bien, del cumplimiento de la ley del amor. Se ve, pues, que la ley natural, jurídica y moral obrando sobre el espíritu, en lo que es en él fatal por naturaleza, sujetan con imperio su voluntad, dirigiendo su progreso inevitablemente ya estimulando su vo- luntad, ya corrigiendo y modificando sus determinaciones de tal manera, que jamás lo dejan libre sino en cuanto basta al respeto de la integridad del individuo. No confundimos aquí, como puede suponerse, la facultad de determi- narse, fenómeno interno del sér subjetivo que decide, con la facultad de obrar que da principio donde termina aquélla; nos referimos al acto de- terminativo interno. Sabemos que la sanción se tiene á primera vista como un acto con- secuente de un hecho ó ejecución de las determinaciones. Así se nos pre- senta ante la ley natural y ante la vida jurídica, pero si bien se medita,, la ley moral, superior á todas las leyes, forma como la esencia, el subs- tratum de los mismos y es la que verdaderamente corrige las violado- nes de la naturaleza y del derecho, porque en ellas se considera vulne- rada. No se pierda de vista que aunque interna, la determinación es ya un hecho efectivo. De manera que basta la determinación de una violación cualquiera, aunque sea del orden puramente físico, para que la ley moral juzgue y se resienta, ordenando al menos una clasificación del sujeto, el cual, queda sometido por ello, al contacto del mundo que le corresponda en el cual ha de encontrar, con toda frecuencia, causas modificativas de sus determinaciones. Pero si la determinación se exterioriza realizán- dose, la sanción es inmediata y correspondiente al acto externo. Así, las determinaciones del mal producen mal por si solas ante el mundo moral; porque la determinación es el acto del sujeto ético. Si pudiéramos examinar una por una todas las causas modificativas de la voluntad, la veríamos envuelta en una red inextricable que embar- ga y anula siempre su libertad. Aparte de las leyes generales que la impresionan de una manera adversa cuando yerra ó delinque, existen causas accidentales que moti- van sus decisiones. De unas y otras ya hemos hablado. Aquéllas, son siempre superiores y docentes, y éstas, unas veces son superiores á la potencia volitiva y la esclavizan y otras veces son inferiores al estado potencial del espíritu y éste los domina y triunfa en el sentido de la deliberación. 340 LUZ Y UNIÓN La libertad, así, es la resultante establecida entre una potencia y una resistencia. Dos fuerzas opuestas que se compelen. La mayor domina y se hace libre. Dos espíritus idénticos, dos seres iguales de igual posibilidad coloca- dos ante las mismas causas generales y circunstanciales obrarían de una manera idéntica: basta que sean semejantes para que obren de una manera análoga. Iguales causas, iguales efectos. Sólo cuando la voluntad como causa es superior á la causa opuesta, delibera. Entonces, sí se decide á obrar mal ó á omitir el acto el espíritu bueno que está en su posibilidad, el espíritu es responsable. Pero en todos los casos, la sanción ha de ser educativa. No lo desconocemos: estamos en presencia de una sensación que nos provoca al mal. excitación El espíritu reacciona con una potencia superior á la y de la se antes de decidir, se suspende dominando los efectos excitación, se le serena y delibera; aprecia en todo su valor el acto maléfico que ofrece se le decide. y el valor de la ley moral que opone: El mal es la ausencia del amor. Un hombre se halla situado sobre un puente. El rio en formidable aluvión arrastra una cuna donde va un niño dormido. El primer impulso del hombre, su sensación espontánea es la de arrojarse al agua para salvar al inocente: éste es su sentir, pero se de- tieíie, reflexiona un instante, delibera: no sabe nadar y juzgando su sa- conmo- crificio tan cierto como inútil determina no arrojarse y se aleja vido y tembloroso ante la excitación que le produce la desgracia: no ha pecado; es bueno, en su alma está el amor y no se le condena porque ama. ¿No es libre? ¿por qué no se arrojó? Ah, porque su voluntad se decidió dominada, subordinada, sugestio- nada por la Razón. Esta fué su motivo, su agente predominante. Si se hubiera arrojado al rio su voluntad se habría determinado bajo la presión de su sentir. Se dirá que el pensar y el sentir son dos funciones nos subjetivas y por tanto la causa determinante está en el sujeto: sí, pero son dos que causas específicas tan distintas de la voluntad como otras cualesquiera mundo externo la dominan y la rigen haciéndola nula en su li- del que bertad; que es nuestra tesis. entre su Puede decirse, que en el caso propuesto, la voluntad eligió sentir y su pensar. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 341 Sí, pero véase cómo se determinó por los motivos de su prudencia,, que eran los dominantes según su estado. No lo hizo libremente. Pero al lado de la corriente, en el álveo del mismo rio hay otro hom- bre, hábil nadador; ve la cuna venir casi á su alcance; á poco trabajo habría salvado al nifio. Su primer impulso es éste; pero se suspende, de- libera un momento y encogiéndose de hombros, vuelve la espalda aban- donando la cuna á la corriente: ha pecado, es malo, el bien estaba en su posibilidad de obrar, lo ha conocido y no lo ha determinado; se le el acto mismo sino porque en su alma no está el amor. castiga no por El acto, no es más que un efecto ocasional de su estado. Se le da lo que corresponde á su estado en justicia, mirando el acto sólo como determinativo de ésta y el mal que sufre como educativo ex- perimental de su espíritu. Sintiendo los dolores del mal, no los querrá más si ni para otros algún día y... ya está salvo. ya para Pero, ¿obró libremente? No, porque su espíritu no está ductilizado todavía para las impresio- del amor carece de este orden de sensaciones altruistas. nes y Su conciencia está ineducada. La responsabilidad no puede ser de cada acto ocasionalmente sino como medio de prueba. Es consecuencia de un estado ingénito aunque transitorio, que se ha de dominar bajo la influencia de la evolución que produce la experiencia en el tiempo y en el contacto del mundo externo. Por eso el mal de que se impone no ha de llevar la consideración castigo, de expiación, sino de estimulo ó medio para la educación. El mal que se experimenta no puede llevar el carácter de expiación el estado de imperfección del espíritu no es en él voluntario. porque ¡Seria bueno que se nos hiciera imperfectos y luego se nos castigara por nuestras imperfecciones! En verdad que ha sido necesario suponer la libertad omnímoda en voluntad del hombre, justificar el falso concepto del mal como la para castigo. El estado de libertad llama como consecuencia la expiación, el cas- tigo. El estado de posibilidad reconoce el sufrimiento como consecuencia de la imperfección y medio de mejoramiento para el espíritu. El concepto de la expiación lo hemos tomado de la reacción que nos produce la sensación del mal, juzgada á priori. La ausencia del bien nos da la sensación del mal que nosotros carac- terizamos como expresión de la Justicia suprema cuando sólo procede de la ausencia del amor en nuestro espíritu, de nuestra ineptitud para sentir el amor, porque nuestro estado es ese y en un sólo día no podemos elevarnos sobre nosotros mismos. 342 LUZ Y UNIÓN Ya sabemos que el arbltrismo nos dirá que cada uno de estos hom- bres se ha decidido y ha obrado por un acto libre de su voluntad ai com- parecer ante la deliberación. Pero éste es un juicio completamente precario, tan precario, ai me- nos, como aquel juicio que declara que Cristo es el Dios mismo. De dos seres racionales que comparecen ante un bien, de ambos igualmente conocido, uno de ellos recibe sus emociones y el otro no. En el uno promueve el amor, en el otro la indiferencia que, si no es odio porque el hecho no ha tenido ocasión de excitarlo, supone la falta de sensibilidad afectiva. ¿Por qué en uno de los hombres se ha promovido la conmiseración y en el otro la indiferencia? Porque uno es bueno y el otro es malo. Cuando habla así el arbitrismo, concierta, sin notarlo, con nosotros: porque el. verbo ser afirma y reconoce un estado substantivo de las cosas. ¿Pero es que Dios creó al uno bueno y al otro malo? No, pero el uno quiere ser bueno y el otro no quiere serlo. (¿Por qué no estamos todos á la altura de Jesús ó al menos de Scevola? ¿Por qué no queremos?) Este quiere, es un comodín muy oportuno para salir del paso. Lo han necesitado, sin duda las Escuelas que no admiten la preexistencia del espíritu para explicar ante la Justicia las diferencias que nosotros' reco- nocemos como estados progresivos de los seres. Supuesto el conocimiento racional del bien, todos querrían ser bue- nos hasta por egoísmo; por gozar de los deleites, pero no todos saben serlo ni pueden serlo aunque quieran, es decir, aunque para conseguirlo hagan propósitos firmes, porque su excitabilidad natural es por de pron- to indómita y cede y se refieja espontáneamente ante las excitaciones presentes, único mundo que por completo las impresiona. EL fin de la actividad es la libertad. Però ¡cuántos propósitos firmes se malversan! ¿Por nuestra debilidad? Si, -por nuestra debilidad en la lucha de nuestra liberación; pero por nuestra debilidad natural, ingénita, por el momento infranqueable porque está por cima del esfuerzo de nuestra voluntad; que no provoca la responsabilidad por falta de capacidad en el sugeto agente. En una palabra: por falta de libertad de albedrío. No es nuestra todavía: existe, si, y la obtendremos con nuestro es- fuerzo y nuestro propósito constante... con nuestra evolución progresi- va... con las cosas cumplidas.!, cuando transcurran los siglos de nues- tra existencia... cuando suene la hora prevista y dispuesta para nosotros en el eterno reloj de los tiempos... órgano oficial de la liga e. española 343 íü ^ * Corolario filosófico: No somos fatalistas, pero creemos que vamos compelióos necesaria- mente por el camino del mejoramiento. La libertad está en razón fiirecta de la superioridad del espíritu y por tanto mucho más allá del estado humano. Esta libertad no responderá nunca al verdadero concepto del libre ulbedrio ó libertad absoluta. El espíritu, vivirá, pero no reinará jamás en el absoluto. Corolario jurídico: Abolición de la pena de muerte como contraria que es á la ley divina. Negación del derecho de castigar. Sustitución de la pena por la corrección indefinida educativa. Transformación de los penales en sanatorios por medio de la cultura y la educación moral. Corolario económico: Sistema comunista en el colectivismo autonómico. El trabajo como único medio de vida. Igualdad de salarios. Corolario politico: El Estado como administrador de la propiedad colectiva. El servicio industrial obligatorio. Corolario ético: El bien como fin único de la ciencia y de la moral. Manuel Pareja Medina. La fuerza mental Yo he visto detenerse hemorragias, sudar copiosamente, producir ataques epilépticos y neuralgias intensas, cicatrizarse úlceras calmarse dolores y curarse varias enferme- ■ dades haciendo intervenir la voluntad, unas veces por iniciativa del enfermo, y otras por mediación de un operador. (De La voluntad como una fuerza medicatriz, del ilustre psico- fisiólogo D. Víctor Melcior, pág. 86). Para algunos la fe es un cociente ilusorio producto de cantidades imagina- rias suscritas en una mente enferma. Para mí, la fe es una fuerza; es el concurso de todos los dinamismos del sér vivo puestos al servicio de una mente exaltada por la pasión ó el convencimiento. Es la que realiza el milagro terapéutico en el 344 LUZ Y UNION surge et atribula salido de labios de Cristo; la misma que ha producido inopina- das curas en él santuario de los taumaturgos dioses Asclepion y Serapis, de la' Grecia antigua y el Egipto de los Faraones; la que ha dado justísima celebridad á San Simón el Mago, Apolonio de Tiana, príncipe de Hohenlohe, Virgen de Lourdes, y á cuantos hombres han sabido inspirarla, desde el eminente Charcot oficiando en su templo de la Salpetriera, hasta el ignorante y zafio curandero que la voz pública cubrió con nimbo de fama (Véase La voluntad como una fuerza medicatriz, de D. Víctor Melcior, pág. 86). Si una mente determinada á la consecución de un fin (desprenderse de un vicio, adquirir una cualidad, curar una enfermedad, aliviar una dolencia, etc ..) tiene un poder de concentración c y permanece en éxtasis diario durante un cierto tiempo i, la cantidad de cualidad que adquiere cada día es directamente proporcional à c y á t é inversamente proporcional á la suma /?de toda suerte de resistencias que se opongan á la consecución de dicho fin. Esto, que es lógico y racional, se justifica fácilmente observando que la in- tensidad mental I que en la unidad tiempo puede una mente determinada enviar sobre un objeto cualquiera, depende en primer lugar de la potencia mental, y en segundo de la serie de resistencias que ofrezcan el medio ó medios conductores de dicha intensidad. Así, por ejemplo, una mente bien educada en la emisión de su efluvio mental producirá en menos tiempo más efecto sobre un sujeto sen- sible, que otra mente menos educada y en más tiempo sobre otro sujeto menos sensible que el primero. De donde resulta que los efectos que la mente puede producir sobre objetos sensibles son función de la fuerza mental, de la resistencia de los medios y del tiempo. Para fijar de una vez las ideas, estableceremos las siguientes definiciones: Se llama Potencia, fuerza ó energía mental ta cantidad de efluvio mental de que dispone un sér y que caracteriza su estado, fuerza y energía psíquicos. Dicha cantidad de efluvio mental ó fuerza potencial puede convertirse y se con- vierte en actual mediante el esfuerzo del sujeto que á su vez está determinado por dicho estado y poder mental. En lo sucesivo lo representaremos por la letra P, inicial de potencia. Se llama intensidad de un efluvio mental la cantidad de este efluvio que es emitido por una mente en una sola y tínica dirección durante la unidad de tiempo sobre un objeto de sensibilidad normal. En lo sucesivo lo representa- remos por I, siendo función de P del tiempo unidad t y de la resistencia R, del medio conductor del efluvio y del objeto sensible. P será por consiguiente: P P I R; de donde I = en cuya fórmula R representa la suma de toda clase de resistencias. Por último recibe el nombre de campo ó espacio mental la porción del medio natural por donde obran y se transmiten las fuerzas mentales de varios sujetos reunidos en un mismo fin mental. Suponiendo que la fuerza mental se dirige en línea recta y según los radios de una esfera cuyo centro es la mente del sujeto ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 345 (hipótesis tanto más admirable cuanto que según vemos en el mundo físico las fuerzas no inteligentes se transmiten y propagan según ondas esféricas) un campo mental formado por los tres sujetos A B ^ C de la fig. l.^ cuyas distancias y situaciones relativas pueden ser cualesquiera, y dirigiendo sus efluvios mentales sobre un cuarto objeto N, estará representado por un ángulo A N C. A Fig. 1.''' C Esto sentado, supongamos que deseamos averiguar el efecto producido por dos mentalidades distintas A y B sobre un objeto sensible N en la hipótesis de que A y B dirijan sus esfuerzos á conseguir el mismo fin. Representemos por pj y p.^ las fuerzas mentales de A y B; por ij é i^ las in- tensidades respectivas; por t^ y t, los tiempos de duración y por r la suma de toda suerte de resistencias. Se tendrá: ■l U "•> t- n s Pi= = —r"' P.' -"7"-0) fórmulas que nos dicen, que los efectos, que si obraran solas cada una de las mentes supuestas, producirían sobre estarían en razón directa de intensidad y tiempo é inversa de la resistencia. Representemos por p, (p¿) el resultado de la reunión ó integración de ambas mentes; es evidente que su fórmula vendrá dada por la^uma de ambas fórmulas aisladas; pero si tenemos en cuenta que r representa la suma de todas las resis- tencias para p¡ y para p.2 incluso la que pudiera ofrecer una de ellas cuando la otra obrara sola, y que por ello mismo la resistencia de la integración p^ (p^) de C tí> ambas tiene que ser menor que r y ha de venir dada por r ó bien por r —'aA. se tendrá: • r _ _ÍiA_ E! L AA. . ~ „Pl CP'V^ -4 ♦ "I • j. ' 'i. I» i. 2 i. ■ - — ^ '' *" '2 t-2 r r^ . t^ r — r — r r análogamente la integración p^ (pj que debe ser igual á la pj (pj) tendrá por fórmula: í t it " -T +A"- ttitítí:® Esto sentado observaremos: 346 LUZ Y UNIÓN 1.° Que cualquiera de las fórmulas (2) es mayor que cualquiera de las (1); luego el poder mental de dos mentes reunidas ha de producir sobre un mismo objeto mayor efecto que una sola de ellas, según era lógico prever. 2." Teniendo en cuenta que p^ + p^ puede ponerse bajo la forma: Aii ^ p, + p., = + ^ (3) r r r y que la expresión (5) es menor que cualquiera de las expresiones (2) podremos afirmar: que el efecto producido por la integración de dos mentes sobre un ob- jeto sensible es mayor que el que produciría su suma. 5.° Observando que el producto de las expresiones (1) afecta la forma: = 'i-: = AA. . Á A p. p, (4) se ve que dicha expresión (4) es menor que cualquiera de las expresiones (2); luego el resultado que la integración de dos mentes sobre un tercer objeto pro- duce es mayor que el que produciría su producto. Sería curioso examinar las diversas fórmulas que pudieran afectar las inte- graciones de grados superiores al segundo; mas basta por hoy de curiosidad matemático-mental. Para terminar enunciaré una ley que quizás algún día con- cluya de justificar: «El espíritu es causa, poder, fuerza, energía y principio que puede producir sobre la materia todos los efectos que se hallen dentro de la posibilidad indefi- nidamente ampliable de tal poder, causa y energía». César Bordoy Responsabilidad de las Religiones I Uu espiritista que reside eii Haedo (Buenos Aires), me escribió dicién- dome: «Hermana mía, á mediados de Diciembre del pasado año, sucedió en la estación de Haedo una gran desgracia. Dos peones descargaban cajones de un vagón, estaban facturados como si contuvieran objetos de ferretería en lugar de poner materias explosivas, que era lo que en rea- lidad guardaban dichos cajones, y mientras los descargaban explotó un cajón y uno de los peones quedó envuelto por las llamas, muriendo á los dos días después de horribles sufrimientos, y el otro pudo salvarse mi- lagrosamente. »E1 que murió hacia dos días que trabajaba en lugar de otro que ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 347 hacía fiesta, ¿qué deuda habrá pagado ese iufeliz, hermana mía? Pre- gunte sí le es posible, que se aprende mucho con las revelaciones de los espíritus». Efectivamente que merece el asunto preguntar el por qué el uno se' salvó de la muerte mientras el otro parece que fué á buscarla delibera- damente. II «Ya lo creo que la buscó (me dice un espíritu), cada cual busca lo que le hace falta, y ese humilde obrero tiene vivísimos deseos de saldar sus cuentas porque no es un espíritu encenagado en el crimen, al con- trario, en el libro de su historia sólo hay una página manchada de sangre. En muchas de sus existencias ha pertenecido á la iglesia romana, sacer- dote humilde y creyente, cumplía su cometido ni envidiado ni envidioso. En su última encarnación religiosa fué un fraile muy aficionado á la botánica, llegando á ser notable por el acierto que tenia en elegir plan- tas medicinales con las cuales curaba á muchos enfermos desahuciados por la ciencia médica. Se aficionó tanto á sus estudios, que pidió permiso para retirarse á una ermita medio derruida, donde sólo había en pie un altar de tosca piedra con una imagen del Salvador del mundo. En aquel retiro fray Salvador adquirió el don de curar á los endemoniados y aquel lugar antes solitario, se convirtió en un Santuario con su pequeña hos- pederia, donde permanecían los endemoniados el tiempo suficiente para curarse; y como en realidad alli llegaban enfermos locos de remate y sallan completamente curados, la fama de fray Salvador creció como la espuma y no le dejaban momento de reposo; él vivia completamente feliz, sin ambiciones mezquinas, sin cálculos utilitarios. Hacia el bien en nombre de Cristo, sin que ninguna pasión terrena le hiciera sentir el menor deseo, mas por su desgracia, llegó un gran personaje, una alta dignidad eclesiástica con una hermosa joven atormentada por los demo- nios que daba compasión el ver aquella niña hechicera como se retorcía al impulso de horribles convulsiones. El principe de la Iglesia le dijo á fray Salvador: «Aquí te dejo esta victima, á ver si tú me la devuelves libre de los enemigos que la atormentan». Y alli quedó la joven endemo- niada poseída por los espíritus maléficos. Fray Salvador al mirarla se sintió dominado por una sensación que nunca había sentido y á solas con la endemoniada, sin darse cuenta de lo que hacia, la estrechó en sus brazos y... se cumplió la ley natural, y aquel hombre, que habla vivido consagrado al bien de sus semejantes, cumpliendo fielmente los precep- tos de la castidad religiosa, se volvió completamente loco y no se saciaba nunca de acariciar á aquella hermosa niña que sin oponer la menor re- sistencia se quedaba dormida en sus brazos; pero aquella excitación, aquel 348 luz y union delirio, aquel fuego que abrasaba su corazón y su mente, se apagó de repente; el hombre cedió su puesto al fanático religioso y fray Salvador, horrorizado de su obra, creyendo de buena fe que los demonios se habían apoderado de él, cogió á la pobre nifia y la estranguló para que no le hiciera pecar más, arrojó el cadáver á un abismo y él abandonó la ermita y se fué lejos, muy lejos, huyendo de sí mismo, horrorizado de su doble crimen. Murió á poco tiempo y encontró en el espacio á su victima, que le perdonó generosamente, porque en realidad él á su vez había sido victima de la barbarie religiosa, de ese ascetismo contrario á las leyes naturales, leyes que atraen al hombre y á la mujer para formar un solo sér, esa fusión divina de la cual nacen las generaciones. El pobre faná- tico se convenció que su religión era la responsable de su locura y de su crimen, pero quiso volver á la tierra para mcrir trágicamente, como él hizo morir á aquella pobre niña victima del desconocimiento de su fami- lia que la entregó á un hombre que lo creían santo y la santidad des- aparece ante las exigencias de las leyes de la naturaleza. »Como él quería aprovechar el tiempo, buscó la ocasión propicia para realizar su intento y pagó una deuda que le atormentaba.—Adiós». III Mucho se aprende con las comunicaciones de los espíritus; ellas nos demuestran que no hay casualidades, no hay más que el cumplimiento de leyes Ineludibles. ¡Cuántos crímenes se han cometido á la sombra de las religiones! Ke- ligiones homicidas que han llevadó á la desesperación á muéhos creyentes de buena fe, que no. pudiendo resistir el ímpetu de sus pasiones y de sus deseos han llegado á ser asesinos ¡desdichados!... Afortunadamente los espíritus han venido á romper el nudo gordiano de las aberraciones religiosas, de las bárbaras penitencias de hombres ignorantes que desconocían por completo la verdadera ley de Dios. ¡Cuántos siglos perdidos! ¡Cuántas existencias mal empleadas! ¡Ben- dito sea el Espiritismo con su racionalismo, con sus verdades y sus espe- ranzas, con su progreso indefinido, en los innumerables mundos que bogan en el infinito! Amalia Domingo Soler. No eches en cara á tu hijo los desvelos que te cueste, los sacrificios que por él hiciste. Al obrar como á buen padre cumpliste sólo con tu deber No disminuyas el mérito de tu obra con injustas exigencias. ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA E. ESPAÑOLA 349 Comunicación Nuestros estados Dependen generalmente de nuestro modo de ser y de obrar, y en casos poco comunes dependen de una serie de circunstancias que sólo los qué han sido encargados de cumplir un trabajo para un bien colectivo, saben que si su estado es de grandes sufrimientos y tribulaciones es por que la naturaleza de su misión lo exije así, dado el medio ambiente en que han de desenvolverse. De aquí que estos ejecutores de elevados designios no culpen jamás á otro sér ni se quejen á ellos mismos por qué saben el por qué de su obra y las consecuencias presentes y ulteriores. Tales han sido Kristna y otros antes de Jesús y los que después de este gran espíritu han cumplido una misión importante en la tierra. Y bien; la generalidad de los seres sufren cada cual en su estado según su propia ignorancia y maldad sin tener que recurrir á tiempos pasados para justificar el sufrimiento, vemos éste justificado en la obra del presente, claro está que amasado con levadura de las pasadas etapas. Difícilmente se puede vivir la vida del cuerpo en una huma- nidad que carece de miras elevadas, de nobleza de pensamientos y de generosas aspiraciones; imperando sólo el orgullo, la envidia y el olvido de lo que somos y desconocimiento de lo que debemos ser. Todo régimen, toda legislación y toda iniciativa resulta cruel y tan suma- mente estrecha que es insuficiente á vivir con relativa tranquilidad, por no ver asegurado un estado que permita un poco de felicidad de la que es posible en el planeta terráqueo. Las clases más elevadas de la sociedad, que lo son no por su saber y virtu- des, hacen tabla rasa de cuanto es un beneficio de todos, y los efectos que tal proceder arrojan son tan temibles y desastrosos como inferior, moralmente hablando, ¡es la causa que los produce!... Las clases más pequeñas de la humanidad, que lo son porque les falta el saber, la astucia y la fuerza, no porque son virtuosos, sufren sin embargo los terribles efectos de un régimen, de una legislación, de un medio ambiente asfixiante que produce en ellas ¡tiranía, opresión, desprecio y la muerte!... Unas y otras viven unidas pero les separa una gran distancia, pues las eleva- das tienen muy en cuenta establecer límites que les señala á las más pequeñas hasta donde les es permitido alcanzar, y para cuyo efecto emplean los medios materiales inventados por su saber y fabricados por los mismos que han de ser víctimas de su ignorancia. ¡El cañón! ¡la metralla! el presidio con sus lóbregos calabozos y pesadas cadenas, el asedio por hambre y por promesas falsas, de tal manera, que todos los esfuerzos empleados se estrellarían ante esa muralla infranqueable labrada de materiales refractarios, disolventes de la clase pequeña que lo es así misma por su ignorancia desmedida y porque adolece de los mismos defectos morales que la humanidad en general. Es, pues, de todo punto imposible una era de felicidad sin que haya un acón- tecimiento impulsado por el progreso la clase pequeña, siendo inevitable de todo punto una revolución más fructífera y menos efusiva cuanto más ilustrada esté la clase. Una vez pasado el efecto de la causa en cuestión, la humanidad pondrá en acción un régimen legislativo mantenedor del derecho natural de todos conside- rándoles iguales en clase, por lo que desapareciendo el privilegio y el dominio en la clase elevada materialmente, sería la vida de la clase hoy pequeña relativa- 350 LUZ Y UNIÓN mente feliz, y la obra de la emancipación de la conciencia sería puesta en vigor, hasta que con el transcurso de los tiempos llegara la humanidad terrestre al grado de elevación que ha de llegar, sin duda alguna, adelantando más ó menos según su ignorancia ó sabiduría, como según sus vicios ó sus virtudes. Es indiscutible cuanto dejo dicho, no hay otra manera de adelantar la huma- nidad; ahora bien, que el fin será más desastroso ó más precursor y de inmedia- tos beneficios según él grado de adelanto con que cuente la prole de abajo según la de arriba la llama Interin no hay medio de solucionar el conflicto, sino por el contrario irá au- mentando cada día hasta que por impulso del propio progreso sea un hecho el acontecimiento mencionado. Cuantas teorías y leyendas desnaturalicen lo inevitable, lo justo, porque la ley natural lo exige, serán parecido á las medicinas que se le apliquen á un enfermo declarado incurable, éstas podrán alargar la vida algún tiempo, pero llega la hora que todo es ineficaz y el enfermo sucumbe presa de la enfermedad llamada incurable. Esta es, sin embargo, mi manera de pensar, pero la experiencia me demuestra que todo progreso definitivo en parte y relativo en lo absoluto, precisa de una transformación intelectual ó moral y el caso citado de revolución material para señalar una nueva era de adelanto en la historia de los mundos y de los seres. Ejemplos mil tenéis á la vista si bien éstos son imperfectos pero factibles y en relación á la época de cada evolución, nombre que merece lo que llamamos revolución mal entendida hoy por los que la proclaman en alta voz ó en el silen- ció de sus espíritus aletargados. Medium, Emilio Márquez. Es copia = Francisco Robles. Ecos Y noticias Nuestro querido amigo y distinguido correligionario D Camilo Botella, con- secuente, como siempre, con sus ideas de adelanto, acaba de inscribir á un hijo suyo, recién nacido', en el Registro Civil, prescindiendo de toda ceremonia reli- giosa, siendo testigos nuestros correligionarios D. Cristóbal Nos y D. Enrique Aragó. Felicitamos al amigo Botella y á su esposa D.® Francisca por la dicha de verse una vez más aumentada su familia y por mantener firme nuestro ideal. Nos comunica el Centro «La Paz», de Mahón, que en Junta general, celebra- da el día 1.° del actual, acordaron cambiar su título por el de «Iris de Paz» y haber trasladado su domicilio á la calle de Cifuentes, 14 También renovaron su Junta Directiva, compuesta ahora por los hermanos siguientes: D. Bartolomé 'Villalonga, Presidente honorario; D. Rafael Villalonga, Presi- dente efectivo; D. Juan Pons, Vicepresidente; D. Lucas Pons, Secretario; don Rafael Bagús, Vicesecretario; D. Juan Pallicer, Archivero; D. Jaime Pallicer, Depositario; D. Andrés Morillo, D. Jaime Coll, D. José Morro y D. Sebastián Pascual, Vocales. Felicitamos á los recién nombrados y les deseamos mucho acierto en sus fun- ciones. ÓRGANO OFICIAL UE LA LIGA E. ESPAÑOLA 351 Con íntima satisfacción vamos á dar cuenta de un hecho á que ha dado lugar la entereza de convicciones de nuestro amigo y hermano Juan Fernández, de La- redo, individuo del Cuerpo de Carabineros, cuya esposa desencarnó el dia 10 de los corrientes después de una larga y penosa enfermedad que duró seis meses, agotando completamente todos los recursos de dicho hermano, hasta sumirlo en una verdadera miseria. Aprovechando una sociedad católica de beneficencia la triste situación en que se hallaba, fueron á ofrecerle sus socorros con la condición de que él y su esposa habían de confesarse, á lo cual no se avino nuestro hermano, sino con la condición de que antes se le tenía que demostrar la verdadera utili- dad de la confesión, cosa que, como es natural, nadie alcanzó, teniéndose que marchar aquellos fariseos, como vulgarmente se dice, con el rabo entre piernas. En vista de lo infructuoso de sus gestiones recurrieron á las autoridades civiles y, visto el fracaso de éstas, á las militares, sin que ni las gestiones de las prime- ras ni las exigencias de las segundas quebrantaran las firmes convicciones espi- ritistas de Juan Fernández. Al cabo de poco tiempo desencarnó su esposa, y la lucha contra la Iglesia se hizo más fuerte aún, ya que ésta quería impedir, contra todo fuero y razón, el entierro civil de la finada, no lográndolo á pesar de todos sus esfuerzos. El día del entierro los alrededores de la casa de nuestro hermano se hallaban completa- mente Henos de fanáticos que insultaron, grosera y cobardemente, á los que qui- sieron acompañar el cadáver hasta su tumba. • Con toda la efusión de que es capaz nuestro corazón felicitamos á nuestro heroico hermano, que ha sabido demostrar que al verdadero espiritista nada le arredra ni detiene en el cumplimiento de su deber. A última hora y estando en prensa el presente número, recibimos la siguiente carta que con gusto insertamos: Barcelona 23 de Noviembre de 1908. Sr. D. Jacinto Esteva Marata. Presente. Muy señor mío y hermano en creencias: Tengo el honor de citarle seguida- mente el resultado que tuvo la Asamblea de ayer en el «Centro Barcelonés de Estudios Psicológicos», para que, salvo las mejoras de redacción que usted crea hacer, se sirva insertarlo en la Revista Luz y Unión y La Voz de la Verdad. Ayer, día 22, á las 5 y media de su tarde, y según estaba acordado, se reunió el «Centro Barcelonés de Estudios Psicológicos» en Asamblea general extraor- dinaria para tratar 1.°, de la aprobación de socios titulares y 2.°, de elección de una nueva Junta Directiva por haber dimitido la anterior. El resultado de lo primero fué la aprobación de ascenso á socios titulares á todos los que hasta la fecha contaba dicha entidad como aspirantes. Seguidamente se procedió á la elección de Junta Directiva, siendo procla- mada como tal, salvo dos abstenciones de voto, la siguiente: Presidente, D. Vicente Serra; Vicepresidente, D. Antonio Roca; Secretario, D. Manuel López; Tesorero, D. Üldarico Torras; Contador, D. José Fons. A continuación y después de varias consideraciones dignas de tenerse en cuenta, tanto por satisfacer á la Asamblea como al progreso de la idea, dióse por terminada la sesión á las 7 y 25 de su misma tarde. Ahora, particularmente, sólo me queda ofrecerme á usted para todo cuanto pueda serle útil dentro y fuera de nuestra escuela, y á la par anhelaría dirigiera sus inspiraciones sobre los que nuevamente se han encargado de dirigir el «Cen- tro Barcelonés», para el mejor éxito de sus funciones, siempre y bien entendido en pro del Espiritismo español. Le saluda su afectísimo y hermano en creencias.—El Secretario del «Centro Barcelonés de Estudios Psicológicos», Manuel López. 352 LUZ Y UNIÓN Aviso á nuestros suscriptores Prosiguiendo esta Revista su costumbre de regalar á sus suscrip- tores cada año una obra de verdadadera valia, les anunciamos que para el próximo año preparamos una, original de nuestro activo y celoso colaborador D. Faustino Isona, cuyo titulo será: La Verdad frente á frente del error. Por las materias de que tratará esta obra creemos será bien acepta- da por nuestros abonados. Las condiciones en que se servirá esta obra-regalo son las siguientes: La obra-regalo se entregará á nuestros abonados al efectuar el pago de su suscripción. La obra-regalo tendrá el mismo tamaño que la que hemos repartido este año y se entregará encuadernada á la rústica. Los suscriptores de fuera de Barcelona deberán remitir junto con el valor de la suscripción media peseta más para remisión del regalo por correo y certificado. Los que quieran recibir la obra encuadernada en tela deberán remi- tir, además, una peseta, valor de la encuademación. De modo que los abonados que recojan el libro en esta Administración sólo deberán pagar las 7 ptas. de su suscripción y 1 más en caso de querer la obra encuadernada. Los del resto de España deberán remitir 7'60 ptas. si la quieren en rústica y 8'60 si la quieren en tela. Los del extranjero deberán remitir 1'2'50 ó 13'50 según si la deseen en rústica ó tela, respectivamente. No tendrán derecho á reclamar el regalo los que efectúen el pago de su abono después de transcurrido el año próximo. Llamamos también la atención, de nuestros suscriptores que tengan deseos de guardar la colección completa de este año, se sirvan repasar los números que tienen en su poder, á fin de que si les falta alguno poder pedirlo con tiempo á esta Administración ó al corresponsal más próxima al lugar de su residencia. B IBLIÓTECA UNIVERSAL OBBAS$ PUBLICADAS AMimSllO T alejautdbo aksakof Liii Tiáit á© Wlifitlioliit (L3, Survic) Cada obra forma dos voluminosos tomos en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada uno 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. ABf1 BE por CH. LAFONTAIHÍE All FAÍB B1 BAE SOMBBAS por E. D'ESPÉBAXCE Cada obra forma un voluminoso tomo en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada una 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. EN PBBLICACIlÍN EL ESPIRITISIÏ10 Y LA ANARQUÍA por J. BOCYÉBA Se publica por cuadernos semanales de á 32 páginas al precio de 20 eén- timos en España y 25 céntimos en el Extranjero.—Pago adelantado. CORRESPONDENCIA Sres. Hascriptores que han satisfecho la suscripción de 1908 L. M —Tobarra. J. T.—Castellón de laPlana J. C —Puenteareas. J. N.—Albuera. M C.—Badajoz. J. M. J.—Ceuta. J. S.—Arecibo (P. R.) N. Q.-Id. T. P.—S. Germán (P. R ) D. B. de G.—Ponce (Id.) M. C.-Id. M. D.—Bailen. C, V. de B.-Id. (Id.) L. C —Sta. Ana (R. S.) S. B — Agost (Alicante). F. A. M. P.—Habana (Cuba) V. R R.—Stgo. de Cuba. T. G.—Casillas de Mortos T. G.—Manzanillo (Id). T. 1..—Almonacid de la S. J. G. C.—Murcia. I. U.-Madrld. F. S. Pobla de Segur. A. H.—Buenos Aires. L. O.—Sancti Spiritu (Id.) F. S.—Inglizuela del Cid. M. K. de S.—Burdeos (F.) F. S.—Holguin (Id.) M. de B.—S. Paulo (Brasil) T. T. G.—Valladolid. J. G. A.—Talavera. .1, P. —Coimbra (Portugal). M. O.—Juana Díaz (P. R.) N. G.—Sto. Domingo de M. A. F.—Bell-biz (I.órida). P. H.—Medellín (R. C.) G S.-Chiclana de Segura. A. F.—Calatayud. B Ci.—Tàrrega (Lérida). M. L. O.—Beas de Segura. N. G. —Buen (Pontevedra). A. P.—Manzanares. J. C.— Segovia. J. M. S.-Novelda (Alicante) M. S.—Frailes. (Alcanza al 31 de Octubre de IñOS) La Administración. ¡STA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, I con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la * protección de sus guias espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSCRIPCIÓN l España 7 Por pesetas un año. .{ i Extranjero 12 » Número suelto . . . .. 0'50 )) CPAGO ADELANTADO) Los Sres. suscriptores al'efectuar el pago de su abono se les rue- ga añadan 0'50 pesetas para el franqueo y certiñcado de la obra de regalo, de lo contrario tendrán que mandar recogerla en la ad- ministración, y los que la deseen encuadernada deberán remitir una peseta más. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- Ilos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los deb Extranjero en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos paises cuyo valor les será abonado al cambio que obtengan el dia de su recibo. En los paises en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los giros á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. —Barcelona Obra de regalo para él próximo año: La Verdad frente á frente del error, por Faustino Isona. Un tomo en 4.° de unas 800 páginas, en buen papel y esmerada impresión. ImD. de Carbonell y Esteva, Rambla de Cataluña, 118.—Barcelona SSII91AB10: D. Angel Grinda.—Los que siembran vientos, recogen tempesta- des, por D.'' Amalia Domingo Soler.—Espiritismo.—Estudiemos, por D. Benito Rodrí- guez.—Comunicaciones.—La vida futura, por Alian Kardec.—¡Quién mucho debe... mucho paga!..., por D.® Amalia Domingo Soler.—¡Salud!..., por J. Crainfort de Nini- ve.—Causa modernista.—Aviso á nuestros suscriptores.—Algo sobre el paria índico.— Varia. Corresponsales Administrativos néjicu.—José Salvadores, apartado 4024, D. F., particular, MEJICO.—Maura C. de Rincón, Calle 4.® de Nicolás Bravo, 19, ORIZABA (Veracruz). Puerto-Rico.—Faustino Ysona, CAYEY.—F. Vázquez Colón, médico cirjujano, MANATI.—Francisco 1. Arjona, Bertoly, 4 altos, PONCE. Cuba.—Adolfo García, Real, lo, MANZANILLO —Delfín Roig y Rosell, Habana baja, 26, SANTIAGO DE CUBA.—Eulogio Infiesta, calle Cuba, 34, HABANA—Faustino Serio, Calle de Cuba, 27, HOLGUÍN.—Luís G. Domínguez, Calle Tacón, 91, CIENFUEGOS.—Arman- do J. Raggí, Apartado 17, CAIBARIEN.—D.® Rosalía Cabrera de Pérez, (Gibara), BANES. República de Colombia.—Petronila Hoyos, MEDELLÍN.—Manuel J. López L., Pasaje Hernán Cortés, 9, BOGOTÁ. República del Salvador (C. A.)—Luciano Cenedella, Dtor. de «La Nueva Luz», SANTA ANA. República Argentina.—B. Ballesteros, Sociedad Espiritista «Saenz Cortés», PEHUAJO. —Genaro Ragno, calle Suárez, 635, BOCA (Buenos Aires).—Pedro Iraola, NE- COCHEA.—Manuel Torres, SANTA FE. República de Costa Rica.—Pedro Pérez Molina, S. JOSÉ DE COSTA RICA. Islas Filipinas.—José M.® Herrero, calie Concepción, 177.—QUIAPO. Rrasil.—Agrippino Gómez Veado, Rua Municipal, n.° 3, CIDADE DO MURIAHÉ (Estado de Minas-Geraes).—Joao Diogo Sá Barretto, advogado, CIUDADE DA CONQUISTA (Estado de Bahía).—Edla de Moarés Cardoso, San Francisco Ha- vrer, 132, RÍO DE JANEIRO. República Dominicana.—Salustiano E. Conde, (Bahía de Samana), SÁNCHEZ. —Aurelio León, SAN FRANCISCO DE MACORIS. República de Kicaragna.—Isidro de J. Olivares, 5 calle Norte, 102, MANAGUA República del Rcnador.—Antonio Safadi, Apartado n.° 464.—GUAYAQUIL. CARBONELL y Nuestras Fuerzas Mentales Ilodo de emplearlas con provecho en el comercio, la industria, las artes, los oficios, y en general en todos los actos y situaciones de la vida por Prentice Mulford Cuatro magníficos tomos encuadernados á la americana. . . . 40 pesetas liUZ Y UHlOf4 ÓRGANO OFICIAL DE LA LIGA ESPIRITISTA ESPAÑOLA AÑO IX - - 1908 EEDACCION Y ADMINISTRACION: Calle de Ferlandina, número 20, principal BARCELONA Indice de los trabajos contenidos en este tomo ENERO Adolfo García, pág. 1.—Sección Oficial déla «Liga Espiritista Española», 2. —El Espiritismo, ante las teorías Dualista y Monista, por Manuel Pareja Medi- na, 4.—Suscripción, 8.—La Plegaria, por Amalia Domingo Soler, 9.—El Refor- mador, por Vidal Barbero, 13.—A Teresa, por Amalia Domingo Soler, 13.—Es tudio sociológico y científico del Espiritismo, por Miguel Mayol, 16.—A la memoria de Senillosa, por Amalia Domingo Soler, 18.—Sobre el temor á Dios, por Faustino Isona, 19.—Centro de Estudios Psicológicos «Luz de Chile», 21.— Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones, 22.—No- tas bibliográficas, 25.—Movimiento espiritista, 27.—Necrologías, 28.—Curiosi- dades, 29. FEBRERO Rosalía Cabrera de Pérez,"pág. 33—El Crucificado, por Francisco Restrepo Gómez, 34.—Sección Oficial de la «Li^a Espiritista Española^-;'35.—El Espiri- tismo, ante las teorías Dualista y Monista, por Manuel Pareja Medina, 39.— Algo de lo que se debe entender por Esencia, Substancia, Fuerza y Materia, por B. Rodriguez, 43.—Odios de ayer, por Amalia Domingo Soler, 46.—La voz de ultratumba, por Francisco Ríos, 60.—A todos..., por Jacinto Fornaguera, 51.— Dos senectudes, por Aguilar, 53.—Dos almas, por Maria Trulls de Rubio, 54.— Reflexiones, por Angeles, 58.—Subscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones, 59.—¡Alerta, espiritistas!, 59.—Movimiento espiritis- ta, 60.—Necrologías, 62.—Notas bibliográficas, 63. MARZO Pedro Iraola, pág. 65.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Española».— Suscripción, 67.—Predicando, por Miguel Mayol, 67.—La sombra de ayer, es la sombra de hoy, por Amalia Domingo Soler, 70.—Estudios, por Benito Rodri- guez, 74. —¡Los niños...!, por Amalia Domingo Soler, 80.—Juicios sobre el de- monio ó diablo, por Faustino Isona, 81.—Al Pueblo, por Un Espíritu, 84.— ¡Amor!, por Emilia de la Cueva, 85.—¿Qué debían?, por Margarita, 86.—La educación, por Emilio Botella Pérez, 90.—Comunicaciones, 91.—Suscripción á favor de los damnificados por las últimas inundaciones, 94.—Notas bibliográfi- cas, 95.—Movimiento espiritista, 95 ABRIL B. Ballesteros, pág. 9.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Española», 98.—Odio y amor, por Amalia Domingo Soler, 104.—Sigamos estudiando, por Benito Rodríguez, 107.—Diálogos espiritistas, por Spero, 111.—Comunicación obtenida en el Centro «Fraternidad», de Sabadell, 113.—¡Luz!..., por Emilio Márquez, 115.—Meditàción, por Francisco Ríos, 117.—¡Los negreros!, por Ama- lia Domingo Soler, 118.—La extraña historia del singular hallazgo de Saint- tJraal, 120.—Los sacerdotes católicos piden casarse, por Salvador Pons y To rres, 123.—Dios ó el Diablo, por Un Colombiano, 126.—Notas bibliográficas, 126.—Necrologías, 128. MAYO Edla de Moraés Cardoso, pág. 129.—Sección Oficial de la «Liga Espiritista Española», 130.—Suscripción, 131.—En honor del Gran Maestro, por J. Esteva AÑO IX DICIEMBRE DE 1908 NÚM. 12 ríuestros Corresponsales 1 I N.ii-iii.■■■■i·ii j ■ '...ir. , _ t En el año 1895 conoció los rudimentarios fenómenos espiritistas del velador y desde aquella fecha no ha cesado de estudiar en todos sus aspectos el Espiri- tismo, con ayuda de sus mediums D. José González Rendón (escribiente mecá- nico) y D. Manuel Gómez (de efectos físicos) practicando la verdadera caridad y luchando con propios y extraños en su defensa y propaganda. Colaboró con , beneplácito de todos en la «Revista de Estudios Psicológicos» y otros periódicos de nuestra comunión, publicando en Febrero de 1899 un curioso trabajo que ti- tilló «El Espiritismo en Isla Cristina. Su aparición, estudio y desarrollo», que le valió ser distinguido con Diploma de Colaborador. Sin interrupción siguió apor- tando su entusiasta concurso material é intelectual, siendo varios los trabajos publicados con el pseudónimo de Daniel Grang, conocido de nuestros suscrip- tores, entre los que citaremos su «Compendio elemental de Espiritismo para los niños», cedido desinteresadamente á la Biblioteca «Sócrates» de la mencionada «Revista de Estudios Psicológicos». Constantemente ha procurado y conseguido mantener vivo el fuego sagrado de nuestra doctrina y la fe racional en nuestras prácticas entre aquellos buenos D. Angel Qrinda 3Ó4 LUZ Y UNIÓN hermanos, lo cual le ha costado no pocos sinsabores y no menos perjuicios ma- teriales, sirviéndole unos y otros de dolorosa experiencia y empeñándole, no obstante, más cada vez en el cumplimiento del deber que, de consuno con sus guías del espacio, se ha impuesto y cumplido con tesón, logrando que aquellos consecuentes hermanos sigan con veneración sus ejemplos y sus consejos, ha- hiendo fundado últimamente el Grupo familiar que dirige, con el título de «Ama- lia Domingo», del que tanto bueno sabemos y tan provechosos frutos esperamos. Conocemos personalmente á nuestro querido corresponsal de Isla Cristina y nos consta hasta donde llega su entusiasmo y abnegación por la causa. En dos ocasiones hemos tenido la satisfacción de contarlo entre nosotros. La primera hizo el costoso viaje desde aquella punta de Andalucía, en ferrocarril, á sus ex- pensas, con el solo objeto de estrechar nuestras manos, «bañarse en la hermosa luz que irradian nuestros Centros»—son sus palabras,—y aspirar al vivificante aroma de nuestras montañas; la segunda vez que le tuvimos, fué también sacri- ficando su posición, segura y brillante, aunque modesta, en aras del amor que sentía y siente por la causa y por nosotros. Siempre deploraremos que circuns- tandas inevitables lo arrancaran de nuestro lado; mas por ello deben estar de enhorabuena los espiritistas de Isla Cristina, que de nuevo recobraron á su in- dispensable y querido mentor. Recientemente hemos tenido la satisfacción de saber que nuestro estimable corresponsal se ha desarrollado en la mediumnidad parlante, prestándose á la inspiración de entidades del espacio, cuyas cualidades de moralidad é inteligen- cia hacen de las veladas de aquel Grupo una cátedra deleitable, habiéndose dado casos en que al pronunciar la primera palabra medianímica espíritus conocidos de algunos de los agrupados, hayan exclamado éstos con asombro «¡Fulano!», cuya veracidad ha sido comprobada Luz y Unión aprovecha con gusto también esta ocasión para dar la más sin- cera enhorabuena á nuestro querido corresponsal D. Angel Grinda y á los demás hermanos del Grupo «Amalia Domingo», de Isla Cristina. Susefipeión à favor de D." Adela Qlanoz Süma anterior 76'60 ptas. José Oliver Betria, de Mequinenza. . rso Micaela Rosales, de Manila. 5'65 R. M., de Madrid 5 José Seigor, de Palma de Mallorca. . 0'25 Grupo «Amor y Vida», de Barcelona 10 Suman 99 ptas. (Sigue abierta la suscripción) órgano oficial de la liga e. española 355 Los que siembran vientos, recogen tempestades I para d.®' amalia domingo soler. Mi querida hermana: Hace unos dias que al pasar por una de las ca- lies apartadas de esta población un hombre anciano que tomando el sol y sentado se dedicaba á hacer lo que por aqui llaman pleita de esparto junto á él se encontraba también sentada su esposa ocupada en coser, de alguna menos edad que el hombre; y al verme me dijo éste: Dispén- seme si le puedo ofender en algo, pero me han dicho que V. puede ó tiene medios para hablar con los muertos y es tal la pena que tengo desde que perdi dos hijos, el uno ahogado en un pozo hace cinco años y el otro hace siete que fué muerto de un tiro en el campo; éste llevaba su escopeta y tanto uno como otro no sé si se mataron ó los mataron y qui- siera saber quién y cómo fué su muerte, pues mire V., mi esposa está casi ciega de llorar y yo no descanso ni duermo en pensar en ellos, por- que hoy podria yo descansar de éste para mí penoso trabajo; todo esto me lo dijo sollozando, á lo que le repliqué que yo, lo mismo que todos los seres terrenales, tenemos facultades para saber y obtener los medios necesarios para saber lo que V. desea, sin embargo, he de enterarme y ver si fuera posible explicarle el por qué y forma de la trágica muerte de sus dos hijos. Asi, pues, desearía de V. se ponga en comunicación del guia de sus trabajos para que una vez más le dé cuenta de la historia de esos seres, dando publicidad en la Revista Luz y unión. Queda suyo affmo. s. s. y hermano.—F. C. M. II Hace pocos días recibí la carta que antecede á estas líneas, y su con- tenido como es natural me impresionó, porque ¿á quién no impresiona el desamparo y el desconsuelo de dos ancianos? Por eso en cuanto pude me puse en relación con el guia de mis trabajos y éste me contestó lo siguiente: 356 LUZ Y UNIÓN III ' 'wjl'··^^ '"" ,,/ í u úas'a Wj. tebJ-r^ èSt" j.·HifíKP'·'w-' < l'í'.-r'l'fs'' ¡r ''■ fJ'- J2'C> ' rfh ,18 0ss«ïlt®í| I i*-ï»A i q - ic , •>«--iv ^ M ,^1 i ' / . MS'l·ïnfjíftlíip^ Í3. &."íiai'>hrS,Mjji a" <-.i «t>j4i«r^s^ t V*; 'ÍÏ ¡ 'lA ! ,' .'rfj, £, ■ ..^x'7ii ..iZüJ-.A ip. o — j n;Sí^< A»'' , '1^'M-í f,í> ' '■'*^^^5,!' ', — , St¿ c-^ -''•'"■i·i ■;■; Si 1 1 *JM-dSfc B IBLIOTECA UNIVERSAL OBRAS PrBL·lCAOAS álIMISMO f gSPlBITlSMO aLkjakobo aksakof Iii( TiiiL WltiiitiMliiii (Ls, Survic) Cada obra forma dos voluminosos tomos en 4.° mayor, letra del 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada uno 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. IL álTE DI MáillTlZál por CH. LAFOKTAINB áL PáíS Di LÀS SOMBBáS por F. B'FSPÉBAKCE Cada obra forma voluminoso tomo en 4." mayor, letra del un 12, en tela, con elegantísimas tapas alegóricas, cada una 7'50 ptas.—En rústica, 6 ptas. EK PFB LieACIÓN EL ESPIRITISMO Y LA ANARQUÍA por J. BOEVÉBY Se publica por cuadernos semanales de á 32 páginas al precio de 20 eén- adelantado. timos en España y 25 céntimos en el Extranjero.—Pago CORRESPONDENCIA de 1907 8res. Snscriptores qne han satisfecho la suscripción F. H.—Uleila del Campo J. P.—Badajoz de 1908 iSres. j^nscriptores qne han satisfecho ¡a suscripción M. F.—Clieste J. M. D.—Yabucoa (P. R.) F. G. W.—Ayaraonte V.N.—Alcora R. A.—Mataró R. C.—Orán (Argelia) J. M.—Papayan F. Q.—León (Nicaragua) E. C.—Córdoba M D. M. Jijona M, F.—Sabadell V. A.—Lérida L. G. A.—Tremp (Lérida) 8res. Hnscriptores qne han satisfecho la suscripción de 1909 A. F. de M.—Rio de Janei- T. P.—S. Germán (P. R.) A. M.—Almería ro (Brazil) T. T. C.—Valladolid J. O. B.—Mequinenza A. P. M.—Rabat (M.) V. J.—Figueras (Gerona) J. P.—Barcelona A. P. -S. Paulo (Brazil) M. V.—Cuenca G. C.—Valencia de A. (C.) (Alcanza al 7 de Diciembre de 1908) La Administración, iSTA Revista se ocupa de todos los asuntos que se relacionan con el ; Espiritismo; para ello cuenta, además de su cuerpo de Redacción, I con la asidua colaboración de espiritistas de gran valía y con la ^ protección de sus guías espirituales. Ve la luz, en cuadernos mensuales de 36 páginas, cubiertas inclusive, del 20 al 25 de cada mes y regala á sus suscriptores al efectuar el pago del abono, una obra espiritista cuyo valor no baja de 2 pesetas. PRECIO DE SUSGRIPCIÓN ( . Por España. un año. 7 pesetas . I Extranjero . 12 w Número suelto 0'50 » CPAGO ADELANTADO Los Sres. suscriptores al efectuar el pago de su abono se les rué» ga añadan 0*50 pesetas para el franqueo y certificado de la obra de regalo', de lo contrario tendrán que mandar ministración los la deseen recogerla en la ad- , y que encuadernada deberán remitir una peseta mái^. INSTRUCCIONES Los Sres. suscriptores de España pueden efectuar sus abonos en se- líos de correos, sobres monederos ó billetes de Banco, siempre en carta certificada. Los del Extranjero, en letras de fácil cobro, billetes de Banco de sus respectivos países cuyo valor les será'abonado al cambio que obtengan el día de su recibo. En los países en que tenemos corresponsales administrativos pueden efectuarse los pagos directamente á ellos dando conocimiento á esta Ad- ministración. Los gipos á nombre del Administrador. La correspondencia á la REDACCIÓN Y ADMÍNISTRACIÓN Ferlandina, 20, principal. —Barcelona Ohra de regalo para el próximo año: La Verdad frente á frente del error, por Faustino Isona. Un tomo en 4.° de unas 800 páginas, en buen papel y esmerada impresión. Imp. de Carbonell y Esteva, Rambla de Catalufia, 118.—Barcelona